Todo empezó normal en el campamento, ya habían pasado meses desde que vencimos a Gea y salvamos al mundo otra vez.
Estábamos en el comedor del campamento, yo miraba a Annabeth mientras se acercaba a su mesa con sus hermanos, cada vez estaba más hermosa y no solo lo digo porque sea mi novia, pero había notado la mirada de varios de los nuevos campistas sobre ella, cada vez que notaba que alguien la miraba sentía la necesidad de colocarle un brazo encima y darle al que la mirara una mirada asesina.
La vi ordenar a sus hermanos hacer fila para ir por su desayuno, su cabaña siempre era la mas ordenada pero a la hora de las comidas los campistas de Atenea se descontrolaban un poco. todos estaban ansiosos de regresar a su cabaña y continuar con sus proyectos.
En sus orejas se veía el brillo de los pendientes que su padre le había regalado para reponer los que había perdido en el tártaro estos eran más grandes y los ojos de las lechuzas tenían dos enormes diamantes cada uno, el padre de Annabeth tuvo la misma idea que yo, con mis ahorros (que no eran muchos) le compré a mi novia unos pendientes de lechuza pero mucho más pequeños y menos costosos que los que su padre le había dado, me sentí muy mal cuando se los di y noté los que ya tenía puestos. Ella me aseguró que eran hermosos e incluso se perforó las orejas de nuevo y ahora lucia los cuatro pendientes.
No noté que alguien intentaba llamar mi atención mientras la miraba hasta que sentí un empujón que me tiró del banco en el que estaba sentado...era Tyson. Varios campistas rieron mientras me levantaba, esperaba que Annabeth no lo hubiera notado pero fue demasiado tarde porque Tyson se encargó de que todo el campamento se diera cuenta cuando gritó
-¡Percy estas babeando por Annie tuve que tirarte!
Sentí mi cara enrojecer al máximo cuando todos comenzaron a reír en especial los hermanos de Annabeth y los campistas de Afrodita mientras Tyson me levantaba como a un bebé y me dejaba en el banco de nuestra mesa.
Por suerte mi vergüenza paso rápido porque Quirón anunció
-Héroes terminen sus desayunos rápido debemos prepararnos para recibir a nuestros invitados-
Y es que los romanos estaban por llegar, después de la guerra ambos campamentos habían llegado a un acuerdo harían visitas para que los campistas conocieran ambos territorios y estilos de vida.
La primera seria de los romanos al campamento mestizo, además extrañaba mucho a mis amigos Frank, Hazel y Jason. Incluso a Reyna un poco y a mi antigua cohorte.
Terminé mis waffles azules y corrí con todos los demás hacia el lago cuando escuchamos un cuerno sonar. Habían llegado.
