No soy dueña de Tinkerbell ni ninguno personajes que aparezca en las película, libro o estén relacionada con ella , son propiedad de Disney. Solo hice la historia.
Esta es una historia sobre Fawn el hada de los animales y también mi hada favorita. Este es mi primer fic con capítulos, espero que les guste.
Capítulo 1: Fawn ya está cansada
Era el día antes de que empezar la primavera, todas las hadas estaban terminando de hacer sus tareas para que estuviera todo listo. Fawn ya había terminado su trabajos hacía rato, se encontraba acostada sobre la rama de un árbol mirando las nubes del atardecer, no tenía otra cosa que hacer.
"Quizás las chicas ya han terminado" pensó el hada. Se paró y emprendió vuelo hacia donde estaban sus amigas para pasar el tiempo.
Primero fue a ver a Silvermist, quien de lo lejos parecía desesperada yendo de un lado al otro por el agua. Fawn aterrizo con suavidad en la orilla del lago rodeado de unos enormes pastizales.
Fawn: Oye Silv…- no pudo terminar, el hada del agua hablo antes que ella pudiera continuar.
Silvermist: ¿Has visto un renacuajo?-pregunto casi a los gritos, haciendo que su amiga pusiera cara de susto.
Fawn: N-no- tenía el rostro de Silvermist pegado al suyo.
Silvermist: uiii- se llevó las manos a la cabeza- tengo que encontrarlo- volvió a volar por todas partes.
Fawn se rasco la frente con el dedo
Fawn: ¿Quieres que te ayude?
Silvermist: No no, yo puedo sola no quiero alterarme… ¿No estoy alterada verdad?
No sabía que responder.
Fawn: No… no lo estás- dijo con un tono poco irónico- sabes, acabo de recordar que tenía algo que hacer, adiós.
Silvermist: Adiós- dijo sin mirarla.
Fawn se alejó lo más rápido que pudo para no tener que poner más nerviosa a Silvermist, desde el cielo pudo notar que el renacuajo que estaba buscando estaba detrás de ella a unos poco metros. No tenía sentido volver, sabía que cuando Silvermist estaba de esa manera era porque le faltaban varias cosas que atender, así que voló hacia donde estaba Iridessa pero tampoco tuvo tanta suerte porque cuando llego le dijo que tenía que ayudar a sus compañeras de la luz a fabricar unas arcoíris. Por ultimo probó con sus amigas Tinkerbell y Rosetta, también le dijeron que no, Tink porque tenía que arreglar algunas cosas en el taller y Rosetta tenía que terminar de juntar unas semillas para plantar flores en tierra firme.
Ya después de sus últimas respuestas se cansó y volvió a tirarse al piso. Últimamente pasaba lo mismo, sus amigas ya no tenían tiempo de nada, ni siquiera de sentarse hablar. Estaba cansada de todo eso quería, por unos minutos, hacer algo con alguien. Cuando comenzó a oscurecer regreso a su casa, no tenía hambre así que simplemente se fue a su cama a dormir.
Aquí termina el primer capítulo espero que hayan podido entenderlo, ya que mi redacción no suele ser muy buena. Voy a escribir el siguiente capítulo luego, espero que haya sido de su agrado, aunque todavía faltan cosas en esta historia. Gracias por leer.