Hola a todos los que se estén tomando la molestia de leer este fic, es algo nuevo lo que estoy intentando. Es un Scorse mezclado con algunas otras historias. Espero que les guste, pueden dejarme su opinión sobre el fic... se lo agradecería mucho muchito xD Aun voy escribiendo la historia tengo la idea de lo que sera, a medida que vaya escribiendo las escenas que tengo en mente la iré subiendo y espero realmente espero que alguien lea esta historia. Los quiero por adelantados y que tengan una feliz lectura(?
Rose intentaba desayunar tranquila esa mañana en la mesa de leones junto algunos de sus primos que estaban sentados a su lado, pero se le dificultaba ignorar las habladurías a su alrededor en la que ella era el tema principal, mejor dicho el espectáculo que se armo cuando rompió con Jared Smith un hufflepuff de séptimo. El chico hizo un drama cuando ella quiso terminar su noviazgo en los mejores términos posible... ahora el no quiere saber nada de ella y todos los que estaban en el pasillos terminaron presenciando el lamentable drama. Ahora ella tomaba café y deseando que las clases comenzaran lo mas pronto posible.
- Rose, otro chico que le rompes el corazón... a este paso terminaremos igualando la lista de citas y noviazgos -James comento sonriendo y llevándose una tostada con mermelada a la boca.
-El pobre Jared, míralo, esta rojo por tanto alboroto -se burlo Fred ll, Louis que estaba tomando zumo de calabaza rió fuerte, lo que provoco que comenzara a toser inmediatamente.
Hugo que estaba sentado junto a Louis le dio unas palmadas en la espalda para ayudarle.
-Rose ya era hora que terminaras con ese tonto, aun no se que le viste... -Hugo le paso una servilleta a Louis que aun mantenía una pequeña sonrisa- Límpiate cerdo, me estas quitando el hambre... -el rubio rodó los ojos y se limpio la barbilla que tenia gotas del zumo- ¿Es eso posible?
A Rose que nada le hacia gracia, mucho menos que sus primos y hermano se tomara todo a broma se levanto luego de tirar su servilleta en el plato de su hermano que se quejo de inmediato. Iba a tener un día muy largo, lleno de bromas y chistes de lo fugaces que eran sus relaciones, era cierto que la mayoría no duraban mas de 6 meses pero de todas forma no era algo que le incumba a ellos.
Caminando a su primera clase se encontró a Albus ya en el aula. En su mesa tenia tostadas y galletas de avena envueltas en una servilleta, también tenia un pergamino abierto y escribía rápidamente... Rose supo que su primo no había hecho la tarea anoche.
-Albus, ¿otra vez se te olvido la tarea? - el pelinegro de ojos verdes miro sobre su hombro y sonrió.
-Si, bueno no... -amplio su sonrisa- sabia que la tenia pero la deje pasar... otra vez. -la pelirroja negó con la cabeza-
-No tienes remedio...
Se sentó junto con Albus mientras los demás llegaban al aula. La mañana permaneció sin tanto alboroto como se esperaba, lo que le pareció perfecto. No quería a nadie metiéndose en su vida y menos hablando sobre ella, aunque podía ver una que otra cotilla mirarla y hablar con la siguiente cotilla que tuviera cerca. No dejo que esto la molestara de sobremanera, ya pasaría algo mas interesante o menos pero al menos un chisme mas reciente y la dejarían en paz. Siempre ocurría lo mismo.
En el almuerzo fue directa a la mesa de Ravenclaw, allí estaban Roxanne y Dominique. Los chico aun estarán haciendo bromas sobre Jared y ella no quería escuchar sobre nada de eso.
-Hola chicas! -saludo Rose, al segundo se unió Lucy junto a Lily. - ¿Almuerzo de chicas?
Todas rieron
-Si, dejemos a los apestosos chicos fuera. -respondió Dominique, Rose sonrió con verdadera simpatía, ya era conocido que Dominique detestaba a los chicos a su alrededor, siempre iban suspirando y dándole flores o chocolates. Cuando la rubia solo quería un chico que fuera inmune a sus encanto veela.
Conversaban de como iban en el curso y de los chicos mas guapos de Hogwarts. Todas reían cuando se escucho una gritería en una de las mesas, todas voltearon a mirar a la mesa de las serpientes que era de donde provenía todos los gritos. Allí en frente de Scorpius Malfoy había una chica de Ravenclaw gritándole mientras este fingía que nada pasaba y seguía cortando su carne.
Scorpius Malfoy el chico mas deseado del castillo, con su aura misteriosa y fama de inalcanzable tenia a todas las chicas de rodillas ante el. Rose lo odiaba... odiaba mirarlo, odiaba pensar en él, odiaba respirar cerca de él. Lo odiaba desde que Scorpius Malfoy rompió su corazón al igual que estaba haciendo con la chica que le gritaba en ese momento. Rose volvió a ese momento hace dos años cuando iban a cuarto y se dio cuenta que se enamoro del chico que jamas debió mirar en su vida. Su primer amor y primera decepción... Scorpius y ella rompieron a los pocos meses cuando el muy maldito comenzó a ignorarla para ir con otras chicas. Jamas le dio una explicación del porque solo le dejo de hablar, mirar... Sin explicación alguna. Recuerda haberse sentido muy humillada, Rose salio de ese trance cuando la chica que le gritaba a Malfoy le tiro su copa de zumo en el pecho...
Las chicas en el comedor suspiraron cuando el rubio se levanto de golpe fulminando con la mirada a la chica, toda su camisa estaba mojada por el zumo y marcaba sus pectorales y abdominales. Scorpius agarro del brazo a la chica y la saco fuera del comedor, los murmullos sobre lo recién acontecido no se hicieron esperar.
Rose tiro sus papas fritas al plato -Creo que no tengo hambre... - Nadie sabia de ese noviazgo fugaz con Malfoy, ni siquiera su familia. Así que nadie adjudico su falta de apetito a la escena de Malfoy. Lo que seguro estaban pensando sus primas era que le acordaba a su propio rompimiento con Smith.
Ese mismo día mas tarde un pelinegro con el cabello alborotado corría en busca de su prima Rose, ellos casi siempre intentaban estudiar juntos en la biblioteca, pero a Albus se le olvido que tenían que encontrarse para trabajar en la tarea asignada por el profesor de encantamientos para entregar al día siguiente. Rose que llevaba rato en la biblioteca y no se veía que se percatara de algo a su alrededor, así era siempre que se concentraba en una tarea. Albus que llego hasta su mesa se tiro en la silla delante de la pelirroja que seguía muy atenta al escrito que tenia entre las manos. El chico le quito el pergamino de las manos para que por fin le prestara atención.
-Rose, llevo mas de tres minuto sentado delante tuyo y nada que te das cuenta -dice Albus.
Rose que lo miro por un segundo sorprendida de no tener el pergamino en sus manos se lo volvió arrebatar de mala gana.
-¡Ah! Hola Al, no me di cuenta; Pensé que llegarías temprano... ¡concordamos una hora, por si no te acuerdas! -lo miro con reproche-
-Es James, esta cada vez mas exigente con el equipo, no me dejo ir hasta que hice todas las piruetas de escape que el quería -se excuso su primo, Rose solo puso los ojos en blancos-
-James es un capitán muy mezquino. - dijo Rose, James Sirius Potter mejor conocido como el rey de Hogwarts junto a Fred y Louis sus otro dos primos, le encantaban ir por el castillo haciendo suspirar a las chicas y creyéndose lo mas guay que ha pisado Hogwarts. Tenia que admitir que eran muy guapos y casi todos los adoraban pero habían ocasiones en la que quería matarlos
-Si bueno, ni tanto, ya sabes que tenemos que ganar la copa de quidditch, es su ultimo año se quiere ir por lo grande... -le excuso Albus que amaba tanto el quidditch como su hermano mayor, Rose rió.
-Ya la tarea esta terminada, solo tienes que leerla y firmar el trabajo -Albus le sonrió con adoración, lo menos que le apetecía era hacer tarea, quería ir comer y casi era la hora d la cena-
-¡Rose eres la mejor! -le tiro un beso por encima del pergamino que la chica le había dado. Algunas chicas que vieron el gesto del gryffindoriano suspiraron. Rose solo se limito a asentir con la cabeza.
Mientras Albus se disponía a leer la redacción de encantamientos, en el otro lado de la biblioteca se encontraba, Scorpius Malfoy junto con sus amigos Benjamín Nott y Marcus Zabini. Ellos como sus generaciones antepasadas eran serpientes de la casa de Slytherin. Scorpius: rubio platinado, ojos grises y tan alto como un chico de séptimo. Benjamín de cabello castaño y ojos azules y Marcus con una piel morena y ojos tan oscuro que casi pasan por negros. Los tres amigos acaban de entrar a la biblioteca, están sacando todo de sus mochilas para comenzar sus tareas. Marcus y Benjamín iban a séptimo mientras Scorpius iba a sexto, ellos se conocían desde bebes, Benjamín era su primo y la familia de Marcus era muy cercana a los Malfoy/Nott así era como era como habían hecho tan amigos estos tres, a pesar que Malfoy fuera menor.
Albus que termino de leer la redacción se levanto junto a Rose para ir a su sala común, los dos primos pasaron justo por la mesa de las serpientes que se disponían a comenzar sus trabajos. Rose no pudo evitar que se le fueran los ojos hacia donde se encontraba Scorpius que nunca se molestaba en dirigirle la palabra a no ser por un debate en el aula de clases. El pelinegro ignorando que su prima no le prestaba la mas mínima atención siguió hablando sin parar.
Scorpius levanto la vista solo cuando Rose ya hubo pasado por su lado, observando por un momento como se dirigía ya a la salida a paso lento con su primo, sus amigos se rieron de él.
-¿Alguna vez le hablaras a la rosa de los leones? -le pregunto con sorna Benjamín
-No creo que Scorp este interesado en hablar con la Weasley/Granger, Benja -dijo Marcus con sarcasmo- Scorp ni siquiera la mira, ¿o alguna vez lo has visto observarla? -seguía usando ese tono burlón con el que hablo al inicio-
-Ja ja ja. Que bromistas son... .MUERAN -respondió el rubio algo ácido.
Scorpius harto de las bromas de sus amigos recogió todas sus cosas y salio de la biblioteca en dirección a las mazmorra.
En la sala común de los leones estaban James y Fred coqueteando con algunas chicas mientras llevaban acabo un juego de naipes explosivos. Los chicos estaban muy cómodos y riendo cuando se abrió el cuadro de la señora gorda y entraron Lily y Hugo, ellos iban a quinto y era su primer año en el equipo de quidditch, aun estaban agotados del entrenamiento. James no los compadecía ni aunque fueran su familia. El dúo lo miraron con algo de resentimiento.
- Tuvimos que ir a la enfermería por una poción que nos ayudara a relajar nuestros músculos -le recrimino Lily Luna, la pequeña de los Potter, Hugo a su lado no dijo nada, solo se sobaba su brazo izquierdo que era con el que bateaba la mayoría de las veces.
-Awww... Los pequeños cachorros están cansados, ¿Quieren que sea mas suave con ustedes? -les pregunto de forma cariñosa James a los chicos que lo miraban ya con una sonrisa pequeña en los labios. Lily que se recogía su cabello rojo tan típico de los Weasley en una coleta asintió.
-¡Pues no! ¡Tienen que entrenar así de duro! ¡Quizás mas! -le grito James que se tomaba muy en serio su papel de capitán -Lily se tiro en el mueble a descansar ignorando a su hermano que era insoportable cuando se ponía en ese plan tan mandon y Hugo solo se limitaba a decir que si, Hugo era muy guapo, tenia los rasgo de los Granger, era uno de los pocos Weasley's que no era pelirrojo. El tenia el cabello castaño y la piel bronceada.
Fred que estaba riendo del numerito que estaba armando James en medio de la sala común a sus primos, hizo un ultimo movimiento ganado la partida de naipes. James se quejo que volviera a ganar. El primero solo sonreía, acentuando sus hoyuelos, Fred tenia una de las sonrisa que aunque estés molesto con el, te la muestra y rápidamente tienes que dejar tu enojo a un lado. Iba en armonía con su mirada picara, las pecas que tenia en el rostro le daban un aire inocente.
Rose y Albus entraron conversando y con algunos libros y los demás los llamaron a su lugar. La sala común de los leones estaba mayormente ocupada por los Weasley/Potter y nadie se quejaba de los escandalosos que eran. Los chicos que acaban de unirse subieron los pies a la mesa con aire despreocupado.
- ¿Cuanto falta para la cena? -pregunto Albus-
-Poco Al -le respondió Lily-
-Tengo mucha hambre... -Fred le paso un chocolate para que dejara de quejarse, el pelinegro se lo devoro en un nanosegundo.
James que había cerrado los ojos y se encontraba ahora recostado en el mueble donde hace un momento le estaba riñendo a Hugo y Lily, los abrió de golpe.
-¿Donde esta Louis? -Pregunto el mayor de los Potter. Los demás solo se encogieron de hombros. Como si hubiera sido conjurado el susodicho apareció en la sala común comiendo varias tortas de melaza y fresas. Albus le robo un pastel.
-Louis eres mi primo favorito- le dijo el ojiverde comiendo su pastel, el rubio no se quejo al ver la rapidez con la que desaparecía el pastel.
-Vaya, si que tiene hambre este. - Louis dijo para nadie en si.
- ¿Donde te habías metido? Llevas desaparecido mucho rato pillin -le comento James.
-Culpa de Dominique, quería que le hiciera campaña para el club de lectura ese que tiene... Me obligo llevar las inscripciones y hacer aparición una vez al mes. -Fred lo miro con suspicacia- ¿A cambio de que? -Louis sonrió angelicalmente- No nos quitara puntos por tres meses -termino sonriendo travieso- James rió fuerte y Fred lo secundo. Hugo negó con la cabeza divertido.
-Dominique tiene que estar muy desesperada para que se unan a su club de lectura -dijo el castaño.
-No puedo creer que Dom haya hecho un trato de ese tipo, ¡Ella es prefecta! -se quejo Rose-
-Si, pero a su club solo se unen chicos que quieren verla mover los labios y agitar su coleta -contesto Lily- Las chicas la odian un poco... -Louis asintió-
-Por eso me ha usado, ya saben... -Fred y James lo miraban de forma burlón
-Si lo sabemos y muy bien chico veelo. -Louis empujo a Fred que seguía riendo.
-¡Ya es hora! - Todos miraron raro a Albus- ¡Ya es hora de la cena! -Se fue sin esperar que los demás lo siguieran al Gran Comedor.
Todos lo siguieron al Gran Comedor.
