Título original: Living in a Bus… Espero que les guste =)
Disclaimer: los personajes son de la banda Paramore, sus personalidades y acciones son controladas por mí.
Nota: Este Fic anteriormente había aparecido en un foro latinoamericano de la banda Paramore. Yo soy la autora del mismo (no vayan a creer que lo plagié y coloqué en Fanfiction) y era conocida con el nombre de usuario: Mariand'FarroxD. Empecé a escribir la historia en enero del 2010 y ya está terminada. Por ahora subiré los primeros 8 capítulos.
Hayley Pov.
Capítulo I.
Día 1
- ¡Es hoy! ¡Es hoy! –gritaba como una loca corriendo de un lado para otro por el pasillo.
Toqué las puertas de los cuartos de mis hermanas con desesperación.
No puedo creerlo ¡Es hoy! ¡Gracias Dios!
- ¡Despierten! –les grité a mis hermanas. Las dos me miraron con odio en cuanto abrieron los ojos. Yo sonreí. Jaja. -¡Es hoy!
- ¡ya lo sabemos! –dijo Brittany irritada.
- ¡Llevas 5 meses y 8 días informándonos que hoy te vas de gira! –agregó Hillary.
- Vamos hermanitas ¡hoy es el mejor día de toda mi vida!
- Eso mismo lo dijiste cuando te compraron tu primera guitarra, cuando compusiste tu primera canción, cuando te presentaste por primera vez en aquel asqueroso bar de la otra cuadra, cuando sacaron el primer disco ese… emm.. ¿Cómo es que se llama?
- All we Know is falling –respondí enojada.
- ¡Ese mismo! Continuo: cuando tu cancion esa…
- ¡Conspiracy!
- conspiracy la pasaron por la radio, cuando tuviste tu primer concierto…
- ¡Cuando te hiciste novia de Josh! –gritó Hillary.
- ¡Qué! –dije.
- ¡Sabes que te gusta! –dijo la tontita de Brittany a la cual no sé por qué tengo por hermana.
- ¡Terminé con él hace mucho!
- Si para ti 3 meses es mucho…
- ¡Cállate Brit! Voy a buscar el teléfono ¡tengo que llamar a los chicos! –dije sin ocultar mi enfermiza emoción.
Fui hasta la sala casi corriendo y tomé el teléfono, pero antes de marcar, Brittany me jaló del brazo.
- Dime una cosa… sólo es una inocente preguntita… -dijo vacilante.
- ¿Qué?
- ¿Josh besa rico?
Corrí a mi habitación mientras la niñita estúpida, ejem perdón, mi hermana me perseguía a toda velocidad; pero fui más rápida y le cerré la puerta en la cara.
Llamé a todos los chicos y estaban igual de ansiosos que yo. Bueno, ¿Quién en nuestro lugar no lo estaría?
¡Hoy nos iríamos de gira por !
Después de tanto esfuerzo y dolores de cabeza que pasamos con RIOT! Valió la pena. Todo un año con este éxito que para mí fue lo más grande de toda mi vida. Gasté voz, sudor, e incluso lágrimas con esto…
¡Y lo logramos! Ya llegamos al final:
The Final Riot!
Woow… quién lo diría.
Desayuné con mis hermanas y mi madre hacía lo que mejor sabía hacer: contarle a toda mi familia por teléfono que hoy me iría de gira. Me comunicó con unos cuantos que me querían desear suerte, yo me limitaba a decir "gracias!" y devolverle el teléfono a mi madre.
- Oye Hayley ¿Qué te pasa? – preguntó Brittany entrando a mi cuarto.
Yo hice como si no la hubiese escuchado y seguía mirando al techo como una autista.
- ¡Oye! ¡tú no eres mi hermana! –exclamó.
- Claro que si, tonta… -dije sin voltear a verla.
- Pero… ¿Por qué no estás corriendo por la casa como una loca? ¡Ya se te fue la emoción o que! ¡hoy te vas de gira!
- y… ¿tu irás también? –pregunté haciéndome la indiferente.
- ¡NO!
- ¡Já! ¡Gracias! Sólo quería escucharte decir eso, ahora si ¡largo de mi habitación!
Se fue prácticamente protestando, y si… no tuve otra opción que cerrarle la puerta en la cara.
No soy mala, sólo soy la típica hermana mayor ¿no?
Yo en el fondo las quiero muchísimo a ambas…
Y cuando digo en el fondo, me refiero a muy en el fondo.
Mis maletas estaban listas… y bueno, debo decir que ya estaban hechas desde el día en que me dieron la noticia de que nos iríamos de gira.
¡O Dios mío!
¡Son las 3:20!
Es hora de que me vaya ¡Genial! No puedo esperar a ver el auto bus… aahh… me lo imagino hermoso y muy lujoso, bastante espacioso y, lo mejor de todo ¡es que la única habitación que hay será mía! ¡Solo mía! Wii xD
Me despedí de mis hermanas, prometiéndoles que "les traería algo"… si, claro (nótese mi sarcasmo). Al salir por aquella puerta sentí una oleada de emoción, alegría, excitación… ¡No lo sé! ¡Eran miles de sentimientos que tenía en todo el cuerpo que ni siquiera sé como describirlos!
Al cerrar la puerta tras de mí voltee a ver pero… ¡¿Qué? ¿Y el autobús? ¡Dónde está!
- Mamá… ¿Qué onda con el bus? No se supone que debería estar parado justo enfrente.
- Pues, John *el manager de la banda* me dijo que ya estaban llegando…
¡Oh! Que oportuno; mi teléfono sonó justo en ese momento.
- ¿Qué pasó Taylor?
- Pues… tenemos algunos inconvenientes. Creo que será mejor que te apresures y vengas a la gasolinera que está como a 2 cuadras de tu casa.
- ¿Por qué?
- El autobús se quedó sin combustible.
- ¿¡Qué!
- ¡Sólo ven hasta acá! Y no te quejes ¡a nosotros nos tocó empujarlo hasta la gasolinera!
Por mi parte estallé en carcajadas y colgué la llamada.
- Mamá, dice Taylor que vayamos a la gasolinera que queda aquí cerca…
Ella frunció el ceño.
- Se quedaron sin gasolina –le dije.
No tengo idea, pero mi madre y yo nos las ingeniamos para llevar el equipaje mientras caminábamos. Al llegar, el primero en encontrarnos fue a…
- ¡John! –grité corriendo hacia él dándole un fuerte abrazo. Lo había extrañado mucho durante los últimos tres meses, pues él era como un padre para mí.
- Hola linda… perdona por hacerte correr hasta acá; una estrella como tú no debe de hacer tales esfuerzos…
- Vamos, no vengas con tus cumplidos otra vez…
- ¿Me extrañaste? Porque yo sí te extrañé.
- ¡Por supuesto que sí!
- Y… supongo que estás emocionada ¿no?
- ¡Claro!... oye, todavía no entiendo ¿cómo los chicos lograron empujar ESO? –dije señalando el inmenso autobús que estaba delante de nosotros.
- ¿Por qué te sorprende? Yo creo que 11 hombres, incluyéndome, pueden mover algo de ese tamaño…
- jaja… mmmmm… ¿cómo que 11 hombres? ¿Quiénes son los otros 5? –pregunté un poco nerviosa.
- Además de tus chicos, *¿mis chicos?* están el ingeniero técnico, el supervisor, otros que se encargarán del sonido y blablablá… y el resto se vendrá en otro bus pero eso no importa…
¡¿QUÉ? ¡¿Qué eso no importa?
¿Once hombres en ese autobusito y YO?
¡WTF!
- ¡Ve! Los chicos están adentro.
Anonadada por la noticia de última hora que me acababan de dar me fui hasta la entrada del auto bus. Subí con mi bolso de mano y al entrar me di cuenta de que no había nadie… todo estaba muy pero muy silencioso… creo que están tramando algo… espero que no…
- ¡Hola! –me sorprendió una voz familiar a mis espaldas. Ese alguien, me tomó por los hombros y me dio un corto beso en la mejilla.
¡NO puede ser! Es…
- ¡JOSH! –grité y me lancé a sus brazos y ambos caímos al suelo.
¡Dios! Tanto tiempo sin vernos. Sí habíamos mantenido contacto por internet y vía telefónica, pero no lo había visto físicamente. Y… a decir verdad, se ve tan…
- ¡Hayles! No has cambiado en nada ¡sigues igual de chaparrita como antes!
- Cállate –dije dándole un codazo.
- ¿Ya recibiste la buena noticia?
- ¿Cuál? ¿la de que conviviremos con 10 hombres más en este pequeño lugar y durante 40 días? Sí.
- Woow… a veces creo que me lees la mente –dijo entre risas.
- Para mí eso no es una buena noticia…
- Mmm… Hayley...
- ¿Sabes? Tendré que pasar más de un mes…
- Hayley…
- ¡no ya va! Yo sólo conviviendo con todos ustedes…
- ¡Hey! –gritó para que yo dejara de hablar como una perica.
- ¿Qué?
- ¿Por qué mejor no nos levantamos?
Ahorita es que me percaté de que seguíamos tirados yo encima de él… oohh.
Sentí como mis mejillas se tornaban ahora de un color vergonzosamente rojo.
Pero lo peor fue cuando hubo mucho silencio.
Ese silencio que marca los indicios de que algo malo pasa… sí. Definitivamente este silencio era uno de esos.
Con nervios miré hacia arriba y me encontré, más bien, Josh y yo nos encontramos con 3 pares de ojos observándonos.
- Ooook. Creo que mejor… nos vamos y volvemos a entrar, y hacemos como que esto nunca pasó… -dijo Zack sin quitar su vista de nosotros
- y como que nunca malpensé Esoo… -agregó Taylor.
En menos de 2 segundos, yo me coloqué en pie.
- ¡Chicos! ¡Vengan acá! –dije extendiendo mis brazos. Todos me abrazaron dejándome sin aire.
Woow…
cuánto los había extrañado…
Después de despedirme de mi madre y aguantarme un par de lágrimas de tristeza por su parte… ya todo se tornó más… ¿Tranquilo? Bueno, no estoy completamente segura.
Nos pusimos todos *los 11 Yo estaba un poco incómoda, porque en ese espacio no cabíamos muy bien todos nosotros. Por fin Frank *el viejito que teníamos por chofer* encendió el autobús y puso marcha…
Hasta luego Nashville…