Glee no me pertenece corresponde a Fox y al magnífico creador de esto, RM.
De ante mano quería agradecer a todos los que os habeís tomado un tiempo en leer. Espero que os guste el empiece de esta pequeña historia. Y si os gusta comentarlo y sino también, todo lo que querais comentar es bienvenido. Gracias!
Eran las dos de la mañana, Kurt esa noche era incapaz de dormirse, miraba las horas pasar y no podía dejar de pensar en una cosa... tenía 22 años y nunca había tenido novio. Os preguntareis porqué justo hoy no se lo podía quitar de la cabeza, y la cosa es que hoy era su cumpleaños, hoy cumplía 22 años, estaba en la ciudad de los Sueños y seguía solo. Dio otro giro en la cama, volvió a mirar su despertador y vio que eran las 2:30. No, definitivamente hoy no iba a dormir.
Se levantó resoplando, se miró al espejo y se preguntó qué malo tenía, qué era lo que no atraía a otros chicos.
Desde que fue muy pequeño ya sabía que le atraían los otros niños y no las niñas, le costó mucho contárselo a su padre, pero él sabía que ese gran hombre le iba a comprender y ayudar. Y así fue a sus 15 años de edad, se dirigió donde estaba su padre y le confesó que era gay. Su padre se quedó quieto, mirándolo, él ya lo sabía desde el momento que Kurt le pidió su primer juego de té con apenas 5 años, pero aún así dicho de la boca de su hijo le sorprendió. Se levantó del sofá, apagó el juego, se puso de frente a su pequeño, le agarró del hombro y le dijo – "Ya lo sabía, pero quiero que sepas que siempre te he querido, siempre te querré y te apoyaré"
A Kurt se le llenaron los ojos de lágrimas y abrazó a su padre con tanta fuerza que no eran necesarias las palabras.
Tras recordar ese momento a Kurt se le empañaron los ojos, deseaba llamar a su padre pero era muy tarde y no podía despertar a su padre por una cosa tan estúpida como esa, así que salió de su habitación, se fue a la cocina se sirvió un poco de agua y se quedó ahí sentado en la encimera con la mirada perdida en el suelo, con un vaso de agua en la mano.
Hey Kurt, ¿qué haces?
Kurt dio un respingo que hizo desestabilizarse - Rachel me has asustado, ¿Qué haces despierta?
Lo mismo digo, son –Dirigió su mirada al reloj que colgaba de la pared de la cocina- LAS 3 DE LA MAÑANA- gritó.
Shhhh, Rach, vas a despertar a Santana y ninguno de los dos queremos verla al más estilo Snix
Perdón, Bajo-iphone-lo Bueno, ¿te diré lo que pasa? Por ENHORABUENA Cierto! - Rachel saltó a Darla un abrazo
Calla, calla –Intentó apartarse del abrazo- Ni me recuerdes que es mi cumpleaños... Hoy lo tomaremos como un día normal ¿De acuerdo? Nada de celebraciones y menos recordarme que cumplo vein... veint...que cumplo esos años.
Rachel se río con ganas, ¿Pero qué dices? ¿Tan pronto vas a empezar con la crisis de la edad? – Siguió riéndose- Siempre puedes recurrir al botox, o como diría la gran Samantha, pueden quitarte la grasa del culo y ponértela en la cara.
Como osas... Rachel Barbra Berry, mi culo es perfecto y no necesito que me quiten ninguna grasa – Le miró con la mejor cara de Bitch.
Rachel se siguió riendo- Venga Kurt, anda solo son 22 años y te queda mucho, tienes celebrar que estás vivo, vives en la mejor ciudad del mundo y eres lo más fabuloso de esta ciudad, después de mi, claro.
Siempre después de ti, claro – Dijo en tono burlón.
QUEREIS DEJAR DE COTERREAR, QUE SOIS UNAS CHISMOSAS. – Salió Santana chillando de su habitación.
Hello Snix únete a la fiesta – Le dijo la morena.
No tenía yo que hacer otra cosa en mi magnifica vida que ponerme a cotillear con Lady Hummel y la enana. – Escupió Santanta.
Wow! si que te levantas de humor eh – Le dijo Kurt.
Bueno a ver ¿qué os pasa? ¿que hacéis a las 3:15 de la mañana, cotilleando cual vecinas desesperas por encontrar a un hombre para un buen polvo?
No todo de basa en los polvos Santana – Dijo Rachel- Pues aquí, Kurt que no está pasando buena noche, yo le escuché me levanté para ver que le pasa y nos pusimos a hablar.
Y para eso ESE JALEO? Yo os mato. – Dijo Santana- Por cierto Hummel FELIZ 22 Cumpleaños.
Te odio, Satan, digo Santana – Dijo Kurt con una media sonrisa.
Venga Chicos dejadlo, Santana tiene razón vayámonos a la cama que mañana nos espera un día largo y hay que estar bien descansados. – Dijo la morena.
Se despidieron y cada uno se dirigió a su habitación. A Kurt le gustaba estar solo pero debía admitir que esas chicas, sus amigas le alegraban la vida y le hacía sentirse un poco mejor, la verdad es que se había olvidado de porqué no podía dormir y ahora tenía una sonrisa en la cara. Nada como una buena charla entre amigos, pensó antes de cerrar los ojos y dormirse.
FELICIDADES! – Gritaron a la vez Santana y Rachel- Vamos pequeño que se te han pegado las sábanas y hoy es un gran día.
Kurt cerró los ojos, no por favor no, dime que todo esto es un sueño, que no están aquí. Sintió como le quitaban las sábanas y de repente un frío invadió todo su cuerpo.
Vamos, dormilón, hoy no te puedes quedar en la cama. VAMOS VAMOS VAMOS!
Lady Hummel, después de que me he levantado a hacerte café no me puedes hacer ese feo, o te levantas o te lo tiro encima. Tú decides.
Gracias, Santana aunque viniendo de ti puede ser que me quieras envenenar aunque trae para acá ese café. –Se irguió y le quito el café de las manos. Dio un sorbo.- Muchas gracias chicas. Ahora si me dejáis un poquito de intimidad os lo agradecería.
Tranquilo Hummel, no tienes nada que no hayamos visto antes.. o sí – Le guiñó un ojo Santana.
Vamos Kurt, vístete rápido.
Kurt se levantó se miró al espejo y más confiado que nunca se metió a la ducha, se enjabonó bien todo el cuerpo y la cabeza, mientras pensaba que era una tontería agobiarse por tener 22 años, aún le quedaba mucho por vivir y experimentar y nada, ni nadie se lo iba a impedir. Hoy iba a ser un gran día.
Además iba a ser un día que Kurt recordaría por el resto de su vida
