Hola que tal. Pues este es mi primer fic, estoy algo impaciente, nunca antes había subido algo, pero honestamente leer varios fics, me animaron.
Y bueno también influyo el ánimo que me otorgo "talassan".
Ahora una introducción rápida: Rick junto con sus dos mejores amigos (adictos al sexo), se encaminan a la tradición anual, de la gran fiesta en el hotel Ibiza Ushuaïa. Rick no sabe pero está a punto de cambiar su forma de ser, y quien sabe, quizá volver a ser el chico que un día fue.
Cabe mencionar que es un AU, especialmente por las personalidades de los personajes, las cuales se darán cuenta son sumamente diferentes. Y es que como dijo una vez la escritora "ButtonUpKitten", cambiar su personalidad, jugar con los personajes le da la diversión a esto. Así que gracias Juno, porque aunque no lo sepas, me ayudaron tus palabras.
También muchas gracias a mi "KB" personal. KB, si lees esto; gracias, sin ti no me animaría a hacer estas locuras. Gracias por darte un tiempo en leer, y dejar una pequeña huella cuando corriges ; )
Al usuario "F", tu sabes a que me refiero jajaja xD
Y a mi amiga "Jess TELLOBO", quien me ha servido de musa, en estas locuras que llegan a mi cabeza. Te agradezco amiga, por prestarme dos de tus personajes, así como sus personalidades y su voz. Y ayudarme a darles vida.
Una ultima cosa, esta historia tiene contenido para adultos, así como lenguaje que podría ser ofensivo para algunas personas. Mi intención no es la de ofender, solo soy una novata en la escritura.
Es clasificación "M", si eres menor de edad, lee bajo tu responsabilidad. Tengan mente abierta, y comiencen a leer…
DECLAMIER: Ningun personaje es mio, son de A. Marlowe y ABC
Los personajes "Johnny y Billy" son de "JessTELLOBO"
xXxXx
CHAPTER I
Who's That Girl?
"And this is how it starts…
But she's got a boyfriend anyway"
Sex - The 1975
El molesto y nada simpático sol, se asomó muy sutilmente entre las cortinas de aquella obscura pero cálida habitación. Los impertinentes rayos se colaron rápidamente a través de ese no tan pequeño hueco, que las muy humildes cortinas intentaban cubrir casi al completo. En una de esas, el rayo choco estrepitosamente en la cara relajada de un joven de no más de veinte.
Produciéndole a su vez, esa sensación de fastidio. Incomodándolo al completo.
-Mierda… -Susurro molesto, tapando ese penetrante haz de luz. Intento inútilmente de ese travieso rayo que solo buscaba jugar con los nervios del joven; esconderse con la cara en la almohada, pero como se imagino fue inútil y la única manera que veía era cerrar por completo la cortina. Masajeo suavemente sus ojos con la yema de los dedos, mientras con un gran esfuerzo se levantaba. Importándole un comino despertar a su acompañante, que hasta ese momento ni se había fijado en su presencia.
Camino a paso lento, sin prisa alguna. Al menos, no aún. Rasco distraídamente su cabeza, sin poder evitar soltar un gran bostezo. Y sin más se metió en aquel modesto baño. Necesitaba una ducha urgente, y más al comprobar que su cabello tenía una sustancia medio sospechosa. Sí que la chica de anoche se había puesto juguetona.
Tan solo era una más. Una más con la cual pasársela bien. Y es que su vida era tan patética, que solo buscaba sexo sin compromiso, mientras el dinero de su beca no se terminara aun. Viviendo de caridades, de fiesta en fiesta. Con la única preocupación de si se había acabado el alcohol.
Se metió en la regadera, dejando que el agua caliente le hiciera relajarse, y quien sabe, quizá tomar una decisión importante como cada mañana. Una decisión que cambiara el rumbo tan patético de su vida.
Pero luego recordó con cierta emoción la fecha que era. Hoy iniciaba la fiesta anual de Armin Van Buuren. Aquella increíble fecha donde el famoso Dj, se tomaba el tiempo de tocar en ese increíble, lujoso y nada barato hotel de España.
Desde que tenía 17, él y sus mejores amigos, tomaban su vieja Van negra emprendiendo el rumbo a una nueva aventura. Pasando una semana entera "libres". Sin ataduras, bebiendo, fumando, y disfrutando de la juventud.
Si, debía de ser positivo. Porque había algo nuevo. Sentía que ese día las cosas cambiarían. Quizá, y podría ser afortunado, y conocer a un par de chicas dispuestas a hacer un trio con él; o encontrar los "dulces" perfectos y baratos para el primer espectáculo de la semana. Quien sabe, pero sea lo que sea Rick Rodgers estaba listo. Algo increíblemente extraordinario se acercaba a pasos agigantados. Podía sentirlo…
Salió de la ducha, mirando su reflejo en el espejo. Lucia cansado. Quizá un par de píldoras lo reanimarían. En cuanto viera a Johnny se las pediría.
Se fijó en su pecho. No era del tipo delgado y escuálido; era más bien fornido. Tampoco es que fuera un "musculitos" pero si tenía lo suyo. Toco delicadamente su barba insipiente, tratando de decidir. Si afeitarla o no.
Y por fin, después de una ligera afeitada, salió del baño de ese sucio hotel. Vistiéndose rápidamente, antes de que la chica, cuyo nombre no recordaba y ni le interesaba; despertara. Y así, mientras se ponía la camisa, la observo. Era rubia, de piel pálida, delgada y bastante bonita. Una niñata. Como la mayoría de las chicas que van a ese tipo de eventos, con el único fin de "rebelarse" a la dinastía impartida por sus padres. Niñatas forradas en dinero.
Negó con la cabeza. Era increíble como a pesar de detestarlas tanto, aun así eran las primeras con las que se iba para pasar el rato. Definitivamente, se había vuelto una mierda de persona. Pero que podía hacer. La vida lo había tratado mal, y ni modo de cruzar los brazos y esperar el siguiente golpe. No, él tenía que seguir adelante. Vivir. Ser feliz.
Salió de la habitación a paso lento, sacando de sus viejos jeans la cajetilla con solo dos cigarros. Maldición, tendría que comprar más, y con lo caros que son. Lo encendió lentamente, disfrutando de ese increíble momento, en cuanto el fuego penetra la punta del cigarro, pidiéndole a gritos las primeras caladas, para así comenzar la desintegración.
Y así, entre calada y calada, salió del edificio, dirigiéndose a la parte trasera, con la esperanza de encontrar la van ahí. Aunque dudaba que estuviera,
Y mientras pensaba en la increíble noche que se avecinaba, la vio.
La vio a través de la maya metálica, de esa estorbosa cerca. Ahí estaba. Había un grupo de chicas, reunidas en una piscina. Nadando, divirtiéndose, asoleándose. Y de entre toda esa belleza femenina, su vista solo capto la atención de una chica de cabello castaño. Quien con el cabello húmedo, sentada en el borde de la piscina, tomaba relajadamente el sol.
Se recargo, observándola lo más cerca que esa maya le permitió. Pasando descaradamente su mirada por todo su cuerpo una y otra vez. La chica sumida en sus pensamientos, no se percató de la presencia de aquel mirón. Al menos, no hasta que una de sus amigas le advirtió de la presencia del chico.
Y fue en ese instante, en el que sus ojos hicieron contacto. En cuanto vio aquella hermosa mirada, esos ojos que con el sol lucían miel, pero con un poco de sombra parecían verdes. Fue cuando estuvo seguro de algo. Esa chica, tenía que ser suya.
La chica le sonrió sensualmente, provocándolo, incitándolo a ir por ella… y de no haber sido por el sonido constante de su teléfono, ya estaría en ese preciso instante devorando su boca.
-Que quieres Billy!? Estaba en medio de algo muy importante. –Dijo con fastidio.
-Hey Ricky, tienes que venir de inmediato al hotel… no sabes lo que acabo de conseguir… algo que te dejara alucinado…
-Ah sí? Y que es…
-Tienes que venir idiota.
-Bien, voy para haya… y espero que sea bueno o la interrupción no habrá valido la pena… -Colgó rápidamente, volteando con la única intención de mirar a la chica, pero se llevó una gran decepción al no encontrarla más en la piscina. En realidad su "amiga" tampoco estaba, solo estaban un par de chicos.
-Ja! Maldito Williams, perdí al bombón por tu culpa. Espero que eso que me mostraras valga la pena. –Dijo en voz alta. Y así dándole las ultimas caladas a su cigarrillo, salió rumbo al hotel de lujo, que había pagado Billy, cortesía de su adinerado y afligido padre. En realidad el hotel no estaba muy lejos del hotelucho de mala muerte. Lo que había llenado su cabeza de varias ideas, para volver a "encontrarse" a la chica sexy de la piscina, y poder tenerla.
En cuanto llego a la recepción del hotel, el tipo trajeado de la entrada, lo escaneo varias veces, y negó con la cabeza. Rick solo pudo negar con la cabeza; reprimiendo las ganas de enseñarle el dedo corazón. Como detestaba a la gente que solo juzgaba por la apariencia. Le sonrió con burla, mientras llegaba el elevador, el cual lo dejaría en la décima planta, donde se alojaban…
-Mierda! –exclamo mientras se maldecía una y otra vez. Pues una vez más, había olvidado la llave del cuarto, en su habitación. Toco con desgana la puerta, esperando que alguno de los chicos estuviera.
-Hey! Otra vez se te olvido la llave, verdad nenita? –Exclamo Johnny con sorna, mientras mascaba algo una y otra vez.
-Cállate imbécil! Mejor dime donde esta William…
-Está solo en su habitación, supongo que haciéndose una buena…
-Eres un idiota… ¡Hey William, ya estoy aquí… muéstrame eso tan importante!
-Hey Ricky! –Salió un Billy despeinado, y sin camisa. –Ven aquí amigo. Tengo algo increíble que mostrarte para esta noche… tú también Johnny Boo… -El chico rodo los ojos, dejando el plato de cereal en la mesa de centro.
-Como sabrán, hoy iniciamos la gran fiesta. Hoy empieza la semana de éxtasis.
-Si, ya ve al grano imbécil. –Menciono Johnny, con fastidio, provocando una sonrisa en Rick.
-Bueno, como recordaran, el año pasado tuvimos grandes dificultades con el tema de la suit, y las habitaciones disponibles para cuando tuviéramos compañía.
-Uff como olvidar a este imbécil desnudo en mi cama, e intentando follar con mi "amiga".
-Hey!, ya te pedí disculpas Ricky. Además cuantas veces te tengo que decir que me equivoque de habitación, y confundí a tu chica con la mía.
-Pues no lo sé pedazo de mierda… será que no me trago eso… siempre te quieres follar a las chicas que yo me follo.
-Eso no es verdad. Solo en una enorme coincidencia que después de que te las follaste, yo me las ligue y quieran estar conmigo…
-Si, ya… claro
-Basta idiotas. Sea como sea. El punto aquí, es que ya tengo una solución… ayer mientras ustedes andaban de calientes, hablé por teléfono con mi padre. Le invente que en el curso están pidiendo fondos para unos materiales, y adivinen quien me acaba de depositar una suma generosa de dinero…
-Tu madre…
-No seas imbécil Johnny… -Rick cerro los ojos con fastidio. –obvio que mi padre… pero para que dialogo contigo, si ya sabemos que el único cerebro que tienes es el de tus pantalones…
-No te pases William.
-Ok, ya chicos…
-Bueno, el punto es que acabo de hablar a recepción y reserve una habitación extra… de hecho es de las mejores habitaciones de este hotel. Es perfecta…
-O sea que habrá una habitación extra para los ligues…
-Más o menos… digamos que esta habitación solo la usara uno de nosotros ya sea por noche o por horas. Así no habrá inconveniente alguno, y no se repetirá lo del año pasado…
-Bien, eso suena genial… pero debemos poner horarios… porque conociendo al gilipollas este, seguro querrá usarla a cada rato…
-Bien que les parece esto… como tu Johnny eres el primero en llevarte a alguien a la cama siempre, tú la usaras primero. Terminas tus cosas y le pides a Lucy que limpie la habitación…
-Lucy? –Dice Rick con la ceja alzada.
-Digamos que le coquetee un poco, y acabe convenciéndola de que limpiara la habitación tres veces por noche… con propina y todo.
-Oh William eres un sucio!
-Bueno, uno tiene que hacer lo necesario para que el trípode se divierta no?
-Bien dicho hermano- Johnny
-En fin, después la uso yo, y al último tu Ricky…
-¿Por qué Ricky al último?
-Fácil, porque Ricky le gusta más divertirse un poco, bailar, reír, oir la música, mientras se liga a alguien… el disfruta más el juego previo…
-Buen punto. Pero y si quiero estar con mas de una chica por noche…
-Dios, si que eres una zorra Jonathan. Pues si ese es el caso las traes aquí, bueno no a mi habitación eh, a la tuya.
-Ya entendí, no soy tan imbécil…
-Déjame dudarlo…
-Ok Billy, esa idea me agrada. Y supongo que cada quien tendrá su propia llave no?
-solo espero que no la olvides como siempre…- se burló Johnny.
-Y ya empiezas a joder al prójimo.
xXxXx
Ya en la tarde, los chicos se prepararon, para la que según ellos, sería la mejor fiesta de la historia.
Rick salió, de la habitación con cara de impaciencia, llevaban esperando más de dos horas a Billy, este nada mas no se dignaba a aparecer.
Se suponía que la tradición de ellos, en esta fiesta era el de llegar juntos. Escanear la zona, pedirse unos tragos, e ir de cacería. Pero no, su amigo Billy tena que arruinar todo.
De pronto la puerta se abrió, apareciendo un relajado Johnny, con un trago en la mano.
-Donde estabas imbécil?
-Pues como no estaba Billy, salí a buscarlo. Y en el camino me entretuve un poco.
-Bien, como sea… ese imbécil donde estará…
-Una de las chicas del hotel, me dijo que por eso de las cinco se pidió un taxi para que lo llevara a no sé qué tienda.
-Rayos! Te lo juro Johnny, que como ese idiota cabeza roja me arruine la apertura, yo mismo me encargo que no pueda follar durante dos días…
-Y relájate Richard. Aquí estoy… pareces nena.
-Donde estabas?
-Fui por dulces… Lucy me recomendó unos vendedores muy buenos, y fui por ellos. A caso no quieres estar divertidito esta noche.
-Bueno, al menos traes dulces… que trajiste? –Billy sonrió. Conocía demasiado bien a su mejor amigo. Dejo la bosa en la mesa de centro, comenzando a sacra su contenido, ante la atenta mirada de Johnny y Ricky.
-Ya sabes, lo usual… éxtasis, hierba, crack, coca… -Johnny sonrió. –Tu favorita Ricky, el ácido… bastante nicotina… -Saco varias cajetillas de cigarros.
-Dime por favor, que trajiste mi tabaco… -Johnny, era de los que mascaban tabaco, con la excusa de que estaba dejando de fumar.
-Si, también tu tabaco… -Dijo con fastidio. –Y por último, unas pastillitas, que según el tipo que me vendió todo, esto nos hará enloquecer. –Saco una bosa con unas cuantas pastillas verde oliva.
-Qué carajo es eso?
-No lo sé, pero dijo que son lo mejor en este tipo de fiestas.
-Olvídalo, yo no le entro a eso. William, ni siquiera sabes que es…
-No seas nena Richard. Siempre le has entrado a todo.
-Si, pero no jodas. Nunca nos hemos metido eso, que tal que es mas peligroso…
-Que nena te ves Richard. –Dijo Johnny con fastidio.
-Pues no consumo eso y punto…
-Te falta Richard…
-Ya chicos, si Ricky no quiere, pues haya él, Johnny. No lo obligaremos a que lo consuma…
-Gracias Billy.
-Pero si eres una nena…
-Estúpido William… mejor ya vámonos… -Tomaron un poco de todo, y salieron rumbo al evento.
Los tres amigos caminaban a paso lento, mezclándose entre la multitud, quienes ya se encontraban disfrutando de la fiesta.
-Bien chicos, propongo un brindis, por otro año de esta maravillosa fiesta, que el buen amigo Armin ofrece…
-Si, también porque el trípode nunca se separe…
-Bien dicho… -Los chicos bebieron de sus cervezas, mientras Billy sacaba una pastilla para cada quien… -Aquí tienen… no son las pastillas verdes Ricky. Es éxtasis…
-Ok… -Sonrió Rick, mientras se tomaba la pastilla, dándole mas tarde un trago a su cerveza.
-Sabes Ricky, no se porque últimamente te estas poniendo de nena. Desde que Kyra te dejo te habías vuelto un tipo amargado, de no haber sido por nosotros estarías de abuelito en tu casa.
-¿Qué? Eso no es verdad.
-Por primera vez, Johnny tiene razón. De no haber sido por nosotros, jamás te hubieras animado a salir, a tener sexo… te hubieras quedado como imbécil, esperando que Kyra volviera y te dijera que te ama… es estúpido, ella nunca te amo. Solo la pasaba bien contigo… además a Kyra le van mejor el tipo de chicos que son riquillos y con familias de clase social alta. No el tipo de chico con una beca, y sueños de volverse cantante de rock…
-Creo que tienes razón… si la quería, pero a la mierda Kyra, y su estúpida familia con "Clase"… soy más feliz ahora, teniendo sexo cada noche… y saben que, ella ni era buena en la cama.
-Así se habla Ricky… -Dijo un eufórico Johnny. Mientras que Rick sonreía con lo que su madre diría, era la sonrisa mas falsa que hubiera visto en años.
Y es que a quien podría engañar. Era una mierda de persona, pero se sentía tan bien. Aunque claro, si Kyra jamás se hubiera ido, y lo hubiera dejado por mandato de sus padres, el ahora seria el hombre mas feliz del mundo. Pero no, ella se había ido, llevándose con ella a aquel Rick con sueños y esperanzas. Dejando en su lugar a este mujeriego, que lo único que le importa es pasar un buen rato en la cama de alguna chica sexy.
-Huy… ya encontré mi presa… -dijo Johnny, mirando embelesado un punto entre la gente. –Rick de inmediato salió de su transe, sonriendo. Ya se le hacía raro que llevaran casi una hora ahí, y Johnny no le haya puesto el ojo a alguna chica…
-Quien? –Pregunto curioso Billy.
-Ahí, al lado de esa rubia y castaña.
-Imbécil, son dos castañas…
-Bueno, la que quiero es a la castaña de piernas bonitas… la alta…
-Oh ya vi quien, mmm está linda… si te digo que lo único malo contigo es tu cerebro… -Rick sonrió, mientras volteaba a ver la "presa" de su amigo. Quedándose sin hablar, al mirar de quien se trataba… donde miraban sus amigos, era un grupito compuesto por tres chicas y un chico. Donde se encontraba nada mas y nada menos que la chica de la piscina.
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Espero y les haya gustado… espero sus comentarios… xD
