Hola gente bonita de todas partes del mundo :) aquí vuelvo con otro fic jejejeje. Esta historia se me ocurrió porque, como siempre, mi hermanita y yo nos pusimos a hablar sobre Bleach y a inventar situaciones cómicas entre los personajes. Y casi siempre nuestra principal victima es nada más y nada menos que Sousuke Aizen! *aplausos, aplausos* xD
Disclaimer: los personajes de Bleach no me pertenecen, son propiedad de Tite Kubo-sama. Si no fuera así, Gin no habría muerto
Los espadas quieren hacerle una broma a Aizen, pero él no se dejara tan fácilmente XD
Intentando Trollear a Aizen
Se podía ver al Emperador de Las Noches y Rey de Hueco Mundo sentado como siempre en su trono de piedra, con su mejilla apoyada en su mano y con su misma cara de "tengo todo planeado, incluso la mosca hollow que acaba de pasar frente a mi también lo planeé". Casualmente ese día todos los Espadas tenían el día libre, pero no creerán que estaban de vagos por ahí... bueno, tal vez algunos si.
En fin, la mayoría de los Espadas estaban reunidos en la sala de Reuniones discutiendo un tema muy importante, tanto que hasta Yammy estaba poniendo atención...si claro. En la sala sólo estaban Barragan, Harribel, Ulquiorra, Nnoitra, Grimmjow, Aaroniero, Szayel y Yammy; Starck estaba durmiendo y Zomari estaba muy ocupado meditando. Nnoitra era el encargado de esa improvisada reunión y Aaroniero estaba de guardián en la puerta por si se acercaban Gin o Tousen, y en el peor de los casos Aizen.
- Bueno mis queridos compañeros - comenzó diciendo la quinta Espada - los he reunido aquí contra su voluntad para...
- no me importa para que nos hayas reunido, tengo experimentos muy importantes que hacer. No tengo tiempo para tus estupideces, quinta - interrumpió Szayel acomodándose los lentes y con notable molestia marcada en su rostro.
- Nnoitra, apresúrate y dinos qué demonios quieres - dijo Harribel con voz de ultratumba y mirada amenazante.
- ya me puedo ir? - pregunto Yammy con un dedo en el oído.
- yo me largo - dijo molesto Barragan para luego levantarse de su asiento y dirigirse a la salida, seguido de los demás Espadas.
- ¡nadie si irá de aquí! - grito Nnoitra ya fuera de sus casillas. Al ver que todo el mundo se giró a verlo con cara de querer meterle un cero por donde no le quepa, prosiguió a explicar de una vez por todas lo que quería decir desde un principio - bien, estuve pensando...
- Uy, y no te dolió? - interrumpió nuevamente Grimmjow partiendose de la risa junto a los demás presentes, a excepción de Ulquiorra, que no le veía la gracia al comentario, y Yammy, que no había entendido.
- ¡ya cállense bola de idiotas!- volvió a gritar la quinta Espada, provocando que las risas poco a poco fueran apágandose - como les decía, ayer se me ocurrió una idea muy divertida. ¿qué les parece si intentamos hacerle un broma a Aizen-sama? - dijo la quinta como si se le hubiera ocurrido la mejor idea del mundo (nótese el sarcasmo)
- tu me estás hablando es de adrenalina - dijo Szayel y de kami-sabe-donde sacó unos lentes oscuros y se los puso..sobre sus gafas...wtf
- quieres que te maten? - preguntó Harribel - hay mejores formas de suicidarse sin sufrir mucho, sabías?
- La mujer una vez me explicó que eso se llama "trollear" - habló por primera vez Ulquiorra, la cuarta Espada.
- y... que dices, mi querido emo? trolleamos a Aizen-sama? - dijo Nnoitra con una sonrisa torcida.
- no, no puedo hacer semejante cosa a Aizen-sama - se negó el pelinegro cruzando sus brazos sobre su pecho.
- yo si le entro! - gritó Grimmjow notablemente animado
-yo también, quiero ver qué pasa - apoyó Aaroniero desde la puerta. Poco a poco se fueron uniendo los demás, aleganando que sería entretenido ver cómo mataban a la quinta Espada por semejante idiotez. Al final, sólo quedaba Ulquiorra, quien se negaba rotundamente a molestar a Aizen-sama
- Vamos emo! no seas marica! - ya Grimmjow se estaba hartando de Ulquiorra. ¿cómo podía ser que existiese alguien tan aburrido?
- Si lo haces te prometo que te explicaré que es un corazón - dijo Szayel, esperando que su soborno funcionara, y para su sorpresa, así fue.
- Está bien - aceptó sin más, sorprendiendo a los presentes, en verdad había caído muy fácil.
- Bien, Aaroniero, avísales a Starck y a Zomari. Los demás preparen sus bromas...digo trolleadas.
Los Espadas aprovecharon el resto del día para planear sus bromas, considerando todos los escenarios posibles, sip... definitivamente tenían todo fríamente calculado. Uno que otro tuvo que pedirle ayuda a Szayel (entiéndase Yammy) pues siempre caía en su propia broma. Stark y su fracción Lilynette cooperaron para planear su propia broma. Por otro lado, Grimmjow se estaba centrando más en matar a Aizen que en trollearlo. Así, para el final del día, ya tenían listas su bromas, en el caso de Grimmjow, sus trampas asesinas.
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Al día siguiente, ya todos estaban listos con sus bromas en posición, todos atentos cuando apareciera su víctima. El único detalle, era que no se habían puesto de acuerdo para ver en qué momento cada quien haría su jugada, por lo que no sabían en qué momento ocurrirían las trolleadas, ni tampoco la ubicación de las bromas; y para empeorar, no tenían ni la menor idea de cuáles serían las bromas de sus compañeros. Estaban perfectamente coordinados (nótese el sarcasmo).
Trolleada de Stark y Lilynette
Habían decidido hacer algo sencillo, en realidad Stark tenía flojera y pensó en algo sencillo. Se habían escondido en la habitación del Emperador de las Noches, La primera Espada se escondió en el armario y su fracción, aprovechando que era pequeña, se escondió detrás de un mueble, esperando que el ex capitán cayera en brazos de Morfeo.
Pero resulta que ambos se habían quedado dormidos mientras esperaban. Lilynette fue la primera en despertar, asustándose al ver la hora en el reloj de la mesa de noche. ¡eran cerca de las seis de la mañana! rápidamente fue al armario para despertar a Stark para llevar a cabo su broma.
- pss! oi Stark! despierta! con un demonio! - gritaba en voz baja la rubia mientras lo zarandaba
- tch! que demonios quieres Lilynette - murmuró medio dormido la primera Espada.
- tenemos que trollear a Aizen! apresúrate y trae la crema pastelera!
- esta bien, ya voy - dijo desperezándose.
Debían actuar rápido, en cualquier momento el ex capitán podría despertar, y si eso ocurría, digamos que no quería ser comida para los Menos. Se acercaron en cuatro patas sigilosamente a la cama. La fracción ya tenía preparada la cámara mientras que Stark colocaba la crema pastelera en la mano del Emperador de Las Noches. Lo único que faltaba para completar la broma era hacer que estornudara. Pero como si el destino, o Kami, o Goku, o como ustedes quieran, estuviera en su contra, sonó el despertador, el endemoniado aparato empezó a sonar como si no hubieran un mañana. Entonces el castaño levantó su mano embarrada de crema para apagar dicho aparato y... digamos que no logró darle al botón a la primera. Lejos de siquiera rozar el despertador, posó su mano sobre la cabeza de la Primera Espada, llenándolo de la dulce crema, que lentamente caía sobre su cara. La rubia no desaprovechó la situación y le tomó foto a su otra mitad. Estaba a punto de reírse, pero al ver como el ex capitán empezaba a despertar, se escondieron rápidamente debajo de la cama a esperar que el Señor de Hueco Mundo abandonara sus aposentos para poder salir corriendo como alma que lleva el shinigami.
Resultado: FAIL! el pastel se quedó sin cereza
Trolleada de Barragan
La segunda Espada había mandado a una de sus fracciones a que siguieran muy discretamente a Aizen para poder saber en donde se encontraba. Había pensado una broma sencilla , demasiado fácil, no veía la mínima posibilidad de fallar. Estaba muy confiado y, según una de sus fracciones le había informado, la Primera Espada había fallado ridículamente. También aprovecharía esta oportunidad para vengarse por su palacio. Ya vería ese niño bonito, nadie osaba sentarse en SU trono.
- Barragan-sama - dijo una de sus fracciones arrodillándose en frente de él - he venido a informarle que Aizen-sama se encuentra camino a la sala del trono.
- Bien, hora de poner en marcha mi truqueada - dijo la Segunda Espada con pose de superhéroe.
- es trolleada, señor - le corrigió la fracción.
- como sea - dijo sin quitar su pose.
Apenas llegó al lugar donde le habían indicado sus fracciones que estaba Aizen, el ex rey de Hueco Mundo fingió que se le había caído una moneda sin que el castaño se diera cuenta, y se escondió detrás de la esquina de uno de los pasillos y esperó a que el ex capitán pasara por ahí.
No habían pasado ni 3 minutos cuando el anciano pudo ver que Aizen se acercaba al lugar donde estaba la moneda. Estaba más que confiado, estaba seguro de que su broma le saldría más que bien. Cuando vio que el castaño iba a agacharse para recoger la moneda, se preparó. Era ahora o nunca...
- PR...COF COF!- a la Segunda Espada le dio un ataque de tos de esos que a uno lo dejan medio muerto. La idea era hacer el sonido de un pedo, ¡no una fea tos con flema incluida!. Por su parte el castaño, quien obviamente escuchó semejante catarro, se volteó encontrándose con su Segunda Espada casi arrodillada y con lagrimitas en los ojos.
- Barragan, deberías ir a ver a Szayel. tal vez tenga algo para esa tos - dijo "inocentemente" mientras que guardaba la moneda en el bolsillo de su hakama.
- h...hai - logró articular a duras penas para luego dar media vuelta y retirarse con una venita en la frente a punto de explotar - puta tos de mierda - murmuró resignado.
Resultado: FAIL! cof cof
Trolleada de Harribel
La Tercera Espada, al igual que a Barragan, se le había ocurrido una broma muy sencilla. Ni siquiera necesitó la ayuda de sus fracciones. Consistía en calentar una moneda a una temperatura extrema y colocarla en el suelo, así el imbécil que quiera agarrarla lo pensará dos veces cuando vuelva a encontrarse una moneda en el suelo.
La rubia sabía que en las tardes Aizen dejaba la sala de trono para ir a tomar té; por lo que ella fue cerca de la hora en que el castaño salía, a la puerta de la sala del trono para colocar la moneda caliente y luego se escondió detrás de uno de los inmensos pilares.
Mientras esperaba, vio que Ulquiorra se acercaba a ella, y sin decirle siquiera "hola" también se colocó detrás de un pilar. Supuso que quería ver como resultaba la trolleada. Luego de esperar por unos 20 minutos, por fin ambos Espadas vieron como las puertas del salón del trono se abrían dejando ver al Emperador de Las Noches.
- "ok, hasta ahora todo va bien" - pensaba Harribel. Pero no contó con que la puerta, al abrirse, fuera a mover la moneda. Por un error tan pendejo, ya había fallado - "diablos"
La puerta había empujado la moneda, quedando ésta detrás de la puerta, por supuesto fuera de la vista de cualquiera. Ambos Vasto Lorde se quedaron escondidos detrás de los pilares y vieron como las puertas volvían a cerrarse dejando ver la moneda pegada a la pared. Apenas el ex capitán se fue, ambos salieron de su escondite. Justo en ese momento venía Nnoitra, quien desde donde venía, podía ver claramente la moneda.
- una moneda! - dijo el pelinegro agachándose para recogerla, pero... - WTF! - exclamó agitando su mano quemada, bajo la mirada aburrida de Ulquiorra, quien dio media vuelta para irse; y Harribel, que simplemente negaba con la cabeza resignada.
Resultado: Fail! agua que me quemo!
Trolleada de Ulquiorra
A nuestro querido Cuarto Espada se le había ocurrido la brillante idea de usar una moneda al igual que a Harribel, sólo que él había pensado la broma de otra forma, no quería arriesgarse a quemarse como le pasó a Nnoitra. La verdad era que no le agradaba nada la idea de hacer quedar en ridículo a su amo Aizen-sama, pero él quería saber que era un corazón, y digamos que la curiosidad mató al gato.
Iba caminando tranquilamente por los pasillos, y cuando sintió la presión espiritual de Aizen actuó rápido. Sacó una moneda del bolsillo de su hakama y de kami-sabe-donde una botella pequeña de pega. Al menos eso era lo que le había dicho Szayel. Colocó una gotita en un lado de la moneda y luego la pegó en el suelo, justo en medio del pasillo, a la vista de todo el mundo.
Cuando el ex capitán apareció en el pasillo, el pelinegro simplemente actuó normal, puso su típica cara de poker con las manos en los bolsillos de su hakama y empezó a caminar en la dirección de donde venía el castaño.
- Ulquiorra - saludó Aizen
- Aizen-sama - el pelinegro hizo una reverencia. Pero justo cuando ambos iba a seguir su camino, llegó Yammy, quien también saludó al Rey de Las Noches con una reverencia. Y ahí fue cuando vio una moneda. Lógicamente, quiso agarrarla, pero gracias al pegamento de Szayel, ni Yammy con su "Ira" podía levantarla del suelo. Por su lado Aizen simplemente se fue como si no hubiera pasado nada, dejando a Ulquiorra con su misma cara de poker, pero que internamente estaba que mataba a Yammy de peor forma posible. Por su culpa ahora no le iban a decir qué era un corazón.
- has arruinado mi trolleada, basura - dijo con ganas de usar su Cero Oscuras contra la Décima Espada, quien al ver la mirada de Ulquiorra más vacía que de costumbre, olvidó la moneda y salió corriendo por su vida.
Resultado: Fail! Basura...
Trolleada de Nnoitra
La quinta Espada, después de exprimirse el cerebro, literalmente, se le había ocurrido la forma más fácil y efectiva de trollear a Aizen-sama. Consistía en echarse azúcar en el pelo y después, cuando estuviera cerca (en lo posible al lado) del Emperador de Las Noches, empezar a rascarse como si tuviera pulgas.
Fue a la cocina en busca de la azúcar, pero para su mala suerte habían dos recipientes iguales. Supuso que uno era sal y el otro azúcar. Pensó en probarlos para ver cual era cual, pero de la nada Aizen apareció en la cocina. Rápidamente tomo uno de los dos recipientes y los escondió detrás de él.
- A...Aizen-sama! que sorpresa verlo por aquí - dijo nerviosamente el pelinegro.
- Es mi palacio, no entiendo porque te sorprendes - dijo como si fuera lo más obvio del mundo.
- N...no e eso. Es que nunca había visto que viniera a la cocina- intentaba sonar educado
- Aunque no lo creas también debo comer. Además, solo he venido a prepararme una taza de té. Gustas acompañarme?- ofreció simplemente. Nnoitra solo pensaba en una forma de escaparse de esa situación. Aunque pensándolo bien, podría aprovechar para poner en marcha su trolleada. Solo necesitaba salir un momento para echarse el azúcar en el pelo
- Será un placer, Aizen-sama - de verdad estaba haciendo un esfuerzo titánico para no mandar a la mierda todo. Odiaba tener que tomar esa cosa, ya tenía suficiente con tener que tomarlo en las reuniones. Pero vamos, todo sea por poder joder a Aizen por lo menos una vez en su putabida. Empezó a fingir que necesitaba ir al baño.
- sucede algo, Nnoitra? - preguntó el castaño al ver que el pelinegro se movía mucho en su asiento.
- es que necesito ir al baño - dijo la quinta fingiendo urgencia en su voz.
- puedes ir - y apenas el ex capitán terminó la frase Nnoitra usó sonido para llegar al baño. Abrió el recipiente y se lo vació sobre la cabeza y de inmediato sintió un olor extraño, y no era precisamente un aroma dulce.
- pero que mier... esto no es azúcar, es sal - dijo un poco frustrado - supongo que igual funcionará.
Al volver a la cocina ya estaban las dos tazas de té servidas sobre la mesa y Aizen sentado en una silla esperándolo ¡qué considerado! si tan solo supiera lo que esperaba. La quinta se las ingenió para sentarse al lado del ex capitán, alegando que en el asiento que le había ofrecido el castaño pasaba una brisa fría, cosa que era pura mentira.
Nnoitra empezó a rascarse la cabeza disimuladamente mientras tomaba té. Poco a poco fue rascándose cada vez más fuerte hasta el punto que empezó a sacudirse. Mientras tanto, Aizen simplemente lo ignoraba y seguía tomando su delicioso té. No podría importarle menos si la quinta Espada tenía caspa o piojos o pulgas o lo que sea. Todos los químicos que se aplicaba en su perfecto cabello tenían componentes anti-caspa, anti-piojos, anti-todo; así que no tenía de qué preocuparse. Pero resulta que en uno de sus movimientos un diminuto granito de sal fue a parar a su único ojo.
- AAAAHHHH! MI OJITO SANO! ¡(/&%¿!$·!$%$/(&%·"! - gritaba agonizante el pelinegro mientras se retorcía provocando que le cayera más sal en el ojo - AAAAAHHHH! POR EL AMOR DE AIZEN ALGUIEN AYÚDEMEEE!
Mientras Nnoitra seguía agonizando, el Emperador de Las Noches se iba calmadamente, como si no fuera con él la cosa.
Resultado: Fail!
Continuará
Qué les pareció? les gustó? si? no? reviews? éste será un fic corto y no creo que pase de dos capítulos.
Cualquier crítica constructiva es bienvenida ;)
Mata nee! Hikari-chan fuera :3
