ADVETENCIAS
ChicoxChico, Shonen Ai
NARUTO es propiedad de Masashi Kishimoto
Este fic no tiene ánimo de lucro
Autores
Antes de empezar informar que este Fic es un fanfic compartido! yo (usura-tialmant, AKA usura-tonkachi) haré el inicio y seguirá Solochely que podeis encontrar en el DA con el mismo nick. La idea nació de hablar de nuestras aventuras escritoras del pasado y decidimos intentar hacer un fic en que las 2 pudiéramos liarla y así divertirnos un rato! Sin más os dejo con mi parte espero que la disfruteís.!
La promesa de vida
by usura-tialmant (usura-tonkachi)/ Solochely
El cielo se estaba nublando lentamente con unas densas nubes negras, el silencio del mundo reinaba por todos lados. La tormenta aún no estaba encima de ellos y los colores rosados y azul verdoso del atardecer se reflejaba en la superficie del agua, de apenas un palmo de profundidad, en la que estaban tirados los cuerpos de lo últimos supervivientes de la lucha por la libertad de la humanidad.
Uzumaki Naruto y Uchiha Sasuke yacían boca arriba contemplando el mundo que habían salvado en silencio. Sus heridas les habían debilitado de tal manera que no les permitían mantenerse en pie. Kaguya había sido el enemigo más formidable que hubieran enfrentado jamás, Deformación de la Naturaleza y creando portales dimensionales separandolos e hiriendo les una y otra vez; la regeneración de aquel monstruo del pasado no parecía encontrar fin.
Tras incontables intentos a cual más arriesgado o descabellado lograron vencer, dejando un amplio territorio totalmente devastado por la crudeza del combate, se levantaron montaña, se crearon claros y lagos. La geografía había cambiado drásticamente y muchos de los ninjas de la Alianza perecieron como daños colaterales. Triste, pero a pesar de los intentos de Uzumaki no consiguieron poder reducir más el número de víctimas; pero el mundo estaba a salvo…
Las mirada de los héroes se fijaron en la nueva luna que ellos habían creado entre los dos sellando a la inmortal Kaguya en su interior. Notaban su vida escapar por cada segundo que pasaba, decidieron entonces mutuamente deleitarse con las últimas sensaciones que experimentarían. Iban a morir y lo sabían, ya no había nada que pudieran hacer ni nada que pudieran hacer por ellos.
Saborearon cada brisa del viento, las gotas de agua deslizándose por su cuerpo empapado, la calidez del sol y los hermosos colores en el enorme tapiz del cielo. Silencio, solo interrumpido por su respiración cada vez más dificultosa.
- Ne, Sasuke…- el otro no le contestó y ni falta que hacía - al final ¿crees que la maldición se habrá roto?- no tuvo respuesta - me refiero a la de Indara y Ashura…
- Quién sabe…- contestó finalmente sintiendo la boca pastosa.
De nuevo el silencio reino entre ellos. Naruto alzó su mano derecha observando el símbolo que quedó perenne en la palma de su mano; un círculo.
- Si no lo hemos hecho, eso significa que alguien deberá llevar esta carga…-
- Es el destino, no hay nada que hacer, como antes lo fueron Madara y Hashirama…
- No puedo aceptarlo… - quiso gritar pero su voz estaba quebrada por la debilidad de su cuerpo - Eso significaría que nuestros esfuerzos no han servido de nada, había una nueva guerra consumidos por la espiral del amor y el odio. ¡Yo no quiero eso…!
Los ojos negros de Sasuke no quisieron ver como los azules de Naruto se empañaron con lágrimas y se mantuvo mirando el cielo rosado cuando las nubes negras empezaron a crubir la hermosa vista como el telón que anuncia el fin de una obra. Ya iba siendo hora que lo artistas se retiraran. Delgadas gotas empezaron a caer creando ondas en la superficie del agua.
- No puedo aceptar que alguien, en un futuro, tenga que vivir la impotencia que he vivido yo todos estos años…-
- …-
- Yo…¡yo no quiero morir!- gritó finalmente dejándose llevar por la impotencia, un ninja debía estar preparado, pero no quería que fuera así. No en ese momento, dejó caer la mano. - Yo...Yo quería ser Hokage para evitar las guerras…¡para evitar que algo así pasara!-
Uchiha simplemente cerró los ojos pudiendo sentir con todo detalle la desesperación del rubio. Él también quería vivir, quería ser Hokage para también purgar los pecados de los anteriores y crear un mundo donde los mismos estúpidos errores dejaran de sucederse una y otra vez. Pero ambos a las puertas de sus sueños debían abandonar.
- Si volviera a vivir quisiera que nos encontráramos todos de nuevo. Pero de lo que más me arrepiento...es no haberte podido salvar Sasuke...Tú no te merecías esto…-
- Ya...Esta bien Naruto…- musitó débilmente - Ha sido también mi decisión… - le recordó - Ha sido divertido hacerlo juntos…- Tras una mueca de dolor se permitió sonreír. - Todos han muerto, Kakashi, Obito, Sakura...Lee, Gaara, todos nuestros amigos en esta guerra absurda que yo inicié.- una risa floja y rasposa de amargura salió de sus labios resecos. - Que verdadero idiota…-
El moreno se sobresaltó cuando sintió la manos de Uzumaki apretarle con fuerza su mano izquierda donde se encontraba su símbolo de la luna creciente. Este le miró de reojo.
-¡No puedo permitirlo! No puedo permitir que sea otro quien te salve, ¡Sasuke! -
Sasuke sólo le devolvió una sonrisa y lentamente empezó a cerrar los ojos, todo terminó para el Uchiha que por fin pudo descansar.
- Dobe...Gracias -
- Sasuke…¡SASUKE!-
No hubo respuesta, la mano del Uchiha, que por un momento le devolvió el apretón con debilidad, no hacía nada de fuerza y supo que al fin estaba muerto. Él pronto le seguiría.
- Sasuke… Seré yo quien te salve, sin importar el tiempo o el lugar y las veces que necesite hacerlo….Yo….te encontraré…Yo…-
Las fuerzas le fallaron sintiendo que no podía mantenerse consciente por mucho más tiempo.
- Es ….mi promesa ...de...por vi...da….-
La tormenta azotó con toda su fuerza, y los tiempos de paz se sucedieron durante milenios salpicados por conflictos como había estado siendo hasta ahora.
TOKYO,2014
La escandalosa alarma de un despertador resonó por todo el dormitorio y una mano perezosa rebuscó por la mesilla de noche hasta apagar el artefacto del demonio. Suspiró profundamente con alivio acomodándose de nuevo bajo las sábanas...La tregua no terminó ya que en apenas cinco minutos cuando había vuelto a caer en brazos de Morfeo la endiablada alarma le sobresaltó.
El despertador voló contra una puerta, pero esta se abrió y el despertador casi golpea a quien decidió despertar personalmente al dormilón al otro lado de la puerta. Un joven de rubio con el pelo anárquico y ojos azules, con extrañas marcas en la cara que recordaban a los bigotes de los gatos.
- Buenos días, Naruto.-
La respuesta fue un gruñido más parecido a un rebuzno y un largo bostezo.
