Primera Historia de Harry Potter, espero y les guste

Es un "universo alterno" por así decirlo, por lo que muchas de las cosas que han aparecido en los libros puede que no concuerden.

Todos los personajes son de J. K. Rowling

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Capítulo uno: "¿defendiéndolo"

Iniciaba su último año en Hogwarts y el "trío de oro" volvía a hacer de las suyas. La guerra contra Voldemort aún no terminaba, pero sólo era cosa de tiempo para que esto ocurriera…

Como todo inicio de año, los pasillos estaban repletos de niños corriendo, el comedor empezaba a llenarse rápidamente, mientras no se escuchaba otro tema que lo acontecido durante sus vacaciones.

El trío de oro se encontraba sentado en uno de los rincones de la mesa de Gryffindor, Ginny, la novia de él denominado "elegido" los acompañaba, mientras recordaban sus maravillosas vacaciones en la madriguera junto con los Weasly, Sirius y la órden del Fénix ( ND: en este caso ni Sirius ni Dumbledore ha muerto, y Snape sigue haciendo clases)

-todavía recuerdo cuando Ron tropezó y cayó sobre ese charco jajaja se veía tan chistoso- comentó una pelirroja mientras todos reían.

-y cuando le saltó la rana encima jajaja-

-vale Harry, pero a mi no me parece gracioso- contestó el afectado rojo de vergüenza.

-pero a nosotros si- molestó la castaña.

Esto hizo que Ron se colocara más rojo aún. Entrando por la puerta del gran comedor se acercaba Luna.

-hola Luna ¿qué tal tus vacaciones- preguntó el ojiverde al ver que se acercaba

-excelentes, gracias- la voz de la chica era tan tranquila como siempre –¿y las suyas?- sonrió ésta mientras era observada por todos los del alrededor, a decir verdad, el gusto de Luna para vestirse era un poco ¿extravagante?, y esta no era la excepción.

-de maravilla, si quieres te puedes sentar con nosotros para contarte, justo estábamos recordando-

-gracias Hermione- le respondió.

Así se pasó la hora de la cena, recordaron todas las travesuras que los dos chicos habían realizado, los gritos de Hermione al intentar jugar un partido de Quidditch, las bromas de los gemelos y el cumpleaños de Harry.

-a propósito Luna- dijo el moreno –muchas gracias por tu carta y tu regalo –agradeció el muchacho mientras salían del gran comedor.

-de nada, sabía que las algas para descubrir Knouts te gustarían- sonrió la rubia.

El chico sólo sonrió, le había gustado la carta de Luna, pero al regalo no le encontraba ninguna utilidad, de todos modos se lo agradeció.

Caminaban por los pasillos que conducían hacia los jardines del castillo, mientras conversaban y reían.

-miren a quienes tenemos aquí- se escuchó una fría voz que arrastraba las palabras –a lunática, dos traidores de sangre, una sangre sucia y al "elegido" cara rajada- soltó el rubio mientras Crabbe, Goyle y Zabini reían a sus espaldas.

-¿qué quieres Malfoy?- preguntó Hermione firmemente.

-nada que venga de ti, sangre sucia inmunda-

-no te atrevas a llamarla así hurón, o lo lamentarás- dijo Ron mientras sacaba su varita y apuntaba al Slytherin.

-¿y se supone que un traidor como tu me lo va a impedir?- sacó su varita con la arrogancia característica de un Malfoy y apuntó al pelirrojo.

-no Ron, no vale la pena, Malfoy sólo quiere que nos castiguen en nuestra primera noche- dijo la castaña acercándose a Ron.

-ásele caso a tu impura amiga Weasly, no creo que quieras pasar la noche en la enfermería- se burló el rubio.

-no jodas Malfoy- dijo Harry mientras entraba al castillo con sus amigos.

-ese Malfoy, que se ha creído, sigue tan arrogante y engreído como siempre- dijo Ginny igual de roja que su hermano anteriormente.

-el hurón sólo quieres problemas, no le sigan el juego por favor, no quiero que le quiten puntos a nuestra casa- dijo Hermione.

-¿Malfoy puede hacer eso?- Luna puso cara de curiosidad esperando la respuesta de la castaña.

-¿qué si puede¡Claro que puede!, Malfoy es prefecto, al igual que yo, él tiene tanto derecho como los profesores a quitarlos, no me extrañaría que sólo quisiera fastidiarnos-

-Hermione, Malfoy no sabe hacer otra cosa que fastidiar- sentenció Harry.

-es verdad- apoyó Ron.

Llegaron a la sala común, cada uno se dirigió a su habitación.

-veo que este año será igual o peor que todos los anteriores- suspiró la castaña mientras se acostaba y se dormía profundamente.

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La nieve había empezado a caer en el castillo, aún así el frío no era impedimento para que los más pequeños, e incluso los grandes, hicieran sus famosas guerras de nieve en sus ratos libres, después del desayuno.

Los tres Gryffindors llegaron a su clase de defensa contra las artes oscuras.

-buenos días jóvenes- saludó un hombre que a pesar de no tener mucha edad se veía desgastado y envejecido, su traje combinaba perfectamente bien con su rostro, no se podía distinguir quién era más viejo, si el hombre o el traje.

-buenos días profesor Lupin- se escucharon sólo las voces de los Grynffindor, mientras los Slytherin miraban fastidiados al licántropo.

-hoy practicaremos un nuevo hechizo- informó –la clase lo observaba atentamente –es un escudo…-

-¿cómo el hechizo protego?- un muchacho gordo y despistado preguntó.

-es mejor que el hechizo protegoNeville, y a la vez más avanzado- respondió –este es un hechizo silencioso y dura el tiempo que uno desee, la ventaja que tiene sobre el escudo protego es que al estar usándolo permite realizar otros hechizos sin perder la protección que otorga, y al ser silencioso el enemigo no sabe si está siendo utilizado-

-profesor ¿y cómo se sabe si el escudo está presente?- Seamus se mostraba realmente interesado en este hechizo, la manera perfecta de atacar sin ser atacado.

-¿alguien podría responder esta pregunta?- la mano de Hermione se lazó –dinos Hermione- cedió la palabra Remus.

-el hechizo scutumo escudo cambia la temperatura de la varita durante cinco segundos, después vuelve a la normalidad, si no se está concentrado al realizarlo el escudo puede ser penetrado, si la varita se calienta el hechizo está correcto, pero si se torna fría es porque no está funcionando como debería- respondió feliz la castaña.

-muy bien Hermione, diez puntos para Gryffindor- premió, ahora chico practiquen el hechizo, luego tendremos un duelo para ver cuanto han aprendido –les hizo una seña y todos se pusieron a practicar.

-esa sabelotodo sangre sucia, el hechizo scutum- imitó Malfoy mientras los Slytherin reían –y ese¿profesor?, no se como el consejo a dejado que vuelva a hacernos clases, después de lo que es, seguro que ese viejo loco de Dumbledore intercedió, pero ya verán, yo me encargaré de que lo echen, por algo soy un Malfoy- la prepotencia y arrogancia destilaban en cada una de sus palabras, sus ojos sólo eran fríos y la mirada de odio era dedicada a cualquiera que lo mirara.

-pero Draco ¿cómo harás eso?, tu padre ya no está en el consejo estudiantil-

-Zabini, Zabini, te falta mucho por aprender todavía, el dinero mueve montañas y el miedo también; no creo que nadie quiera que la marca tenebrosa aparezca sobre su casa ¿no es cierto?-

-tienes razón- apoyó el ojiazul.

-siempre la tengo, siempre-

La clase siguió, el momento de poner en práctica el hechizo había llegado.

-Seamus y Dean, ustedes serán los primeros. Deberán desarmar a su oponente, sólo desarmar- advirtió.

Los dos chicos se pararon uno frente a otro, esperaron el conteo y atacaron, ambos chicos quedaron tirados en el suelo.

-deberán practicar más- informó Lupín aguantando la risa –Lavender, Parvati, les toca-

Así fueron pasando todos, nadie había podido dominar el hechizo, ahora sólo quedaba Draco y Hermione para actuar.

-lista para perder Granger- se burló Malfoy.

-eso está por verse- respondió la chica.

-ya verás, la sabelotodo no podrá con un Malfoy y menos con el gran Draco- estaba tan preocupado de molestar a Hermione que no notó cuando su varita cambió de temperatura tornándose fría.

-jajaja, me haces reír hurón, ahora prepárate-

-un, dos, tres- contó el profesor antes de ellos decidieran actuar de otra forma.

-¡¡expelliarmus!!- gritaron los dos jóvenes.

Hermiones quedó parada mientras que el hechizo de malfoy había sido absorbido, en cambio, Draco se encontraba tirado sobre las sillas que habían sido acomodadas ahí para darle más espacio a la sala.

-jajajajajajajaja- rieron todos los Gryffindors.

-y así se hace llamar el "Gran Draco Malfoy"- molestó Ron.

-el huroncito no pudo con un simple escudo- continuó Harry.

-si tu padre se enterara de que fuiste vencido en un duelo, se querría morir Malfoy- molestó Seamus.

-aunque no creo que los dementores le den la noticia- Dean y todo el resto de Gryffindor reían, los Slytherin miraban asombrados la escena, Malfoy había sido derrotado por una sangre sucia y no una cualquiera, si no que la sabelotodo y amiga de Potter, Granger.

-no se atrevan a insultar a mi padre- se paró rápidamente y los apuntó con su varita.

-no creo que para él sea un insulto, Malfoy¿no está tan orgulloso de ser llamado mortífago?- le replicó Harry.

-te arrepentirás cara rajada-

-¡ya basta!- gritó Lupín –no permitiré más insultos en mi clase, la próxima vez no seré tan considerado- los miró fijamente expresando toda la furia que sentía el hombre lobo.

-no se preocupe, profesor, no volverá a ocurrir- Harry respondió, aunque seguía mirando a Malfoy con odio.

-eso espero- sentenció –Hermione, te felicito, eres la única que lo ha conseguido, son treinta puntos más- la chica sonrió feliz, aunque estaba un poco molesta con sus amigos por lo acontecido anteriormente –eso a sido todo por hoy, pueden irse-

Gryffindors y Slyherins salieron ordenadamente del aula.

Harry, Ron y Hermione se dirigieron a su sala común, se sentaron en las butacas cercanas al fuego…

-no puedo creer que se hallan comportado así en la clase de Lupin- los regañó la chica.

-¿y que querías?, era nuestra forma de molestar al fastidioso de Mlafoy- le respondió Ron.

-por favor Ronald, si no hubiera sido Lupin el que estaba en esa clase ya no tendríamos puntos- bufó enojada.

-lo sabemos Hermione, pero no lo pudimos resistir- Harry encogió los hombros y puso cara de niño bueno.

-aún así, no me parece que hayan dicho todas esas cosas- dijo un poco más calmada.

-¿estás defendiendo al hurón?- preguntó Ron rojo.

Hermione se puso nerviosa y trató de contestar lo más tranquilamente posible.

-que estas… como se… claro que no Ron, es solo que… que no quiero que Gryffindor pierda puntos, eso es todo- trató de sonar lo más convincente posible, aún así no lo logró.

-sí, como no- Ron se paró totalmente rojo de furia, caminó hacia el retrato de la señora gorda, lanzó un bufido y salió.

-¿y a éste que le pasa?- dijo la chica.

-Herms¿estás segura de que solo querías que no nos descontaran puntos?- le dijo.

-claro que estoy segura Harry¿por qué debería de haber otro motivo?-le dijo.

-no lo sé, es sólo para estar seguro- miró a su amiga y decidió creerle.

-bueno, voy a la biblioteca- tomó sus libros y salió –vaya, de la que me he salvado- suspiró tranquila mientras caminaba -¿pero que estoy diciendo¿salvarme de qué?, esa era la verdad, no quería puntos menos para Gryffindor¿por qué no hay otra razón o si?-

-hasta que tu cabeza se atreve a admitirlo- le dijo su dulce conciencia.

-me estoy volviendo loca-

-no lo estás- Hermione caminaba por los pasillos hacia la biblioteca cuando un niño de Hufflepuff la miró detenidamente y empezó a reír.

-claro que los estoy, hablando sola por los pasillos, suficiente tengo con creer que estoy loca como para convencer al resto con mi amena charla con mi "conciencia"-

-haz lo que quieras-

-perfecto, hoy todo el mundo me ha cuestionado- entró a la biblioteca y soltó sus libros con fuerza, haciendo que retumbaran en el lugar.

-señorita Granger, esta es una biblioteca, no haga tanto escándalo- la regañó Madame Prince.

-lo siento- se sentó y se dijo a si misma –definitivamente este no es mi día-


-¡qué se han creído esos idiotas¡nadie se atreve a humillar a Draco Malfoy y menos una sangre sucia y sus amigos buenos para nada!- se recostó en su cama –pero me las pagarán, esa sangre sucia se arrepentirán por el resto de sus días por haberme derrotado, y Potter y Weasly por haber dicho esas cosas… ¿pero qué es lo que puedo hacer?, tiene que ser algo que realmente le deje claro lo que es capaz de hacer un Malfoy si se ríen de él –pensó unos segundos y se sentó rápidamente -¡ya sé!, si soy brillante, mataré tres pájaros de un tiro, si logro…

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Aquí está el primer capítulo, espero que les guste, dejen reviews para saber su opinión

Que estén bien, adiós!!!!