MIRAGE

Capitulo 1: La historia de un fantasma

Cuando estaba viva, mi nombre fue Maya. Tenía una vida normal. Amigos, familia. Iba a la escuela y mis calificaciones eran desastrosas. Vivía con mi abuela en la orilla del mar, en una cuidad cuyo nombre no recuerdo. Y ahora, así como estoy, lo que mas extraño es la voz de mi abuela todas las mañanas cuando tenía que levantarme.

Pero toda mi vida cambio en un segundo.

Iba camino a mi casa después de visitar a una amiga. Eran las ocho de la noche, y la calle por la que siempre pasaba estaba casi a oscuras. Solo un solitario faro iluminaba mi camino en medio de esa oscuridad agobiante. Escuche pasos detrás de mí. Asustada voltee, era solo un gato. Sus ojos vieron fijamente delante de mí, y cual no seria mi sorpresa al darme cuenta de que había allí un hombre alto. Grite, pero nadie me escucho, su mano cubrió mi boca, mientras me arrastraba hacia un edificio abandonado. Después, ya no recuerdo otra cosa.

Abrí los ojos en medio de un resplandor azul. Un hombre con alas me sostenía por encima de la ciudad. Intente hablar, pero ninguna palabra salía de mi boca.

-Has muerto pequeña- me dijo suavemente.

Desde entonces, viaje por el mundo conocido, atravesando mares y desiertos. En donde me paraba, muchos sufrían, aunque yo intentara ayudar. Algunos niños me veían, y se asustaban. Llenaba sus pesadillas. Hasta que una dulce niña de ocho años me vio, y susurró el que sería mi nombre a partir de entonces

-Mirage- no era más que un espejismo para ella, cerró los ojos y suspiró. Sus alas me cegaron, mientras ella partía hacia la luz, regalándome una sonrisa que llenó de calidez todo mi ser.

Han pasado muchos años desde entonces. Ya nadie me vio de nuevo. Por lo menos eso pensaba, hasta que llegué a un edificio de forma extraña. En una de las habitaciones, la que mas me recordaba a la que tenia cuando estaba viva, estaba un joven dormido. Su piel tenía un extraño color verde, su pecho subía y bajaba conforme a su respiración. Un suspiro escapó de mis labios. Él se despertó. Nos vimos a los ojos. Y asustada, solo escapé.

¿Será posible que el me hubiera visto? No lo sé. Yo lo único que deseo es verlo de nuevo, para poder susurrarle mi nombre e ir a otro lugar, donde no pueda dañar a nadie.

Espero les guste. Y prometo ya no escribir más RaexRob