Esto es para Nott Mordred, que me lo encargó como las pizzas ;)

Que te aproveche, guapa.


Ah, el periódico.

Tom desdobla El Profeta, mira a la lechuza, se mete la mano en el bolsillo y hurga y nada, maldita sea y saca unos cuantos knuts de bronces. Dos o tres. Los mete en el saquito de la lechuza y le lanza una mirada de mala folla vete, maldita. No tengo más dinero que hace que la lechuza despegue a toda hostia.

Tom Ryddle Sénior anuncia su compromiso

El joven y rico heredero de la familia Ryddle parece al fin haber encontrado el amor verdadero.

Tras haber tenido una relación de varios años con la misteriosa squib Mérope Gaunt, una harapienta vecina que vivía con su padre Sorvolo y un hermano (Morfin), Tom huyó alegando que había sido embrujado por la squib.

No descartamos la teoría de que adquiriese en el Callejón Knocturn un filtro amoroso, que fue fácil camuflar en un vaso de agua que el joven aceptaría tras uno de sus largos paseos a caballo con Elsie, una compañera de infancia.

Parece ser esta misma Elsie, quien años quince años después de…

Mierda, mierda, ese puto muggle.

Tom rasga el diario, pero recorta la fotografía del bastardo de mi padre y se la guarda en el bolsillo.

Me temerá. Lo mataré.

Se levanta sin haber a penas desayunado. No piensa ir a Encantamientos. En lugar de eso, se adentra en las mazmorras y entra a la sala común de Slytherin. Allí, Rodolphus Lestrange está sentado en uno de los sillones verde botella y ostia, Tom necesita decir que odia a su padre o reventará.

–Lestrange, –comienza Tom, cargado de ira.

–Ryddle –saluda Rodolphus, distraído.

–Odio a mi padre.

–Ya, bueno, Tom. Todos odiamos a alguien alguna vez en la vida.

Esto es distinto, joder Lestrange. Quiero que me tema, quiero matarle, quiero ver su agonía y quiero reírme de lo patético que es pero Tom, irías a Azkaban mucho tiempo aunque claro está que a Tom me suda la polla. Quiero matarle, coño. Retorcerle el pescuezo. Y Rodolphus sólo puede trazar una enigmática sonrisa. Si quieres que te teman, tendrás que darte a conocer. Y todos los villanos tienen un nombre que suena importante.

Tom no le sigue, pero se sienta ¿Quieres decir un anagrama? y no exactamente, Tom, pero creo que servirá.

Le arrebata a Rodolphus una hoja de pergamino y se saca de la mochila una pluma y un tintero. Juega con los nombres.

Mordred. Voltor.

–Eso no impone, Tom.

–O te callas o te mato, Lestrange –gruñe Tom.

–Cojonudo –Lestrange se saca un cigarrillo del bolsillo –. ¿Quieres uno, Tom?

Tom lo acepta sin darle las gracias, lo prende y entonces se le prende una idea.

–Soy lord Voldemort.

–¿Qué coño dices?

–Soy lord Voldemort –repite Tom con entusiasmo.

–Estás pirado.

Tom observa a Rodolphus y le devuelve su pergamino.

Tom Sorvolo Ryddle. Soy lord Voldemort.

Las letras tachadas una por una y reordenadas para formar tres palabras que aterrorizarán a varias generaciones venideras.

–Eres un puto genio, aunque sigas estando loco. Suena imponente.

–Entonces –susurra Tom, sonriendo y los ojos ya parecen rendijas –llámame así. Voldemort.

Un escalofrío azotaría la espina dorsal de Rodolphus si no conociese a Tom.

–Y cómo piensas matar a Ryddle Sénior.

–Con un Avada Kedavra.

–¿Qué?

–Hasta tus bisnietos temerán esas dos palabras. Y estoy seguro de que las usarán, serán mis mortífagos. Mis súbditos, mis seguidores.

–Suena bien, Tom –admite Rodolphus.

–Suena genial, Rodolphus.

Lord Voldemort, Avada Kedavra, mortífagos.

Genial se queda corto, suena de puta madre.


Ale, pues esto ya está, niños.

P.D.: Dadle click a 'Go' para que Tom tenga la idea brillante de meterse en vuestras camas. Sí, ostia. A mí el Tom de 16 años de La Cámara de los Secretos me pone becerra xD