Fic de:Yatten Katsuya Kaiba

Idea original de: Yatten Katsuya Kaiba

Disclaimer: lo típico, los personajes que salgan no me pertenecen, a excepción de uno, sino de marvel y sus socios. Este fic no tiene ánimos de lucro... porque si fuera así, este estaría mucho mejor redactado...

Aviso: Esta Historia contiene género Yaoi/slash… es decir relación Hombre x Hombre… si eres Homo fóbico / ca no sigas leyendo… no me haré responsable… estás avisado / a

Notas de Autor:En el 15 de febrero del 2005 me atreví a subir por primera vez una de mis historias, era horrible, pésima narración, un trama más que repetido y rosa, pero aún así hubo gente que me leyó y me dio aliento para que siguiera escribiendo, gracias a ellas yo celebro mi hoy mi noveno año subiendo fanfics, gracias a ellas y a ustedes que me leen hoy.

Nombre: Observaba

Ella observaba desde su esquina.

Los observaba combatiendo, con sus trajes de colores llamativos, ceñidos a sus cuerpos, enfrentándose unos a los otros.

El polvo, por lo general, cubría sus rostros, pero ella observaba, observaba cuando ellos creían que nadie veía.

Y cómo los envidiaba.

Ella observaba desde su esquina.

Observaba todo el desplante de poderes, cómo de sus manos salían chispas, volaban cosas, derrumbaban edificios, salían cuchillos.

Los envidiaba porque ella quería ser como ellos.

Especial.

Especial frente a lo ojos de los demás, distinta, poderosa, con poder suficiente como para pasar desapercibida entre la gente.

Y ella observaba.

Observaba cuando no estaban combatiendo, cuando iban de civil entre los normales y aburridos seres humanos creyendo que nadie los notaría, que nadie los observaba.

Ella observaba desde su esquina.

Observaba con más detalle cuando pasaban dos de ellos por su esquina, uno alto y bastante guapo y otro bajo y de aspeto huraño, muy distintos, pero parecidos a la vez.

Los observaba conversar entre ellos, reírse de ellos, pelearse, rozar suavemente sus manos cuando creían que nadie los veía.

Ella los observaba en el campo de batalla, cómo se defendían, cómo prestaban atención al otro sin que se dieran cuenta, como eran los primeros en ir a ayudarse, sin esperar nada más.

Observaba como las cosas explotaban cargadas de un tenue color rosa, cómo sus garras atravesaban todo lo que se interponía en su camino.

Y ella observaba, cómo los días pasaban.

No era la primera vez que dejaban de pasearse.

No era la primera ves que desaparecían.

Y observó cómo un día el más bajo se detuvo en su esquina, hombros caídos, pasos lentos y arrastrados, puños que se apretaban y ojos ligeramente rojos.

Se dio vuelta y la miró, pero sus ojos la atravesaban. Suspiró con pesar y siguió caminando.

Y mientras los días pasaban, las hojas caían, las estaciones cambiaban y el tiempo corría, Ella observaba.

Observaba, como el primer día que lo hizo, esperando a que se pasearan ambos, buscando entre la gente una melena castaña y un negro que, cabello a cabello, se emblanquecía.

.-.

Muchas gracias a todos.

Mito.