Disclaimer: Todos los personajes de Harry Potter le pertenecen a J.K Rowling

-blablabla- dialogo

"blablabla" pensamientos

*/*/*/*/*/ Cambio de escena


Prólogo

Uno podría pensar que poner a un niño de tan solo 7 años a arreglar un gran jardín es algo cruel e inhumano, sin embargo para Petunia Dursley eso solo es un pequeño pago por su gran bondad de dejarlo vivir en su casa, y es por eso que un pequeño niño se encuentra trabajando arduamente en el jardín trasero del numero 4 de Privet Drive.

Si uno no conoce al chico fácilmente podría confundirlo con un infante de 5 o 6 años, ya que es un poco bajo para su edad real, además se puede ver algo delgado y pálido llegando a parecer enfermo.

Su nombre es Harry Potter poseedor de una indomable cabellera azabache, unas brillantes esmeraldas por ojos y una curiosa cicatriz en forma de rayo en la frente, un chico que a pesar de los malos tratos y carencias que a sufrido a manos de sus parientes, cree que aun existen personas buenas en el mundo, como Arabella Figg una bondadosa viejecita vecina suya, a quien a veces le ayuda con algunas pequeñas tareas en la casa y a cambio ella le proporciona un poco de alimento, que le va bien a su casi vacio estomago.

-Apúrate con eso que todavía debes limpiar la casa-le llego la chillona voz de su tía Petunia, él no dijo nada pues con el tiempo aprendió que negarse solo lo hacia merecedor de un castigo.

Se apuro lo mas que pudo ya que sabia que si no terminaba antes de la hora de comer lo mandarían directo a su alacena sin derecho a comida, pero eso para el ya era algo normal pues no seria la primera ni la ultima vez que eso pasara, así que puso todo su esfuerzo en terminar con la esperanza de recibir aunque sea una hogaza de pan y un poco de jugo.

Lastimosamente ni con todo su esfuerzo fue capaz de terminar a tiempo, para cuando escucho el carro de tío Vernon estacionándose frente a la casa y viendo que aun tenia mucho por hacer no pudo mas que resignarse a no tener cena, y con ese pensamiento siguió haciendo lo que hacia.

-Petunia ¿ya esta la lista la cena?-pregunto el corpulento hombre nada mas cruzar la puerta de entrada.

-Ya casi cariño, porque no te sientas a ver la tele mientras termino-le dijo Petunia llegando desde la cocina con una cerveza en las manos, pasándosela mientras el hombre le daba su saco y maletín.

-Guarda esto muchacho-le dijo con voz enojada volteando a ver a Harry y pasándole las cosas que momentos antes le diera Vernon, el pequeño se apuro a hacer lo que decía para volver a su quehacer.

-¿Dónde esta Dudley?-le pregunto a su mujer ignorando por completo a Harry, fijando la mirada en la mujer.

-Esta arriba haciendo su tarea-le dijo de forma orgullosa mientras regresaba a la cocina, momento en el que Vernon reparo en Harry.

-Aun no acabas tus deberes fenómeno-le dijo con hastío al ver una cubeta con agua a un lado de Harry.

-Y..yo..-titubeo un poco siendo que sabia muy bien que el hombre solo estaba esperando una razón para descargarse con él.

-Así que no-dedujo el hombre al ver al chiquillo temblar en su lugar-creo que tendré que darte un buen castigo-dijo acercándose al chico y propinándole una bofetada que lo tiro al suelo.

Después de ese primer golpe le vinieron mas, y el pobre chico lo único que podía hacer era tratar de cubrirse con sus pequeñas y maltratadas manitas tratando de disminuir el daño a su cuerpecito; al principio solo usaba sus puños, después al verlo hacerse un ovillo en el suelo comenzó a dar patadas y para ese momento la sangre no se hizo esperar.

"Qué alguien me ayude, por favor que alguien me salve" era el único pensamiento que se repetía una y otra vez en la cabecita de Harry, pero después de unos minutos donde siguieron los golpes y vio que nadie vendría a salvarlo dejo de luchar, para que hacerlo si no había nadie a quien le importara si vivía o moría.

-¡Vernon para¡-escucho Harry en la lejanía mientras luchaba entre la conciencia y la inconciencia, se sintió aliviado al ya no sentir mas golpes-vas a matar al muchacho.

-Eso se merece este anormal-fue lo que dijo el hombre en su defensa-después de lo bondadosos que nos hemos visto al aceptar a alguien como él en nuestra casa, lo menos que puede hacer es ayudar en los quehaceres.

-Lo se, pero si algo malo le pasa que le diremos a ese hombre si llega a venir-dijo de forma nerviosa dándose una idea de lo que eran capaces esas personas.

-Tienes razón-dijo un poco mas calmado Vernon-aléjalo de mi vista antes de que cambie de idea-dijo yéndose a la sala para ver la tele y tomando la cerveza que había puesto en la mesita de la entrada.

Petunia tomo de forma brusca a Harry, sin cuidado lo metió a su alacena y lo encerró, sin ni siquiera pararse a pensar en lo herido que lo había dejado su esposo.

-Por tu bien mantente lejos de Vernon-fue todo lo que escucho Harry antes de oír los pasos de su tía alejándose.

Unos momentos después los sollozos no se hicieron esperar, aunque eran muy bajos ya que si lo llegaban a escuchar solo se ganaría otra paliza, y su cuerpo estaba demasiado adolorido para resistirlo, su respiración era algo entrecortada y podía casi jurar que tenia algunas costilla rotas por el intenso dolor de su abdomen, pero como era costumbre lo único que podía hacer era rezar por que sus heridas se curaran rápido por si solas, siendo que siempre que su tío le daba una paliza como esa, su tía se hacia la que no había visto nada y lo encerraba en su alacena para que se recuperara por si mismo, mas para su desconcierto en una a mas tardar dos semanas ya estaba prácticamente recuperado.

-Si desaparezco ¿alguien me recordara?-dijo de forma ausente sintiendo un intenso dolor en su abdomen.

-¿Por qué no habría de ser así?-el chico se sobresalto al escuchar esa extraña pero por algún motivo familiar voz, pero no pudo descubrir a quien pertenecía o de donde venia ya que se había desmayado antes de poder hacer algo.

-¿Nunca debí confiar en su palabra?-dijo la voz con enojo y un rastro de tristeza al ver el estado de Harry, momentos después una luz inundo todo el lugar.

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Dumbledore se encontraba en su despacho revisando unos documentos, cuando un sonido estridente inundo todo el lugar rompiendo el agradable silencio que reinaba. Tardo unos minutos en recordar para que era esa alarma y salió corriendo hacia una esquina donde había una pequeña bola de cristal que se prendía y apagaba con una luz roja, Dumbledore quedo pasmado al ver las letras que se habían formado en el centro.

Privet Drive 4

Era todo lo que decía pero fue lo único que necesito Dumbledore para entender lo que pasaba.

-Harry-fue todo lo que pudo articular antes de ir hacia la chimenea, tomar polvos flu y decir-casa de Arabella Figg-desapareciendo alrededor de un montón de llamas verduscas

Después de llegar a casa de Arabella corrió hacia fuera ignorando los llamados de la mujer, quien estaba desconcertada al ver la figura de Dumbledore emerger de su chimenea, solo atino a seguirlo esperando saber el motivo de la apuración del hombre.

Dumbledore camino a paso rápido hasta el numero 4 en la calle de Privet Drive, con los sentidos agudizados en busca de cualquier anormalidad en el lugar, sin encontrar rastros de algún peligro para Harry, camino por el empedrado y muy bien cuidado caminito que llevaba a la casa donde vivía Harry, para cuando estuvo frente a la puerta toco el timbre con algo de apuro y al poco tiempo se encontró frente a la molesta cara de Petunia Dursley, quien paso del enojo, a la sorpresa y llego al nerviosismo.

-Buenas tardes Petunia-dijo con una calma falsa.

-¿Qué hace aquí?-le pregunto frunciendo el seño, era un mal momento para venir pues no sabia como podría explicar el mal estado en el que se encontraba el niño actualmente.

-Solo pasaba por aquí y decidí venir a hacerle una visita a Harry-dijo con naturalidad, pero dentro de él estaba muy ansioso por ver a Harry y creer que solo había sido una falsa alarma.

Mas al ver que la mujer se quedaba callada y no decía nada le dio un mal presentimiento, pudo notar como Petunia estaba tensa y parecía algo nerviosa.

-Petunia ¿Quién es?-Dumbledore vio como llegaba Vernon, quien al verlo no pareció muy contento de ver a otro anormal merodeando su casa.

-Buenas tardes señor Dursley-dijo educadamente-le decía a su esposa que pase a ver como estaba Harry-vio como el también se tensaba al escuchar el nombre del chico, lo cual ya no le estaba gustando mucho.

-Él tu…tuvo un pequeño accidente-trato de parecer lo menor nerviosa Petunia, Dumbledore arqueo una ceja al escuchar eso, ahí había mas de lo que decían.

-¿Qué clase de accidente?-dijo no muy seguro de querer saberlo, estaba seguro que se iba arrepentir de haber dejado a Harry con ellos.

-Si bueno..el muchacho es algo torpe y-comenzo Vernon no sabiendo que excusa inventar-cayo por las escaleras-dijo siendo eso lo único que se le ocurrió.

-Pero esta bien ¿no?-dijo con un rostro muy serio-quiero verlo, llévenme con él-fue una orden mas que una peticion.

Al ver que no tenían mas salida lo dejaron pasar y contrario a lo que se esperaba Dumbledore la pareja se dirigió hacia la alacena debajo de las escaleras lo cual lo desconcertó, pero mayor fue su sorpresa al ver como petunia palidecía al abrir la pequeña puerta.

-No esta-fue en ese momento que algo hizo clic en su cerebro y una tremenda furia lo embargo.

-Petunia, no estarás insinuando que Harry duerme ahí-la pareja se estremeció al escuchar el peligroso tono que había adoptado el viejo mago-mas aun, que tenían a un niño herido en ese lugar-el silencio que le siguió solo sirvió para aumentar la furia de Dumbledore.

-Cálmese por favor-Arabella quien hasta ahora había permanecido solo como una espectadora intervino al ver como los cuadros en la casa comenzaba a agitarse un poco.

Dumbledore dio un largo suspiro antes de acercarse al lugar donde supuestamente debía estar Harry, mas se arrepintió al momento de posar su mirada en el catre dentro cubierto por una viejas sabanas, pero su mirada pronto se quedo clavada en unas manchas carmín que había en la grisácea sabana, por lo que veía estaban frescas por lo que no necesito de mucho para entender la situación o eso creyó el.

-Arabella comunícate con el ministerio para que manden algunos aurores-dijo con una voz gélida que hizo estremecer a los tres-diles que tenemos un posible caso de asesinato por parte de unos muggle en contra de un joven mago, y que la posible victima es Harry Potter-la mujer se quedo paralizada al escuchar eso-ve Arabella-la mujer salió rápidamente al escuchar la voz del director.

-¿Que? ¡No¡-grito Vernon una vez su cerebro proceso las palabras de ese hombre-nosotros no le hemos hecho nada a ese fenómeno-dijo sin darse cuenta de su error.

-¡Basta¡-grito Dumbledore arto de todo esto-ustedes tendrán que responder ante la ley mágica por la desaparición de Harry y su posible asesinato-ninguno dijo nada al ver la fría mirada que les dirigía.

No tardaron mucho en llegar cinco aurores para llevarse a la pareja y al regordete Dudley, mientras no se supiera el paradero del niño ni su estado su destino era incierto, y el hecho de que la victima fuera el famoso Harry Potter no los ayudaba mucho.

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Durante los seis meses siguientes el mundo mágico ingles busco desesperadamente algún rastro de su salvador o al menos una pista que les indicara que estaba vivo, pero eso no paso y con cada día que pasaba sus esperanzas de encontrarlo con vida disminuían y llego el día que menos quería Dumbledore.

-Lo siento, trate de persuadir al ministro pero fue inútil-decía Kingsley viendo las tristes caras que habían puesto todos los presente al enterarse de la noticia.

-No podemos rendirnos, aun hay posibilidades de que este vivo en algún lugar-decía una muy acongojada Molly.

-Lo sabemos cariño, pero si a estas alturas aun no lo hemos encontrado-le dijo Arthur abrazándola- hay muy pocas esperanzas de que lo encontremos después.

-Eso si esta vivo-interrumpió Moody, hasta el momento nadie había querido pensar en esa posibilidad pero cada vez parecía ser la mas acertada.

-Dios mío-dejo salir un grito ahogado al pensar en eso-solo es un niño como mi Ronni-dijo sin poder evitar que las lagrimas comenzaran a brotar de sus ojos.

-No tenias que ser tan rudo-le riño Arthur consolando a su mujer, quien no paraba de llorar como magdalena.

-Bueno-volvió a tomar la palabra Kingsley-sin importar si esta vivo o no, a partir de hoy la búsqueda a sido suspendida y para el ministerio Harry Potter esta oficialmente muerto.

-¿Qué opina de todo esto Dumbledore?-pregunto Snape quien estaba a un lado del hombre, esperando saber que pensaba.

-No podemos dejar de buscar a Harry si esta vivo-dijo con firmeza-y si no es así, por lo menos encontrar su cuerpo para darle un digno entierro-esto último le dolió en el alma decirlo pero sabia que aun estaba esa posibilidad, sin más salió del lugar dando por terminada la reunión.

"James, Lily espero puedan perdonarme por no haber podido proteger a su hijo" pensó con amargura mientras salía del lugar donde se había llevado una reunión de la orden del fénix, para saber como iba la búsqueda de Harry.

Y como una suave brisa de verano, un día simplemente desapareció sin dejar rastros.

Continuara….


Waaaaaaaaaaaaaaaaaaa

Bueno esta es una idea que estaba rondando mi cabeza y no pude evitar la tentación de hacer un fic y pues este es el resultado, aun no tengo bien desarrollado el rumbo que tomara pero lo que si puedo adelantar es que tendrán muchas sorpresas por venir.

Me gustaría mucho sabes si les gusta la idea que se me ocurrió o de plano no sirvo para esto, asi que seria de mucha ayuda que me dan su opinión de que les pareció.

Bye bye