Miradas infinitas.
~Miica.
{!} Los drabbles no están en orden cronológico, es decir, en uno puedo contar la boda de Naruto y Sakura y en el otro el comienzo de su amor.
{!} Trataré de actualizar, máximo, cada tres o cuatro días.
{!} Si te gusta agradecería que dejaras un review (:
x
O1. Frío
El invierno estaba recién empezando en Konoha y, como para demostrarlo, oleadas de aire frío recorrían la aldea de vez en cuando. Sakura Haruno cubrió su estómago con sus brazos en un intento de abrazarse a sí misma y tiritó. A nadie más que a Kakashi se le ocurría castigarlos así.
Bueno, no había sido tanto; simplemente le habían hecho una pequeña broma y, como al parecer el peli-gris no había dormido muy bien en la noche, se lo había tomado a mal, castigándolos a correr por Konoha al menos una hora, empezando desde las seis de la mañana.
Sakura suspiró ya con cansancio y se preguntó dónde estaría su compañero, 'probablemente durmiendo' pensó girando los ojos hasta dejarlos blancos y sonriendo.
&.
- ¡Kuso! – Exclamó un atareado Naruto Uzumaki al salir de su casa corriendo y terminando de ponerse la camiseta al mismo tiempo. Obviamente, se había quedado dormido y había olvidado el castigo de Kakashi-sensei, por lo que ahora, con media hora de retraso, tenía que correr el doble de rápido.
Dejó atrás el antiguo edificio donde se encontraba su departamento y empezó a correr. Al principio, al no ver gente en la calle debido a la temprana hora, se había entretenido silbando levemente o viendo los escaparates de las tiendas, pero al cabo de un rato se aburrió de nuevo. Entonces recordó que en ese castigo estaban dos, y se encontró pensando en cómo estaría corriendo Sakura, con su cabello al viento y sus ojos jade semi-cerrados y su-
- ¡Auch¡ - Escuchó antes de caer de bruces al suelo. – Naruto, ten más cuidado. – Exclamó una vocecilla algo molesta que él conocía muy bien.
- Sakura-chan, lo siento. – Dijo el rubio poniendo una mano tras su nuca y sonriendo angelicalmente. La chica no pudo más que morderse el labio inferior débilmente y hacer un gesto demostrando que no había sido nada. – Es que, bueno, me quedé dormido… - Declaró con algo de vergüenza. - …y, ya sabes, hay que cumplir los castigos. -
- Como no me lo imagine. – Dijo Sakura con un tono impregnado en la ironía y levantándose de un salto, con renovada energía. Naruto se encogió un poco más y rió. - ¿No tienes frío? – Preguntó al verlo solamente con una camiseta encima.
- ¿Yo? – Sakura bufó demostrando lo obvio. – Bueno, en realidad no. – Sonrió traviesamente y se quitó el polvo que le había dejado la caída de encima.
– Venga, vamos, hay que seguir corriendo. – Exclamó Sakura estirando la mano hacia el shinobi, quien la aceptó con mucho gusto para después levantarse y empezar a correr, sin soltar la mano de la chica.
&.
Luego de una hora y cuarenta y cinco minutos (cortesía de Naruto, quien encontró que correr otra media hora no le hacía daño a nadie) los adolescentes, finalmente, pararon de correr.
Encorvada, con las manos en sus rodillas y jadeando, Sakura le dirigió una mirada de muerte a su compañero a lo que este solo se encogió de hombros demostrando una inocencia inexistente. Sin necesidad de palabras, solo con un gesto, la kunoichi indicó que se dirigieron a su departamento.
Al llegar, se dieron a la tarea de prender el fuego en la chimenea de Sakura, tarea nada fácil, por lo demás, ya que la peli-rosada se frustraba rápidamente y terminaba por apagar la pequeña llamita. Finalmente, fue Naruto quien logró encenderla.
Y allí, sentados los dos en el cómodo aunque antiguo sillón, con Sakura acostada en el regazo de Naruto y este acariciándole el pelo, ninguno de los dos pudo evitar pensar que, después de todo, el frío no era tan malo.
x
Y… ¡Ahí está! Espero les haya gustado lo suficiente para dejarme, aunque sea, un review.
Nos vemos en el próximo drabble ;D
~Miica.
