Título: La excepción.
Fandom: Twilight.
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, la trama sí.
Claim: Edward&Ángela.
Rated: K+
Advertencias: Nada, nadita.
Summary: Porque siempre hay alguna persona en la que las reglas no se aplican.
Notas: Participa en el reto Palabras para el recuerdo, del foro lol, (Palabra clave: Leer).
La excepción.
Edward se cansaba con facilidad de escuchar los pensamientos de todos en la cafetería. Los humanos son predecibles, tontos, egoístas, todo aquello que él odiaba. Era asfixiante tener que aguantar cosas que no le gustaban, pensamientos lujuriosos hacia Rose y Alice (algunos eran, por decirlo de alguna manera, demasiado explícitos). Le agobiaba ir a su casa y estar rodeado de pensamientos amorosos, apasionados y llenos de detalles que nunca quiso saber.
Su don podría ser muy útil y envidiado, pero él lo detestaba la mayoría de las veces. Que tu cabeza sea invadida por las cosas más extrañas e inimaginables no es algo de envidiar, piensa Edward. Muchas veces añoraba esos días en los que no sabía todo lo que pasaba por las mentes de las personas; mejor vivir en la ignorancia.
«Jessica luce cansada, ¿me pregunto que habrá ocurrido? Espero esté bien…» son cosas que pasan por la mente de ella (mucho más agradables que los «Luce horrible, parece un cadáver» que Miranda lanza cuando la ve). Le encanta la manera que Ángela tiene de pensar, tan gentil y dulce; ella es una especie de bote entre la marea de pensamientos egocéntricos.
Además, los pensamientos de ella son hermosos; llenos de sensaciones y colores, inclusive entretenidos. Cuando ella mira a Ben, no piensa en un «Lo amo» (tan simple, casi sin sentimiento), ella piensa en el cielo y el Sol, piensa en ángeles y en Dios, en la felicidad, el cariño, el amor, las flores y los detalles. La percepción de Ángela está llena de imágenes, no sólo palabras, y eso es algo refrescante.
Edward odia leer las mentes de las demás personas, Ángela Weber es la excepción.