CAPITULO 1:El Descubrimiento
RUTH
Estaba yendo a la biblioteca, como todos los miércoles y llevaba el pelo recogido en un moño con palillos chinos cuándo una extraña visión me hace detenerme. Un chico, con aire despeinado y cabello negro y una chica, rubia y con malas pulgas, ah y por cierto también estaban luchando contra un monstruo enormemente feo. En ese momento me quedé blanca como la pared a mis espaldas, se parecían enormemente a los protagonistas del libro que en ese momento llevaba en mis manos y no podía ser una coincidencia a menos que me hubiera vuelto loca. ¿Pero cómo es que nadie parecía darse cuenta de lo que pasaba? Entonces me di cuenta de que la calle estaba desierta y que a lo lejos se escuchaba la sirena de un coche de policía. ¡Mierda! La gente seguro que había huido hace ya rato y llamado a la policía y yo aquí, tan tranquila. En ese momento me di la vuelta y eche a correr, pero el monstruo se dio cuenta de mi presencia y se zafó de los dos jóvenes que trataban de matarlo y echo a correr hacia donde yo estaba. Sabía que era inútil intentar escapar de él, así que hice lo único justificable para una niña de 12 años en esa situación, dejé caer mi libro y me desmayé.
Se escuchaban voces, voces extrañas, jóvenes y de las que no entendía nada. Me esforcé un poco más en intentar entenderlas, pero me di cuenta de que sencillamente no podía, estaban hablando en inglés. Intenté abrir los ojos pero recordé que antes debería intentar averiguar dónde estaba, me concentré un momento y noté que estaba en una cómoda cama, tapada con unas sabanas suaves. Se notaba el suave vaivén de un barco y decidí que lo mejor sería abrir los ojos. Entonces pude ver que estaba en un cuarto, pequeño y en la parte de abajo de una litera. Había muchos jóvenes, en ese momento no pude decir cuantos y estaban discutiendo en voz baja en inglés. Entonces la rubia de antes se dio cuenta de que los estaba observando y paró la conversación. Me preguntó algo así como que que tal estaba pero en ese momento mi inglés no era demasiado fiable así que hablé en español.
-Creo que estoy bien- En ese momento decidí incorporarme y aunque algunos hicieron gestos alarmados yo lo hice de todos modos y me encontré con que estaba perfectamente. Me toqué la cabeza sorprendida, sabiendo que con un golpe como el que me pegué al caer al suelo debería de tener al menos un buen dolor de cabeza, pero no sentía nada. Estaba perfectamente. Entonces uno de los chicos de pelo rizado y negro se acercó a mi y me habló en español, con algo de acento sudamericano.
-¿Que tipo de semidiosa eres tú?- Yo lo miré sorprendida, ¿porque hablaba de semidioses? Entonces me di cuenta, el libro que me estaba leyendo contaba una historia de semidioses en la actualidad y estos chicos encajaban perfectamente en esa descripción. Me entró un escalofrío, así que después de todo el libro contaba una historia real. Decidí contestarle con suavidad.
-Yo no soy una semidiosa, solo una mortal normal.- El me miró alzando las cejas y tradujo al resto de compañeros en inglés. Entonces la rubia, (esa tiene que ser Annabeth me dije a mi misma) le dijo algo al chico que estaba a mi lado y él me tradujo.
-Mi amiga Annabeth quiere saber porqué podías ver entonces al monstruo o si te había pasado antes esto.
-No, es la primera vez que veo algo así de raro. No sé porque lo he visto, se supone que tengo la niebla ¿no?- El chico me miró de nuevo alzando las cejas (este tiene que ser Leo, recordé de pronto, era el único del grupo que hablaba español) y me preguntó.
-¿Cómo es que sabes de la niebla? Y por cierto pequeña, ¿me podrías decir tu nombre?- Yo le contesté nerviosa de que se riera de mí y un poco enfadada porque me llamara pequeña.
-Me llamo Ruth y se de la niebla porque me gusta leer.- Suspiró resignado, y tradujo al resto de los que estaban en la habitación. Hablaron un momento entre sí. Entonces Leo se volvió hacia mí y dijo.
-Bien, yo me llamo Leo y parece que tendré que hacer de traductor para tí. Hasta que ti aprendas el suficiente inglés para que puedas comunicarte sola con nosotros - Luego añade con tono que daba a entender que estaba de broma. - Bien mis horarios son: De 10 a 1 del mediodía y d de la noche, sin horas extras. ¿Ha entendido señorita española?- Yo me reí y asentí con la cabeza, pero me di cuenta de que había dicho que estaría por aquí el tiempo suficiente como para aprender a hablar inglés y eso era una idea un tanto preocupante. ¿Qué pensaría mi madre si yo no aparecía? Y algo mas preocupante ¿Cuanto tiempo llevaba desmayada? Y lo miré asustada y dije:
-¿Cuanto tiempo llevo desmayada?
-Unas dos o tres horas, pero tranquila, algunas personas se llevan así varios días después de una impresión como esa. Tuviste mucha suerte de que Percy y Annabeth estuvieran allí, si no...
-Uff menos mal, pero¿ puedo preguntar una cosa?
-Claro que sí- Me dice Leo, algo divertido como si ya se lo esperara.
-¿Podría ver a mi madre?- Leo me mira asintiendo para sí y se lo dice a los demás, estos asienten y Annabeth dice algo, que Leo me pasa al español.
-Si ustedes y además así... Así podrás preguntarle porque no te dejó saber que tu collar es un símbolo de protección. Eso solo lo necesitan los mestizos, así que ¿Por que no? Vamos a tú casa.
