Bueno espero que les guste y que a mi amiga que cumple años hoy igual, y espero que me salga bien nwn.
Bien sin mas que decir, los dejo con la historia.
NOTA IMPORTANTE: Los personajes usados en esta historia no me pertenecen son de sus respectivos creadores.
Capitulo 1.
La historia de una Guerra.
Hace muchos años existía dos reinos que antes estaban en paz, sin embargo con el tiempo esa amistad se perdió cuando los monarcas estos fallecieron y sus herederos subieron al trono, y gracias a eso estallo la guerra entre ambos reinos.
El reino del Fénix, era gobernado en la actualidad por su Rey, Antonio Fernandez Carriedo, este tenia un amigo de confianza y el segundo teniente de su guardia imperial, Emilio Fernandez Carrido, que sobraba decir era su primo y a quien había elegido como su sucesor, en caso de fallecer.
Y el reino azul del pájaro Azul, era gobernado por Chun Yin Wang, esta tenia una hija de su matrimonio con Paulo Da Silva, su difunto esposo, de nombre Jade Wang Da Silva, a quien había elegido por si ella llegaba a fallecer como su sucesora.
Pero vamos a ver como les va a ambos reinos en este conflicto que ya llevaba mas de cien años sin resolverse.
Era una mañana tranquila en el reino azul, en el castillo una joven despertaba debido que los rayos del sol entraban por su ventana, la joven de cabellos sumamente largos se levanto de su cama mientra se estiraba para quitar su pereza se levanto de la cama y abrió su ventana, respiro el aire fresco de la mañana, justo en ese momento entro a s cuarto una de sus criadas, la cual apenada se disculpo por no llamar antes.
-Disculpe usted majestad-Dijo apenada la joven con rasgos asiáticos como ella, el nombre de esa chica era Sakura Honda, su mejor amiga.
-No hables con tanta formalidad Sakura, solo llámame Jade-Le dijo mientras se acercaba a ella.
-Esta bien Jade-Sama-Dijo algo mas apenada, Jade suspiro sabia que su amiga nunca dejaría sus formalidades-Le traje su desayuno.
-Genial gracias Sakura-Le dijo mientras lo recibía y empezaba a comer-Por cierto, ¿tienes lo que te pedí?-Le pregunto.
-Si, el regalo de cumpleaños de Chun Yin-Sama esta en su mesa de noche-Le dijo mientras ella le sacaba un cambio de ropa-Lo puso ahí como usted me dijo.
-Bien, gracias Sakura-Le agradeció mientras comía.
Cuando termino de comer para después ser ayudada por Sakura a vestirse, aunque Jade se resistió no logro persuadir a la chica por lo que se resigno a que Sakura la vistiera, cuando termino de arreglarse tomo el regalo de su madre y se dirigió a verla.
-"Solo espero que le guste mi regalo"-Pensaba la joven imaginando lo feliz que se pondría su madre al recibir su regalo.
Mientras en otra parte.
Un joven de rasgos latinos caminaba por los pasillos mientras pensaba en los últimos acontecimientos ocurridos, no le gustaba mucho la guerra pero fue criado literalmente para ella, entrenaba día tras día, para ser un buen soldado, desde que era un niño fue educado y entrenado por su primo Antonio, su única familia y rey del reino rojo.
Pero sin querer ese día se encontró con su primo en el camino a su cuarto.
-Hola Emilio-Le saludo el joven español sonriendo.
-Hola Antonio-Le saludo algo serio y suspiro.
-¿Te ocurre algo Emilio?-Le pregunto preocupado el joven rey.
-Solo pensaba, ¿en verdad tenemos que seguir esta guerra que ya no tiene sentido?-Le pregunto mirando a su primo a los ojos.
Antonio lo medito un momento, y luego suspiro, su primo tenia razón esa guerra hace años que dejo de tener sentido, pero no sabia que hacer para cerrar ese siclo de odio y desprecio por parte de los dos reinos.
-Tienes razón Emilio, pero ya no se que hacer para parar esto-Dijo mientras suspiraba, pero cambio de conversación-Supe que ya afinaste mas tu poder sobre el fuego.
-Si, yo puedo controlarlo un poco mas-Dijo mientras suspiraba, ya imaginaba que para zafarse Antonio cambiaría el tema.
-Me alegro, sigue así y algún día podrás usar la invocación de las alas del Fénix-Dijo sonriendo.
-Si no te preocupes, seguiré entrenando-Dijo en tono serio-Si me disculpas iré a mi cuarto, estoy cansado de entrenar con Monika.
Y se retiro a su cuarto, mientras su primo lo veía irse, cuando Emilio se perdió de vista, el mentor del joven rey, Vladimir Lupei se acerco a el.
-Creo que el chico se siente algo presionado Antonio-Le comento el mentor al joven rey.
-Solo quiero que sea un buen rey y que si yo no lo logro, el puedo detener esta guerra sin sentido alguno-Le dijo mientras caminaba en la dirección opuesta seguido de Vladimir.
En otra parte.
La joven princesa Jade ya había llegado donde su madre, esta ultima estaba en su despacho hablando con su general del ejercito de su reino, no se atrevió a entrar ya que sabia que cuando había alguien hablando de temas de guerra con su madre no debía interrumpir, por lo que decidió esperar un momento a que terminaran.
-Su majestad, el ejercito esta listo para partir a la batalla-Dijo el joven con tono de respeto, su nombre era Toris Lorinaitos.
-Toris-Lo llamo, el joven castaño la miro con atención-¿Donde sera la batalla?
-Sera al sur, el ejercito del Fénix ataco y se adueño de una aldea que estaba bajo nuestra jurisdicción-Dijo con tono firme.
-Ya veo, vayan con cuidado y que el sol ilumine su camino Aru-Dijo mientras miraba por la ventana directo a su pueblo.
El joven hizo una reverencia y se retiro, encontrándose con la joven princesa a la cual saludo de forma respetuosa y se retiro a preparar a sus hombres para salir a la batalla.
Jade una vez sola su madre entro a su despacho, Chun al ver a su hija se acerco a saludarla con una sonrisa.
-Jade Aru, ¿Como estas hija?-Pregunto tranquila la joven reina.
-Estoy bien madre, y feliz cumpleaños-Le dijo mientras escondía el regalo detrás de su espalda.
-Gracias Jade Aru-Le agradeció mientras la abrazaba.
Jade con un movimiento rápido escondió el regalo en una de sus mangas, cuando se separaron Jade respiro hondo y se dispuso a hablar.
-Madre, veraz debido a que esta es una fecha especial para ti, quiero...-Pero fue interrumpida por la capitana de su ejercito, Fatima, la cuñada y prima de su fallecido esposo, aparte de su mentora.
-¿Ocurre algo Fatima Aru?-Pregunto curiosa.
-Si, se requiere su presencia en el Gran Salón-Dijo de manera respetuosa, podrá ser su cuñada pero no dejaba de ser la reina.
-Bien, estaré ahí Aru-Dijo con mas calma y suspiro mirando a su hija-Hablaremos después Aru.
-Claro Madre-Dijo con algo de desilusión que supo disimular.
Chun se fue junto a Fatima mientras que Jade sacaba su regalo y se marchaba a su cuarto mientras suspiraba con su regalo para su madre aun en brazos, entro a su cuarto y se quedo dormida mientras pensaba en una futura época de paz que esperaba no estuviera muy distante.
-Espero que esta absurda guerra termina algún día-Dijo antes de caer dormida mientras abrazaba la pequeña caja que aun tenia en brazos.
