Disclaimer: la presente historia se basa en caracteres creados por J.K. Rowling, que yo tomo prestados para divertirme un poco jiji y con la esperanza de divertirlos a ustedes.

Este es una nueva historia que se me ocurrió de repente, espero sus reviews con sus opiniones.

Prólogo

Después de que la guerra terminara, Hermione se paró un momento a hacer el recuento de daños, vio a los Weasley al lado del cadaver de Fred, a Harry abrazando a Ginny, continuo mirando la escena y entonces vio a Malfoy con sus padres, Lucius parecía enojado, entonces vio como el chico tomaba su varita y la partía por la mitad, los aurores se aceraron a ellos y los apresaron, Hermione estaba paralizada, ante la acción Draco se dio cuenta de que en verdad la magia creaba más problemas de los que resolvía, en ese momento decidió abandonar la magia, ser muggle totalmente, camino sigilosamente hacia Hogsmeade para que nadie notara su huida, al llegar se desapareció y llegó a Londres, tomó su dinero de la camara de Gringosts, lo cambio por dinero muggle y cuando estaba a punto de llegar al mundo muggle le llegó el patronus de Harry

-Hermione, ¿dónde estás?,¿Todo bien?,¿Necesitas ayuda?¿Te desapareciste y no sabemos donde estas?.

Respondió con su nutria. "Estoy bien, tengo que ir por mis padres a Australia", no agregó nada más, era una fugitiva, fue al aeropuerto y tomó un muy muggle avión, no quería volver a utilizar su varita, aunque no la destruiría, uno nunca sabe si se puede necesitar, además primero debía quitar el encantamiento a sus padres.

Llegó a Australia, le parecía un buen lugar para quedarse a vivir, tal vez sólo recuperaría a sus padres y se establecería en ese lugar y serí una total muggle, sintiendo como la magia corría por sus venas, pero pronto todo eso pasaría, la decisión era drástica, pero en los siete años de contacto con la magia sólo la había usado para defenderse, el lema parecía ser correr o morir, deseaba alejarse de todo eso por un tiempo, quiza después lo pensara mejor y retomara la hechicería, pero hoy estaba determinada a olvidarla por siempre.


Mientras esto pasaba en Inglaterra se organizaban los juicios en contra de los mortífagos, Harry atestiguo en favor de Narcissa, quien sólo tuvo que pagar una suma considerable de dinero, Lucius Malfoy no había corrido con tanta suerte, su estancia en Azkaban, si lo resistía era de cincuenta años, en cuanto a Draco, al ver que destruyó su varita, la estancia en Azkaban sería de sólo seis meses y después podía abandonar el país, con la condición de no usar su varita más que en caso de emergencia, todos los hechizos realizados por su varita serían revisados mensualmente.


Este es tan sólo el prólogo, espero que le agrade. Mucha suerte para tods ls que están en exámenes.