Nota del Autor: Para el entendimiento del siguiente one-shot es conveniente leer la letra (y escuchar también) de la canción Un Hombre Secreto de Myriam Hernandez.
Disclaimer: Ni Sailor Moon ni la canción antes mencionada me pertenecen.
La decepción, la soledad y cierto dejo de depresión la invadían día y noche. Darien había logrado despojarla de toda su luz, su felicidad había quedado marchita por la actitud y acción del que ahora era su esposo y padre de la pequeña hija de cinco años que habían tenido en su momento de alegría matrimonial.
Y tratando de buscar una escapatoria a este abismo en el que se había convertido su vida, decidió que entre ellos dos debería haber algo que la separara de aquél que se llevaba la calidez de la alegría, que separara el amor del desamor: él… ese que la haría feliz, con quien podría rencontrarse y ser la que era antes.
Entonces lo encontró… Seiya.
Desde ese entonces que gritaba su nombre por las noches, dormía en su cama y le daba el amor que ya no recibía de su esposo, siendo infiel al que alguna vez amó. Aquel hombre ahora ocupaba una parte de su corazón y todos sus pensamientos.
Así vivió por un tiempo, queriendo a ese escape que la hacía dichosa.
Para ella, él era un hombre secreto… pero para Darien, Seiya era un amante inexistente, un grito del corazón de su esposa que sólo existía en su mente: él se prestaba en cuerpo y alma para que Serena soñara con aquél que la adoraba.