Cuándo tenía diez, no miraba mucho el cielo. Pensaba que era ya toda una señorita y como tal, mis preocupaciones variaban entre amigos-chicos-cabello.
Cuándo tenía diez, sin embargo, seguía siendo un brillante barril de inocencia, de apariencia superficial, pero niña al fin y al cabo.
Cuándo tenía diez, ya no sentía miedo. Todos eran mis amigos. O parecía al menos, no serles desagradable. Atrás estaba el traumático apodo de "chica frentona"
Cuándo tenía diez, el también tenía diez.
Cuándo el tenía diez, miraba muy seguido sobre su cabeza. Pensaba que aún era un niño en un mundo demasiado grande.
Cuándo él tenía diez, era un monstruo. Uno inocente.
Cuándo él tenía diez, nadie era su amigo.
Cuándo teníamos diez, no supe nada de aquello.
Por eso, cuándo le susurré a Sasuke
"Dile a Naruto que me perdone"
El no puso objeción.
Perdón por no ayudarte, perdón por no observarte, perdón por ser grosera, perdón por no mirar sobre mi cabeza y ver que estabas allí. Esperando una palabra.
Perdón a mi misma, por todo aquello también.
En la próxima vida, quizás.
Sí.
Naruto, la próxima vez, estaré contigo.
Y caigo, hacia el infinito. Dónde duermen las mariposas, y a los diez, sólo miramos el cielo.
Me dio en un ataque de fanatismo. Luego de ver "The Last" comencé a ver el manga desde el principio. Y mi humilde opinión, es que ese final no le hace ni mierda de justicia; no me malinterpreten, no tengo ningún problema con el naruhina ni mucho menos. Es que Naruto es mucho más que eso. Y de haber tenido que quedarse con alguna chica, por desarrollo, Sakura era la indicada ¿Por qué? Fácil, le hace justicia a los 700 capitulos del manga. De haber dejado a Naruto y Sakura juntos, The Last no habría sido necesaria.
