Pesadillas 2 HELADO MILAGRO
Summary: Continuación de Pesadillas
Han pasado ya 6 meses desde el accidente con Pitch Black, Tooth, North y Áster han dejado de buscar a Jack, los guardianes se han alejado por la rabia y la nostalgia que les da por no poder estar con Jack y que la causa de que no esté con ellos sea la desconfianza que le tenía, Meme esté empezando a preocuparse por Jack, el día del parto estaba cerca y no tiene idea de cómo ayudarle. Un Pitch Black listo para atacar, un Jack algo inestable a causa del embarazo, un artefacto que le podría salvar la vida al albino y el nacimiento de un Príncipe muy especial.
Advertencias: Mpreg, Drama, Romance y Lemmon
Pairing: Human! Áster x Jack
Fandom: Rise of the Guardians
Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenece si no a Dreamsworks y lo hago sin fines de lucro
Capítulo 1 A tres meses del milagro
Buscando en la senda de la vida
El cansado viajero encontró
Aquel pequeño milagro
Que la vida le salvó
El frio a su alrededor
Muy poco le importó
Pues aquel pequeño milagro
De la nieve surgió
Jack se despertó en la noche y miro a la ventana, sonrió con entusiasmo y salió de su cuarto para ver a Meme llegar, en todo este tiempo, el hombre de arena y él, habían establecido una unión bastante familiar.
Uno como el hijo y el otro como el padre, cada uno amaba y apoyaba al otro, Jack, como buen hijo, escuchaba los consejos de su padre, le ayudaba cuando el clima de los lugares fríos se volvía un problema y le brindaba toda la atención que le podía dar. Además de que le dio un reloj que le avisara donde se encontraba Pitch, las arenas negras que salieron de la columna de hielo eran grandes alarmas de que Pitch se encontraba cerca, se alteraban y lograban dar tiempo a Meme para preparar una ofensiva y así proteger a los niños.
Y aunque Meme también iba de vez en cuando a los guardianes, notaba la falta de comunicación de todos. Áster parecía apagado y algo entristecido, Norte parecía más severo e incluso llegó una que otra vez a dar algo de miedo, Tooth parecía algo perdida y llena de trabajo, le decía a las hadas a donde ir y si alguien llegaba a nombrar a Jack por accidente… Bueno digamos que la reunión se acababa y todos se iban a sus guaridas, les seguía doliendo bastante.
Una vez Meme le preguntó a Tooth si habían encontrado a Jack y ella solo respondió que no había caso, que el chico no les perdonaría nunca y que era imposible encontrarle, aquellas palabras decepcionaron a Meme, todos habían dejado de buscar.
En la guarida de Áster todo estaba normal, a excepción de los constantes suspiros de este cuando se daba cuenta de que a veces pintaba diseños invernales en sus huevos, lo cual lo deprimía y dejaba de pintar un rato, para luego seguir pintando al escuchar su caja de música, una verdadera hermosura de diseño y color.
La melodía era suave y atrapante, pintada a mano por él, con diseños primaverales y el mecanismo era una creación del mismísimo Jack, quien había inventado la tonada a partir de los sonidos que este oía en las ventiscas suaves.
Áster sonrió y siguió pintando alegre mientras la música seguía sonando, él nunca supo apreciar donde empezaba o terminaba la melodía, pues esta sonaba con delicadeza y como si fuera una danza de la naturaleza, algo mágico que giraba y giraba sin parar repitiéndose y repitiéndose sin parecer aburrido y fastidioso.
-Hay Dios que hice… El chico no merecía ese trato que le di. Debí de protegerlo y confiar en él… Me lo merezco, el siempre trató de sentirse alguien y nosotros lo alejábamos- Áster suspiró rendido y dejo de pintar aun faltaba algo de tiempo para la Pascua y casi tenía todos los huevos terminados.
Se levantó y se dirigió a su cuarto, hasta que unas pesadillas se pusieron en su camino y él se puso a la defensiva de inmediato.
-Pitch, pedazo de mierda, largo de mi Madriguera-
-Conejo cuidado con ese lenguaje- dijo Pitch divertido
-¿Qué haces aquí?- preguntó molesto Áster
-Busco a Jack, el pequeño mocoso es difícil de encontrar. Aunque eso ustedes lo debieron de saber hace mucho si dejaron de buscarlo. ¿Cómo se sentiría el chico si supiera que lo han dejado de buscar?- dijo Pitch sonriente
-Será mejor que te vayas si no quieres que te rompa la cara- amenazó el Conejo
Pitch sonrió y se empezó a retirar con sus sombras
-Pobre de ti Áster, viviendo con ese miedo de nunca ser perdonado, de nunca encontrar a Jack, si que te tengo lástima, ese chico era muy especial, pero ahora ya no es su arma ni tampoco es la mía-
-Él no era un arma-
-¿Entonces que era?-
-Era parte de nuestra familia-
-Pero me parece que contigo era diferente ¿no?-
-¿A qué te refieres?- dijo con un repentino interés Áster
-¿Qué tan ciego estas? Ese chico te adoraba, siempre sobre ti, captando tu atención, ¿nunca notaste esa atención que te daba? Si que no te mereces a ese chico- dijo con sorna
Áster miró con odio a Pitch y le agarró del cuello, lo lanzó a una pared, ganándose un gemido de dolor ahogado, se lanzó a él hecho una furia, sabía que lo que decía Pitch era verdad y eso era lo que más le hacía enojar, la verdad duele, y duele mucho si no has corregido el error que te molesta.
-¿Sabes que es lo más gracioso Áster? Que el chico tenía miedo de lo que pensaras de él luego de que supieras lo que le hice-
Pitch se desvaneció del lugar, dejando a un Áster confundido y dolido por todo lo que le había dicho, pero ese le dio una nueva determinación, encontraría a Jack fuera como fuera y para ello necesitaría ayuda de uno de los demás guardianes y espíritus pero no tenía ni idea de a quién pedirle ayuda.
-Debo de conseguir ayuda y pronto… Dejo de encontrar a mi pequeño Frost Bite- dijo con seriedad, miró afuera de su ventana, era de noche, así que se fue a dormir. Él, como Guardián de la Esperanza, no se daría por vencido tan fácilmente.
Mientras que en el Polo Sur, Jack estaba muy feliz conversando Meme, hasta que sintió algo en el vientre, unos ligeros golpes en su estómago le hicieron sonreír de una manera tan brillante y verdadera que captó la atención de Meme y este le preguntó qué pasaba
-E—esta pateando… mira siéntelo, aquí- tomó la mano del hombre de arena y la puso en su vientre.
Meme sonrió, podría sentir en su arena las patadas que daba el infante, eran suaves, tiernas, algo de lo que maravillarse, unas figuras se alzaron en la cabeza de Meme, mostrando unos copos de nieve, unas partituras de una canción suave, alegre, cariñosa, la misma que Jack siempre hacía sonar en su cajita musical.
-Es tan lindo… me pregunto cómo será-
Meme sonrió y con algunas de sus figuras le dijo a Jack que su bebe sería tan parecido a él que sería como una versión pequeña de él.
-Eso sería fabuloso amigo- dijo Jack sonriente
Meme sonrió y Jack bostezó, en el reloj que ellos habían puesto aparecía que era ya la media noche Meme señaló el cuarto de Jack y este hizo una mueca de fastidio.
Durante ese tiempo lo único que Meme no había logrado era crearle a Jack una costumbre de dormir y por mucho que se lo dijera Jack insistía que no necesitaba dormir.
-Ya te dije Meme, no necesito dormir- finalizó esa extraña conversación Jack
Lo que no esperaba es que el hombre de arena jugara su última carta, lanzarle una de sus esferas de polvo para dormir, la cual dio de lleno en la cara de Jack, dejándolo completamente dormido
Meme lo cargó a la cama del congelado Guardián y luego él mismo se dirigió a su cuarto para descansar un poco, hacía tiempo que no dormía una siesta y vaya que la necesitaba si seguía cuidando del joven Jack y su próximo y pequeño milagro.
Mientras tanto, Pitch seguía buscando a Jack, esperando encontrar una señal de donde se encontraba, pero nada se presentaba, había visitado todos los lugares, incluso en el Polo Sur pero no encontró nada, cosa curiosa, él creía que allí se encontraría el chico, pero se decidió alejar, durante 6 meses lo buscó por todas partes, pero seguía sin encontrarlo. Pero eso no lo detendría él seguiría buscando a su pequeño Frost para atormentar a los Guardianes y hablando de ellos…
Miró como Áster estaba estirando las patas y recorría varias partes del mundo, encontrándose con los espíritus de las estaciones, entre ellos, otoño, un viejo amigo de Jack, o mejor dicho compañero de Trabajo, esos dos parecían hermanos en la actitud, siempre molestando al otro, pero nunca defraudando al contrario, en su vida pasada había sido un gran guerrero junto a su mejor amigo, un dragón
-Me temo que no le he visto Áster, pero creo saber quién te puede ayudar a buscarlo- dijo el chico con una sonrisa
Otoño, mejor dicho Hiccup, era uno de los espíritus estacionarios que siempre tenían una idea de cómo encontrar a otros espíritus, en especial si se trataba de Jack.
-¿En serio chico?- dijo Áster cada vez más esperanzado
-Estoy seguro, Áster, espérame aquí que lo voy a buscar. ¡Toothless!- en un momento llegó el dragón del chico y ambos se fueron volando en busca de aquél que le ayudaría a encontrar a su helado amigo.
Aunque Meme le había prometido no decir nada a los Guardianes, nunca dijo nada sobre otros espíritus, en especial los compañeros de trabajo de Jack así que cuando Hiccup se acercó al Polo Sur por una ruta que le había indicado Meme y Jack lo vio por poco le da un paro cardiaco… de no ser porque reconoció a su viejo amigo
-¡MEME! Ven que te debo preguntar algo- dijo en voz alta mientras se dirigía al salón principal
El salón principal era una elegante sala con sillones grises y una mesa de centro de madera finamente tallada, un candelabro de arenas doradas contenidas en cristales de hielo que tenían forma de gotas de agua
Tocaron a la puerta y Jack abrió con una sonrisa traviesa
-Hola Hiccup, ¿Cómo estas? ¿Cómo me encontraste?- dijo el albino sorprendido de la inesperada visita que recibía… y que le hizo extrañamente feliz
-Oh, eso, me lo dijo Meme el día que le pregunté dónde estabas, te desapareciste… y aumentaste de peso viejo- dijo Hiccup haciendo notar la barriga de su amigo
-Que chistoso chico dragón, mira que si solo vienes a decirme gordo te sacaré a paradas de aquí y te dejaré afuera congelándote- advirtió juguetón
-Ya, tranquilo Jack, solo bromeaba- dijo Hiccup en un tono medio nervioso
Ambos se rieron y entraron, dejaron que Toothless fuera a un suelo de piedra y la calentó lo suficiente como para no incomodarle, el dragón se durmió un rato, había sido un largo viaje al sitio más frio del universo al que había viajado.
-Dime, ¿Qué hace el espíritu del otoño en el lugar más frio del mundo y el más olvidado por cierto, aparte de visitar a su amigo y compañero de trabajo?- dijo Jack acomodándose en uno de sus sofás de cuero blanco
-Le hago un favor a cierto Guardián que te anda buscando y que no ha perdido la Esperanza de encontrarte- dijo Hiccup
Al primer momento Jack no había captado la indirecta pero cuando relaciono las palabras Guardián y Esperanza en su cabeza, su corazón empezó a latir a mil por hora, si no fuera porque estaba helado el ambiente se hubiera ruborizado al máximo.
-¿Áster?, ¿Buscándome? Viejo no me hagas ese tipo de bromas pesadas- dijo tratando de mantener la calma
-No es broma Jack, el pobre está devastado desde que te fuiste… todos lo estábamos…- dijo con tristeza
-Ahora solo Meme y yo sabemos dónde estás… y seguro que solo Meme sabe porque estás tan panzón- dijo señalando la barriga de Jack que no había dejado de observar desde que había llegado
-Tendré un pequeño milagro, gracias por preguntar antes de decirme gordo- dijo un melodramático Jack para luego carcajearse con la cara de asombro de Hiccup
-¡¿Tendrás un bebe?! ¿De quién?- preguntó Hiccup
-Esa es una historia que me cuesta recordar y contar- dijo Jack algo entristecido
Hiccup observó a Jack un momento y luego le abrazó con ternura, esperando que sirviera de algo, quería darle a entender a Jack que no estaba solo y por Thor que no lo dejaría solo nunca.
Jack, se abrazó a Hiccup y empezó a llorar con fuerza, estaba acongojado y saber que un amigo, aparte de Meme claro está, le apoyaba le hacía sentir feliz, lloró por un largo rato, hasta que se quedó dormido.
-Pobre, ha sufrido tanto en tan poco tiempo, ojalá pudiera ayudarle- dijo Hiccup cargando a Jack a una recámara que estaba cerca y que seguramente era de Jack por el tipo de decoración
Meme, quien había estado presente sin que Jack se hubiera dado cuenta, le sonrió a Hiccup y dejaron descansar al podre espíritu que estaba algo destrozado por dentro, rupturas que ellos arreglarían, con cariño, cuidados y lo más importante, aquello que le faltó siempre a Jack.
AMOR
Notas de la Autora: Hola a todos, bueno esta historia está entrelazada con Pesadillas, aquí veremos que nuevas aventuras tendrá Jack para alcanzar la felicidad que parece alejarse de este, espero les guste y… ¡Nos leemos Pronto!
Por cierto como soy mala les daré una probada de este Fic cada que se me dé la gana
¡Nos vemos y espero muchos comentarios!
