Harry Potter: ¿Cómo llegó a los muggles?
Hola! ¿Cómo estan? Primera historia que publico aquí!!!! Espero que les guste, este fue el primer fic que escribí y del que más orgullosa estoy. Tengo otras historias que pronto publicaré porque aquí, lo aseguro. Bueno, no doy mas vueltas.. Ah! Supongo que tengo que decir que los personajes no son mios y eso... ya lo saben... y tambien saben como me gustaría que fueran mios.... ¬¬ pero no se puede....
NOTA IMPORTANTE: según mis cálculos y un par de averiguaciones, Harry nació en 1980, por lo que al año 2003 tendría algo así como 23 años, pero hagamos de cuenta que por obra de magia (irónico, ¿no?) en este año que termina, él esta a mitad de su séptimo curso ¿oka?, porque sino no me queda bien la historia... La narración empieza cuando Harry esta en 3° año, lo que se traduce en el año 1999. Bien, si no entendieron cualquier cosa consulten en el Libro de visitas...
Capitulo 1: Con la aprobación del director.
Llegó al Caldero Chorreante como un rayo y llevándose por delante un par de gnomos: -Lo siento... no los vi- se disculpó. Y ere sincera, es difícil distinguir, cuando uno va apurado, a dos gnomos de 20 centímetro de altura. Los gnomos refunfuñaron un poco y siguieron su camino. Ella los miró con fastidio y se dirigió a la chimenea: -¡Un knut! (NdA: mmm... se escribe así, ¿no?) – gritó con voz chillona un elfo doméstico que estaba parado al lado de la chimenea. Fastidiada de que todo el mundo la retrasara metió la mano en su túnica y le dio el knut al alfo chillón. Este le acercó un recipiente con polvos flu, tomó un poco y los tiró a la chimenea, se introdujo en ella y tratando de que ninguno de los papeles que llevaba se le cayeran pronunció claramente: -¡Hogwarts! ¡Pum! Cubierta de hollín y más fastidiada aún salió de la chimenea convencida de que se compraría urgente una escoba cuando cobrara su sueldo como redactora del diario El Profeta: -¡Johann!- una apacible voz la sacó de sus pensamientos- no te esperaba tan pronto. -Eh? Ah! Profesor Dumbledore- Johann miró a su alrededor y comprobó que estaba en el despacho del director de Hogwarts. -Vamos, Johann, puedes llamarme Albus, ya no eres más una alumna. -A veces querría volver a serlo, extraño Hogwarts... -Todos lo extrañan, Remus dijo lo mismo cuando llegó- comentó Dumbledore mientras se sentaba y le instaba a Johann para que hiciera lo mismo. -Gracias. Así que Lupin esta aquí, bueno, no sé de que me sorprendo, ya lo sabía: todo se sabe cuando Rita Skeeter es tu compañera de trabajo, aún no comprendo como hace esa mujer para enterarse de todo... -Ja, ja, ja, veo que Rita no ha cambiado... -En absoluto. – Johann sonrió, le daba gusto estar ahí, hablando con su antiguo director de su estancia en Hogwarts, o mejor dicho del estado actual de sus compañeros de Hogwarts. -Dime, Johann, ¿qué era eso tan urgente que necesitabas preguntarme? En tu carta parecías ansiosa. -Ah! Claro, para eso he venido... Bien... estoy iniciándome como escritora y... bueno... mi intención era comenzar escribiendo una historia real, creo que estoy acostumbrada a eso por mi trabajo, pero no escribirla como una noticia, sino como, una historia, como una novela- Johann miró a Dumbledore por primera vez después de su mini-discurso que dijo sin respirar en ningún momento. -Interesante- se limitó a decir el director- creo que serás una muy buena escritora, tienes talento. -Gracias - contesto Johann aliviada-. Pero, seguramente se preguntará porque estoy aquí, porque no viene a pedir su opinión... ¡No es que no me interesara, claro!- dijo en tono de disculpa- Pero la realidad es que... Bueno... El tema que he elegido para mi novela es la vida de Harry Potter. Usted sabe se han escrito miles de libros de historia sobre él, miles de artículos periodísticos, pero ninguna ficción y creo que tiene méritos para convertirse en una... Además mi objetivo es que llegue a los muggles. Sé que sería como revelar nuestro secreto, pero... vamos, ellos son tan... tontos... creerían que es solo una historia salida del cerebro de una mujer que no tenía mejor cosa que hacer que escribir, nunca llegaran a sospechar que todo es verdad... También estuve hablando en el Ministerio y me dieron permiso...- Johann levantó la vista para encontrarse con la de Dumbledore que simplemente acomodó sus anteojos de media luna- Lo que yo quería –continuó- era pedirle permiso para hablar con Harry, para ver si él estaba de acuerdo con mi idea y para que él me contara todo, porque pensé que sería muy interesante tomar todo desde el punto de vista de Harry, ya sabe, según como él se fue enterando de las cosas- Johann levantó la vista nuevamente y vio como el director se acomodaba en su silla. -En este momento Harry y sus amigos deben estar en la sala común de Gryffindor- se limitó a decir Dumbledore mientras sonreía. Johann sonrió de oreja a oreja, se levantó de la silla y se dirigió a la puerta del despacho. Cuando estaba por salir se giró: -Em... Profesor... -Albus -Sí, Albus,- dijo con un poco de vergüenza- le molestaría decirme donde esta la entrada a la sala común de Gryffindor y cual es la contraseña... ya sabe, soy una Ravenclaw. ----- Bueno... ¿captaron la esencia? Para el que no: la persona que esta por iniciarse como escritora es Johann K. Rowling ¿ahora comprenden? Para el que no: la idea se basa en que J K Rowling es una bruja que esta escribiendo sobre la historia de Harry, es decir que todo lo que se cuenta esta pasando... Por eso tarda en escribir los libros ¡no puede inventarlos, tiene que esperar que las cosas pasen! Así que, fanáticos, no la persigan tanto a la pobre Johann, ella no tiene la culpa de que un año escolar el Hogwarts dure tanto... Ahora, ¿se entendió? Para el que no: no leas más este fic hermano! Bien... solo una cosa más, que parecerá reiterativa: ¡dejen comentarios!. Sé que es denso y cansador (al principio odiaba dejar comentarios, es más, no lo hacía) pero no saben cómo reconforta al escritor... es el reconocimiento a su obra... Bueno... sin más, los dejo. Annie Malfoy.
Hola! ¿Cómo estan? Primera historia que publico aquí!!!! Espero que les guste, este fue el primer fic que escribí y del que más orgullosa estoy. Tengo otras historias que pronto publicaré porque aquí, lo aseguro. Bueno, no doy mas vueltas.. Ah! Supongo que tengo que decir que los personajes no son mios y eso... ya lo saben... y tambien saben como me gustaría que fueran mios.... ¬¬ pero no se puede....
NOTA IMPORTANTE: según mis cálculos y un par de averiguaciones, Harry nació en 1980, por lo que al año 2003 tendría algo así como 23 años, pero hagamos de cuenta que por obra de magia (irónico, ¿no?) en este año que termina, él esta a mitad de su séptimo curso ¿oka?, porque sino no me queda bien la historia... La narración empieza cuando Harry esta en 3° año, lo que se traduce en el año 1999. Bien, si no entendieron cualquier cosa consulten en el Libro de visitas...
Capitulo 1: Con la aprobación del director.
Llegó al Caldero Chorreante como un rayo y llevándose por delante un par de gnomos: -Lo siento... no los vi- se disculpó. Y ere sincera, es difícil distinguir, cuando uno va apurado, a dos gnomos de 20 centímetro de altura. Los gnomos refunfuñaron un poco y siguieron su camino. Ella los miró con fastidio y se dirigió a la chimenea: -¡Un knut! (NdA: mmm... se escribe así, ¿no?) – gritó con voz chillona un elfo doméstico que estaba parado al lado de la chimenea. Fastidiada de que todo el mundo la retrasara metió la mano en su túnica y le dio el knut al alfo chillón. Este le acercó un recipiente con polvos flu, tomó un poco y los tiró a la chimenea, se introdujo en ella y tratando de que ninguno de los papeles que llevaba se le cayeran pronunció claramente: -¡Hogwarts! ¡Pum! Cubierta de hollín y más fastidiada aún salió de la chimenea convencida de que se compraría urgente una escoba cuando cobrara su sueldo como redactora del diario El Profeta: -¡Johann!- una apacible voz la sacó de sus pensamientos- no te esperaba tan pronto. -Eh? Ah! Profesor Dumbledore- Johann miró a su alrededor y comprobó que estaba en el despacho del director de Hogwarts. -Vamos, Johann, puedes llamarme Albus, ya no eres más una alumna. -A veces querría volver a serlo, extraño Hogwarts... -Todos lo extrañan, Remus dijo lo mismo cuando llegó- comentó Dumbledore mientras se sentaba y le instaba a Johann para que hiciera lo mismo. -Gracias. Así que Lupin esta aquí, bueno, no sé de que me sorprendo, ya lo sabía: todo se sabe cuando Rita Skeeter es tu compañera de trabajo, aún no comprendo como hace esa mujer para enterarse de todo... -Ja, ja, ja, veo que Rita no ha cambiado... -En absoluto. – Johann sonrió, le daba gusto estar ahí, hablando con su antiguo director de su estancia en Hogwarts, o mejor dicho del estado actual de sus compañeros de Hogwarts. -Dime, Johann, ¿qué era eso tan urgente que necesitabas preguntarme? En tu carta parecías ansiosa. -Ah! Claro, para eso he venido... Bien... estoy iniciándome como escritora y... bueno... mi intención era comenzar escribiendo una historia real, creo que estoy acostumbrada a eso por mi trabajo, pero no escribirla como una noticia, sino como, una historia, como una novela- Johann miró a Dumbledore por primera vez después de su mini-discurso que dijo sin respirar en ningún momento. -Interesante- se limitó a decir el director- creo que serás una muy buena escritora, tienes talento. -Gracias - contesto Johann aliviada-. Pero, seguramente se preguntará porque estoy aquí, porque no viene a pedir su opinión... ¡No es que no me interesara, claro!- dijo en tono de disculpa- Pero la realidad es que... Bueno... El tema que he elegido para mi novela es la vida de Harry Potter. Usted sabe se han escrito miles de libros de historia sobre él, miles de artículos periodísticos, pero ninguna ficción y creo que tiene méritos para convertirse en una... Además mi objetivo es que llegue a los muggles. Sé que sería como revelar nuestro secreto, pero... vamos, ellos son tan... tontos... creerían que es solo una historia salida del cerebro de una mujer que no tenía mejor cosa que hacer que escribir, nunca llegaran a sospechar que todo es verdad... También estuve hablando en el Ministerio y me dieron permiso...- Johann levantó la vista para encontrarse con la de Dumbledore que simplemente acomodó sus anteojos de media luna- Lo que yo quería –continuó- era pedirle permiso para hablar con Harry, para ver si él estaba de acuerdo con mi idea y para que él me contara todo, porque pensé que sería muy interesante tomar todo desde el punto de vista de Harry, ya sabe, según como él se fue enterando de las cosas- Johann levantó la vista nuevamente y vio como el director se acomodaba en su silla. -En este momento Harry y sus amigos deben estar en la sala común de Gryffindor- se limitó a decir Dumbledore mientras sonreía. Johann sonrió de oreja a oreja, se levantó de la silla y se dirigió a la puerta del despacho. Cuando estaba por salir se giró: -Em... Profesor... -Albus -Sí, Albus,- dijo con un poco de vergüenza- le molestaría decirme donde esta la entrada a la sala común de Gryffindor y cual es la contraseña... ya sabe, soy una Ravenclaw. ----- Bueno... ¿captaron la esencia? Para el que no: la persona que esta por iniciarse como escritora es Johann K. Rowling ¿ahora comprenden? Para el que no: la idea se basa en que J K Rowling es una bruja que esta escribiendo sobre la historia de Harry, es decir que todo lo que se cuenta esta pasando... Por eso tarda en escribir los libros ¡no puede inventarlos, tiene que esperar que las cosas pasen! Así que, fanáticos, no la persigan tanto a la pobre Johann, ella no tiene la culpa de que un año escolar el Hogwarts dure tanto... Ahora, ¿se entendió? Para el que no: no leas más este fic hermano! Bien... solo una cosa más, que parecerá reiterativa: ¡dejen comentarios!. Sé que es denso y cansador (al principio odiaba dejar comentarios, es más, no lo hacía) pero no saben cómo reconforta al escritor... es el reconocimiento a su obra... Bueno... sin más, los dejo. Annie Malfoy.
