Este es un songfic basado en la canción "Jueves" de la Oreja de Van Gogh.
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Jueves
Quizás si él si no fuera tan extravagante, él podría hacerlo. Las personas frecuentemente hablando de como su personalidad y apariencias eran inapropiadas y, para Mikaela, eso nunca fue importante antes de conocerla. Desde que la vio por primera vez en el supermercado, no podía evitar preguntarse quién era ella para hacerlo sentir inseguro.
Por días, Mikaela la ha encontrado en el mismo pasillo a la misma hora. Una rutina que él no podía recordar cuando comenzó pero la idea de verla de nuevo al día siguiente era suficiente para cambiarle el humor. Ellos nunca han hablado y aun así podía sentir que la conocía solo por verla interactuando con otras personas en el supermercado.
Ella poseía una actitud sarcástica a la cual él podía relacionarse. Ella no ponía mucha emoción en sus palabras y disfrutaba burlándose de otros en cada oportunidad que tenía. Se enojaba fácilmente con personas que hablaban sobre su estatura hasta el punto de demostrar que a pesar de su apariencia era capaz de derribar personas que lucían más fuertes que ella.
Cada vez que sus ojos se encontraban, incluso si era por un breve momento, él se congelaba siendo que su respiración se detenía y cerraba sus ojos esperando hasta que ella desviara su mirada. Él solo quería golpear su cabeza por ser incapaz de hablarle.
Y entonces, un jueves cuando la vio de nuevo en el pasillo de comida para microondas, sucedió. Estaba cansado de ser tímido cuando eso nunca fue una de sus características y dijo su nombre. Mentalmente decidió preocuparse sobre cómo justificar que él conocía su nombre por escuchar la conversación telefónica que ella había tenido ayer.
La forma como ella lo miró hizo que perdiera toda su confianza y Mikaela asumió que Shinoa estaba estudiándolo en los segundos más largo de su vida. después de eso, ella caminó hasta colocarse a su lado con esa sonrisa que solo ha visto en ella.
– Realmente te tomaste tu tiempo – Dijo con confianza y colocando sus manos en su espalda – Había pensado que sería quien empezara esta conversación.
– Entonces, ¿por qué no lo hiciste? – Preguntó Mikaela ocultando sus manos en sus bolsillos, tratando de ganar tiempo para aclarar su mente. – Tuviste una semana completa.
– Porque yo no quería ser quien hiciera todo el trabajo – Respondió ella con esa sonrisa en sus voz que usa cuando está bromeando – ¿Acaso no es suficiente que haya estado viniendo a este supermercado solo para verte cuando podía haber elegido ir al que está más cerca de mi casa? ¿Qué clase de acosador eres para no saberlo?
Mikaela no esperaba que hiciera esa declaración y rió sintiéndose que todas sus preocupaciones fueron para nada. Ella quería conocerlo, ella estaba bromeando sobre sus "reuniones".
– Además de esta forma fue más divertido – Continuó – Siempre lucías como si iba a golpearte cuando intentaba decirte algo.
– En realidad, yo pensaba que ibas a matarme si te distraía – Replicó con una falsa expresión de miedo, finalmente sintiéndose como él mismo y siendo capaz de regresar sus bromas – y no podía dejar que eso pasar. Puede que no lo parezca pero soy una persona muy importante.
Una vez ellos iniciaron, no querían detenerse… pero entonces, las luces se apagaron mientras el edificio temblaba.
Lo último que hicieron fue juntar sus manos antes de que las paredes cayeran sobre ellos.
