Advertencia: Contenido Lemon, (Muy inapropiado, si eres sensible NO LEER) si no te gusta ó eres menor de edad, por favor no leer, en cambio si te agrada, léelo bajo tu riesgo. Esta historia es de tema delicado, así que si no crees que te guste… mejor dejar de leer
Si leyeron "Juego de Niños", sabrán que esta historia salió de un one-shot, lo continuare… disfrútenlo
Declaración: No soy dueña de los personajes de Dragón Ball Z, que aquí se utilizan (Claramente se nota…), con fines de entretenimiento
pecado
La lluvia, ese día era de los peores del año, pues los días lluviosos eran del diario, y ojala fueran lluvias leves, seguidas por un arcoíris, indicando que tardaría en regresar… pero la maldita lluvia no era así, más bien era de esa que te enceguece, que no te deja ver el camino de dónde vas, que no deja que salgas…
Y ahí estaba ella, sentada en el espacio que ofrecía su ventana, mirando la maldita lluvia que le había amargado la salida… y es que con 15 años, lo único que deseaba era ir de fiesta con sus amigas, o al centro comercial… al menos pasar su tarde en el cine, y después pasar por un helado, pero la maldita lluvia no dejaba que saliera
Se levanto de aquel frio lugar, y miro su recamara, luego su reflejo en el espejo… dulces ojos azules, inocentes, y entonces rio… mientras escondía un mechos azul detrás de su cabello, y miro su tocador, abrió el ultimo cajón, donde escondía aquel juguete que había obtenido en aquella tienda tan extraña y excitante, donde fue en compañía de un par de amigas, y aunque al principio había ido con la cara roja, prono todo se le olvido… ella demostraría que no era más una mocosa, y que mejor que comprando aquel juguete de adultos….
Lo tomo, y miro con desconfianza su puerta… sus padres no estaban, de hecho la casa estaba sola, y así estaría por un par de horas más… así que su mente divago rápido, no había probado el nuevo juguete, y esos momentos parecían los más apropiados
Se relamió los labios, para humedecerlos… y se quedo ahí frente al tocador, mientras veía como su mano acariciaba su cuello, bajando a sus pechos, para amasarlos con firmeza, bajando la copa de su sostén, para pellizcar sus rosados pezones… y luego inclino su rostro, para que su lengua pudiera degustarla…
…..
Llego a la casa, sabía que nadie estaría ahí… estaba todo oscuro, sus planes se arruinaron por la maldita lluvia, y tuvo que regresar… paso por la cocina, y tomo un sorbo de jugo de naranja…
Se dirigió a su recamara, si tenía suerte la fastidiosa se habría dormido, y no le molestaría… pero joder, ella no le molestaba, pero debía alejarse de ella, sabía que no debía permanecer mucho tiempo cerca de ella… así que la evitaba, era indiferente con ella, incluso la insulto… y a pesar de el llanto que ella había dado, pensó que era lo mejor
Pero al pasar por su puerta, un leve quejido llego a sus oídos… y su instinto pudo mas, así que pensó en tocar la puerta, y preguntarle si se encontraba bien… pero un quejido más profundo invadió sus sentidos, y sin tocar, abrió un poco la puerta para mirarla…
Sin embargo no contaba con lo que sus ojos miraron en esos momentos… ahí estaba ella, parada justo frente a su tocador, con sus manos jugando con sus pechos desnudos, mientras su lengua atrapa el rebelde pezón rosado que rebotaba… trago duro, y cerró los ojos, ella no había notado su presencia…
Por un segundo pensó en salir de ahí corriendo, y olvidar lo que había visto, pero en lugar de hacer lo correcto, solo pudo entre cerrar la puerta, dejando suficiente espacio para poder seguir mirando ese espectáculo frente a él, no le quito la mirada…
Ella seguía estimulado sus pechos… hasta que de pronto su mano, siguió su descenso, llegando a sus bragas, para adentrarse en ellas, y estimularse sin adentrarse en su intimidad… mientras cerro sus ojos, y empezó a gemir, sintiendo total confianza, sabiéndose sola en la casa, entonces metió un dedo, y este entro rápido pues estaba mojada, apretó sus labios, tratando de ahogar su gemido
Su mano libre dejo su pecho, y se apoyo en su tocador, abriendo los ojos, para mirarse sonrojada, y mirando que sus bragas estaban ya mojadas… luego metió otro dedo, y miro fija su expresión en el espejo, se sentía tan bien….
Mientras que él miraba, no podía controlar su erección, su pantalón de pronto lo asfixiaba, el calor de su cuerpo aumento de manera drástica, ni el frio que la lluvia le dejo cuando se mojo le afectaba en esos momentos, todo eso desapareció cuando la vio ahí, dándose placer… a ella, que solo de un poco tiempo al presente había dejado de ser una niña, para convertirse en una mujercita, y muy hermosa… aunque a su cuerpo aun le faltaba desarrollo, era hermosa, su piel blanca era suave, tal y como se veía…
Incomodo, trato de controlar su erección, dándole un ligero toque para mantenerle en calma, sin contar con lo que ella haría… pues de pronto cuando regreso su vista a la joven, ella había tomado un extraño aparato, que jamás pensó que ella tendría… un consolador color azul, de un tamaño considerable, y vio como ella de a poco se lo acerco a sus dulces y tiernos labios rosados, sacando su lengua para empezar a lamerlo, haciendo una "O", con su dulce boca…
Gimió inconsciente mientras la observaba, y sus ojos se cerraron… empezó a envidiar aquel maldito juguete… deseando remplazarlo, pero no debía… hasta que la escucho, haciendo un sonoro "plop" cuando su boca abandono el miembro de plástico, y vio como un liguero rastro de saliva era dejado…
Se volvió a intentar acomodar su hinchado miembro, de pronto un leve ruido se escucho, y miro rápidamente si alguien estaba ya en la casa, y lo habían descubierto husmeando en aquella puerta… pero para su alivio, no había sido nada, solo el viento… y la fuerte lluvia
Miro de nuevo a la peli azul, joder… ella tenía una mano en el tocador, y la quito de ahí para hacer a un lado su braga, y así entonces comenzó a introducir lentamente aquel hule azul, cerrando los ojos con fuerza, y mordiendo los labios para ahogar sus gemidos y gruñidos…
Bulma trato de aferrarse a su tocador, y abrió un ojo… miro como el sudor bajaba por su rostro, mientras aquel juguete, se perdía en sus adentros, hasta que sintió una pequeña barrera… y no insistió mas, así que lo volvió a sacar casi por completo… pero antes de terminar, lo introdujo de nuevo, y entonces dejo que sus gemidos se escucharan, total… ¿Quién podría estarla escuchando?, así que dejo aquel gemido atrapado en su garganta salir con libertad…
Miro al espejo, y la imagen vino rápido a su mente, aquel cuerpo sin camisa, sudando mientras se ejercitaba, tentándola a ir y lamerlo todo, como una dulce paleta helada en un día caluroso, le encantaban esos fuertes brazos, que en ocasiones la habían estrujado, pero ya no mas…
"Que te jodan" Grito de pronto ella, mientras bombeaba aquel aparatito en ella, y buscaba su pecho, dándole unos cuantos tirones a sus sonrojados pechos
Cerró los ojos, maldición, ese rostro afilado… esa voz ronca, como anhelaba pasar sus uñas por ese cuerpo, y escucharlo… ¿Gemía, gruñía… seria suave, o salvaje?, joder… quería que esas manos la tocaran, y así lo imaginaba, pensaba que era él, quien tomaba sus pechos, quien le cogía en esos momentos… era lo que más deseaba, así que hecho su cabeza hacia atrás… y apretó la mandíbula
Su admirador, no podía mas, estaba en un maldito conflicto, y tuvo que abrir su cierre y dejar que su hinchado miembro se asomara, sintió tanto alivio cuando sus dedos descendieron y tomaron con fuerza, apretando toda su longitud, maldita sea… deseaba entrar a la habitación, y retirar aquel hule de la chica, y apresarla, y follarla ahí frente al tocador, apretando su cuello, mientras se enterraba con rabia, y le obligaba a gritar su nombre
Eso solo logro que su miembro se hinchara mas, y un gruñido escapo de sus labios, miro su pene… y entonces dejo caer un poco de saliva, para lubricarlo un poco, y así comenzar a masajear con ímpetu, mientras miraba atento todos los gestos de la peli azul, que se arqueaba y comenzó a maldecir
"Que t-te jod-a… maldito" Chillo ella, y sus piernas fallaron
Él miro como ella parecía agacharse, aun con su juguete entre las piernas, mientras por esas piernas hermosas, bajaba un liquido transparente… así logrando que su mano estimulara su cuerpo a ritmo más acelerado, y su corazón corría frenético… hasta que la escucho gritar con fuerza, y la miro atento mientras se corría… sus gestos eran únicos
Se derrumbo en el piso, aun si retirar su nuevo juguete… abrió sus brazos y jadeo, una enorme sonrisa invadió su rostro, nunca antes una sesión de esas le había satisfecho tanto, quizás era aquel nuevo juguete azul…
Mientras en su puerta, esos ojos negros la miraron terminar, cerró los ojos… hasta que la escucho levantarse… él aun necesitaba una liberación, y ella parecía que iba a salir de aquella recamara pues la vio cubrirse con un camisón… y no lo pensó tanto, corrió lejos de ahí, hasta encerrarse en su recamara
…
Bulma retiro de su cuerpo su ahora añorado juguete, lo limpio, y guardo nuevamente en su cajón, luego salió, necesitaba algo para hidratarse… pero un maldito trueno resonó en la casa, iluminando todo y ella se sobresalto, sentía aun el corazón acelerado
Camino rápido a la cocina, y bebió agua… mientras limpiaba el sudor de su frente, camino hasta la sala, donde encendió el televisor, y miro a su lado la foto familiar… rodo los ojos, amaba a su familia, pero le habían jodido la vida… suspiro cansada, hasta que el ruido de su teléfono le llamo
Se levanto de golpe, corrió a su recamara, pero de ahí no provenía el ruido, miro por el pasillo…
"Tonta, lo olvide en la recamara de mis papas…" Se dijo mientras se dio un golpe en la frente
Camino apresurada, pero la luz de unos de los cuartos le llamo la atención, así que se detuvo… ahí debía estar entonces el imbécil aquel, que desde hacía meses, la trataba como escoria, como si ella le hubiera jodido la vida, cuando había sido todo lo contrario…
Cerró los ojos y apretó la mandíbula, pensó seriamente irse de ahí, pero un gruñido gutural le llamo la atención, y pego la oreja en la puerta… asombrada por lo que escucho detrás de ella
"Si… te voy a follar hasta que me canse" Gruño furioso
Bulma se impacto, ¿Acaso había llevado a alguna chica a la casa, y se la estaba follando ahí?, se enfureció… ¿Cómo podía hacer algo así?... sus ojos se tornaron a fuego, por un momento pensó retirarse y dejarlo con su asunto, quizás después le gritaría unas cuantas cosas, y le diría a sus padres… pero el ruido de aquel, hizo que traicionara sus deseos
"No tienes una idea… voy a follar ese dulce huequito tuyo, y vas a pedir más… no te olvidaras que fui yo quien estuvo ahí…" Grito, maldición, tan fuerte que se escucho aun encima de la lluvia
Fue el colmo, ella no permitiría que irrespetaran su casa, no le importaba si aquel imbécil estaba en medio de algo… ó más bien, en medio de alguien
…..
Había llegado a su recamara, se había metido y cerrado tras de sí, olvidando poner el cerrojo… solo tenía una cosa en mente, follar a Bulma hasta que no pudiera dar un paso, hasta que estuviera consiente que ella quedaría en cama, sin poder pararse… y todo gracias a él
Se tocaba las venas de su hinchado miembro, eso estimulaba mas su imaginación, y su cuerpo, que comenzaba a sudar, camino hasta caer en su cama, mientras su mente imaginaba a la peli azul, encima suyo… con sus pechos meciéndose sin control, mientras que él los observaba, y atrapaba, luego a ella, hundiéndose en su pene… hasta llegar a lo más profundo, deseando meterle hasta los testículos…
Si, el placer que experimentaba era sin duda grande, estaba enfermo y lo sabía, por eso se había alejado de ella, por eso la insultaba… pero ahora, solo podía imaginar su sonrojado cuerpo, caliente y sudoroso sobre el suyo, mientras le daba estocadas fuertes… y la oía gritar sin control su nombre, apresando su pene en sus paredes… hasta que se le olvido que ella estaba en la casa, a solo unos metros
Perdió la razón, y comenzó a gritar, diciéndole lo que deseaba hacerle, sin acordarse que solo era su maldita imaginación…
Hasta que la jodida puerta se abrió de manera escandalosa, revelando a una muy enrojecida y molesta Bulma, que parecía a punto de explotar…
Mientras que Vegeta, rápidamente dejo su actividad, y se cubrió por reflejo… el carmín en sus mejillas subió de manera instantánea, sus ojos se abrieron en sorpresa, y ninguno pronunciaba palabra…
Bulma miro impactada, no había nadie en la recamara, solo Vegeta… y por lo visto estaba en un momento privado, pues lo encontró gruñendo, mientras en su mano estimulaba su miembro grueso, que de solo verlo, hizo que se mojara… su boca se abrió… y sus ojos se posaron en esa parte de su cuerpo, que trataba fielmente de esconder en sus manos, ella no podía ni quería decir nada que hiciera que él la sacara de su recamara, había estado pensando tanto en él… aunque sabía que estaba mal… lo deseaba
Camino hasta estar a su lado, ante la mirada de esos ónices, que le siguieron el recorrido… tragando duro, cuando ella se paro junto a él, y tocos sus manos que con desesperación, ocultaban su excitación…
De pronto ella hizo lo impensado… retiro su camisón, exponiéndose… quedando solo con unas bragas, y aquel sostén que antes Vegeta había visto…
Se quedo tieso… sabía que debía correrla, gritarle y hacerla salir, si fuera necesario empujarla fuera, y echarla a patadas, pero sus cuerpo no lo hizo… solo se quedo ahí, como un idiota mirando, cuando ella llevo sus finos dedos a su espalda y dejo caer ese sostén, para darle una perfecta vista de sus pechos…
Con solo 17 años, las hormonas de Vegeta estaban enloquecidas, sintió que sus manos abandonaron su pene, y sin que lo notara, llegaron hasta uno de los suaves pechos de la peli azul, rozando apenas su rozado pezón, que parecía estar demasiado sensible, pues la vio estremecerse…
"Vegeta…" Dijo ella, acompañado de un gemido tal, que hizo que Vegeta deseara llevar su boca a su cuerpo, y lamerlo todo… sin dejar un espacio que no haya sido probado
"Htm" Un gruñido fue la respuesta…
De pronto la mano de Bulma, tomo la de Vegeta, invitándole a que la tocara con más confianza, que apretara su dulces pechos, mientras cerraba sus ojos, y disfrutaba de todas las sensaciones
Vegeta entonces bajo sus manos por su cintura, sabía que era hermosa, la había visto en trajes de baño, cuando su piel estaba mojada, y envidiaba a la maldita prenda, y odiaba a los pendejos que se le acercaban para saludarla, e invitarla a salir… llevo su boca, y lamio su abdomen, subiendo hasta encontrar sus hermosos senos, donde paso su lengua, y de pronto succiono uno, mientras su lengua jugaba con él, y así le arrancaba gemidos y suspiros a la peli azul
Bulma abrió los ojos, miro a sus pechos, y ahí estaba él, su boca daba lengüetazos, mordidas… y ella atrapo los cabellos azabaches en sus manos, y tiro con fuerza, para atraerlo más a su pecho, como si deseara que él se hundiera en ellos
Vegeta siguió su recorrido con su húmeda lengua, hasta buscar sus dulces labios rosados… ¿La habrían besado antes…?, no lo sabía, y no quería preguntar, porque si alguien se hubiera atrevido a tocarla, seguro lo mataría…
Beso sus labios con fuerza, con furia, y mordió… haciendo que ella sangrara, pero le sorprendió que no se quejara, al contrario, lo agarro con fuerza, removía sus cabellos en llama, y él aprovecho para tocar su espalda, tan suave como la recordaba...
De pronto Bulma estaba encima suyo, besándole, restregando su cuerpo contra el suyo pasando su intimidad por su endurecido miembro, haciendo que gruñera con fuerza…
Y entonces, un rayo de conciencia llego a él, y la aparto brusco dejándola a un lado de la cama, como si de pronto ella quemara… como si su piel estuviera llena de veneno, y no deseara tocarla
"¿Qué… pasa?" Pregunto jadeante la peli azul
Vegeta negó con la cabeza, tomo sus cabellos… "…No podemos, ¡Maldita sea, sabes que está mal… no podemos hacerlo!" Grito desesperado…
Ella lo entendía, lo sabía… no había momento del día que no se recordara que era un pecado, que sus deseos eran oscuros, malditos… pero lo deseaba, y pensó que él también la deseaba, pero ahora lo pensaba mejor, seguro que la chica que imaginaba cuando se masturbaba no era ella, debía ser alguna de sus amiguitas, pero ella jamás…
Se levanto de la cama, con ojos llorosos… había ido ahí, se había mostrado ante él, se había dejado llevar por sus deseos obscenos, estaba dispuesta a entregarse a él, pero la estaba rechazando, y sabia porque…
"Que te jodan Vegeta… maldito estúpido, si no quieres me iré, creo que Yamcha me follaría sin ningún problema si se lo pidiera" Dijo ella herida, con el alma en la mano, buscando aunque fuera, enojarlo… un poco
Si bien no la quería como mujer, sabía que algo de sus celos de hermano debían estar por ahí, al saber que deseaba ser follada por uno de sus amigos
Vegeta levanto la vista a su pequeña hermana, sabía perfectamente bien, que su maldito amigo de la cicatriz en el rostro, deseaba a su hermana, lo había escuchado hablar de ella, y de lo hermosa que se ponía cada día… el mismo lo notaba, día a día… mientras se reprochaba el amarla, el desearla como mujer y no como su hermana pequeña
La vio, ella trataba de ocultar sus pechos en sus manos, estaba herida y avergonzada, y Vegeta excitado, no había nada que no deseara mas, que follarla, que hacerla enloquecer de placer… y gobernarse su dueño, decirle a todos que ella era suya, que si la miraban incluso con deseo los arrastraría por el fuego… pero sabía que si lo hacía, se condenarían, al odio… su familia, sus amigos, la sociedad… nadie los aceptaría
Amaba a su hermana, con la misma intensidad que la deseaba, y temía que ella lo descubriera y lo tachara de de enfermo…
Bulma al ver que no contestaba, que ni siquiera los celos de hermano pudo mostrar, decido irse… correr y encerrarse en su cuarto, con su vergüenza, deseando que la tierra se la tragara, pues había hecho lo impensable, demostrarle a su hermano que lo amaba… como hombre
No busco su ropa, joder… no lo quería ver más… estaba avergonzada, corrió sin mirar atrás
Vegeta se levanto, sus sentimientos estaban arremolinados en su cuerpo, por una parte deseaba correr tras ella, besarla, y decirle lo que sentía, abrazarla y hacerle el amor hasta que ambos se agotaran, dejarla descansar un poco, y luego seguir poseyéndola…
Pero su parte razonable, le decía que la dejara, que olvidara lo ocurrido, que no tenía sentido lo que deseaba, que se apartara, que saliera pronto de su casa, y no verla más… que buscara una chica fuera, una a la que pudiera amar sin remordimiento…
Un gran conflicto, y no sabía si debía ir… ó dejarla por siempre, estaba consciente del pecado en ello…
Ella era su más grande pecado, cuando pensaba en ella para masturbarse, cuando pensaba en ella en la cocina cuando se levantaba, cuando pensaba en ella en la escuela, cuando golpeaba sin control a los estúpidos amigos que le decían que su hermana era hermosa, que le pedirían una cita, cuando veía que los chicos la miraban en la playa…
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Ok, mátenme… pero despacio, mi mente es demasiado activa en ocasiones, así que si me piensan insultar bueno, aceptado, y si no mejor…
Pueden dejar sus opiniones, me encantaría saber que les parece