Las hermanas que yo perdí

Yo perdí dos hermanas por esta guerra; a Andromeda muchos años atrás, cuando ella se escapó con un muggle. Madre quemó su rostro del tapiz de la mansión Black, mientras Bella soltaba sendas carcajadas, y yo sólo miraba en silencio.

A Bellatrix también la perdí, unos años después que Meda, cuando fue condenada a Azkaban por la tortura de dos aurores. Luego ella escapó de la carcel, y hace unos pocos meses, volví a perderla cuando la asesinaron en la batalla que se generó en Hogwarts.

Perdí a dos hermanas, en diferentes años, si, pero por la misma causa. El prejucio de los no puros.

Hace unos años atrás, cuando Draco era un pequeño, tuve un encuentro con ellos, y no me parecieron tan diferentes a mi.

Estaba de comprar con mi pequeño hijo de tan solo cuatro años en el callon diagonal. Draco estaba muy impaciente por irse, ya que se estaba aburriendo en la tienda de túnidas

-Draco por favor, quedaté quieto- pedí mientras observaba una túnica de color azul marino.

Élme miro fijamente, me sacó la lengua, y luego comenzó a correr.

¡Draco Lucius Malfoy! – Rugí desesperada mientras me daba vuelta y lo buscaba.

Noté que mi pequeño comenzaba a correr lejos de mi y mi desesperación aumento, cuando noté que entraba al Caldero Chorreante.

Cruce rápidamente esa puerta y salí al mundo exterior, al otro mundo como Lucius la nombraba. Comencé a mirar a mi alrededor y me empecé a desesperar.

Luces muy pálida querida ¿Te encuentras bien? – Dijo una señora acercándose a mi.

En aquel instante la miré. Mis prejuicios, todos aquellos que mi familia me había inculcado de estos seres no me importaron. Mi hijo estaba perdido.

Mi hijo se escapo. Se fue de mi lado, no se donde está.

Tranquilice señora ¿Cómo es él? – Consultó.

Es pequeño, tiene cuatro años. Es más pálido que yo, tiene ojos grises y tiene el pelo muy rubio. Se llama Draco – Murmuré

Draco, – Susurró. – es un bonito nombre – Dijo sonriendo.

Me dedicó una sonrisa tranquilizadora y luego comenzó a caminar a mi lado mientras buscábamos a mi hijo. Yo seguía su paso mientras miraba a mi alrededor, a todas las personas que me rodeaban.

¿Es ese tu pequeño? – Consultó mientras señalaba unos metros por delante nuestro.

Allí estaba él. Sentado en una mesita comiendo pastel y un jugo. Me acerqué a él con una sonrisa.

Draco me has asustado. – Exclamé abrazándolo – Nunca más me dejes. – pedí mientras acariciaba su rostro.

No mami, es que me aburría. – Murmuró haciendo puchero. Le dio un mordisco al pastel y solté una carcajada cuando se manchó su rostro.

Levanté mi mirada, y le dediqué una sonrisa a la mujer que había ayudado a encontrar mi pequeño

Volví a la realidad suspirando mientras veía el cuadro en el que estábamos las tres. Bella en el centro, y nosotras dos a su lado.

Bella está muerta, Andromeda vivió, pero perdió a su marido Ted, a su hija Nymphadora, y a su yerno.

Suspiré. Parecían décadas de aquellos momentos que juntas viviamos, cuando ibamos al salón de té y pasabamos tardes junto a madre y tía Walburga.

Tiempo atrás, soliamos ser muy unidas pero eso cambio.

Yo perdí dos hermanas, en una guerra de prejuicios de mi lado se fueron, y nunca volverían.

Hola. Acá les traigo este fic de las hermanas Black. Lo escribí en las dos horas de literatura ya que estaba aburrida.

Gracias a mi beta pokechessi. Es de las mejores betas, es muy buena y siempre a disposicón.

Espero que les halla gustado. Saludos, y nos vemos pronto ya que tengo mas fics.