Disclaimer: Fairy Tail le pertenece a Hiro Mashima.
Extensión: 444 palabras.
Personajes/pareja: Natsu/Sting/Rogue, anormalmente fumado.
Notas: Dije que aceptaba el reto Reveire, y lo dije en serio asjdbjasf Está cosa es crack, muy crack, ridículamente crack. Tiene situaciones ilógicas, OoC intencional, sexo insinuado y travestismo, lean bajo propio riesgo (?)
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Challenged acepted.
Natsu comía helado con una no absoluta calma, por dos motivos principales: el primero era la competencia que tenía con Gray –quien a su vez comía sopa picante– y el segundo era el azabache frente a él. No, no Gray, ese azabache estaba a su lado, Natsu se refería al azabache de Sabertooth, más conocido como Rogue Cheney.
El mago en cuestión, el Cheney, lo apuntaba con una de sus manos con algo parecido a fuego en los ojos.
–¡Dragneel! –exclamó, obviamente que para algo están las exclamaciones rodeando la oración.
Natsu miró a su alrededor, sin comprender bien la situación.
–¡¿Qué?! –exclamó a su vez, para ir con las circunstancias, más o menos.
–¡Te reto a un duelo! –recibió de respuesta.
–¡¿Qué?! –No, esa exclamación no fue para ir con las circunstancias–. ¡¿Por qué?!
–¡Por la virginidad de Sting!
–¡¿Qué?! –No, ese no fue Natsu, ese fue el resto del gremio. Natsu, como era de esperar en toda ilógica situación, acepto el desafío porque no estaba dispuesto a perder a su amada abejita, con la que caminó por las hermosas calles de Crocus en una velada romántica durante la noche de llegada a esta, antes de los juegos.
El problema es que Rogue tampoco estaba dispuesto a renunciar a Sting, su bello rubio con el cual contemplo un eclipse mientras derrotaban dragones y se juraban amor eterno.
Por ese motivo es que Natsu y Rogue se odiaban a muerte, porque no estaban dispuestos a perder al amor de sus vidas por causa del otro. Aunque para obtener su felicidad tuvieran que destruir la del contrario, lo harían, era un precio que estaban dispuestos a pagar.
Dada la nula lógica de esto, este es el momento ideal para que llegue Sting con un vestido de novia gritando "¡No, no peleen por mi causa!"
Y pues, como los deseos del dichoso rubio son ordenes para sus amados, no pelearon.
–¡Me puedo casar con los dos! –exclamó, porque por lo visto aquí todos exclaman–, ¡en Bosco aceptan la poligamia!
Bueno, Bosco igual era un lindo lugar para casarse y tener la luna de miel, así que los dichosos magos aceptaron, todo con tal de no perder a su rubio, aunque seguían mirándose con odio mutuo.
Sobre el sexo de la luna de miel, eso fue simple, un piedra, papel o tijeras y decidieron quien iba primero.
Y ahora, queridos lectores, la autora se va a detener una invasión de helados del mal causada por el helado que Natsu dejo a medio comer. A cambio, los deja con la siempre linda imagen del trío que se montaron los tres mencionados tras la boda.
¡Nos vemos!
Ta dán, ahí está Reveire (?)
LOL
Rueguen que no vuelva a fumar lo que me fume para hacer esto y nos leemos.
Bye's.