Señoritas, aquí les traigo otras de mis ideas locas, se supone quedaría como un one-shot, pero no, ahora ser una pequeña historia de 5 cap.

Espero les agrade la idea de este fic, y no olviden hacérmelo saber.

Msln, NO ME PETENECE, TODOS LOS CREDITOS A SUS CREADORES. XD

SEPAN DISCULPAR LAS FALTAS, UNO ES HUMANO Y SE EQUIVOCA…XD


-fate, vuelve a la cama-una mujer entre sueños hablaba y se movía de un lado a otro.

Una rubia de ojos carmesí, miraba por la ventana, desde allí podía ver toda la ciudad de Japón.

-ya es tarde, será mejor que me vaya, todo está pagado-su voz sonaba seria y fría. Se colocó sus jeans y la camisa que traía y abrió la puerta de la habitación.

-no olvides llamarme-hablo aquella mujer desconocida.

La rubia dejo unos cuantos billetes en la mesa del centro y salió, mientras iba por los pasillos, pensaba que su vida era demasiado bohemia y que debía cambiar, pero ese era un pensamiento que no sabía si lo iba a cumplir a o no, después de todo se acostumbró a la vida que llevaba y hasta cierto punto le gustaba.

Fate Harlown Testarossa, es una mujer llena de éxitos, una gran cirujana, la cual tuvo que pasar por mucho para llegar a ocupar el nivel de vida que tiene, ha vivido la pobreza, pues cuando pequeña vivía en un barrio de los más pobres, habían días en los que no comía absolutamente nada, pues sus madres no tenían trabajo y debían de cuidar ella y de su hermana, pero esas solo son experiencias que ella ha sabido tomar como un incentivo.

Su familia era lo más sagrado que tenía, pero casi ya no veía ya que su trabajo no se lo permitía, todos los días tenia citas que atender o cirugías que hacer, nada dejaba que vaya a visitar a u familia, a veces su madre la llamaba para saber cómo estaba, pero no pasaba de eso, para lo que se daba tiempo era para las fiestas que organizaba en su departamento en la discoteca.

Ahora que es la mejor cirujana del continente y la más reconocida, dona mucho dinero a fundaciones, tanto así que ha pagado para que reconstruyan todo el sector donde ella vivía cuando era pequeña, eso siempre ha dado muy de que hablar.

Pero su lado oscuro era el que la hacía ver de otra manera, muchos conocían la vida que llevaba, todas las noches después de salir de la clínica en la que tenía, iba a bares, a discotecas o a cualquier lado de los que siempre salía a compañía por mujeres muy guapas, varios medios de comunicación solían hablar mal de ella, y no era para menos, varios escándalos había provocado en varias ocasiones, pero eso era algo que no le importaba a ella.

-Akari, he llegado-fate llego a su departamento en uno de los mejores sectores de Japón, dejo las llaves en la mesa que tenía a la llegada, se sacó la chaqueta y la tiro a un lado del sillón de cuero.-oh, querido, he llegado-fate acaricio a un gato negro con manchas blancas, el cual se le acerco muy cariñosamente.

Fate se levantó por un poco de wiski y se volvió a sentar junto a su gato, a pesar de tener todo el dinero que alguien podía tener, ella vivía sola y casi no tenía muchos amigos, no porque no los quisiera, solo que ella pensaba que la mayoría se acercaría por su dinero o por quien es.

Al ver su reloj vio que eran más de la media noche y al siguiente día tenía una cirugía, pero no tenía muchas ganas de ir a atender a las necesidades innecesarias de señoras caprichosas. Fate adoraba su trabajo, pero había personas que hacían que lo odie, esas mujeres eran demasiado superficiales y en cierto punto culpaba a sus esposos por no saber controlar a sus mujeres, pero en fin, eso era lo que le daba el dinero y la fama que ahora tenía.

-Akari, crees que mi vida es un asco?-aquel gato solo la miro y agacho su cabeza para que fate lo acariciara-está bien tomare eso como un, "es tu vida no la de los demás"-fate sonrió y se levantó, dispuesta a irse a su habitación a dormir.

Ya muy por la mañana, en la clínica de Fate los trabajadores comenzaron a llegar, al igual que las clientas que tenían previa cita para sus cirugías.

-señorita Yagami, ¿ha legado la Doctora Fate?-pregunto una peli rosada acercándose a la recepción.

-Doctora wolkenriter, no, la doctora Harlow aún no ha llegado-dijo mirándola a los ojos.

-jum, esta mujer nos va a llevar a la ruina, bueno, cuando legue avísame inmediatamente, ahora tengo cirugía-la peli-rosa se alejó apresuradamente por uno de los pasillos.

-esta señorita Harlow, de seguro tuvo una de sus fiestas.-Hayate continuo tecleando y enviando algunos correos.


Departamento Harlown

-Buenos días señores, el sol sale ya a las 7:00 Am de la mañana, muchos ya deben estar en pie y otro…bueno dormidos-el despertador radio sonó, haciendo que fate se moviera de la posición en la que se encontraba.

-apagar-hablo fate entre sueños y con una voz ronca, de inmediato el radio se apagó y fate se volvió a dormir.

Después de una hora más tarde, fate se despertó asustada, sentándose en su cama y mirando de un lado a otro.

-rayos me volví a dormir-hablo a la nada-Signum me matara-se levantó apresurada y tomo un control grande y cuadrado, aplasto varios botones y la televisión de la sala se encendió por sí sola, al igual que la ducha.

Fate se desvistió y entro a la bañera, el dolor de cabeza no le paraba, "de seguro es el wiski de ayer", se masajeo la cien y cerró los ojos, al abrirlos su gato estaba parado en frente de ella.

-vaya, quieres bañarte tú también ¿verdad?,-fate quiso meter al gato a la bañera, pero este salió corriendo.-algún día lograre bañarte-fate miro el reloj y se asustó ya eran las 8:30, de verdad que Signum la mataría.

Se apresuró a salir de la bañera, busco su traje negro y se cambió, la camisa blanca era muy pegada a su cuerpo, dejando unos botos del pecho abiertos y su pantalón dejaba notar mucho más su figura, cepillo u cabello y lo revolvió, dándole ese detalle rebelde, tomo su reloj, celular y llaves y salió del departamento.

Al bajar por el ascensor, varias de sus vecinas la saludaban, algunas de lejos y otras se acercaban demasiado para darle un beso en la comisura de la boca, eso le gustaba a Fate, sentirse atractiva para las demás, con una gran sonrisa salió del edificio y su auto LAMBORGHINI AVENTADOR J, color negro sin capotal, ese era el auto favorito de los que tenía fate, entro al auto y se colocó las gafas, encendió el radio y salió lo más rápido posible a la clínica.

Fate, llego y salió corriendo para atender a sus citas, el ascensor no llegaba y eso ya empezaba a enojar a Fate.

-agh, hasta que al fin-entro de inmediato al ascensor y llego a la recepción.

-Doctora Harlown, hasta que al fin llega-Hayate la saludo formalmente y le hiso una mueca a la sala de espera para que viera a varias mujeres esperar por ella.

-en un momento las atiendo, iré por mi bata-Fate miro a Hayate-si Signum sale, dile que llegue temprano-le guiño el ojo y salió corriendo a su consultorio.

-Hayate, has que pase la primera-pidió Fate por el teléfono.

Fate suspiro hondo y espero a su primera cita.

-perdón-hablo una mujer de cabello tomate y ojos azules.

-sí, adelante, tome asiento-hablo profesionalmente Fate.

Las preguntas de rutina comenzaron, era lo mismo para todas: ¿Qué es lo que no te gusta de tu cuerpo?, ¿Qué quieres cambiar?, ¿el tamaño?...y así un sin muero de preguntas.

Este día en particular estaba muy concentrada en su trabajo.

-su nombre-pidió mirando a la chica a los ojos.

-Teana Lanster…-la mujer sonaba coqueta-¿solo debo hacer esos exámenes volver la próxima semana?-pregunto sin dejar de mirar a Fate.

-así es, señorita, debe hacerse esos exámenes y nos veremos la próxima semana-fate se levantó de su asiento y se dirigió a abrir la puerta.

La se levantó y se acercó a fate.-muchas gracias, Doctora-se acercó y beso la comisura de la boca de FATE.

Esta solo sonrió y salió tras la mujer, llego donde estaba Hayate.

-vaya, hasta que se digan en aparecer la Doctora-se escuchó una voz muy seria, Fate rodo los ojos y volteo a ver la cara enfadada de Signum.

-cariño, es demasiado temprano para regaños.

-¡JA!, temprano para regaños…aja si-Signum se acercó a Fate de forma retadora-en la tarde quiero hablar con tigo-Signum no la dejo hablar y pidió pasar a la siguiente chica a su consultorio.

Fate se quedó en su lugar y torció su boca.

-Hayate, podrías pedir que me lleven algo de comer, me muero del hambre- pidió y llevo a otra mujer a su consultorio.

La castaña asintió y sonrió ante las muecas que fate le hiso a Signum.

Lo que quedaba de la mañana paso lenta, fate y Signum atendían a un sin número de mujeres las mismas que salían alegres de sus atenciones, las dos eran muy buenas doctoras y confiaban en ellas.

-¡listo!, al fin he terminado-Fate se estiro en su silla, mientras que Hayate recogía los platos que habían sobre la mesa-ahora sí, a escuchar el regaño de Signum-fate salió de su consultorio para entrar al de Signum, quien parecía estar de salida.

-Fate, seré breve-Signum hablo seria-si tú sigues llegando tarde, juro te presentare m renuncia, n quedare mal ante estas personas, por tu impertinencia-Signum tomo las llaves de su casa-pero eso es secundario, yo ya te advertí, ahora lo que importa es cuadrar la fiesta de aniversario de la clínica-la peli rosada le extendió un papel-ahí está la dirección del lugar que nos dará los postres y esas cosas, yo no poder ir, debo ir a ver a Shamal, hoy cumplimos un año de relación-Signum apaciguo su enojo y sonrió bobamente-confió en ti, la mujer a la que debes ver se llama Nanoha-sin decir más Signum salió.

"esta tarde no puedo, tengo una fiesta". Fate sonrió y guardo el papel en su chaqueta, salió del consultorio y fue por sus cosas.

-Hayate llama al chofer-fate se dirigía al ascensor-cuídate, pasa bien tu fin de semana-Fate bajo alegremente y se encontró con su chofer.

-Yuuno-kun-fate sonrió al ver al muchacho rubio, estúpido y nervioso de siempre-apártate, y llévame al lugar de siempre-ordeno fate entrado a la parte trasera del auto.

El muchacho asintió nervioso y corrió al lado del conductor, arranco y llegaron a una discoteca copada de gente-listo señorita, la esperare-hablo bajito.

-no importa cuánto tarde, debes quedarte aquí-no dijo nada más y bajo.

Fate vio la cola inmensa de gente para entrar al lugar y sonrió, ella podía entrar libremente, era una cliente de lujo, saludo al guardia e ingreso, adoraba ese lugar, la música era buena y el alcohol ni se diga, fue directo a la barra y pidió un vodka, esa noche la disfrutaría, hace mucho tiempo no salía a festejar como se debía, pronto le dieron su trago y las chicas se le acercaron.

-hola chicas, esta noche hay que festejar como nunca-beso a una de las muchachas apasionadamente, todas asintieron y llevaron a fate a la pista de baile.

Música electrónica era lo único que se escuchaba ahí todos los chicos saltaban y cantaban las canciones más sonadas de los tiempos, en un lugar algo lejano de todos, varias mujeres guapas y sexis rodeaban a fate, la conocían desde siempre y ya le tenían confianza al igual que la rubia de ojos color vino.

-chicas, necesito sentarme-fate se lanzó cansadamente a uno de los sillones de cuero y las mujeres hicieron lo mismo, comenzaron a besarla y Fate sabía que había llegado la hora de salir de ahí, ya estaba pasada de copas, pero eso significaba que la noche recién empezaba.

-Fate-hablo una mujer de pelo negro que aun besaba la boca de la rubia-esta noche seré yo quien vaya a tu departamento-volvió a besarla y acariciar la pierna de Fate.

-si mujer, tu y tú también irán-señalo a dos chicas más, las cuatro mujeres salieron de la discoteca y fate llamo a Yuuno, este llego de inmediato y las ayudo a entrar al auto.

Ya en camino al departamento de la joven rubia Yuuno la maldecía por tener a esas bellas mujeres junto a ella, eso solo lo hacía sentir mal, pero con más ganas de quitarle lo que tenía.

Todas subieron al departamento y se besaban entre ellas, todas acariciaban a fate y fate también las besaba a todas.

Entraron al lugar y fate se fue a su cuarto, mientras que las mujeres extrañas llevaban más alcohol para fate, entraron a la habitación y le sirvieron una copa a la rubia, fate la acepto y tomo hasta la última gota, dejo la copa a un lado y comenzó a besar a la mujer de cabello negro, esta sentía el deseo y la lujuria de la rubia, sus besos se sentían bien, bajaba por su cuello y volvía la boca, las manos de fate perdían el control cuando tocaba a una mujer sexi como con la que estaba.

Las demás al sentirse desplazadas y fuera de lugar, decidieron irse, dejando a solas a Fate con la de pelo dentro, esta solo sonrió y beso a la rubia, se sentó encima de ella y la beso con más deseo, mordía su labio de vez en cuando, logrando sacar unos gemidos de FATE.

Fate estaba volviéndose loca con aquella mujer, su deseo de hacerla suya crecía cada vez más, esos besos la reconfortaban y la hacían sentir…fogosa, ahora era fate quien estaba encima de la mujer, deseo el cuello de la mujer, saboreando cada lugar de este, saboreando el perfume e impregnándolo en sus labios, su deseo crecía y comenzó a desvestir a la mujer, besaba su boca una y otra vez.

Ya con solo su ropa íntima fate llego al límite y la hiso suya, aquella noche había terminado como lo esperaba, junto a una mujer espectacular, Fate se cansó y se durmió de inmediato.


EN ALGUNA CAFETERIA….

-padre, la mujer que mencionaste no ha llegado, llevo aquí esperando varias horas-hablo una cobriza dueña de unos ojos muy azules, aparentemente muy enojada. Esta esperaba en una cafetería muy cercana a la clínica de Harlown Fate.

-hija, perdón, regresa a casa, nos veremos ahí-al otro lado de la línea, una voz de un hombre muy cariñoso hablo, pero en el fondo estaba enfadado, nunca antes habían hecho esperar a Nanoha y eso le parecía una falta de respeto.

-entendido, cuídate-la cobriza cerro su móvil y se levantó de la mesa, pidió su abrigo y salió.

"pero que falta de consideración, ¿Quién se cree para hacerme esperar?", pensó Nanoha para sí misma mientras caminaba entre la multitud de gente, tomo un taxi y pidió al hombre que la llevara a su casa.


Shiro takamachi

-señorita Wolkenriter-ironizó el hombre.

-Señor takamachi, ¿dígame que se le ofrece?-aparto un poco a Shamal de su lado.

-¡¿Qué, que se me ofrece?! Dejo plantada a mi hija.-alzo la voz Shiro.

Signum se golpeó la frente con la palma de su mano y después cerro su puño.

-Señor, lo siento, envié a otra persona, pero por lo visto debió tener algún inconveniente-se disculpó.-sepa disculparnos-agrego.

-mañana a las 7:00-dijo sin más-en punto, señorita-dicho esto colgó.

Signum suspiro enojada, pero se alivió l sentir los brazos de la mujer que amaba rodear su cintura, Signum se dio la vuelta para quedar de frente con su novia, sin soltar el abrazo ella la eso.

-¿paso algo?-pregunto una cariñosa Shamal.

-no, de hecho-Signum la beso cariñosamente-todo está más que mejor-la miro a los ojos con un brillo muy especial-te quiero mucho, hemos cumplido un año, y eso me hace feliz, pero-se alejó de ella-quiero pedirte algo-se arrodillo y saco un anillo de su bolsillo-¿te casarías con migo?-le pidió Signum, dejándole a una Shamal boqui abierta.

-Amor, esto es…romántico-unas lágrimas bajan por sus mejillas-sí, si quiero vivir toda mi vida con tigo-se arrodillo junto a Signum y la beso. Su velada continuo muy alegre y disfrutaron de una gran cena preparada por Signum.


AL SIGUIENTE DIA, OFICINAS TAKAMACHI.

-Buen día, adelante-hablo el hombre castaño.-Tomé asiento.

Signum obedeció y se sentó frente al hombre.

-he decidido venir personalmente, disculpe usted lo sucedido ayer.

-olvidémoslo, hablemos del pedido que me ha solicitado.

-así es señor Takamachi, la clínica de mi gran amiga, cumplirá ya 5 años y hemos decidido hacer una pequeña reunión, y teneos varias recomendaciones de sus postres-le sonrió al hombre para después continuar-por ello queremos que nos surta vario de sus postres, los mejores-concluyo.

-bien…-busco entre varios papeles-solo firme aquí y la degustación será el día de mañana-pidió el hombre.

-listo, entonces hasta mañana-Signum se levantó y extendió la mano-un gusto.

Salió de la oficina y bajo hasta su auto, al cual subió de prisa, ya que tenía una cirugía y una conversación pendiente con Fate.


Eso es todo, el siguiente cap no tardará, eso espero, y bueno que les pareció?

En esta semana actualizare, así que pendientes….saludos, espero sus reviews, si les gusto déjenmelo saber.

Saludos a mi esposa… *-*