Una parte de la ciudad se encontraba destrozada, edificios colapsados y carbonizados, la gente había evacuado toda zona en peligro supuesto.

A lo lejos se veía la gigantesca nave de Lord Boros, muy cerca del suelo pero sin tocarlo, tan grande como una ciudad, los Heroes habían evacuado también y solo algunos se quedaban para mirar, aparentemente los invasores solo peleaban con los héroes que quedaban aunque no los mataban y cuidaban que nadie se subiera a la nave.

Lord Boros esperaba en la entrada de esta con una sonrisa perversa pero feliz.

a lo lejos de la gran nave, en una zona destruida, cerca de un callejón carbonizado, se encontraban un resignado Heroe calvo y un muy enojado ciborg.

-por qué sensei!?- nunca le había importado esas cosas, ¿Por qué ahora te afecta tanto como para llegar a esto, eres un héroe, no un villano!-

Saitama miraba a Genos serio

-ya no más podré seguir aquí Genos, me iré con Boros y eso es todo- decía el calvo bajado la mirada, se dio la vuelta para empezar a caminar hacia la enorme nave que había destruido gran parte de la ciudad.

Genos frunció el ceño, estaba realmente enojado y confundido, corrió hacia el sujetándolo de un brazo para después acorralarlo en la pared, -por qué no me das explicaciones?!, es demasiado extraño, tu podrías lidiar con esto fácilmente, no puedo creer que digas que esta vez no tienes escapatoria, ¿eso qué significa? DIME!-

Saitama no dijo nada. Genos cerró sus puños rasgando la pared que empujaba

-por qué me haces esto?!- realmente no creía que esto estuviera sucediendo, su sensei se iría, tal vez para siempre, pero por que cedió tan fácil, no lo entendía. - … voy a volverme fuerte, y lo intento, ten paciencia y seré tan poderoso como tú, por favor- hablaba ante la idea de que Saitama se fuera porque él no pudiera igualarle, tal vez eso era, se iba por que Boros era el único que podía enfrentarle.

- puedes seguir sin mi, te has vuelto más fuerte desde que nos conocimos, no me necesi…-

-NOO!- el calvo se sorprendió ante el grito de su discípulo – No sensei, lo necesito, si no eres tu, yo… quiero volverme fuerte bajo su guía, quiero volverme fuerte, PARA PROTEJERLO MALDICION!...

-…-

-se que algo pasa que no me quiere decir, me odio a mí mismo por no tener lo suficiente para que confíes en mí, por no poder protegerte, pero luchare por ti!-

Saitama lo miraba con ojos sorprendidos, realmente tenía un discípulo tan fiel, mas que su disipulo, era su mejor amigo, un amigo tan bueno que siempre se preocupaba por el y lo cuidaba aunque no lo necesitara, pero…, miró por un segundo a la nave, sonrió levemente feliz para después cambiar su mirada

-entonces… ven conmigo –

Genos se sobresaltó ante eso que no esperaba, levanto su rostro encontrándose con la mirada relajada del calvo que tanto lo caracterizaba, un momento, se dio cuenta de que estaba muy cerca el uno del otro, quiso retroceder pero el otro lo jalo de la nuca uniendo sus cuerpos

-ven conmigo a la nave, estaremos juntos- decía muy bajo, pero Genos podía oírlo, si no lo conociera hubiera jurado que lo estaba seduciendo

-pero…yo…-

-dejaran en paz la tierra y conquistaran otros mundos, pero tú y yo estaremos juntos, y seguirás siendo mi aprendiz- se acercó más a su rostro.

-sensei, yo… yo…-

-dijiste que no importaba que, siempre me seguirías verdad?, sigo siendo el mismo Saitama-

Saitama acaricio la mejilla del ciborg y después se separó, Genos terminó acorralando la nada, aun sorprendido y con la mirada oculta por sus mechones rubios, por unos segundos más y miró a su sensei que ya estaba en camino a la nave

-vamos genos- dijo empezando a caminar

…..

-…si maestro…-

Ambos héroes caminaron hacia la enorme nave alienígena, Genos no sabía lo que seguiría pero algo le decía que debía acompañar a Saitama, todo era muy extraño, pero decidió seguirlo-

Los héroes llegaron hasta la nave de Boros, quien le dio la bienvenida a Saitama pero miró de manera fulminante al ciborg

-¿Quién es el Saitama?, no permitiré que héroes entren a la nave- dijo con un tono serio y mirando desafiante a los dos

-es un amigo y ha jurado seguirme sin importar nada- dijo igual de desafiante golpeando a Genos con el codo levemente – Genos, preséntate-

El ciborg lo miro confundido pero aun así hablo

-soy Genos, soy el discípulo de Saitama!-

- discípulo?, jajajaja, debes saber que Saitama será de los nuestros ahora!-

Genos lo miro enojado frunciendo el ceño y enseñando los dientes

-Boros, este ciborg ha jurado seguirme a donde sea, dijiste que tendría lo que quisiera si me quedaba aquí- hablo Saitama interponiéndose entre el alienígena y su discípulo.

- hmm!, debo pensar que es un juguete o algo asi?-

Genos no entendía nada, ¿por qué estaba haciendo eso?, su sensei hablaba de por el, pero en esos momentos debía seguir la corriente, ya tendría para hablar con Saitama, siendo sincero, no podría luchar contra alguien como Lord Boros, sabiendo que era el líder y que nadie excepto Saitama podría enfrentar ese grupo de extraterrestres. Miraba atento a todos los movimientos del sensei

-asi es – finalizo el calvo sin apartar la vista de Boros

-…. Hmmm, esta bien, si eso es lo único que quieres, estoy de acuerdo, no tengo nada que perder-

Después de la discusión los hombres de adentraron en la nave pasando por todas las miradas arrogantes de los otros monstruos, Saitama no parecía importarle.

En un momento cuando pasaron al lado del líder, este agarró a Saitama del cuello de su traje levantándolo para intimidarlo, Genos, al ver eso, se puso a la defensiva alzando su mano llenándola de energía, listo para atacar, si no fuera porque Saitama alzo una mano en señal de que se detuviera y no hiciera nada.

-te advierto, que si intentas negárteme o hacer algo estúpido sabes lo que pasara – dijo desafiante el de un ojo, acercando al calvo

- suelta a sensei, como te atreves a… -sus palabras fueron calladas por el héroe

- lo se Boros, al final de cuentas vine, iré contigo y conquistaremos los mundos-

Genos no podía con la duda, Saitama le daba la razón a Boros, que iría con él, ¿Por qué?.

El monstruo se quedó mirando al calvo levantándolo, y después lo bajo despacio

-veras que no te arrepentirás de seguirme-

- hmm, de todos modos era una vida aburrida- dijo el calvo siguiendo su rumbo al gran pasillo oscuro que llegaba hasta los adentros de la nave voladora

-jajjajajaja, bien bestias vámonos ya!- anuncio Boros, quien dicho esto, la nave tembló y comenzó a elevarse, serrándose las puertas detrás de ellos

Genos miro atrás, realmente este era el último día que vería a la tierra,¿ que pasara con la vida que había desarrollado ahí, con sus amigos, con la asociación, con el doctor Kuseno, con el ciborg del cual había jurado vengarse, ya no podría pensar más así

Pero…

Imaginarse una vida sin el, sin Saitama, ¿realmente sería lo mismo?, no, no podía dejarlo, no sabía si era por eso, si se había vuelto malo y realmente quisiera unirse a ellos, no lo podía creer, pero Saitama también se veía preocupado, el rubio sintió que debía saber, no dejaría las cosas así, preferiría ir con el, no estando seguro de sus intenciones, que vivir con la duda

-lo siento Doctor – dijo finalmente viendo por última vez el cielo de la tierra.

Uno de los monstruos guio a ambos chicos a una parte que parecía cueva, extensos pasajes cuyas paredes no eran lisas, si no discontinuas, parecían raíces gruesas de un material extraño y oscuro, con extraños cristales incrustados en esas raíces que iluminaban lo suficiente para ver, obviamente nada que conocían.

Tuvieron que recorrer muchos metros en un incómodo silencio por parte de ambos.

El monstruo los guio a una puerta grande, al parecer de metal con extraños diseños labrados. Tras esa puerta había una muy amplia "habitación" donde se encontraban una gran cama, un sillón alto, un armario y una mesa grande, oscura como todo el lugar alumbrada por esos cristales.

-no entiendo cómo pudo Boros-sama dejar que humanos entren a la nave así, pero parece que tu eres una excepción señor Saitama- hablo el monstruo mientras abría las puertas, este era grande con cuerpo alto musculoso de color gris muy claro, cuatro ojos rojos y seis brazos, hablaba con una voz tenebrosa que hacía eco.

Saitama veía sus alrededores tranquilamente mientras Genos seguía con la mirada en el piso solo siguiendo a su sensei sin decir una palabra.

-avíseme si necesita algo Saitama-san, boros-sama me ha ordenado personalmente para complacer todo lo que se le ofrezca, mi nombre es Karistropinosledss, estaré…-

-Kari que?, ese es un nombre confuso hombre-

-he?..-

-yo te llamare solo Kapi ¿de acuerdo?, -

-He? Kapi?, pero yo…-

- ese suena mejor y más sencillo, te llamare Kapi-

-kmm, bueno, qué más da, me retiro- dijo el monstruo resignado, cerrando las puertas cuando salió de la habitación.

Cuando estuvieron ambos solos, Genos se atrevió a levantar la mirada para ver al héroe, este tenía el rostro de siempre, ¿Cómo podía estar tan tranquilo? Estaban en una nave alienígena, rodeado de monstruos que detestaban, ya no podrían regresar a la tierra, que hay de todos los que extrañarían a Saitama? , su vida tranquila, el rubio rompió el silencio diciendo:

-ahora si me vas a explicar sensei?, porque ha decidido esto, ¿Qué pasara con la tierra ahora si no estas para salvarla?-

- … hay muchos héroes en el mundo Genos- dijo simplemente

Simplemente

-Que pasara con la asociación?!- dijo más fuerte el rubio, se estaba cansando de la repentina actitud del calvo

- ya no me necesitan- otra respuesta sencilla

-Que pasara con los demás que conoce, la gente que en verdad lo aprecia, no es posible que hallas decidido volverte un villano de la noche a la mañana! ¿Qué pasará con su vida en la tierra?!- grito al borde de su ira

-… hm si, ya no podre gozar de las ofertas del supermercado…-

Eso termino con acabar con la paciencia de Genos, abalanzándose bruscamente sobre el tumbándolo en el piso

-YA ESTOY ARTO! DIME POR QUE HAS TOMADO ESTA DECISIÓN, NO ENTIENDO NADA!- gritaba muy furioso mirando a Saitama,

-shhhh, no grites así- ahora el calvo frunció un poco el ceño

-ES QUE ESTOY MUY ENOJADO, NO VOY A PERMITIR QUE…mmhh!?-

.

.

Repentinamente Saitama jalo de la cabeza de Genos hacia sí, acallando su boca con sus labios, eso logro descolocar al rubio, quien estaba muy sorprendido por tal acto, su mente se nublo y solo se mantuvo rígido mientras duraba el beso, sus ojos estaban totalmente abiertos, ahora sí que no comprendía. Trato de apartarse pero Saitama lo sujetaba fuertemente.

"no lo entiendo, por qué me besa en esta situación?" Pensaba

No se sentía raro, ya ha habido veces que se han besado antes, después de todo tenían una relación muy cercana, no les sobraba un beso piadoso en algunas ocasiones, por curiosidad y sin llegar a mas, pero esta vez no tenía sentido, acababan de abandonar la tierra donde vivían, pasarían el resto de sus vidas al lado de malvados busca pleitos, Genos no quería eso, pero debía admitir que no pensó en si mismo sino en su sensei, y ahora lo estaba besando como si nada, ¿Qué era lo que pasaba con Saitama?. Con esfuerzo logro zafarse del beso

-mmmh….mhhaaa!, ¿Qué está haciendo?, no es momento de juegos!...mhhh!-

Saitama volvió a jalar a Genos uniendo sus labios otra vez mientras miraba a todos lados, cámaras pequeñas, no estaba seguro así, y Genos se volvía muy molesto gritando

Pov's Saitama

Por qué estoy haciendo esto?, no tenía planeado llevarlo con migo, pero él es tan terco, no se por qué le dije que me acompañara, se volverá loco aquí y tendría muchos problemas con los demás, lo siento Genos, esto será un cambio radical, será difícil y no nos gustará, debiste quedarte en la tierra y seguir con tu vida, ¿por que seguirme hasta acá donde probablemente no tienes oportunidad de ganar en peleas?….. Pero….. de algún modo me siento contento, agradezco que aceptaras acompañarme, de este modo no será tan malo, al menos puedes quedarte a mi lado. Sé que fui egoísta, espero que puedas perdonarme.

Cuando el beso terminó lo empujo para quedar frente a él parados

-escúchame Genos, de ahora en adelante estaremos en esta nave te guste o no, cuando te dije que me iría tú decidiste arriesgarte a seguirme, así que no quiero reproches, estarás con migo como tú quieres, y te aconsejo que no hagas enojar a los demás o pondrás las cosas peor- dejo con el tono serio levantando un dedo para explicar

-pero… yo no…-

-me seguirás como siempre lo haces y harás todo lo que te diga, no me des problemas y mantente callado cuando salgamos ¿entendiste?-

El ciborg temblaba de rabia y odio, o podía creer que ese fuera su sensei, algo lo cambio por dentro, en ese momento se arrepintió de haber sido seducido y aceptado irse con él, debió dejarlo que se fuera solo, total estaba seguro de que estaría bien.

-esto es lo que piensas en serio?, bien, como tu ordenes, me largo de aquí, ya no tiene sentido seguir hablando- dijo el rubio mientras se aproximaba a la puerta,

-a donde vas?- no tienes a donde ir- hablo el calvo un tanto sorprendido, o quería que se fuera y mucho menos que lo odiara

-donde sea, lejos de ti- eso ultimo lastimo de sobremanera al héroe, quien rápidamente se puso frente a el poniendo sus manos en el pecho metálico para detenerlo

-no, espera, no piensas ir por ahí rondando, conociéndote comenzaras a pelear con todos-

-no me importa, no quiero seguir aquí, debí dejarte que te largaras a donde fuera-

Saitama bajo la mirada dolido, Genos lo odiaba, pero no podía dejar que se fuera, lo matarían, debía buscar una manera de que lo obedeciera.

-si es así…- entonces lo empujo a la cama y tomo su rostro volviéndolo a besar, esta vez más intensamente, dejándolo sin aliento, cuando se separaron el calvo se quitó toda la ropa frente a él aun sabiendo que había cámaras por doquier. Genos se puso rojo ante eso pero no lo detuvo.

-te dejaré tenerme a cambio de que te quedes – dijo Saitama avergonzado, fue lo único que se le ocurrió, sabía que Genos sentía algo por él, por eso quiso aprovecharse de eso para evitar conflictos

-Saitama….sensei?-

-por favor Genos, no compliques las cosas- acerco su rostro al del rubio y lo beso nuevamente.

Genos por su parte solo pudo cerrar los ojos dejándose llevar ante lo tentador que era esa oferta, en el fondo sentía algo por Saitama, estaba molesto y dolido, lo sabía, sin embargo no podía hacer nada en ese momento, solo dejar que el otro lo besara, pero por más que odiaba toda la situación, no podía desagradarle las insinuaciones del chico calvo.