N/A: recientemente vi Escuadrón Suicida, y me enamoré completamente del personaje de Margot Robbie, Harley Quinn (la novia del Joker). Me fascinó este personaje, nunca fui una gran fan del universo de superhéroes y villanos, pero desde que vi Escuadrón Suicida, amé a Harley desde el primer momento. En la película se podía apreciar que Deadshot se había encariñado bastante con ella, desde mi punto de vista, creo que se había enamorado de Harley. Esta historia es como una continuación de la película, en la que se desarrolla la relación (el "pequeño romance") entre Dead y Harley, además de aportar mi visión de como sería una Harley Quinn embarazada. Espero que sea de vuestro agrado ^^ Decir también que me he creado una cuenta en Wattpad.

Ni la película ni los personajes son de mi propiedad.

Narra Harley

Las lágrimas comenzaban a fluír de mis ojos una vez más, sin siquiera ser capaz de poder retenerlas. Él ya no estaba. Mi único amor, mi bichito... Ya no estaba... Él... Me había dejado... Para siempre... Y todo por culpa de ese estúpido murciélago... Me prometí desde aquel día que me encargaría de matarlo lenta y dolorosamente con mis propias manos...

Mi corazón... Dolía tanto... Todo esto era... Era simplemente demasiado doloroso. Ya no había vuelta atrás, estaba sola, me lo habían arrebatado. Sin él... Sin él estoy completamente perdida.

El maldito murciélago no solo me había arrebatado a lo más importante de mi vida, sino que también me había dejado sin dinero. Ya no tenía a donde ir. No tenía nada.

Lo primero que pensé fue en poner fin a mi vida. Sin mi bichito ya nada tenía sentido. Pero no podía... Había una pequeña parte de él que me necesitaba con vida. Mi pequeño... Una parte de él que Batman no había podido arrebatarme...

Me llevé las manos a mi plano estómago, el cual estaba lleno de cicatrices de antiguas peleas, y lo acaricié con cariño. Sonreí mientras mis lágrimas rodaban por mis mejillas. En mi interior crecía mi único motivo para seguir viviendo. Lo único que quedaba de mi bichito. Un pequeño ser al que aún no conocía, pero que amaba con todo mi corazón.

Me incorporé de la cama y agarré mi último vestido del armario. Era rojo, con pequeños detalles de encaje en el escote y las mangas. Mi vestido favorito, el que me había regalado mi bichito... Lo doblé con cuidado, una vez más con lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta, y lo metí en mi enorme maleta, junto con el resto de mis cosas. Cogí mi maleta y abandoné la habitación de hotel, ya que no podía permitirme quedarme allí por más tiempo...

Y ahora, ¿qué iba a hacer?

Narra Deadshot

Ya habían pasado dos años desde que había visto a Harley por última vez. Dos años, que se dice pronto, vaya, pero para mí ha pasado como una eternidad. Y no hay día en que no piense en ella.

Desde que la chica desapareció de prisión, no volvimos a saber nada de ella. Obviamente el gobierno trató de encontrarla, pero les fue imposible. Era como si Harley hubiese sido borrada del mapa... Solo esperaba que ella estuviese bien. En alguna parte, llevando la vida normal y tranquila que ella siempre había deseado, la chica se lo merecía.

El resto del Escuadrón fuímos liberados dos años más tarde de la desaparición de Harley, después de haber trabajado muy duro en varias misiones secretas del gobierno para conseguir reducir así nuestra condena y salir de aquel repugnante lugar cuánto antes. Claro que sin Harley y Diablo ya no era lo mismo.

Al salir, cada miembro del equipo siguió un camino distintoo. Yo llegué a un acuerdo con mi ex mujer y conseguí la custodia compartida de mi hija. Había dejado mi vida de asesino para dedicarme plenamente a ella. Incluso encontré trabajo en una oficina de la ciudad para que no le falte nada. Me alejé completamente del crimen, ya no estaba interesado en seguir luchando contra Batman, ni en seguir matando gente. Eso ya no iba conmigo. Había escogido llevar una vida tranquila y feliz al lado de mi niña.

Sin duda, aquella parecía la descripción de una vida casi perfecta, o feliz al menos. Os diré una cosa: No lo era. No podía dejar de pensar en ella, en lo que le habría sucedido, en si estaba viva o muerta, y muchas más intrigas.

Entonces, mi vida cambió radicalmente de un día para otro.

Sucedió en una tarde de invierno, fría (como la gran mayoría de tardes de esta estación), con el cielo cubierto de nubes grises, lloviendo a cántaros.

Yo estaba solo en mi piso, encerrado en mi despacho, escribiendo unos informes que debía entregar la próxima semana en la oficina. Entonces mi teléfono móvil comenzó a sonar. Alargué una mano, lo cogí y leí las letras blancas que se mostraban en la iluminada pantalla

Número desconocido...

- ¿Sí?

- ¿Dead? ¿De verdad eres tú?-reconocí de inmediato la voz femenina que me hablaba desde el otro lado de la línea. Sin lugar a dudas, era ella. Su voz sonaba temblorosa y rota, incluso enferma. Pero era ella. Claro que lo era.

Aún no salía de mi asombro cuando traté de responderle:

- ¿Har... Harley? ¿Harley Quinn? Yo... Sí, soy Deadshot. Bueno, no...no exactamente... Ahora soy Floyd... Pre... Preferiría que me llamases así... Deadshot... Él es... Parte del pasado. ¿Dónde demonios te habías metido estos dos años?

Pude apreciar como la muchacha suspiraba al otro lado.

- Yo... Necesito que me ayudes... Por favor... No tengo a nadie... Yo... Necesito... Ayuda... Por favor... Yo... - nunca había escuchado a Harley tan triste y vulnerable. ¿Dónde estaba la divertida y alegre Harley Quinn que yo había conocido, llena de fuerza y vida?

Realmente sonaba desesperada, y eso me asustó.

- Hey, hey... Tranquila Harley, ¿qué ha ocurrido?- susurré serio, tratando de calmarla.

Oí como ella se tragaba las ganas de llorar. Dios, esto no podía significar nada bueno... En qué lío se habrá metido...

- Estoy sola en la calle, no tengo a nadie, me lo han quitado todo, no tengo a dónder ir- gimió.

- Vale, bien, Harley... Dios, no puedes quedarte más en la calle, vas a morir de hipotermia o pulmonía, Dios... Tranquila, no pasa nada, todo va a salir bien, ¿vale? Ven a mi casa, puedes quedarte aquí el tiempo que necesites... Puedo mantenerte hasta que encuentres...

- ¡Y yo que sé donde coño vives!

- Tranqui, tranqui, ahora mismo te doy la dirección y puedes venir en taxi, ¿va...?

- No me llegará el dinero...

-Vale, bien, tranquila, en ese caso... Dime dónde estás e iré a recogerte.

Narra Floyd

Bajé de mi citroen oscuro justo en el lugar que ella me había indicado. Caminé hacía el pequeño vulto evuelto en un fino abrigo. Madre mía, debía estar cogelándose.

- Hey, Harls... Adivina quien ha venido a salvarte- susurré en tono irónico.

Harley alzó la cabeza y me miró con los ojos rojos. Estaba pálida, demacrada, con ojeras y temblando.

Me dedicó una pequeña sonrisa, cansada y triste, mientras que me regalaba un "gracias" con la mirada.

- ¿En... enserio pu... puedo quedarme en tu... casa?- tartamudeó.

- Claro que puedes- le sonreí amablemente. Dios, yo, sonriendo, siendo amable, con una mujer que no era mi hija...

- Gracias...- dijo ella muy bajito.

- Te llevaré a casa- murmureé-. ¿Puedes caminar?

Ella asintió y trató de incorporarse. Entonces, sus piernas fallaron y se cayó hacia delante.

La cogí rápidamente para evitar que se estampara contra el suelo, y la cargué en mis brazos al estilo nupcial.

La metí en el coche, en el asiento del copiloto. Le quité el abrigo mojado y le pasé una toalla para que se secara el cabello, además de envolverla en una cálida manta.

- Gracias...- susurró ella.

Me dirigí en silencio hacia el asiento del conductor y encendí el coche. En ese momento, el estómago de Harley empezó a rugir.

- Vaya, parece que alguien tiene hambre... Tienes un paquete con un tazón de sopa en la guantera, la hice antes de salir y con el calor que hace en el coche no creo que se haya enfriado, pensé que te serviría para entrar en calor.

Ella negó con la cabeza.

- Tengo el estómago delicado últimamente... Además no tengo hambre.

Arqueé una ceja.

- ¿Estómago delicado? ¿Que no tienes hambre? Vaya, y yo que creía que una villana como tú sabía mentir... La sopa es lo mejor si tienes el estómago jodido, además tu tripa no para de hacer unos ruídos horribles.

Harley dirigió la mirada hacia la ventanilla, mientras su barriga seguía gruñendo con fuerza. Ella sólo se limitó a acariciarla delicadamente, y pude ver una tierna y triste sonrisa en su rostro reflejado en la ventanilla, lo cual, me confundió todavía más.

- Harley... Deberías contarme lo que está sucediendo, todo esto es muy extraño.

Ella suspiró y me miró de nuevo, esta vez parecía tener la misma sonrisilla burlona que antes la acompañaba en todo momento, e incluso parecía la Harley de siempre (de no ser por lo desarreglada que iba y el aspecto de enferma que tenía), pero de sus ojos no había desaparecido ese deje de tristeza.

- Mañana, ¿te parece? Hoy estoy cansada- dijo, sonriente.

Asentí con la cabeza y volví a pegar los ojos a la carretera. Entonces su estómago rugió una vez más.

Harley suspiró y levantó la tapa de la guantera y comenzó a comer la sopa. Observé por el rabillo del ojo como comía animadamente, mostrando al fin el hambre que tenía.

- ¿Hay más?- preguntó con la respiración entre cortada después de haber comido tan rápido, mientras se limpiaba la boca con el dorso de la mano.

Solté una carcajada y negué con la cabeza.

- Lo siento muñeca, cuando lleguemos a casa te daré toda la comida que quieras- le dije divertido.

Ella asintió.

- No te preocupes... No me quedaré contigo por mucho tiempo, solo hasta que consiga un lugar dónde quedarme...

- Harley... Puedes quedarte el tiempo que necesites, al menos hasta que te recuperes.

- Estoy bien- afirmó ella cortante-. Encontraré pronto un sitio dónde quedarme. Puedo cuidarme sola.

Suspiré y volví a fijar los ojos en la carretera, siguiendo el camino hacia mi piso.

- Narra Harley-

Llegamos a un enorme edificio de color gris, con muchas, muchas ventanas. Floyd aparcó el coche a la puerta de la edificación. Bajó de éste y me abrió la puerta. Me ayudó a bajar del vehículo y agarró mi cintura para sostenerme. Me sentía mejor al haberme tomado la sopa, había entrado en calor, pero seguía estando muy cansada y hambrienta. Además, llevaba la ropa y el pelo mojados, por lo cual estaba bastante incómoda.

- Bienvenida a mi mansión- exclamó sarcástico.

Solté un gruñido divertido; su sentido del humor no había cambiado en absoluto.

Floyd me ayudó a caminar hacia delante y abrió la puerta del edificio. Nos metimos en el ascensor, y éste se detuvo en el tercero. Floyd y yo nos adentramos en su piso; era pequeño, pero poseía cierto encanto. Las paredes eran blancas y pulcras, adornadas con fotos que mostraban a Floyd con su hija, en las que se les veía realmente felices.

Supongo que yo me vería así en unos años, una madre sola con su hijo o hija. Mis ojos se llenaron de lágrimas una vez. No quería. No quería criar a nuestro bebé sola. Quería a mi bichito, quería una vida normal a su lado, ver crecer a nuestros hijos junto a él. Pero eso ya no iba a hacerse nunca realidad.

Empecé a sollozar sin poder parar, no quería venirme abajo delante de Floyd, no quería contarle nada por ahora, no me sentía preparada. Aún tenía que asimilarlo, asimilar que jamás volvería a ver a mi bichito. Y eso me rompía. Me rompía el corazón.

- ¿Harley? ¿Estás bien?- oí la voz de Floyd detrás mía, sonaba preocupado.

- Sí, sí... Yo... Solo- traté de decir entre sollozos, sin todavía mirarle a la cara. Di un profundo suspiro tratando de calmarme.

Él se acercó a mí y sentí como envolvía sus brazos alrededor de mis hombros.

- Shhh, tranquila, ya está- murmuró, tratando, sin éxito, de tranquilizarme.

Apreté los dientes tratando de no llorar, pero era inútil. Estaba rota, destrozada. Mi bichito, lo echaba tanto de menos, lo necesitaba tanto, lo amaba tanto. Sin él yo no era nada.

No aguanté más y mis piernas fallaron. Me caí al suelo. No lo soportaba. Mis sollozos se hicieron más y más fuertes.

- Harley, Harley, tranquila, ¿qué ha pasado?- oía las preguntas que me hacía, pero no quería responderlas, no, necesitaba desahogarme, quitarme todo este dolor, pero eso parecía imposible.

- Bichito...- gemí entre los sollozos.

Entonces el rostro de Floyd cambió considerablemente y pareció comprenderlo.

- Está bien, Harley, está bien... ¿Qué ha sucedido con el Joker?

N/A: espero que os gustara el primer cap ^^ me encantaría leer vuestra opinión en un comentario y que dejéis vuestro voto si os ha gustado. Gracias por leer, si veo que tiene buena aceptación subiré pronto el siguiente cap.

¡Un abrazo!