Chaper one: The beginning


En aquella vieja estación de policía donde todos, o mejor dicho la mayoría de los trabajadores que se encontraban ahí, estaban totalmente ocupados, yendo de aquí a haya, algunos papeles volaban y quejas ahogadas se podían oír.

Bueno no era culpa de ninguno de los presentes, hace aproximadamente dos horas alguien les había hackeado y ese alguien lo tenían muy en claro de quien era, pero eso no era lo más preocupante…

—como mierda es que consiguieron la base de datos de todos los trabajadores? — pregunto aquel hombre de cabello azabache.

— n-no lo sé, señor bishop, pero saben quiénes somos, nuestro historial, nuestras caras… — dicho esto la mujer se sobresaltó, al oír el puño del hombre golpear fuertemente con el escritorio.

— rayos! — se quejó el hombre mientras sobaba su puño que por cierto le dolía mucho. — La operación es un completo fracaso y todavía no había empezado—murmuro enfadado.

La mujer que revisaba los papeles se percató en algo entre ellos.

—señor…—la mirada del llamado la puso nerviosa pero prosiguió. —Creo que no todo está perdido — dijo suspirando.


[…]

Aquel hombre de no más de 23 años, joven, de ojos verdes y recién salidos de la academia de policía. Caminaba entre aquellos pasillos, alguna que otra foto se encontraba en la pared colgada, estaba completamente nervioso desde que su jefe lo había llamado tenía un mal presentimiento, llego al la puerta de roble que lo separaba de su desconocido destino, suena exagerado pero se sintió por un momento si él fuera una persona chiquita como aquel personaje pulgarcito y esa puerta fuera una barrera que lo separaba de un gran gigante y al cruzarla este lo atraparía entre sus fauces.

Trago en seco y con la mano temblorosa golpeo levemente la puerta a puño cerrado.

—Pase— se oyó del otro lado.

Suspiro, y exhalo, tomo el picaporte de bronce y la giro, la puerta se entreabrió y con el corazón en la boca entro.


[…ciudad de nueva york…]

En aquella villa donde se encontraban varias casas totalmente humildes, el atardecer estaba empezando y algunos infantes jugaban aun en las calles, ahí en el porche de una de las contrucciones,se encontraba, un joven de pelo rubio oscuro, sus ojos color zafiro veían el cielo que poco a poco se tornaba de colores oscuros, sostenía con la mano derecha que estaba vendada por vendas color hueso, aquel crucifijo que estaba atada a su cuello.

—Leo…—dijo una voz tras él, este volteo y vio a otro rubio, este era un rubio mucho más claro, al igual que sus ojos que eran de un color más claro comparándose como el color del cielo, tenía en su cara una mueca de total preocupación, algo que cualquiera que lo vea en él se sorprendería, ya que nunca mostro preocupación ante algo, pero en esta ocasión…

— ¿q-que pasa? —dijo leo evitando tartamudear, su voz mostraba su gran preocupación.

— el doctor rockwell ya tiene el diagnostico— dicho esto, juraría que aquel atardecer se hizo mucho más oscuro y siniestro que todos los antes vistos…


Joooo si amigos! Tony volvió con este fic! Sinceramente no se me venía a la cabeza borrar mi primer libro haci que decidí reescribirlo ;)

Por ahora solo me concentrare a escribir este y "después de muerto" (que por cierto no les garantizo que sea muy largo ese libro, ya he pensado en un final)

La idea de volver a escribir esto, fue porque…¿fue mi primer libro?

Además me alegre mucho, ya que estuve leyendo los capítulos que había publicado junto a los reweis y me dije:

-alto ahí! Por qué vas a borrarlo? Fue una de tus primera creaciones que por cierto te salió muy, jeje sinceramente soy ¿perfect?si lo soy…

{después de mil alagos de mi persona dichas por mi}

- bueno voy a escribir!- le llega una notificación.- oh! Han subido los cuatro episodios subtitulados! Voy a verlos…

{después de ver los cuatro episodios (y quedarme con ganas de ver mas)}

- bueno ahora voy a escribir- y escribe el capitulo que por cierto es bien corto.

Y asi quedo?

Bueno los vere en la próxima!

Do dzibania! (adiós en ruso,que se me a olvidado como se escribe).

Atte:Tony