Disclaimer: Los personajes expuestos en esta fanfic no me pertenecen son propiedad de Hajime Isayama como tampoco la fanfic misma yo solo lo traduje al español porque me pareció un trabajo inspirador y hermoso.


Original work: "No one knows" by Wizardinblack.


N/A: A partir de ahora estaré traduciendo esta hermosa fanfic con el consentimiento de la autora, para todos los lectores que les encante el yaoi y la pareja Reibert seguro se enamoraran de esta bella historia como yo lo hice. La razón por la que decidí traducir este trabajo aparte de lo anteriormente mencionado arriba fue porque aparte de que esta historia me atrapó desde el inicio hasta el final, además de eso aproveche la oportunidad para comenzar a practicar mi traducción, prácticamente es la primera que he hecho una y espero seguir mejorando con el tiempo.


Nadie Sabe

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Traducido por

Kary Rivaille


Capítulo I


−Braun – el entrenador Shadis tiró de Reiner a un lado después de la práctica. Aun sudoroso y usando sus almohadillas de futbol, sostenía su casco con su mano derecha, sus dedos hacían presión alrededor de las barras de la protección facial. Ya sabía de qué se trataba. Esa era la tercera vez que Shadis tiraba de él a un lado para hablar de ello. Estaba harto de escucharlo y solo quería retirarse a las duchas.

−Estas fallando− dijo el hombre finalmente con una expresión severa que no abandonada su rostro.

−Lo sé− Reiner trató de ocultar la molestia de su voz para que se notara lo más mínimo posible.

− ¡Ya sé que lo sabes! ¡He salvado tu trasero tres veces ya! –estaba gritando en ese momento y Shadis no era el tipo de hombre que se contuviera así mismo a pesar de ser un entrenador de futbol de preparatoria − ¿Por qué no has hecho nada al respecto?

Esta vez Reiner dejó que su molestia se notara –Lo estoy intentando− gruñó.

− ¡No es suficiente!− Shadis arrojó mientras sacaba algo de su bolsillo− No puedo cubrirte más, si no subes tus calificaciones voy a tener que echarte del equipo.

− ¿Qué? ¡No puede hacerlo! –Reiner se quedó boquiabierto, no podía ser expuso del equipo; el equipo era todo lo que él tenía. Él estaba por recibir una beca de futbol completamente pagada por estar en ese equipo. Si lo expulsaban, literalmente perdería todo.

− No me estás dando otra opción –Shadis extendió el arrugado papel que había sacado de su bolsillo –Hablé con la asesora y ella te asigno a un tutor.

Reiner tomó el papel que le había sido entregado.

−Ese es tu horario− le explicó –Debes reunirte con él cada semana y es mejor que lo hagas.

−Sí, Si −Reiner gruño, sin molestarse en mirar el papel mientras Shadis lo enviaba a las duchas.

Cuando entró en los vestidores estos estaban vaciós; la mayoría de los otros chicos ya estaban en las duchas y probablemente ya estarían terminando de asearse. Abrió su casillero, sacando su mochila para meter el papel en el interior, pero decidió echar un vistazo antes de hacerlo.

Deseo no haberlo hecho, al menos en ese momento. "Bertholdt Fubar" decía el papel. ¿Por qué de todas las personas probables tenía que ser él?

No había hablado con Bertholdt en años. El otro chico vivía a solo una calle de él y cuando eran niños fueron inseparables, pero una vez que empezaron la secundaria su amistad comenzó a quebrarse. Reiner maduró, volviéndose más abierto, lo que lo hizo popular con otros chicos, consiguió hacer muchos amigos y comenzó a salir y pasar el tiempo con ellos. Mientras que Bertholdt se refugió en sí mismo, prefiriendo quedarse así, y creció siendo tímido y solitario. Pero eso no quería decir que Reiner no estuviese consciente de su presencia.

Hablando de eso, podía escuchar como algunos chicos estaban dejando las duchas en ese momento. Y eso significaba que no solo eran los chicos del equipo de futbol sino también los del equipo de pista, los cuales tenían sus encuentros a la misma hora que los que practicaban futbol. Bertholdt estaba en el equipo de pista, allí era donde de Reiner lo veía la mayoría de las veces. Ellos no tenían ninguna clase juntos y no pasaban el tiempo entre la misma multitud. Bueno, Bertholdt no pasaba el tiempo con ninguna multitud, el solo tenía una amiga; una chica intimidante llamada Annie. Pero sin embargo, era allí donde había visto a Bertholdt, corriendo vueltas en la pista que rodeaba el campo de futbol, y luego en el vestidor en las duchas…

Reiner sabía que era gay durante años, pero no se lo había dicho a nadie y tampoco había hecho nada al respecto. No tenía ningun problema en no mirar a sus compañeros mientras estos estaban en las duchas, pero a Bertholdt… Él no podía evitar mirar a Bertholdt, Reiner no podía olvidarse de él, incluso aun después de que habían dejado de hablar el uno con el otro. Una vez que los equipos de futbol y de pista comenzaron a practicar a horas iguales algunas veces, él no podía evitar mirar a su viejo amigo. Bertholdt siempre había sido más alto que Reiner, pero cuando ambos alcanzaron la pubertad, ambos crecieron excepcionalmente altos para su edad. Bertholdt es aún más alto que Reiner, era delgado y tonificado para correr, a diferencia de Reiner que era grande y voluminoso debido al entrenamiento muscular. Reiner no podía negar su atracción por él y el hecho que fueran viejos amigos lo hacía aún más difícil. Cada vez que cruzaban caminos o se miraban el uno al otro había un sentimiento incómodo para cada uno. ¿Debería decirle hola? ¿Debería reconocerlo? Ninguno de los dos lo había hecho en vez de ignorarse el uno al otro.

A menudo se preguntaba que podía haber pasado si nunca hubiesen dejado de hablar, tal vez algo podría haber ocurrido y no se sentiría tan extraño por esa tonta atracción que tenía por su viejo amigo, pero esa solo era una estúpida fantasía. Además, estaba seguro de que él y esa chica Annie eran más que amigos de todos modos.

A pesar de estar seguro de su sexualidad, él no podría abrirse a ello. No había otros chicos en la escuela a los que pudiese sentir atracción. Por supuesto había chicos que le parecían guapos, pero no había ninguno por el que sintiera algún deseo de perseguir o que supiera que fuera abiertamente gay. Pero sobre todo no estaba seguro de si debía salir o no ¿Cómo afectaría eso a sus compañeros de equipo? ¿Pensarían diferente de él? ¿Estarían incomodos a su alrededor? Así que lo mantuvo en silencio. No importaba, ya que Bertholdt era realmente el único chico de la escuela por el que tenía un verdadero deseo.

Él había intentado salir con algunas chicas, incluso había dormido con algunas de ellas. La única con la que había llevado una relación seria se llamaba Krista, y ella era un ángel, pensó que las cosas iban a funcionar entre ellos, hasta que ambos intentaron tener relaciones sexuales. Ella era tan pequeña, frágil y demasiado linda también. Reiner no podía mantenerse excitado y terminaron sin tener que terminar. Afortunadamente Krista era una chica bastante agradable que no le dijo nada a nadie. Había renunciado a intentar, diciéndole a la gente que solo quería enfocarse en sus prácticas y en obtener esa beca en lugar de salir con alguien, y eso parecía ser bastante bueno para la mayoría de la gente.

Rápidamente metió el papel en su mochila y comenzó a quitarse la ropa sudorosa, empujándolas en su casillero. Opto por tomar una ducha, se vistió con ropas limpias y abandonó el lugar. Se preguntaba si Bertholdt sabía siquiera que él iba a ser su tutor, pero todavía no quería arriesgarse a tener que hablar con él sobre eso allí en los vestidores.


Kary: Bien, prácticamente este fue el primer capitulo de esta traducción, aun no se la fecha exacta en la que subiré el próximo capítulo pues todo depende de mi tiempo libre, pero si les interesa saber cuando actualizare o que otros proyectos tengo en mente para próximos fanfics, cosplays y otros proyectos pueden buscar en m pagina de Facebook la cual podrán encontrar directamente en mi perfil.


Gracias por leer

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(´¸.·*´¯`*»— — Kary Rivaille