UNA NUEVA VIDA PARA LOS PEVENSIE

Disclaimer: nada me pertenece, sólo la idea.

Nota de la autora: no estoy nada de acuerdo con lo que hizo C. S. Lewis con Susan en el 7º libro. En este fic, Susan vivió su propia vida (y tanto su familia como sus amigos lo aceptan y lo respetan en lugar de criticarla por ello) y cuando llegó su momento también fue a la verdadera Narnia como sus hermanos, porque ella era una buena persona y se lo merecía.

Aslan paseaba tranquilamente por la estepa, había un pequeño asunto que lo atribulaba, se trataba de los Pevensie.

Los hermanos habían cumplido la profecía, habían derrotado a la Bruja Blanca, vencido a Miraz el tirano, ayudado a Caspian, a su hijo Rilian, a Tirian, habían devuelto la paz varias veces a Narnia y muchas, muchas cosas más. Eran niños normales y corrientes que huían de un mundo en guerra y fueron a parar a otro, su infancia y adolescencia se vieron marcadas por esos sucesos. De repente, un día, murieron en un accidente de tren, ahora estaban en el Cielo narniano.

Aslan lamentaba que los jóvenes no hubiesen podido disfrutar de una verdadera vida, que se hubiese cortado tan deprisa. Después de todo lo que habían sacrificado, murieron jóvenes.

Caspian, Lilliandil, Rilian, Tumnus y todos los demás amigos eran narnianos y habían tenido vidas largas y felices. Es por eso que Aslan decidió que merecían una segunda oportunidad y los envió de nuevo a la Tierra. Todavía tenían cosas que hacer allí.

Los hermanos Pevensie nacieron, crecieron, fueron al colegio y se criaron con una familia buena y cariñosa. En sus sueños veían retazos de su vida anterior. Eustace y Jill tuvieron la misma suerte, en el colegio se conocieron y se hicieron grandes amigos, quizá algo más en el futuro.

Siento que sea tan cortita, pero mi inspiración ha decidido tomarse vacaciones, la universidad mantiene mi cerebro ocupado en otros asuntos. La continuación de esta historia, con Eustace y Jill como protagonistas, se titula Feliz Año Nuevo.