Okey. Yo realmente no debería estar publicando otra historia. Lo sé. Pero simplemente es más fuerte que yo. Nunca en mi vida pensé que escribir sería tan adictivo.
Tengo muy poco tiempo entre la universidad y mis clases de piano pero esta historia está completa en mi cabeza por lo que es sólo cosa de escribir. Me ocupa menos tiempo porque no debo hacer coincidir la realidad con la ficción como en las otras historias que he escrito. PERO eso no quiere decir que esta historia no será realista. Porque lo será, y mucho.
Es Auslly pero la personalidad de ellos será un tanto distinta a como es en el show. Físicamente deben imaginarse a Ally como Laura en el photoshot de NAKED MAG. Y bueno a Austin como en la cuarta temporada.
El nombre me lo sugirieron unas amigas, no para esta historia pero creo que le viene perfecto *guiño guiño para ellas*
Espero que les guste :)
Si Ally tuviera que describir su vida en este instante la palabra perfecta sería predecible. Aquí se encontraba nuevamente con la decepción de terminar una relación y sólo podía oír su subconsciente que le repetía una y otra vez "te lo dije".
Pero esta vez algo había cambiado. Por lo menos, no sentía pena por terminar la relación, Elliot y ella seguirían siendo amigos. Sólo tenía tristeza de que nuevamente las cosas no funcionaran para ella. Porque hace unos años sólo se sentía así.
Como que nada funciona para ella.
"Ally ¿estás segura que estás bien?", le preguntó Trish. Ally había ocultado por días que su relación con Elliot había terminado pero hoy tuvo que obligadamente contarle a su mejor amiga. Ally era muy buena en guardarse sus sentimientos pero ella no podría engañar jamás a Trish. Ella era la persona que mejor la conocía en este mundo. Han sido vecinas y mejores amigas toda la vida. Y a pesar de que Ally insistió en que ella estaba bien con lo que había sucedido hace unos días atrás, Trish perfectamente notó que le estaba mintiendo.
"Uhm sí", Ally le respondió no muy convincente.
"Estoy segura que Elliot se va arrepentir de dejarte. Lo conozco, créeme", ella le dijo en un intento por animarla. Trish era amiga de él desde hace unos años y gracias a ella, Ally y Elliot se habían conocido. Ally le sonrió amargamente.
"Trish yo sabía que tarde o temprano esto pasaría. Elliot y yo no estábamos destinados a funcionar, no estábamos en la misma página". Su amiga le dio una mirada confundida.
"No estaban en la misma página… ¿Qué significa eso?", cuestionó.
"Nunca realmente actuábamos como una pareja… yo soy muy tímida y me costaba andar tomándolo de la mano o besándolo en público…. y siempre actuamos más bien como amigos. Y ya sabes el también seguro quería que otras cosas pasarán y yo no sé si iba a ser capaz de dárselo", le explicó.
"¿Tú te refieres a tener sexo?" – preguntó molesta. Ally asintió– ¡lo voy a matar! Cómo se le ocurre ponerte en esa situación. Tienes 15 años, eres virgen y él lo sabe".
"¡No! Él no me puso en ninguna situación, ni tampoco insinuó nada. Pero vamos tú sabes que iba a pasar, él es mayor que yo por un año y ya lo hizo hace mucho tiempo. Tarde o temprano iba a querer y yo no creo que hubiera sido capaz de hacerlo. Además si siempre actuamos como amigos, no habrá gran diferencia ahora. Las cosas no van a cambiar seguiremos siendo amigos, de verdad estoy bien con que lo nuestro terminara", la tranquilizó. Trish se quedó pensando un momento y luego volvió a mirar a Ally.
"¿Entonces por qué estás triste?", le preguntó todavía preocupada. Ally suspiró pesadamente.
"Estoy cansada de que todo me salga mal…", murmuró por lo bajo sin mirarla.
"Ally sé que estas cansada de que las cosas salgan mal pero déjame decirte algo. Tú eres la chica más inteligente que conozco, eres amable, tierna y linda a pesar de que te vistes con toda esa ropa oscura y parezcas una gótica", se burló su amiga haciéndola reír.
"¡Hey! ¡Me gusta el negro y cómo me visto!", Ally le reclamó fingiendo que se sintió ofendida. Ella estaba acostumbrada a las bromas sobre su forma de vestir. Trish era todo lo contrario a ella, le gustaba la ropa llamativa y estar a la moda porque ella tenía una personalidad fuerte. Ally por su parte era más bien un tipo más grunge y vintage pero estaba lejos de tener una personalidad rebelde.
"Ahaha es broma amiga. A mucha gente le gusta tu estilo aunque sea un tanto depresivo", bromeó nuevamente.
"Trish basta", Ally rio suavemente. Pero tenía algo de razón su forma de vestir tenía mucho que ver también como se sentía generalmente.
No había mucho color en su vida.
Los padres de Ally se habían divorciado hace dos años atrás y su vida desde entonces cambió para siempre. Ella vivía con su mamá y su hermano James el cual era un año menor. La relación con ellos no era ni buena ni mala, sino que sólo normal e insignificante. Mamá trabajaba todo el día y su hermano tenía su propia vida con sus propios amigos. La relación con su padre era aún peor y complicada. Podría resumirse que desde el divorcio pasó de ser la hija preferida y cariñosa, a la hija que le causaba problemas y que prácticamente lo odiaba.
Su tristeza más grande estaba ahí… pero ella prefería no pensar en eso.
"¡Ya sé que debemos hacer! ¡Debemos ir a una fiesta!", su amiga exclamó entusiasmada.
"No estoy muy de ánimos Trish", ella rezongó. Él celular de su amiga sonó.
"¡Vamos! Lo necesitas… además Kira ya viene en camino hacia acá", dijo mostrando un mensaje de texto en su celular.
"Supongo que no tengo opción…", aceptó resignada. Era sábado después de todo y sus amigas no irían a la fiesta sin ella y no quería arruinarles su fin de semana también.
Minutos más tarde su otra mejor amiga llegó a su habitación. Kira había sido novia de su hermano durante el verano, eso fue hace unos 8 mesas atrás y ahí se habían hecho grandes amigas. La relación con James no funcionó pero su amistad sobrevivió. Actualmente James paso de ser su ex novio al el hermano de su mejor amiga.
"Tú mamá sólo me dejó entrar ¿cómo estás? Vengo de la casa de Elliot y me contó que rompieron", Kira le preguntó inmediatamente a Ally con preocupación.
"Estoy bien", ella le respondió tranquilamente.
"¿Segura? Yo pensé que querías a Elliot", le cuestionó escéptica. Kira y Elliot se habían hecho buenos amigos este último tiempo gracias a su relación.
"Segura. Y sí, lo quiero pero no iba a funcionar de todas formas. ¿Supongo que te dijo que continuaremos siendo amigos…?", Ally le preguntó.
"Uhm sí… Pero aún no puedo creer que simplemente rompieron, ustedes hacían tan linda pareja", ella respondió decepcionada.
"Kira los dos tomaron la decisión de romper, no se lo hagamos más difícil", Trish la reprendió.
"¡Pero él también es tu amigo! Debemos hacer que se arreglen. No pueden terminar así como así", ella le discutió.
"¡No puedes obligarlos a estar juntos!", Trish exclamó molesta.
"¡Basta chicas! No discutan entre ustedes", Ally las interrumpió. Sus amigas se miraron la una a la otra.
"Lo siento", ambas se disculparon al unísono.
"Esta noche nos olvidaremos de los chicos y sólo seremos las tres", Ally las abrazó.
"¡Yayy noche de chicas!", exclamó Kira en éxtasis.
"Noche de chicas", concordaron Ally y Trish.
"Muy bien iré a casa a cambiarme de ropa y vuelvo en un segundo para maquillarnos y todo eso", Trish dijo saliendo de la habitación.
"Espérame acá, iré a pedirle permiso a mi mamá", Ally le dijo a Kira quien ya se estaba comenzando a maquillar. Bajo las escaleras para llegar al primer piso a la habitación de su madre. Ella estaba recostada en su cama leyendo un libro.
"Hey… con las chicas queremos ir a una fiesta y venía a pedir permiso para ir…", Ally le dijo tímidamente a su mamá.
"¿Dónde es?", le preguntó por costumbre más que por curiosidad. La mamá de Ally confiaba en ella y todo se debía a que Ally no bebía alcohol ni fumaba, además de ser bastante introvertida. Su mamá estaba segura que su hija no hacía nada malo a pesar que su forma de vestir decía lo contrario.
"Es en la casa de un chico de la escuela, no tengo idea su nombre…", Ally confesó. Su madre soltó una risita.
"¿Ally Dawson vas a una fiesta sin invitación?", le preguntó incrédula.
"Mamá no se necesita invitación… es una fiesta masiva", la respondió con una pequeña sonrisa.
"Muy bien… puedes ir". Ally le sonrió un poco más. Su madre ni siquiera le daba una hora de llegada porque su hija era muy prudente siempre.
"Gracias mamá", le dijo dándosela vuelta para volver a su habitación y dar las buenas noticas.
"Pero con una condición", su mamá le dijo deteniéndola. Ally volvió donde estaba algo confundida, nunca había pedido condiciones.
"¿Cuál condición?"
"Necesito que vayas a la casa de Marie y le pidas unas aspirinas. Se me acabaron y este dolor de cabeza me está matando", respondió arrugando un poco su frente.
"Mamá me puedo quedar en casa si te sientes muy mal", le dijo automáticamente con preocupación.
"No hija está bien… es solo un dolor de cabeza", la tranquilizó.
"Entonces iré de inmediato". Ally salió dirigiéndose a la casa de la vecina Marie que estaba a unas cinco casas más allá de la de ella. Pero para llegar ahí debía pasar por al frente de la casa de Gabe. Él era un chico de unos 17 años, pelo castaño claro, ojos verdes, sonrisa perfecta y sí, muy atractivo. No asistía a la misma escuela que Ally pero él era amigo de todos los populares. Ella siempre lo saludaba por cortesía debido a que era su vecino y todo eso. Pero si fuera por ella prefería ignorarlo. Él no era el tipo de persona con la que estaba acostumbrada a relacionarse, además de que la ponía nerviosa.
"¡Hola vecina!", exclamó Gabe. Él estaba sentado en las afuera de su casa fumando un cigarrillo.
"Hola", Ally lo saludó y continuó su camino en busca de las aspirinas. Cuando venía devuelta con su encargo, él aún estaba ahí. Ella bajo su mirada para seguir su camino pero el rápidamente se puso de pie y la alcanzó.
"¿Por qué huyes vecina?", él le preguntó con una sonrisa divertida en su cara.
"No estoy huyendo, sólo tengo que llevar esto a casa", le dijo mostrando la caja de aspirinas.
"Oh lo siento, es solo que pareciera que siempre huyes de mí", dijo algo decepcionado.
"Bueno tal vez puede que huya un poco de ti…", admitió algo cohibida.
"¿Por qué?", él le preguntó con esa misma sonrisa divertida.
"Bueno… tú eres popular y yo no. Las personas como nosotras no se relacionan", ella le respondió como si fuera la cosa más obvia del mundo.
"¡Vecina vamos! yo pensé que no eras una persona prejuiciosa", él le reclamó.
"No es de prejuiciosa, es sólo que no nos vemos como el tipo de persona que serían amigos", Ally le explicó un poco más.
"Los dos tenemos un piercing en el labio, ya tenemos una cosa en común. Seguro que podemos tener más cosas en común y ser amigos vecina", él le sonrió. Ally pensó un poco, tal vez podía tener razón.
"¿Por qué quieres ser mi amigo?", Ally no pudo evitar preguntarle.
"Seré sincero… me lo pidió un amigo mío. Pero eso no significa que no me parezcas interesante porque créeme que lo eres", respondió. Ahora Ally estaba confundida.
"¿Te lo pidió un amigo tuyo? ¿Quién? ¿Por qué?", cuestionó sorprendida.
"Austin Moon, seguro sabes quién es". Por supuesto que lo conocía pero sólo porque era el chico más popular de su escuela pero más allá de eso, no sabía nada de él. Y tampoco le había interesado saber.
"¿Por qué él te pediría algo así?", ella le preguntó. Gabe comenzó a reír y Ally le dio una mirada extraña.
"Hace un minuto no me querías ni hablar y ahora me llenas de preguntas. Hemos avanzado", él respondió ante su mirada. Ally cayó en cuenta que literalmente lo había bombardeado en preguntas y se sonrojó.
"Yo… yo tengo que irme", murmuró volviendo a caminar hacia su casa.
"¡Hey espera! ¿Somos amigos ahora?", él le gritó. Ally se dio la vuelta y lo miró.
"Tal vez".
…
Ally caminó rápidamente hacia su casa. Trish estaba saliendo de la suya y se encontraron en el ante jardín.
"A que no adivinas lo que me acabó de suceder", Ally le dijo todavía sorprendida a su amiga mientras caminaban hacia el interior de su casa.
"¿Qué?", le preguntó curiosa.
"Gabe me habló y me dijo que quería ser mi amigo"
"¿Él quiere ser tu amigo?", le cuestionó incrédula.
"Sí y eso no es todo. Dijo que quería ser mi amigo porque Austin Moon se lo había pedido", terminó de contarle.
"No estoy entendiendo nada", Trish le dijo todavía sorprendida.
"Yo tampoco", Ally reconoció.
"¿Te dijo por qué Austin quiere eso?". Ally negó con la cabeza.
"Ni idea. Pero tampoco me interesa… sólo me pilló por sorpresa", ella le respondió.
"¿A quién no? Austin es un mujeriego, seguro que puso sus ojos en ti", su amiga concluyó.
"¿Qué? No lo creo. No soy realmente su tipo, ni él el mío", la contradijo. Además ¿por qué alguien como Austin Moon se fijaría en una chica como ella? No podría imaginárselo ni un millón de años.
"Supongo… pero igual debes tener cuidado ese chico tiene novia y es conocido por serle infiel. Realmente no me explico cómo ella no se entera si todo el mundo lo sabe", Trish le advirtió.
"Estás muy bien informada… al parecer lo conoces bastante bien", Ally bromeó.
"Todo el mundo lo conoce bastante bien, es popular. Tú eres la antisocial que no se entera de nada", ella se burló. Ally rio porque tenía mucha razón.
"Okey. Olvidémonos de este tema insignificante y entremos a casa, debo entregarle esto a mamá y luego irnos a esa fiesta", le dijo abriendo la puerta de su casa.
"No podré ir a la fiesta, debo cuidar a mi hermana. Mamá tiene un compromiso de último momento", Trish le dijo decepcionada.
"Me quedo contigo entonces", Ally afirmó.
"No, de ninguna manera. Necesitas salir y distraerte. Además Kira no puede ir sola. Ya sabes hay que cuidarla o cometerá cualquier locura", le recordó. Kira solía descontrolarse en las fiestas y siempre había que estar ahí para que no cometiera alguna estupidez de la cual después podría arrepentirse.
"Lo sé… está bien".
…
La fiesta era una locura. Mucha gente, todos borrachos, todos bailando, parejas por todos lados. Ella no podía estar más incómoda. Las fiestas no eran lo suyo en lo absoluto. Pero haría lo que fuera por su amiga, la cual se estaban divirtiendo por lo menos bailando con unos amigos.
Ally estaba en una pared apoyada solo observando a la gente esperando que la fiesta terminara y poder volver a casa.
"¡Hey estás aquí!", exclamó una voz masculina interrumpiendo sus pensamientos. Ella se volvió a mirar a quien la había hablado.
"Hey Elliot", lo saludó con una pequeña sonrisa.
"¿Por qué no estás bailando?", él le preguntó mientras bebía una cerveza. Estaba un poco ebrio. No era una gran novedad. Otra cosa que no tenían en común.
"Ya sabes el baile no es lo mío…", ella se encogió de hombros.
De pronto una chica apareció y le dijo algo al oído a Elliot. Se rieron ignorando completamente a Ally.
Muy bien.
Si ella pensaba que no podía estar más incómoda en esta fiesta.
Ahora lo estaba.
La chica tomó la mano de Elliot y lo guio hacia la improvisada pista de baile que se había formado en la sala.
"¿Estarás bien?", él le preguntó antes de alejarse. Ally asintió.
"Muy bien", afirmó con una sonrisa falsa y él se alejó.
Comenzaron a bailar muy cerca entre ellos, prácticamente moliéndose el uno con el otro.
Gran espectáculo.
Era extraño verlo en esa situación, sobre todo porque habían terminado su relación hace sólo unos días. Pero ahora ella se daba cuenta que en realidad no le dolía.
Tal vez después de tantas decepciones su corazón era insensible a este tipo de cosas.
No sabía si alegrarse o no por eso.
Fue en busca del baño para escapar por un momento de todo. Entro y cerró la puerta con pestillo. Se miró al espejo y respiró profundo. Sólo debía aguantar un poco más y pronto estaría devuelta en su casa, en su habitación, en su cama. Aislada de todo.
De pronto la música dejó de sonar y notó que algo estaba pasando afuera. Salió rápidamente del baño para encontrarse con que la fiesta había terminado abruptamente porque los padres del dueño de casa habían llegado. Buscó a Kira de inmediato.
"¿Nos vamos a casa?", Ally le preguntó esperanzada.
"Son solo las 10 de la noche, no podemos volver tan temprano", su amiga rezongó.
"Pero la fiesta ya acabó", insistió esperando que aceptara irse. Pero cómo el destino la odiaba, por supuesto que ella no volvería a casa.
"¡Hey chicas iremos a otra casa a seguir la fiesta! ¡Vengan con nosotros!", exclamó Elliot entusiasmado.
"¿Ves? La fiesta continúa… además Elliot nos quiere ahí. Por favor ¿podemos ir?", Kira suplicó.
"Ally vamos diviértete un poco. Nunca lo haces, ahora que somos amigos puedo decírtelo. Debes relajarte y vivir", Elliot le dijo sin filtro. Ally notó que en eso también eran diferentes, ella no era el tipo de persona sonriente y divertida. En cambio él era eso y mucho más pero nunca tuvo la confianza para contagiarse de esa alegría que el poseía.
Tal vez ahora que eran amigos podría hacerlo. Así que decidió que esta noche iba a divertirse.
"¿Dónde es la fiesta?", Ally le preguntó con una sonrisa. Kira sonrió ampliamente también al escuchar a su amiga.
"En la casa de Austin Moon".
Opiniones, comentarios, son bien recibidos para actualizar lo antes posible. Realmente quiero saber si les interesa que continúe… sino no tiene mucho sentido continuar y estoy realmente emocionada por esta historia.
Próximo capítulo aparece Austin en gloria y majestad ahahah.
PD: Ili tengo presente tu sugerencia de historia pero por el momento no puedo sacar esta de mi cabeza. A penas pueda comenzaré a escribir sobre eso.
¡Un abrazo gigante!
Keey :)
