Es mi primer fic, así que por favor sean amables conmigo.

DISCLAIMER: Dragon Ball le pertenece a Akira Toriyama y Toei Animation.

Esto sucede después de Dragon Ball GT, 100 años después.

Dragon Ball New Generations

1. Empieza la búsqueda.

Todo comienza donde una niña de cinco años y su mama leen un cuento.

—Entonces, el hombre de caramelo #4, o actualmente llamado Obochaman, se atreve a confesarle su amor a la señorita Arale diciendo... —la madre se detiene.

— ¿Diciendo qué mami?— La pequeña niña pregunta.

— Lo siento, pero en unos minutos llegará tu padre y sabes que si no le doy la bienvenida y su cena no esta lista, nos va a pegar— dijo la madre con cierto tono de dulzura

— Vamos mami, solo un minuto más— suplica la niña con tiernos ojos

—No, ya se que nos hemos tardado en leer el cuento, pero a tu papá no le gustaría saber que leemos cuentos. Mejor déjalo para mañana.

— Ok mami — dice la pequeña desilusionada.

Minutos después, el padre llega gritando como energúmeno y azota la puerta.

—Oh, hola querido— saluda la señora. El hombre solo la ignora y se va a comer.

Mientras tanto, la pequeña niña lloraba en su cuarto.

— Si los deseos fueran realidad desearía mi libertad... no entiendo el amor, mami dice que es maravilloso pero ¿Por qué estar casada con un hombre que la maltrata y golpea? No sé por que no huye ¿Por qué? … ¿Acaso es tan grande la magia del amor?

Después de un tiempo, la pequeña niña fue creciendo hasta cumplir once años.

Aunque se veía feliz, siempre ocultaba su miserable vida.

Esta chica no era como las demás, era muy perspicaz. Cuando algo no le parecía no tenía miedo de mostrar la cara. También era muy linda, sin embargo esta cualidad la ocultaba vistiéndose con camisa negra, unos jeans, una bandana rosa y tennis.

Cierta vez fue a la biblioteca, ese día su vida cambio...

— ¡Ay!—gritó— Estúpido libro, me golpeaste… ¿Uhh?

La pequeña trataba leer el titulo del libro que le había caído encima, lo que le parecía imposible ya que estaba muy gastado y viejo.

— Las es…esfee… esferas del dra… drap… dragón, ¡Las esferas del dragón!— así pues, la niña consiguió adivinar el título y comenzó a leer.

—Esta es mi solución, con esas esferas desearé mi libertad. Ni mi padre, ni mi madre sabrán de mí, ¡seré independiente!— exclamó.

—Shhh— le dijeron las personas que se encontraban ahí.

— Lo siento— Dijo apenada. — Así que las esferas del dragón…

Salió del lugar.

Cuando la infanta volvió a su casa, se puso a idear un plan para buscar las esferas del dragón. Pronto, algo acudió a su mente.

¡Así es! Fingiré estar en un internado… para tener tiempo de buscarlas.

—Que bueno que ya hayan terminado las clases ¿no?— comentó un niño alegremente de pelo alborotado.

—Si—asintió seriamente otro, con cabellos semejantes a una llama.

Al lado de ellos, una niña pasaba caminando ágilmente, hasta que…

—¿¡Oye que te pasa idiota!— Gritó la chica— ¿No ves que hay una damisela frente a ti? ¡Deberías tener más respeto!— chilló aún más fuerte. Sus quejidos resonaban por toda la cuadra.

— ¿Idiota yo? ¡Tu eres la idiota por no fijarte!— respondió igualmente gritando la persona con quien había chocado.

—No le hables así a una señorita tan linda e inocente como yo— reprendió con ojos tiernos

—Oigan... Ya dejen de pelear— intervino el infante de cabello alborotado— Déjala en paz Vegeta.

— Si "Vegeta", déjame en paz— ordenó, después se alejó murmurando:

— No tengo tiempo para estas tonterías… tengo que buscar las esferas del dragón…

— ¿Esferas del dragón?— repitió el chiquillo que detuvo la pelea— Tengo una… tiene cuatro estrellas. Yo no la ocupo para nada.

Ella detuvo su avance y volteó realmente interesada.

—¡¿De verdad?... Bueno… eso servirá. Pronto mi deseo se hará realidad— expresó con mirada soñadora. Suspiró.

— ¿Entonces te podemos acompañar, niña?

—Claro, si ustedes quieren…

— ¡Si! ¿Escuchaste eso, Vegeta? ¡Vamos por una aventura!— dijo mientras saltaba emocionado. —Bueno, mi nombre es Goku ¿Y el tuyo niña?

— ¿Mi nombre?... mi nombre... mi…— dudó.

— ¡Ya me hartaste! ¡Solo di tu maldito nombre de una buena vez!— interrumpió irritado Vegeta.

La cría, enojada pero sin darle mucha importancia, dijo:

— Ok, ok. Mi nombre es... pero, es que yo… — detuvo lo que iba a decir después de ver de reojo a Vegeta— es ¿¡Bunma Ok!

Fin del capitulo uno.

Espero que les haya gustado. El capitulo fue editado por O'h Isabel.