Disclaimer: Todos los personajes de Resident Evil así como la idea original pertenecen al maestro Sinji Mikami y a CAPCOM, en cuanto a la trama de este FanFic es enteramente de su servidor redactada sin mas fin que el de entretener al público, así que por favor no me demanden.
"Poesía"
Tomo su mano, entrelazando los dedos con los suyos.
Los besos parecían ya no bastar, la necesidad de obtener algo más los orillaba a ser agresivos el uno contra el otro.
No era un juego de posesión, pese a parecerlo, en aquel beso ardiente que los tenia unidos, se daban el tiempo de explorarse, se turnaban, la lengua ajena invadiendo la boca de su amante.
Pronto la ropa comenzó a ser lo que era, un accesorio que ocultaba la verdadera presencia del otro.
Sin dejar esa manía recién adquirida, se ayudaron para alcanzar la desnudez.
Él un campeón griego, su físico parecía labrado por las manos de los mismísimos dioses marcado con las cicatrices de las guerras ganadas, varonil como ninguno.
Ella una musa, la más bella de todas, piel blanca y tersa como la más fina de las sedas, su figura como la más perfecta de las esculturas.
La temperatura había subido, las caricias se desviaron hacia zonas más erógenas y el sonido de los dos amantes era lo único que resonaba en esa habitación de dos por dos.
El tiempo siempre relativo fue testigo de lo que aconteció después, la pelirroja y el rubio se fundieron en un solo ser, sedientos de ese momento desde hace mucho.
Él arremetiendo como un poseso, ella disfrutando de aquel embate que se alojaba en su interior.
Minutos extensos de ese caos, las poses en una suerte de acrobacia, todo con la finalidad de cubrir ese instinto primitivo que radicaba en ellos,
Luego el silencio, la culminación del acto, la sensación de satisfacción exhalada por cada fibra de su piel.
Era mutuo y era suyo, nadie lo merecía más que ellos, ellos provocaban que se volviera poético, que sus arranques carnales fueran traducidos como poesía pura.
Por ello, no se quedaría en el primer asalto, irían por más, al fin y al cabo, el tiempo era relativo, lo tenían para manejarlo a su antojo.
