Hola gracias a todos por darle una oportunidad a mi historia, espero que les guste, es mi primer fic cabe destacar.

Sumary: La historia comienza cuando Rachel se va a New York dejando todo atrás incluso a Finn, pero al pasar los años ¿Qué pasará cuando se encuentre con una amiga en New York estudiante de Yale? Faberry, Britanna y lo que venga, mal sumary.

Aunque mucho yo quiera, los personajes de Glee no me pertenecen, sólo los uso para mis propios y nefastos propósitos.


Capítulo 1: Vidas separadas, pensamientos unidos.

Ha pasado mucho tiempo desde que Rachel se fue de Lima, desde que su amor la dejó ir, ha costado pero incluso lo ha superado, ya no piensa en eso, sólo es su futuro, en ser la estrella que más brilla en los escenarios del glamuroso Brodway, todo lo que había soñado se estaba cumpliendo.

Mantenía contacto con sus padres en Lima, y con algunos de los chicos del Glee Club, en todo ese tiempo habían pasado muchas cosas, Brittany y Santana seguían juntas y estaban en NY al igual que otros chicos del Club, Mike y Tina, Mercedes y Sam, aunque no lo crean, sí volvieron a estar juntos, también Kurt y Blaine, entre otros, siempre hablaba con Kurt, siempre fue su mejor amigo en las buenas y en las malas, todos habían seguido sus caminos pero aún así habían logrado mantenerse en contacto.

Había cierta rubia de la que no sabía mucho, sólo lo que Santana y Britt le decían, esa rubia que siempre le hizo la vida imposible pero a la final se volvieron muy unidas y siempre quiso lo mejor para Rachel, quizás no casarse e irse a cumplir sus sueños fue lo mejor que pudo haber hecho, y parte de eso se lo debe a Quinn, siempre quiso contactarla y agradecerle todo, pero según sus amigas estaba muy ocupada y era difícil contactarla.


Rachel POV.

Rachel siempre estaba ocupada con sus asuntos, casi nunca salía, pero un día Kurt se decidió a que debían salir, la convenció de ir a un bar, en realidad aparte de querer que se relajara quería que conociera a alguien, una relación, no estaba con alguien desde lo de Finn, ya era hora de seguir adelante, siempre decía que no tenía tiempo para salir con alguien, pero no le importó Kurt.

- Vamos Rach, tienes que salir, el mundo nocturno desea ver a la diva en las flamantes calles de NY ¿Sí?

- ¿Por qué mejor no salen tu y Blaine? Así tienen tiempo a solas, como pareja – Exclamó ella con cierta fatiga.

- Ya tendremos tiempo para eso, el punto aquí eres tú, necesitas divertirte y no acepto un no como respuesta—Dijo el chico insistente con una sonrisa en su cara.

- Está bien, déjame arreglarme y pasas por mí más tarde ¿Vale? Pero no te acostumbres - Dijo sonriendo - Creo que sí necesito salir un poco.

- Perfecto, nos vemos más tarde, ya verás no te arrepentirás- Y el chico se marchó dejando a la diva con el ceño fruncido.


Santana POV.

Había pasado mucho desde que la Abuela de Santana la echó de su casa, y aún seguía sin hablarle y no quería ver a su nieta, decía que era una desgracia para la familia entre otras cosas.

Santana orgullosa de su sexualidad y de amar a Britt, no dejaba de dolerle que uno de los seres al que tanto admiraba por su valentía y amaba por siempre estar ahí para ella, le haya dado la espalda y rechazado de aquel modo.

Siempre que eso le venía a la mente había cierta rubia ahí, para calmarla y hacerle saber que no está sola, y gracias a eso no se arrepiente de haber decidido pasar todos sus días con ella, que con esa dulce voz e inocencia era capaz de protegerla también, su pequeña bailarina.

Incluso en el cumpleaños de su hermano, Santana tuvo que irse porque su abuela no la quería allí y aunque su familia no quería que ella se fuera, ella decidió hacerlo para que todos pudieran estar juntos en esa fecha importante para su hermano y ella no tener que tonar todo en un drama, se sentía aislada, pero aun así ahí estaba su rubia.

- San, tengo que decirte algo—Dijo la rubia con expresión seria y segura.

- ¿Qué pasa cielo?- Dijo extraña la latina.

- Voy a hablar con tu abuela, lo tengo decidido, quiero hacerle ver lo mucho que te amo y que te hago feliz.

- Britt, te amo tanto, es un hermoso gesto pero… No puedo dejar que hagas esto, ni siquiera te escuchará, ni dejará que entres a su casa… Perderás tiempo en ir a Lima para eso…- Dijo bajando la mirada.

- San, haría lo que fuera por ti y tu felicidad, no me gusta que por mi culpa estés mal con tu familia- Y una pequeña lágrima caía por su mejilla.

La latina poniendo su pulgar para detener dicha lágrima, y acariciando su mejilla - Britt, no es tu culpa, mi familia siempre ha sido muy tradicional, no quiero que te culpes, gracias a ti soy feliz y es lo único que importa- Dijo regalándole una de sus mejores sonrisas.

Britt acortó la distancia entre ellas y se dieron un tierno beso, pero incluso en su cabeza no parecía haber cambiado de idea.


Quinn POV.

La rubia siempre mantuvo contacto con Sam, su mejor amigo, se veían cuando tenía tiempo y pasaban el rato, pero siempre estaba ocupada y no salía mucho, estaba centrada en sus estudios en Yale, y aprovechando haber entrado en esa universidad, pero Sam decidió que era hora de hacerla salir, ya que siempre pasaba sus días recordando cierta diva que le había robado sus miradas, su latir del corazón, todo, aunque nunca se lo dijo por temor, ya que ella estaba muy enamorada de Finn, siempre estuvo en contra de ese matrimonio y aunque por un lado es triste que la diva no obtuvo lo que quería, su sueño de casarse, ella se alegraba de ello, quería que se centrara en su futuro y brillara con todo su talento y belleza que la caracterizaba.

- Hey Quinn, hoy saldremos un rato y no acepto un no como respuesta, es hora de que te relajes.

- Sam, tengo cosas que hacer, no insistas, además no quiero que tu Aretha me golpee después por quitarle a su chico por una noche- Dijo con una risita divertida.

- Ella hoy tiene cosas que hacer, vamos, no la uses como excusa.

- Está bien, pero sólo porque necesito un respiro ¿Ok? ¿Paso por ti en mi moto? Espera ¿A dónde iremos?

- No tranquila, yo te paso buscando, iremos a dar un pequeño paseo—Dijo con sonrisa un tanto malévola.


Rachel POV.

La diva de encontraba esperando a su amigo, estaba lista con su cabello suelto, un maquillaje natural, y un vestido que le sentaba muy bien, no tenía idea a donde iban así que no se molestó mucho en arreglarse tanto, sin embargo deslumbraba toda su belleza. Al fin el timbre sonó y la diva se dispuso a salir, abrió la puerta y vio a su amigo.

- OH-MI-DIOS, toda una hermosa diva ¿Estás lista?

- Vamos, aunque aún no se a donde me llevarás.

- Ya lo verás—dijo guiñándole el ojo.

Y así se fueron los dos amigos, el camino fue algo corto, al bajar del auto Rachel se percató que estaban en un bar, sorprendida, le dijo.

- ¿Me has traído a un bar?- Su cara estaba descolocada.

- No seas aburrida, entremos, tomamos algo, bailamos un poco y vez sí conoces a alguien- Dijo divertido su amigo.

- Lo tenías todo planeado, bueno que más da, pero me la debes. -Dijo dando pequeño golpe en el hombro de Kurt.

Entraron y el lugar se veía agradable, música, un buen ambiente, personas, Rachel y Kurt fueron a la barra y enseguida pidieron algo de tomar, empezaron con algo suave y comenzaron a hablar muy entretenidamente, en cierto punto de la conversación, hablaban de los chicos del Club.

- Y dime ¿Has sabido algo de Quinn?

- ¿Y ese repentino interés en ella? - Dijo su amigo con el ceño fruncido, el siempre ha sabido que ella admira a Quinn, y nunca descartó la idea de que algo pasara entre ellas, ya al insistente intento de convencer a Rachel de no casarse y que pasaban tiempo juntas.

- Ella siempre ha sido mi amiga, bueno no siempre, pero la extraño, es especial para mí - dijo volteando la mirada.

- Así como Blaine para mi… -Dijo con la ceja levantada, a lo que su amiga le golpeó el hombro.

- Basta, sólo somos amigas, bueno espero que lo sigamos siendo.

Así siguieron su charla hasta que Kurt decidió ir al baño, ya había tomado varias copas y la diva empezó a recorrer el lugar con la mirada, decidió caminar, todos parecían felices en sus mundos y ella caminaba con la mirada perdida, distraída… hasta que esta se posó con una silueta inconfundible bailando en la pista.


Quinn POV

Estaba esperando a Sam, conociendo al chico sabía que terminarían en algún bar o algo parecido, pero no le tomó mucha importancia, sólo se divertiría y no bebería mucho, sólo charlar y disfrutar del ambiente, en eso llegó el rubio.

-Tan radiante como siempre Quinny – Dijo con una sonrisa.

- Cállate y vámonos – Dijo de manera divertida.

- Hace unas horas no querías ir – Dijo riendo.

- Aun me puedo arrepentir ¿Sabes?

- Ok, vámonos.

Y así fueron el rubio y la rubia, paseando por la calles de NY, hasta que por fin el auto del chico se detuvo en un local bastante llamativo para sorpresa de la rubia.

- Sabía que terminaríamos en un sitio así – Dijo mirando a el rubio que sonreía.

- No puedes negar que te gusta – Dijo sonriendo.

- Con tal y Mercedes no me asesine, todo está bien.

- Ella sabe que ando contigo, incluso te mandó saludos, hubiese venido pero como te dije está ocupada y tenía que sacarte de tu casa, quién sabe y conoces a alguien especial… - Dijo pícaramente.

- Entremos y ya – Dijo la rubia empujando al chico.

Entraron al lugar y decidieron sentarse a charlar un rato, comenzando desde los chicos del club, hasta los temas universitarios, en ese tema, la rubia no pudo olvidar esa chica pequeña morena que tanto extrañaba.

- Oí que está estudiando en NYADA, como había soñado.

- Sí, lo sé, espero y esté bien y se acuerde de mí, algún día.

- He notado como te brillan los ojos cuando hablamos de ella.

- Es sólo mi amiga, nada más… Además ella ama a Finn.

- Eso pasó hace mucho, no han vuelto a verse, quizá hasta se olvidó de él, quizá hasta el rehízo su vida con otra chica, el destino los separó por algo ¿No?

- Bueno eso no lo sé y no viene al caso… Voy al baño – La rubia se levantó y fue al baño un rato.

En el baño duró un rato mirándose al espejo, no se dio cuenta ni cuánto tiempo duró así, recuerdos venían a su mente de aquel momento, aquella despedida.

Flashback

Estaban todos en la estación, despidiéndose de Rachel, al momento de ella despedirse de Quinn, se quedan mirando un rato largo.

- Estarás bien, voy a extrañarte… te quiero Rachel.

- Yo también voy a extrañarte mucho Quinn, te quiero…

Jamás olvidarán esas últimas miradas que se dieron, se sentían seguras la una con la otra, en cuanto el tren arrancó, Rachel miraba a Finn, pero no podía evitar también mirar a esa rubia, y quinn tampoco podía evitar mirar a Rachel… su Rachel.

Días después se enteró que fue aceptada para estudiar en Yale, en NY estaría cerca de Rachel.

Fin del Flashback

Quinn salió del baño, no vio a su amigo, así que decidió pasearse por el lugar, terminó en la pista bailando sola, tenía unos tragos ya encima y no le importó, de pronto sintió a alguien detrás y volteó para ver quién era.

- ¿Andas solas? – Era una chica blanca, tenía cabello negro y un rapado rojizo en la parte derecha, tenía piercings en el labio (snakebites) una vestimenta con aires de chica rebelde.

- No, ando con mi mejor amigo pero no sé donde está… ¿Tú quién eres?

- Mi nombre es Juliet ¿Y el tuyo?

- Llámame Quinn.

Siguieron bailando, se notaba que la chica estaba coqueteando con ella, en eso la chica pide su número y Quinn se lo dio, se acerca a su oído y le dice.

- Debo hallar a mi amigo.

- Cuando termine la canción ¿Sí?

Quinn asintió y siguieron bailando, se reían, le pareció una amable chica, a pesar de sus aires de chica mala, era preciosa, no lo negaba pero en ese instante volteó para toparse con unos ojos que hacía tiempo sin ver y le hacía falta ver.

- ¿Rachel?...