Primer fic serio. No seáis muy duros, pls. Gracias por leer anyway.


Agua. Lo único que se oía en el búnker era agua. Las gotas caían por el cuerpo de Sam mientras este se aclaraba el pelo en su segunda ducha del día, el calor era casi insoportable.

Al salir se enrolló la toalla a la cintura y se contempló en el espejo, la barba de dos días y las ojeras le hacían parecer unos años más mayor de lo que en realidad era, sin embargo, seguía siendo bastante atractivo al ojo femenino. Y al masculino.

Dejo caer la toalla que cubría su desnudez al mismo tiempo que un despistado Kevin abría la puerta sin esperar que iba a encontrar a Sam desnudo, al hombre con el que había estado teniendo sueños últimamente, él mismo que le producía esa rara sensación en el estómago, él que le hacía sonreír por cualquier tontería. Daba igual lo malo que hubiera sido el día, Sam siempre le hacía sentirse bien, feliz como no había estado en mucho tiempo.

-¿¡Kevin!?

-Yo...eh...lo siento Sam, n-no sabía que estabas aquí -dijo al mismo tiempo agachaba la cabeza. Ya notaba la sangre acumulándose en sus mejillas y en la punta de sus orejas. Cerró la puerta y se quedó apoyado en ella, resbaló hasta quedarse sentado en el suelo. Acaba de ver a Sam, su Sam desnudo. Completamente. No solo el torso, como ya había hecho otras veces mientras observaba como hacia ejercicio con la excusa de que él también debería ponerse en forma. Se rio para sí pensando en lo que diría Dean, o cualquiera, si supiesen lo que hacía por las noches con esas imágenes en su cabeza. Lo que haría esta noche, porque ya no tenía que imaginar nada.


Esto en principio iba a ser un one-shot para unos amigos que me lo pidieron, pero ahora quieren que lo continúe, intentaré hacerlo pero de momento se queda en esto.

Gracias por leer y comentar si os gusta.