Disclaimer: Sakura y sus amigos no me pertenecen, son propiedad de Clamp. Pero la historia nacio del deseo de jugarle una broma a mi cerebro :) Ciertos personajes y la historia son parte de mi invencion. Toma esa cerebro! [UA] Todo parecido a verdaderos humanos de carne y hueso que respiran y caminan por el mundo es puramente imposible porque gente tan rara solo puede existir en mi imaginacion :P No me copies madre naturaleza!
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Susurros y Silencios
En el otoño de sus dieciseis años, Sakura Kinomoto se ve obligada a dejar atraz su ciudad natal y confrontar la curiosa vida del pueblo donde el hombre que la abandono aun antes de haber nacido, ha vivido todo ese tiempo. Con un oscuro sentido del humor, un miedo desconcertante al silencio y la fiel compañia de Dj [su loro], Sakura tendra que lentamente desenrredar el pasado lleno de rumores y secretos mientras descubre amor, amistad y traicion.
SxS, TxE
"Localize la unica persona que podia salvarme pero la unica capaz de undirme. Sin pensarlo, corri y me colgue de su brazo. Solo habia una forma de hacer que Fujitaka no se nos acercara y de que esta persona no abriera su bocota y me delatara. [...]. Lee que parecia no salir del shock de ser atacado por la gran fresa que era yo, me seguia viendo como si estuviera mas loca de lo que el mismo habia imaginado y pobre de el, aun no sabia que tan mal podia ponerse todo..."
Prologo
Toda mi vida he vivido con mi mama y mi abuelo. Mis padres se separaron antes de que yo naciera. Los dos eran muy jovenes cuando se casaron...-demasiado jovenes-.
Dieciseis años despues, conocere a mi padre por la primera y -Dios quiera- ultima vez.
No, de hecho, estoy algo ansiosa por ver que cara pondra cuando me vea.
Pero hay una razon para mi subita visita. Todo comenzo el dia en que mi madre me anuncio la tragedia: el compromiso.
-La Tragedia-
Era un nubloso dia de Noviembre y estaba yo, sentada como siempre en una rama alta del arbol de cerezo en nuestro jardin trasero; un libro en mano y musica reventando mis timpanos: Era un tipico viernes por la tarde -el paradiso-.
El señor Darcy acababa de finalizar su segunda propuesta de matrimonio con mas suerte y delicadeza que en la primera ocasion [N/A: Orgullo y Prejuicio por Jane Austen] -cuando el alarido de mi madre por poco me tumba del arbol por la octava vez del mes.
Despues de leer de perfecta compatibilidad en una pareja, es normal que la noticia que me aguardaba en casa me pareciera el crimen mas grande de la humanidad.
Mi madre ha salido con la populacion entera de solteros de la ciudad, he ahi el porque hasta ese dia mi ahora-futuro-padrastro no habia representado ninguna amenaza para mi.
Siendo en general bastante suspicaz en estos asuntos, me tomo cinco minutos completos antes de vomitar el veneno de mi estupefaccion. Aun en grave estado de shock, mi opinion al respecto fue bastante clara pero como era de esperarse, nadie me tomo en cuenta.
Los meses pasaron pero el primer shock aun no se iba. Me encontre una vez mas en el despacho de la psycologa quien astutamente introdujo en la cabeza de mi madre, la formula; causa de mi sentencia.
-La Formula-
Sin importar lo que Freud pudo haber opinado, yo no tengo ningun trauma.
He notado que el consultorio de la psycologa estaba mucho mas vacio esta vez que cuando la conoci por primera vez. Por consecuente, la base de mi argumento es de que la psycologa necesitaba urgentemente de dinero y mi madre es, despues de todo, una victima facil.
Por lo que ingeniosamente concocto la formula segun la cual mi odio a los hombres provenia del trauma infantil de haber nacido sin padre. Esta formula, me negue y aun me niego a reconocer; Para comenzar, bien que no tuviera padre, el abuelo hizo un tan mal trabajo como cualquier otro hubiera hecho y para concluir, cualquier apatia de mi parte no era solo dirigida hacia los hombres sino a la totalidad del universo y mas que odio o apatia, era mortal indiferencia.
Sin embargo, como la fecha se acercaba y yo no salia del shock, mi madre estaba dispuesta a intentar cualquier sugerencia de la psycologa que incluyera mi desaparicion.
He ahi el porque DJ y yo embarcamos en un incomodo autobus, una rara soleada mañana de Setiembre, un año despues del elemento perturbador de esta historia.
-Esta Historia Es Un Elemento Perturbador Sin Fin-
Cuando subi en el autobus con la jaula de DJ en mano -DJ adentro- y mi mochila en la espalda, me esperaba un viaje incomodo. Lo que no me esperaba era la tortura china que en realidad fue.
Los asientos que ya de por si eran duros, pequeños y pegados unos a los otros, no eran nada nuevo para mi. Por desgracia -para mi- el pasajero atraz mio tomo su asiento y el martirio comenzo: sus rodillas, anormalmente huesudas, atravezaban mi debil asiento y durante todo el trayecto tomaron por mision de incrustarse en mi columna vertebral. -Reclinar mi asiento estaba fuera de cuestion-.
Poco despues, se sento a mi lado una señora regordeta que por falta de espacio decidio entasar su humanidad sobre mi a la hora de dormir. -Durmio durante todo el viaje-.
Jamas imagine que estaria tan feliz de bajar del autobus que me habia conducido [mas cerca] al lado del procreador. Una vez abajo, jamas pense que querria tanto volver a subir...
Ahi estaba yo, Anna de las Tejas Verdes [N/A: escrito por Lucy Maud Montgomery] esperando ser recogida; pero a diferencia de Anna, yo hubiera dado un riñon por no estar ahi y yo no era una desfortunada huerfana sino una indeseable abandonada.
Mas, al igual que Anna, el que debia recogerme no estaba a la hora y tal como a ella, una desagradable noticia me esperaba, aunque a diferencia de Anna, la noticia no era que tenia que irme sino de que estaba obligada a quedarme... para siempre...
-El Plan Maestro-
Todo habia sido meticulosamente planeado por los cuatro antagonistas de mi vida: mi madre, el padrastro -la raiz del mal- , el procreador y el mayor colaborador: el abuelo!
-"Me mentiste", acuse por telefono.
-"Es lo mejor, seras mas feliz." Respondio sin la menor nota de arrepentimiento la que escasas horas atraz se decia mi madre.
-"No me puedes hacer esto, todo esto es un plan del anciano para deshacerse de mi." Insisti con desesperacion.
-"Tu abuelo no tiene nada que ver. Sabes muy bien que lo intente todo cariño pero no me dejaste mas opcion. Amo a Dan, porfavor entiendem..."
Su suplica probablemente continuo pero colgue sin escuchar nada mas.
Subitamente, habia sido abandonada por segunda vez en mi vida, esta vez por la procreadora.
El procreador me observaba desde una considerable distancia. Le habia tomado años reconocerme y tomando en cuenta de que yo tenia menos referencias que el, nos habia tomado una hora acertar el uno con el otro.
Despues de anunciarme la nueva tragedia, no habia vuelto a abrir la boca. Justo por la primera vez que hubiera deseado que alguien me hable para poder gritarle que se calle, mi padre guardaba silencio.
Yo no podia sino observar el telefono, encerrada en la pequeña cabina. Mi mente estaba vacia excepto por el extraño zumbido mudo que retumbaba en mi craneo... el silencio invasor.
Aun no se como llegue al carro, en ese momento intentaba tan solo ignorar el hormigueo que recorria mi cuerpo. Pero una vez en el carro, cuando solo deseaba el bullicio de la radio y el pueblo, el procreador comenzo con la charla ligera...
-"Has crecido tanto, solias ser una mancha en el utero de Susan." Rememoro el procreador en un tono ligero y cargado de incomodidad.
-"Aun sigo siendo una mancha, utero o no utero." Respondi sobre el mismo tono nostalgico
-"Tu madre solo quiere lo mejor para ti."
Y se hizo el silencio.
-"Te pareces mucho a Susan." Comento y lo observe con despiadada compasion. "Tus expresiones". Aclaro, "cuando piensas, frunces la frente igual que ella." Dicho esto, solto el volante para pasar un dedo entre mis cejas. La naturaleza con la que toco mi frente me tomo por sopresa y esto le causo gracia.
Su burla logro cerrarme la boca y por el resto del camino lo ignore, jugando con DJ que ahora que su jaula estaba destapada repetia sin cesar su palabra favorita: "Sakura, Sakura."
