Capitulo 1: Las Hermanas Rotas

Hace 2 millones de años existía un planeta errante, no ligado a alguna estrella, su nombre era Nimmoria. Alrededor de el giraba una gran luna hecha de pura lava en ebullición, Alarkan.

Nimmoria era un mundo muy oscuro, iluminado solo por la débil luz de Alarkan y por la linea de estrellas que nosotros llamamos Vía Láctea.

La armoniosa danza de estos dos astros a través del negro mar de estrellas presagiaban el surgimiento de dos grandes razas, que cambiarían para siempre a la galaxia; Los Nimmorianos y Las Leh-Faih.

Los Nimmorianos eran una raza de aspecto insectoide (con 4 patas para sostenerse y 2 brazos para manipular objetos), originarios de las catacumbas subterráneas de Nimmoria, ellos tenían una organización eusocial como las abejas de la Tierra, y al igual que ellas toda su sociedad se estructuraba alrededor de La Reina, matriarca de todos en la colmena.

Pero no existía una sola Reina, había decenas, cientos, miles. Todas con una ambición intrínseca, programada por su ADN, el deseo de ser la única y absoluta reina de todos los Nimmorianos.

Estos deseos de dominación desataron intensas guerras por todo el planeta, sumiendo a Nimmoria en una época de barbarie.

Mientras ese caos se formaba, en las regiones montañosas surgió otra especie Las Leh-Faih

Ellas eran muy especiales, una extraña e improbable mutación las doto de un órgano nunca antes visto, el Lóbulo Psiónicos. Este les permitió entrar en contacto con una dimensión nunca antes vista: El Subespacio, una dimensión de energía en el estado mas puro, materia prima de universos.

Este nuevo órgano les dio habilidades nunca antes vistas, la capacidad de mover objetos con la mente, levitación y la mas importante un nuevo método de comunicación el Enlace, una conexión psíquica que les permitía compartir pensamientos y emociones, gracias al cual crearon una civilización pacífica centrada en el conocimiento y la armonía.

El contacto entre Leh-Faih y Nimmorianos era solo cuestión de tiempo.

FIN DEL CAPITULO 1