(narra Katniss)

-Peeta- le susurro suave, acaba de abrir los ojos y deseo ser la primera persona a la que vea.

-Kat, hola.-hace una sonrisa dormilona. Se sienta y me abraza más fuerte de lo que esperaba para acabarse de despertar.

-He hecho el desayuno.- abre los ojos con sorpresa.

-¿Qué? Te he hecho un favor para que no tengas que trabajar. Ya sabes, mañana es un duro día de trabajo... Ten- le paso un cupcake con un diente de león de fondant.

-Mmmm... –lo prueba- primera vez que una magdalena te sale bien, Kat –me dice y se ríe. Al ver que mi expresión cambia, se apresura a decir- lo siento, era una broma amor.

-Vale, Peeta. Te amo. Espero que lo sepas.

-Lo sé desde nuestros 1s Juegos. Y me sigues queriendo desde el Vasallaje, y espero que todavía tienes el sentimiento de la perla.

Meto la mano el el buró y saco la perla, reluciente y sublime como el primer día. Baja y se toma el desayuno, que previamente yo comí. Hoy haré todo el trabajo yo para que no deba hacer nada más que relajarse.

-Voy a despertar a Prim-me dice, y se despide con un beso.

-¡Mami! -Unos minutos más tarde, una voz aguda sale de la escalera. Primrose: mi hija.

-Prim, hola.-Le digo (no es un tono borde) que coma un poco, que hoy he hecho magdalenas. En la suya hay una capa de fondant rosa y su nombre en chocolate, acompañado de la flor de donde viene su nombre y el de mi difunta hermana. Difunta. Me cuesta asimilarlo, aunque han pasado seis años y mi hija tiene ya cuatro. Todavía pienso en ella. Todavía la rabia me consume cuando pienso en que él creó la bomba que mató a mi hermana menor. Prometí mentalmente no volver a verle ni a hablarle. Sin que él lo supiera, nos mudamos a el 4, al lado del mar con la casa de Annie y Vick cerca. Abrimos una panadería. Yo cazo y usamos la carne para algunos productos. Yo a veces hago cupcakes, pero la mayoría los llevo a casa para Peeta, Prim y para mí.

(narra Primrose Mellark)

Los cupcakes de mi mamá están más buenos ahora que papi le enseñó a decorarlos co n fondant, colorante y chocolate. Desapareció de los de ayer, pero no se lo dije a nadie, pues nos lo repartimos Buttercup y yo. A mi madre no le entusiasma Buttercup. No lo entiendo. Es muy mono y cuando lo abrazo ronronea. Reconoce mi nombre. Mami dice que es por mi tía. Mi tía se llamaba como yo. Papi dice que Buttercup le bufa a mamá porque mamá no le hace ninguna magdalena. Cuando las decoro yo hago una para cada uno: Papi (con su nombre y un pan) Mami (con un corazón) Buttercup (con un pececito de fondant) y para mí (normalmente con flores). Empiezo a preguntarle a mamá cuando me llevará a cazar.

-Mami. Quiero ir a cazar contigo... Es que quiero ser como tú. Así de alta, fuerte, lista y guapa.
-Prim, amor, no dudes eso. Tu serás más alta, fuerte, lista y guapa que yo. Muchísimo más.

Mami siempre me abraza, me pone ropa de caza como la suya y me lleva a cazar. Sobretodo los lunes por la mañana porque ella no va a trabajar y papi sí, así que tenemos la mañana para nosotras. Me alegra mucho estar con ella.