True Feelings
Un enorme y pesado suspiro se escuchó por la pequeña habitación que en teoría se hacía llamar departamento, era la cuarta vez que la pequeña coneja rodaba en su poco cómoda cama, el reloj marcaba las 3AM y aunque había conseguido resolver el mayor complot de la ciudad, no había podido pegar el ojo en ningún momento desde que había llegado a su departamento, simplemente recordaba ese momento en que aquel zorro se había marchado molesto por lo que había dicho en la conferencia de prensa.
Solo era un zorro, era lo que intentaba pensar de forma cruel para no desanimarse, él había sido la causa de lo que había pasado, no tenía por qué pelear con ella frente a cientos de cámaras mirándolos, tal vez "Solo era un plan suyo por hacerla quedar mal" era lo que la joven intentaba meterse en la cabeza, después de todo solo era un zorro, eran buenos mintiendo y engañando a todos, tal vez ella solo había creído que aquel zorro había cambiado, pero no, solo había estado jugando con sus sentimientos, involucrándose en la graciosa actuación de una torpe coneja policía que intentaba hacerse la heroína de la ciudad, tal vez quería algún tipo de recompensa económica o simplemente que no lo enviara a prisión por evasión de impuestos… Seguramente eso quería, él nunca había deseado pasar tiempo al lado de ella y mucho menos trabajar juntos.
— Que tonta fui… —susurro acurrucándose entre las sabanas y cerrando por un momento sus ojos, un volátil recuerdo al lado del zorro apareció en su mente. ¿Por qué lo recordaba y tenía tan doloroso y cálido sentimiento? Se supone que conejos y zorros deberían odiarse, pero… ¿Por qué? ¿Había hecho mal pensando así de él? No era tan solo un simple zorro… No, era algo más, algo más fuerte e intenso que simplemente odio o rivalidad por la especie.
¿Lo quería? ¿Era eso? ¿Amor? ¿Una coneja y un zorro? ¡Sería una tontería!
— Nick… —susurro ella antes de ceder por completo al cansancio que se apoderaba de su cuerpo.
Los días fueron pasando, uno tras otro, sin dejar descansar en ningún momento a la joven coneja quien lidiaba de sol a sol con los conflictos que ella misma había causado a la ciudad. Había luchado tanto por el trabajo de sus sueños, pero ahora ese trabajo no la llenaba… Se sentía inútil, de que servía proteger a la ciudad si ella había sido la causante de todo y con ello había perdido al único que la había apoyado.
Se rindió. Colocando únicamente su placa sobre el escritorio de la alcaldesa y huyendo de Zootopia, escapando como la patética presa que era, después de todo estaba en su "biología".
De nuevo en la granja, vendiendo frutas y verduras. Tal vez lo único para lo que servían los conejos, eso era lo que ella pensaba, debía de redimirse y abandonar cualquier patético sueño.
¡Espera! ¿Eso eso…? ¿Un rayo de esperanza? Podía arreglar todo, podía volver a su vida de antes… ¡Podía recuperar a Nick!
Pidió ayuda, solo Finnick sabría dónde estaba, y lo sabía, solo, en un lugar abandonado de la gran metrópoli.
El corazón de él sufrió al verla. El de ella salto de emoción.
— ¡Nick! Sé que no vas a perdonarme, fui ignorante… Pero no quiero que otros sufran por mis errores, no lo lograre sin ti… Si quieres ódiame… Fui una terrible amiga… —intento hablar con seriedad, dejando escapar lágrimas y pequeños sollozos.
Su patética disculpa grabada.
Un dulce y cálido abrazo de parte del zorro… La había perdonado… De verdad la quería…
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Primero que nada, me gustaría agradecer por haber leído este pequeño drabble así como también me gustaría agradecer a "Alex Land" por ayudarme con el beta :3
No es la extensión de texto que acostumbro escribir así que fue una interezante nueva experiencia xD
Espero que les haya gustado y cualquier opinión de su parte la atesorare~
Nos vemos :3