Un nuevo fic, esta ves es UA (Universo Alternativo) en el que K´ es un vampiro, jeje. Bien como podrán darse cuenta es el quien narra la historia y este capitulo es algo asi como una introducción.

Espero que les guste, será mas corto que el anterior, cuando mucho 3 o 4 capitulos.

Rojo Carmesí

Cap.1 Pasado y presente

Pobres tontos humanos. ¿Importa acaso quien soy? ¿De donde vengo?

A ellos eso no les importa en lo mas mínimo. Soy lo que soy pero ellos nunca lo notaran.

¿Qué que soy? Bien, esa es una pregunta que nunca contesto. No es necesario por que aunque lo dijera no me lo creerían. Pobres tontos humanos. Tienen tanto miedo de lo que no pueden entender. Un solo cambio hace que entren en pánico. Es tan patético.

Hay unos cuantos que (perdón si me desvío un poco del tema, creo que estoy divagando) unos cuantos que se creen parte de nosotros.

Se nombran a si mismos incomprendidos, criaturas de las sombras, pero eso es algo que nunca podrían entender. Solo quieren llamar la atención.

¿Qué soy yo? Volverán a preguntárselo, una y otra vez, ¿no? Bien, se los diré.

Jamás quise ser lo que soy ahora. Jamás quise que pasara lo que paso pero…oscuridad…tristeza…mi vida ya no me importaba para nada. Recorría la ciudad a la media noche. Sobra decir que estaba vacía, y yo me sentía mejor. Mientras mas solo estuviera, mejor me sentía. Pero al decir mejor, no quiero decir que me sintiera bien.

Cuando me di cuenta de que estaba solo me puse a gritar. Grite como nunca, sacando mi frustración y mi rabia. Sentí que alguien me seguía. Fuera quien fuera, si tratara de hacerme daño, no lo lograría. Yo era el mejor de todos los peleadores de mi ciudad. Aunque, quien sabe, si me hubieran atacado en ese momento, tal vez hubiera dejado que me mataran.

Bueno, pues no recuerdo bien lo que pasó. Solo un fuerte dolor…un color rojizo y mi vista nublándose. Cuando desperté, el dolor seguía pero ya no era tan fuerte. ¿quieren saber que mas paso? Pues digamos que estaba en una casa muy lujosa, pero que yo nunca antes había visto…me acerque al espejo…y no pude verme.

Quien me convirtió fue un vampiro que tenia apariencia de un hombre de unos treinta años. Decía que necesitaba un aliado, y ¿Quién mejor que yo, un joven inteligente, fuerte y valiente?

Me sometí a sus ordenes, pero guardaba algo de furia en mi interior. Yo no quería ser un vampiro, me parecía peor que la misma muerta. Me entreno y aprendí todo lo que necesitaba.

Un día me entere de que había matado a toda mi familia, para que no intentaran buscarme. No le reproché nada. Seguí fingiendo conformidad. Mi hermana seguía viva y para mi eso era más que suficiente, al menos por ese momento. Pero cuando trate de ir a verla, la encontré muerta, tendida en un sillón, en su casa. Tenia una foto mía entre sus manos.

Esa noche volví a la mansión, y lo maté. ¿Cómo matar a un vampiro? Se puede, créanme, el vampiro muerto pude ser yo esa noche. Pero lo supere en fuerza y en habilidad. Desde entonces me gane muchos enemigos. Pero con el paso del tiempo extermine a los que estaban mas cerca y podría decirse que esta zona es mía. Tan cerca de la ciudad, tan cerca de los humanos.

De esto ya han pasado por lo menos veinte años. Sigo teniendo apariencia de un muchacho joven, por supuesto. De hecho, veinte años son muy pocos en la vida de un vampiro.

Odio a los humanos por lo que piensan sobre nosotros.

Les plantearé algo: ¿nos derretimos con el sol? No. Nos molesta un poco, pero una gabardina y unas gafas oscuras bastan. ¿vestimos siempre de negro? No. Nos distinguimos, de hecho, por ser elegantes y por nuestros modales. ¿Somos todos paliduchos y de pelo oscuro, y ojos rojizos como siempre nos hacen ver en los libros ridículos? No. De hecho, yo soy de piel oscura y tengo el pelo…blanco. Si, se que suena raro pero ni yo mismo se la razón.

Un tiempo viví bastante aburrido sobre lo que pasaba alrededor de mí.

Desde entonces salía a la ciudad (sí, de día). Caminaba por el parque y tomaba café en un restaurante.

En el parque conocí por lo menos a tres chicas, que se decían…góticas, darks, ya saben, una de esas que les he dicho antes, solo quieren llamar la atención.

Recuerdo a la primera. Pálida, de pelo negro. Me habló acerca de la oscuridad. Me dijo que a veces lo que mas deseaba era la muerte. Que ella estaba enamorada de la muerte. La seguí hasta la noche.

¿Tanto deseaba la muerte? Solo le di gusto. Encontraron su cuerpo al día siguiente. No pudieron hallar una explicación.

La segunda era muy parecida. Por supuesto también la maté.

La última fue la gota que derramó el maldito vaso.

La encontré oyendo música bajo la sombra de un árbol. Me vio y me hizo una seña para que me acercara, le seguí el juego y decidí sentarme con ella. Otra vez la patética charla sobre la oscuridad, la tristeza y la muerte. Ella se dio cuenta de que no me impresionaba con eso.

-Te diré algo más, honey…

Me molesto la familiaridad pero seguí fingiendo interés.

-¿que quieres decirme?

-Soy un…vampiro.

Por supuesto que me molestó. Un vampiro sabe cuando hay otro vampiro cerca. Yo como vampiro puedo saber si alguien es un vampiro. Y ella por supuesto no lo era. Además, los vampiros no andamos pregonando lo que somos. Quienes se dan cuenta de que soy un vampiro frecuentemente no (o mas bien nunca) viven para contarlo.

Fingí sorprenderme y pude ver la satisfacción en su rostro. Llegó la noche y salimos de aquel parque.

-Oye tu…vampiresa… ¿le tienes miedo a lo que no conoces?- ella me miró extrañada pero no le di tiempo ni de moverse. La mordí y comencé a beber de su sangre.

Pobre estúpida. Sonrió. Pensó que la iba a convertir, que pasaría la eternidad conmigo…pero cuando noto que yo no hacia nada más su rostro cambio por completo. Luego solo la nada…el vacio de sus ojos me indico que su agonía había terminado.

Ya he matado a mucha gente. En el pasado y hasta hace poco. Todo mundo piensa que esta ciudad esta maldita…

Nadie va al parque por las noches, solo yo. Tienen miedo. Han corrido muchas leyendas sobre mi pero…

Quienes me ven en el día, en la calle, ni se imaginan quien soy.

Pero todo cambio una noche. En una de mis rondas nocturnas en el parque, vi una figura sentada en una banca, bajo un poste de luz (el único que funcionaba en todo el parque)

Me acerque con la intención de asustarla, pero decidí observarla un rato. Me acerque lentamente y me senté junto a ella. Trate de buscar un tema de conversación y le pregunte sobre el libro que tenía en sus manos. Me hablo sobre el y mientras hablaba pude apreciar que era muy bonita, tenia unos ojos lindos y su cabello era…azul. Es tan raro como mi cabello blanco…pero eso es otra cosa.

A diferencia de las otras chicas, ella logró captar mi atención. Era inteligente, se notaba, segura de si misma y apasionada al hablar de su amado libro.

Me quede embelesado viéndola. Bueno…jamás trate de matarla. Ella no trato de llamar mi atención, lo logro sin querer. Como a las doce se puso de pie y me dijo que tenía que irse. La acompañe hasta la salida del parque y le dije que tenia que irme por otro lado. Se empezó a alejar pero recordé algo importante:

-¡¿oye, como te llamas?!-volteó y me sonrió.

-Kula… ¿y tu?

-yo soy…K´…

-Bien K´ nos vemos.

Se fue y yo regresé lo más rápido que pude a mi mansión. Si mi corazón latiera, diría que estaba al mil por hora.

¿Enamorado? Claro que no, la persona a quien mas he querido es a mi hermana y ella murió. Los vampiros no nos enamoramos, y los que lo hacen, después tienen demasiados problemas.

Perdonen si soy algo frio para describir mi situación. No acostumbro dejarme llevar por mis emociones, aunque aquella ocasión fue tan distinta. No es fácil acostumbrarme a sentir algo, cuando no he sentido nada en tanto

Pero lo que no esperaba es lo que paso después…

Sé que van a decir que insisto mucho con esta pareja, peo si yo no lo hago ¿Quién?

Dejémoslo así: cursi!! Jejeje

Besos!!