El Inicio del Fin
Prologo
La nueva amiga de Nina Wong
Dos semanas y media después del suceso de Yuna
Una Otome vestida en una armadura plateada volaba al raz de los árboles para no ser detectada por los radares y la tecnología de Artai. No tenía permiso para sobrevolar su espacio aéreo todavía y si era descubierta podría iniciar un conflicto bélico en proporciones gigantescas. Ella sin embargo tenía una misión en su cabeza. Iba a despertar a Nina de su estupidez y de paso devolverle la alegría de Meister Arika y por eso con permiso de Takumi había traído un sobre grueso que contenía unas cartas y regalos para Nina. Sin embargo nadie sabía de su visita, solamente Takumi y la Directora Natsuki.
La Otome alzó su mirada al cielo para ver algo sorprendente. Había una especie de nave sobrevolando la zona. La Otome se le quedó mirando embobada hasta que recordó que no tenía permiso para estar allí y descendió al piso a toda prisa y comenzó a volar entre los arboles tratando de evadir las miradas y los posibles equipos de descubrimiento de Otomes que pudieran tener. Diez segundos después aterrizaba entre los árboles para ver pasar sobre su cabeza la colosal nave. Vio su dirección y sus ojos se abrieron como platos de la pura angustia…
Iba en dirección de la mansión de su padre…
La chica se llenó en un estado de furia y gritó…
- ¡KAZE ARIGATAI! –
La ropa de la Otome cambió en ese momento…
Su traje se puso más tieso y fuerte. Una especie de semi-casco apareció en la cabeza de la muchacha. La chica se perdió entre los árboles con una rapidez de miedo. Desde la poderosa nave solo notaron como algo extremadamente fuerte derribaba arboles y hacía estallar el piso en la misma dirección que llevaban.
El capitán de la nave se percató de lo mismo pero decidió ignorarlo y ordenó seguir el curso. En ese momento avanzó y llegó al frente de la casa y ella se posó en el jardín girándose ciento ochenta grados para hacerle frente a la nave. El aterrizaje de la Otome fue violento ya que las ventanas del frente estallaron en pedazos haciendo que una muchacha y un hombre salieran de la casa para ver a la Otome delante de ellos. Se acercaron a ella y se asustaron un poco al ver a es monstruosa nave, la cual comenzó a abrir fuego sobre ellos. La chica alzó sus manos y dijo:
- Wild Kaze. Blaze Cannon –
Al lado derecho de la chica se materializó una lanza roja gigantesca. La chica alzó su mirada a la nave y dijo:
- Fire –
Nina y Serguei vieron algo impresionante. La lanza cargó y lanzó una especie de balazos de luz. Nina supo al instante de que esas balas eran hechas de puro aire comprimido. Los disparos llegaron a la nave y esta comenzó a moverse para esquivar el ataque pero no pudo ya que la chica movía su cuerpo en esa dirección y los disparos continuamente golpeaban la nave. La nave comenzó a mecerse como un borracho y la Otome dejó de disparar para que los tres vieran como esa mole se derrumbaba al frente de ella en medio de una tremenda explosión. Al terminar la explosión Rei alzó su lanza y dijo:
- Esto no ha terminado aún Otome Wong. Necesito de tu ayuda pero primero debes protegerle –
Nina miró hacia atrás para ver a Serguei pálido y totalmente aterrado. Nina alzó una ceja y al mirar a la cara llena de entendimiento en el rostro de la chica….supo que ella y su padre sabían algo acerca de esa mole….pero su padre supuestamente no tenía memoria….eso la puso en guardia. Nina miró a la chica quien desvió la mirada. Nina frunció el cejo pero se sorprendió bastante cuando la chica peli azul se acercó a ella y dijo:
- Esmeralda de Neptuno, Mashiro ya no es tu Ama….ella tiene mucho en su plato. Mi Amo el Rey Takumi es ahora tu Amo y te da la aprobación para que uses su poder y permitas que tu portadora use su poder de Otome cuando veas precisado o cuando ella lo necesite –
La Joya brilló levemente pero no pasó nada más. La chica se dio la vuelta nuevamente y ordenó que ellos regresaran dentro de la vivienda. Serguei arrastró consigo a Nina mientras Nina miraba con angustia a aquella Otome. Al llegar a la puerta ambos se detuvieron para ver a la chica y un chico muy parecido a su anterior Amo hablar para luego comenzar una pelea muy feroz. El hombre para sorpresa de ellos dos materializó una armadura dorada con destellos de color azul. El hombre chasqueó sus dedos y detrás de él se materializó algo transparente de la cual comenzaron a asomar el pomo de varias armas de gran tamaño. La muchacha se detuvo y su lanza brilló a la luz de la luna. Nina escuchó decir al hombre de la armadura…
- Puertas del Infierno –
La Otome retrocedió y Nina supo en ese instante que la chica miraba aterrada aquel poder. Ella se recuperó diciendo…
- Veo que con la Lanza del Perro Culan no puedo vencerte. Esa armadura es muy buena… copión –
Nina alzó una ceja a eso y el hombre dijo:
- Valoro eso en ti querida o debería decir que tú eras igual que yo…y que éramos como hermanos cuando pequeños….yo me copié de muchas de tus técnicas de combate…o más bien tu me las enseñaste….jajaja tu padre se sorprendió mucho cuando lo usé contra las paredes del castillo de Aries… - Aquí Nina abrió sus ojos como platos -… eso fue el día en el que le pedí a él la mano de tu hermana pequeña para que ella fuera mi jugue… digo mi esposa…ahora veo que la transformación planeada por Shina a su hijo es muy buena…eres igual de hermosa que tu madre…gracias a ti desgraciado, mi abuelo no pudo cumplir su deseo de controlar Aries y el poder de los Himeno...y con estas dos cosas poder hacerse dueño del mundo.-
A este comentario Nina sintió que la chica comenzaba a temblar de furia. Ella abrió la palma de sus manos y dijo:
- Veo que eres muy competente para poder haber venido al futuro pero vamos a ver si puedes tomarme…mi hermana mayor no se dejó vencer de ti….y murió para evitar que tú te apoderaras de nuestra hermanita y de mi padre…pero es preferible mil veces morir a estar en la presencia ruin y asquerosa de su familia… - La chica rió de una manera tal que el aura del hombre vino a la vida y Nina sintió la burla de la Otome hacia ese guerrero extraño. La Otome que les salvó la vida continuó – ….pero aparte de eso….llevas tratando mucho tiempo de poseer el poder de los Himeno…desde hace ya varios años…o más bien…siglos….a los tres hijos de Shina Himeno….pero te llevarás chasco perro…nunca conseguirás dominar este mundo… ¡Y MENOS TOMAR EL PODER DE MI ABUELA PARA LOGRAR ESO! ¡ELLA CREÓ TODO PARA EL BIEN DE TODOS EN ESTE MUNDO! ¡ANTES MUERTA QUE DEJAR QUE TU TENGAS EL PODER DE MI ABUELA EN TUS MANOS! –
El hombre perdió el control y una lluvia de armas cayó sobre la Otome de manera increíble creando otra explosión. Nina en esos momentos vio como varios hombres se movían algo alejados del combate y se dirigían hacia ella y su padre. Nina supo en ese instante de que el hombre estaba distrayendo perfectamente a la Otome. Los hombres siguieron avanzando mientras la pelea continuaba fuertemente al frente de ellos. Nina no quería usar su poder por temor a perder el control y no activó su traje. Su padre también retrocedió con ella más y más. Los hombres salieron al espacio abierto hacia ella mientras el Hombre de la armadura atacaba a la Otome con una hoz muy grande y le atravesaba el costado. Nina pensó lo peor pero se llevó la sorpresa de su vida cuando la chica gritó…
- Viento Bendito….Kaze Arigatai…Ultimate Ein…Set Up -
En ese mismo instante la lanza desapareció en medio de un pequeño destello de partículas y fue reemplazado por un arma invisible que Nina no pudo identificar….con ella hizo un tajo y un poderoso viento se levantó e hizo que el hombre de la armadura pusiera sus brazos para proteger su rostro. La Otome aprovechó la situación y con una velocidad inusitada apareció ante sus agresores y usando una velocidad envidiable los dejó fuera de combate y parecía como si no le importara si los mataba o no. El hombre se dio cuenta también y gruñó peligrosamente. El hombre se inclinó un poco y sacó del cinto su arma principal, una espada cónica que termina en punta. El hombre alzó su brazo e inclinó su cuerpo hacia adelante. Luz morada comenzó a emanar del arma con poderosa fuerza. Nina notó que les apuntaba a ellos por la mirada que les hacía. No lo notaba ya que la chica estiró su mano y luz naranja comenzó a materializarse al frente de ella. Quince segundos después el Hombre estiró su mano con la espada gritando…
- ¡Thunder Smasher! –
Ella abrió sus ojos como platos al ver la descarga de energía dirigida hacia ellos y Nina solo pudo ver como ella se interponía ante aquella descarga de energía. Nina tarde notó el arma…lo hizo cuando perforaba el torso de la Otome…el hombre sabía que la Otome podía parar su descarga y por eso mandó esa espada escondida dentro de la descarga….
El infierno se soltó….
La Esmeralda de Neptuno se activó pero solo apareció su tridente de color plata. Nina vio como la Otome se desplomaba en el piso ante semejante herida pero había parado la descarga de energía usando su cuerpo. El traje soltaba chispas por todos lados y humo salía del cuerpo de la Otome. Nina se enfureció totalmente y se asombró cuando el hombre dijo:
- Levántate…esas heridas no son nada para ti ¿verdad? –
La sorpresa de Nina aumentó al ver ponerse de pie a la Otome todavía con el arma clavada en su cuerpo. El hombre sonrió y su mirada se volvió loca. La chica por toda respuesta levantó su arma invisible y en ese instante Nina notó que las armas eran gemelas. El hombre se lanzó a la carga y pronto sus armas resonaban terriblemente y ondas de energía surcaban el aire cada vez que las armas hacían contacto….
POV Nina
El hombre se distrajo un momento al verme con el tridente en mis manos, me apuntó con su arma y la Otome aprovechó para gritar…
- ¡BLAZE CANNON! –
El ataque fue certero y envolvió al hombre de la armadura en una tremenda explosión. Cuando la descarga pasó un poderoso surco había en el piso bastante profundo. El hombre maldijo y desapareció al ver su armadura soltar chispas doradas. Al ver desaparecer al hombre la Otome se relajó, sentí que sus armas gemelas se desmaterializaban. Me traté de acercar a ella pero me detuve brevemente para ver como se sacaba del cuerpo aquella arma que desaparecía tan pronto ella la soltó. Al acercarme a su lado pude ver que estaba ilesa causándome sorpresa. Había jurado que esa arma le había atravesado el cuerpo. Ella desapareció su traje y se sentó en el piso. No le reproché nada….había sido una batalla increíble que dudaba pudiese yo repetir. Ella me miró con una sonrisa y sacando un sobre de un compartimiento de su capa chamuscada, me lo entregó.
Lo tomé con cierta sorpresa al notar que a pesar de esa batalla no le había pasado nada malo. Ella se volvió a girar a la nave diciendo…
- Hay gente todavía viva dentro de esa nave. ¿Qué deseas hacer con ellas? –
La chica me cruzó con su mirada penetrante. Yo miré la nave y supe que los soldados no tenían la culpa de seguir ordenes de sus ambiciosos superiores y algo me hizo entrar en razón….yo había sido lo mismo…mi cara o mis ojos le mostraron algo a la Otome porque cuando la miré ella sonreía abiertamente, su mirada acerada había desaparecido…la reemplazaba una de alegría y de amistad. Ella dijo:
- Digamos que yo estuve también en el mismo barco –
Ella se movió con velocidad suma y pronto en el pasto frio estaban los supervivientes y los heridos. La chica se puso a atenderlos. Yo dudé un momento, le pedí a Serguei que fuera a la casa a dejarme el sobre en mi mesa de noche y prender la iluminación de la mansión e ir arreglando los cuartos para poder mover primero a los heridos de mayor gravedad. Luego corrí en su ayuda. Esas palabras me habían dejado pensando fuertemente…
Dos horas después salvamos a muchos. Solo fallecieron cinco soldados de los más de cincuenta rescatados por la Otome. Al comienzo tuvieron miedo pero la chica dijo:
- Mi nombre es Rei Elcano, soy la Otome de Zipang y soy General de las Fuerzas Militares de Windbloom. Me fue ordenado venir en su protección y veo que mi Amo y la Meister Yumemiya estuvieron muy acertados en su pensamiento. –
Yo abrí mis ojos como platos…esa chica nos había salvado la vida por supuesto, pero el pensamiento de Arika, Mashiro-sama y del Rey de Zipang era el motivo por el cual seguía viva al lado de mi padre. Mi padre miró a la Otome de arriba abajo y dijo:
- Vaya estoy teniendo ilusiones o me pareció que habías sido herida de gravedad –
- Si fui herida, pero mis nanomáquinas ya me han curado. –
Los soldados miraban a la Otome aterrados de que ella les hiciera algo. Ella al verlos así de asustados sonrió diciendo…
- No tengo nada contra ustedes, por favor descansen para que sus heridas sanen pronto y puedan volver con sus familias. Debo comunicarme con mi Amo en espera de instrucciones. Esto ya debió subir a escala internacional –
La chica salió del cuarto con prisa. Yo la seguí sin que ella lo notase hasta un cuarto que jamás había visto oculto detrás de una estatua de una Otome. Supe en ese momento que Rei conocía la casa donde estábamos al dedillo. Me recosté en la estatua a escuchar….
- ¿Qué sucede Natsuki? –
- ¿Entregaste la carta? –
- Si –
- Bueno, pues en estos momentos cuatro pilares están con el Rey de Zipang. Hubo un intento de asesinato –
- ¡¿Qué?! –
El cuarto comenzó a temblar fuertemente. Sentí la ira de la chica. Ella habló con una voz ronca de la rabia…
- Ahora entiendo el momento de debilidad que tuve y eso casi me cuesta perder una pelea con ese desgraciado. ¿Quién fue? –
- Adivina, Nagi se ha encontrado con alguien muy parecido a él y ese hombre dice ser su abuelo y que viene del futuro. Él fue el que lo rescató –
Nina escuchó la sarta de maldiciones de la Otome pero como cosa rara no fue regañada. Ella dijo:
- Salgo de inmediato. Necesito que dos pilares vengan a proteger a los Wong. Yo parto para Zipang…nadie les tocará el pelo de la ropa…el juramento que le hice al abuelo de Serguei se cumplirá….su descendencia vivirá eternamente… –
- Muy bien Ama, entonces quédate allí –
- Natsuki – dijo la chica en son de aviso. Yo desde atrás quedé paralizada….le llamaban Ama a la Otome. Escuché a la Otome decir…
- Natsuki dile a Arika que necesito lo acordado con ella –
- Arika ya se está haciendo cargo de ese aspecto. El caso de Nina Wong. Ella está en estos momentos en la capital de Artai hablando con el encargado provisional del Reino. Está tratando de convencerlo de que Nina no tuvo nada de culpa en lo sucedido –
- Gracias, es una deuda que le debo a ella –
- No, sabes. También es el deseo de Meister Arika –
La Otome guardó silencio y luego una risa dulce escapó de sus labios. Rei dijo:
- ¿Dónde se encuentra mi Amo? –
- Esta en el palacio del Reino de Windbloom. El Palacio Shokan tuvo serios daños estructurales. Los ejércitos de ambas naciones se han movilizado como uno –
La Otome soltó un suspiro. - Muy bien me quedaré aquí más tiempo. Sé que Arika y los pilares protegerán a mi Amo y a mi Ama –
- Eso lo sabemos perfectamente. Sabes muy bien que Arika te estima y te respeta enormemente y haría hasta lo imposible por protegerles…a ambos –
Rei bajó su cabeza y murmuró….
- Ojalá fuera más fuerte…mi padre y mis hermanas seguirían vivos y a salvo….no hubiera muerto mi abuela y la madre de Arika….mi ahijada no se hubiera vuelto un experimento…Nina no hubiera podido seguir a ese idiota y….Erts no hubiera tenido que morir…ojalá hubiera estado lista más rápido y mi madre me hubiera mandado antes…–
Ese comentario me conmovió terriblemente, descubriéndome, caminé hasta donde Rei estaba y dije abrazándola…
- Rei Elcano, Otome de Zipang…sí que eres muy fuerte….ojalá yo fuera así…resististe la tentación de irte con ellos y ser su aliada…tu si pudiste controlarte cosa que yo nunca he podido hacer…has hecho lo que has podido…no te culpes de nada…por favor no lo hagas -
Rei me miró fijamente y luego cabeceó. Yo miré a Natsuki y ella me saludó con una sonrisa. Yo me envalentoné y dije…
- Rei…quiero invitarte a mi cumpleaños –
Rei dio un brinco adorable y yo sonreí. Natsuki dijo:
- Estas disculpada. De hecho puedes asistir a la fiesta allá ustedes y luego al día siguiente irán al palacio Windbloom. Arika las ha invitado a las dos y a Serguei. –
Rei y yo nos miramos. Yo asentí y Rei sonrió alegremente y dijo:
- Entonces hora de comprar tres regalos –
Yo asentí sonrojada y Rei despidió a Natsuki confirmándole la asistencia. Luego ella salió y yo fui con ella. En la sala de la mansión ella se sentó y casi se acostó. Yo en un momento fui a mi cuarto y al regresar vi a Rei atendiendo a un soldado. El soldado estaba firme ante ella. Él dijo:
- Cuando nos recuperemos de nuestras heridas, estamos a sus órdenes General –
- Pero…yo…. –
- Señorita, es decisión de todos nosotros. Hemos visto las cosas que haces por todo el mundo. Tus padres deben estar orgullosos de lo que has hecho con tu vida –
Rei bajó la cabeza y contestó…
- yo solo estoy cumpliendo el deseo de mi hermana menor….el anhelo de mi padre biológico y de las dos familias que lo dieron todo por la nuestra….a dos familias que estimo de la misma manera de la que estimo a la mía propia –
El soldado cabeceó serio pero vi en sus ojos que estaba conmovido y triste por la mirada llena de dolor que estaba en los ojos de la Otome. Ese soldado sabía algo de Rei. Me entristecí mucho al saber que había perdido a dos hombres a quienes había querido como su padre. Yo me juré que nunca sufriría de nuevo ese terrible dolor que ahora ella sentía por duplicado. El hombre dijo:
- Permite que te ayudemos a cumplir el deseo de la señorita Ai Elcano…una gran guerrera y una gran amiga…mi abuelo y mi bisabuelo lucharon a su lado y ella fue genial….noble y muy poderosa….la llamaban el demonio blanco por su poder…demonio por lo mortal pero blanco por su pureza y amabilidad…y cuando le hacían daño al inocente tu podías ver a un verdadero demonio…mi abuelo en su diario escribió sus aventuras junto a Lena Sayers, Shina Elcano y su hermana Rei Elcano…Ai Elcano dio su vida para salvar la de su hermana Rei y dejar esa maravillosa joya a este mundo….Rei Elcano…Actual Otome de Zipang…usando el poder de su madre Shina combinado con la joya que mató a tu padre…El Viento Bendecido…llamado antiguamente Kaze No Stigma…Ahora tú haces lo mismo que tus hermanas en el pasado siguiendo los deseos de tus padres y es mi deber velar por la persona que le salvó a mi abuelo su vida…permíteme cumplir con mi deber familiar…el juramento de mi familia… -
Rei estaba muda, primero por lo dicho por el hombre y segundo al escucharle decir de un juramento familiar. En los ojos de la chica había un brillo de reconocimiento ante el hombre delante de ella. Yo me hice dar a conocer y el hombre levantó su mano a su frente saludándome como los militares hacen:
- General Wong –
Yo le miré confundida y él contestó…
- Es tu cargo…el que te ha nombrado el Rey de Zipang y tú eres la segunda Otome de Zipang. Solo te estoy dando los respetos que mereces –
Yo negué con la cabeza a ello diciendo…
- Yo no merezco su respeto para nada –
El soldado me miró con preguntas y Rei dijo:
- Es mi orden, después de todo, tú eres mi amiga y he de recordarte que sin tu ayuda estaría ahora muerta…o peor….en manos de ese desagraciado… - a la chica le pasaron escalofríos por el cuerpo y yo asentí pensando en su actitud y me pasó uno cuando comprendí lo que me quería decir. Escuché decirme - ….no lo creo –
El hombre cabeceó mirándome con sumo respeto. Yo suspiré y Rei ordenó…
- De cuantos hombres ilesos contamos –
- De doce –
- Muy bien. Preparen un perímetro de seguridad para solo la mansión con ustedes doce. Ya he puesto barreras protectivas para que nadie pueda entrar sin mi conocimiento. El primer y segundo turno lo haremos Nina y yo –
- Entendido, entonces me retiro a preparar el resto –
Rei le permitió salir, yo me senté a su lado y comenzamos a hablar de cómo ella se había conocido con Arika y las demás. Ella me contó superficialmente pero nada revelador y yo respeté eso sabiendo que tenía dos buenos secretos y no quería destaparlos. No me enfadé ya que todavía no me había ganado su confianza para que me los contase y por eso los dejé pasar. Yo le conté todo lo mío. Ella no interrumpió mi relato y cuando acabé la vi pensativa y meditabunda. Yo la miré fijamente para ver a la altura de su antebrazo derecho un tatuaje de un ave que parecía estar en llamas. Yo alcé una ceja pero no dije nada de lo que veía. Ella suspiró y dijo:
- Bueno vamos afuera. Nuestro turno empieza en un par de minutos –
Ambas salimos de la casa y Rei me guió a una piedra que no había visto y que se encontraba en la parte lateral de la casa cerca de un arrollo, lo que me dio a entender que la chica conocía la casa como la palma de su mano. Sonreí sabiendo que algún día me contaría todo. Además de relajarnos un poco desde ese lugar podíamos vigilar la casa muy bien y nada se escaparía a nuestros ojos.
Ella dio un brinco y se trepó en una rama del árbol. Ella sacó de la nada una sabana vieja, la miró con mucha nostalgia y se cubrió el torso con tristeza. Yo tragué saliva pero no dije nada. Estaba respetando su retiro. Rei sin embargo me miró y sonriéndome me dijo:
- Sube –
Yo miré y no hallaba una manera de hacerlo. Ella meneó su cabeza y apoyándose en sus piernas quedó cabeza abajo, estiró sus manos hacia mí. Yo las tomé fuertemente y ella de un solo empujón nos mandó hacia arriba. A mitad de camino ella me "puso en la rama" y ella se detenía antes de irse de espaldas. Cuando el movimiento terminó juntas estábamos sentadas en la rama. Yo la miré sorprendida por su agilidad y sentí envidia de ella. Ella sin embargo sonreía y me dijo:
- Si quieres puedo enseñarte estas habilidades que tengo. Desde los cinco años me machacaron y por eso soy tan rápida y flexible. Las Otomes hoy en día solo confían en sus poderes. No saben que el ser humano es una máquina increíble. No conocen el verdadero poder de un ser humano. –
Rei suspiró mirando la casa con ternura. Ella me miró y para mi sorpresa una lágrima cayó de su mejilla. Yo no pude hacer nada, simplemente guardé silencio al ver que Rei comenzó a hablar…
- Ese desgraciado que os atacó…es el asesino de mi hermana mayor y de mi padre….esa familia es una partida de cobardes y son pusilánimes por naturaleza, saben atacar por la espalda que es una maravilla, sobre todo tratándose de seres indefensos -
Yo le miré sin contestarle, y ella debió de ver en mi mirada algo muy distinto de la admiración, porque al cabo de un corto silencio continuó:
- Piensa lo que quieras, Nina; pero yo le aseguro que hay sentimientos en el corazón humano que dirigen el brazo valiente de un hombre o de un muchacho, o de una mujer o de una chica. Si no hubiera pasado el ataque, hubieras visto un sepulcro que encierra a los dos seres más queridos del mundo para mí. Fueron asesinados por dos hombres de cabello color plata y sus compinches, y desde aquel día aciago siento crisparse mi mano cada vez que veo un cabello color plata…y muchos han sido los enemigos que han muerto debido al poder de las gemas creadas por mi abuela…las joyas que vomitaron el poder homicida en el corazón de mi noble padre y cuya precisión ya tuvo usted ocasión de comprobar en batalla con ese desgraciado –
- Nina, eres una excelente guerrera – añadió – pero aún si tuvieras al Viento Bendito a tu servicio no llegarías a usar todo su poder y tú misma sufrirías las consecuencias al usarlo. Ya puedes pensar cuanto tuve que ejercitar mi cuerpo para poder aguantar su monstruoso poder y conseguir usarlo. Yo se manejar todas las armas, mi cuerpo es un arma de hecho, pero tratándose de la Familia de Nagi solo uso este traje y su poder, pues he jurado que cada grano de energía de los que empujaron el poder que mató a mi madre Shina, a mi abuela, mi hermana Ai y a mi padre Rico, me lo he de cobrar con la vida de cada uno de sus subordinados; y creo estar ya próxima a realizar mi juramento. El mismo poder que mató a mi padre, mi abuela, mi madre y a mi hermana Ai, será el instrumento de mi venganza. -
- …ese tipo fue el que les mató… – murmuró Nina aterrada….
- ¿Cómo lo sabes? ¿Quién te lo contó? –
Bajé la cabeza y le confesé….
- Yo…..quise ayudarte con tus cosas y al recogerlas del sofá estas se abrieron y cayó un librito…la curiosidad me ganó y leí las dos primeras páginas -
- Entonces lo sabes todo -
- No, Rei. Cuando supe que eso era muy privado dejé de leer, pero si….sé quien les mató y con qué arma…un arma que conozco perfectamente….y sé que ellos vinieron a esta época desde el pasado...se han juntado con Nagi…y sé que eres del pasado…lo siento -
Rei me miró dando un suspiro de alivio y no sé porque….Rei me estaba ocultando todavía algo pero no le dije nada….ella me lo contaría en el futuro y no me molestó porque no me consideraba digna de saber sus secretos. Rei miró durante varios minutos el correr del rio hasta que reaccionó y después de contemplar un rato el valle que se abría a nuestros pies, empezó:
- Mi madre…era Comandante del Escuadrón de Otomes del Reino de Carthleya. Reino que sufrió mucho hace doscientos años en la época de los trastornos políticos que privaron a muchos hombres de sus medios de vida, y los arrastró la vorágine, de la que sólo pudieron escapar huyendo de su patria, y como al poner el pie en tierra extranjera….a decir Artai…se encontró sin recursos, y sin relaciones en un mundo nuevo, hubo de echar mano de lo primero que se le ofreció. Se convirtió en soldado al Servicio de Artai. Confió a mi hermana mayor a una familia de buena posición que le recibió como una hija….Kenichi Wong se llamaba el hombre que la recibió en su hogar…- a este comentario mis ojos se abrieron como platos y entendí el porque Rei saludaba a mi padre tan respetuosamente…Serguei era nieto de ese hombre…. - …mi madre duró varios años en el ejercito entre peligros y aventuras que le convirtieron en una General y un estratega respetada por sus colegas y temida por sus enemigos. En una de sus expediciones le llevó a Aries y allí trabó conocimiento con Lena Sayers y su Amos Bruce y Sifr Windbloom y se hicieron amigos. En Aries fueron regalados como huéspedes del Rey de Aries y en el palacio Lena y mi madre Shina conocieron a su hijo Rico Elcano. Ninguno de los hijos del Rey tenía su esbelta y majestuosa figura, su valentía sin par y su cabello color dorado le hacía ver como si ya tuviese una corona puesta en su cabeza. Era el encanto de los Dioses y el orgullo de Aries y las jovenes estudiantes ardían en deseos de conquistar sus estudios y convertirse en Otomes de la nueva generación, pero convertirse en su Otome. Más ninguna halló gracias a los ojos de ese chico, porque este amaba a mi madre…Lena también le pretendió y mi madre era la pretendiente más joven, era apenas una chiquilla. También en el corazón de Rico despertaron las perfecciones de la hermosa chica, un cúmulo de sentimientos nuevos, que le impulsaban a seguir las huellas de sus pies, a velar por ella y tratarla con mucho afecto.
Una noche se presentó a ella Lena y le dijo:
- Shina, no es como los demás hijos de su pueblo, de cuyos labios brota la mentira como las boñigas de la tripa del búfalo. Siempre ha hablado la verdad a Lena, su amiga -
- Mi hermana Otome tiene el brazo de una guerrera fuerte, y es la más sabia en el consejo. No está sedienta de la sangre del inocente y yo le he dado la mano de amiga. Hable, pues -
- ¿Ama mi hermana a Rico, el hijo del Rey de Aries? -
- Me es más precioso que todo el poder de las Otomes y las riquezas de este mundo -
- ¿Y será buena para él, no hablará con dureza a su oído, sino que le dará su corazón y al convertirte en su Otome le protegerás contra todas las tormentas de la vida? -
- Yo le llevaré en la palma de mis manos y le sostendré en toda pena y en todo peligro.-
- Lena Sayers conoce el cielo y sabe los nombres y el lenguaje de las estrellas; pero el astro de su vida se ha puesto para siempre, y en su corazón han entrado las tinieblas de la noche, Lena amará a otro pero no de la misma manera con que Ama a Rico pero eso no ocurrirá en un buen tiempo. Los ojos de Rico-sama iluminan a una amiga y sus labios pronuncian el nombre de mi hermana querida. Mi hermana Shina se ha ganado su corazón y yo volveré seguidamente para ver si Rico, el hijo del Rey de Aries es tan feliz como merece serlo. -
Y dando media vuelta desapareció en la oscuridad. Cuando regresó cinco años después, halló a Rico y a Shina, cuyos ojos luminosos decían mejor que las palabras la ventura que gozaban, me tomó a mí, que escasamente contaba unos días, en sus brazos, me besó, colocó su mano, como bendiciéndome, sobre mi cabeza, y dijo:
- Lena velará por ti como el árbol en cuyas ramas duermen los pájaros del cielo y donde hallan los animales protección y abrigo contra el agua de las nubes. Su vida sea tu vida y su sangre sea la tuya. Nunca se paralizará el aliento de su pecho ni la fuerza de su brazo para el hijo de Shina-chan. Caiga el rocío de la mañana sobre sus caminos e ilumine la luz del sol sus senderos para que este camino puro le lleve a un futuro feliz y tranquilo donde nada atente con su felicidad -
Pasó el tiempo y yo fui creciendo; pero a la vez iban aumentando los deseos de ni madre de ver a su hija mayor. Yo tomaba ya parte en los juegos guerreros de los futuros soldados de Aries y aprendía estrategias de combate con mi padre. Mi madre no pudo ya dominar sus ansias y se dirigió Artai, llevándome consigo. Al lado de mi hermana, y en un mundo nuevo, se abrió ante mis ojos una existencia nueva, de la que no creía poder desprenderme jamás, por lo cual mi madre regresó sola a Aries, dejándome en manos de los protectores de mi hermana. Mas al cabo de algún tiempo sentí la nostalgia de mi país, con tal fuerza que no podía resistirla, y en la próxima visita de mi madre para informarnos de que mi hermana y yo habíamos tenido a una hermanita y que tenía cinco años, no aguanté más y exigí que me llevara consigo…mi hermana emocionada se nos unió a la partida.
Al llegar al palacio real de Aries lo hayamos vacio, destruido y arrasado por el fuego, y después de buscar por mucho rato encontramos un campamento en el que el Rey de Aries nos informaba lo sucedido. Ryotaru de Artai, Archiduque de Artai había visitado con frecuencia Aries y había pedido la mano de mi madre pero en Aries no le tenían simpatía, porque era un ladrón que había desvalijado a menudo sus depósitos de oro. Fue, pues, rechazado y se fue jurando venganza. Luego se enteró que el Príncipe era su esposo e instigo a la fuerzas militares de Artai para invitarlos a invadir Aries.
El Ejercito de Artai no le dijo nada a la Otome de Artai y siguieron su consejo, llegó un momento durante la guerra que hicieron una gran jugada y el ejercito que guardaba el palacio fue mandado a un pueblo vecino a parar el ataque que estaban recibiendo dejando el castillo desprotegido y se aprovechó eso para atacar el palacio. Aquéllos sorprendieron a los pocos soldados presentes en el palacio, que saquearon e incendiaron, matando a las mujeres jóvenes y a las doncellas y torturaron y asesinaron a los varones y mi padre lo secuestraron y mi pequeña hermana fue salvada por uno de los soldados de confianza de mis padres. Nosotros de inmediato nos pusimos a seguir las huellas y con ellas debía sernos fácil darles alcance y detrás de nosotros se juntaron más de mil guerreros sedientos de venganza.
En pocas palabras, en el camino topamos con Lena, Bruce y Sifr, que habían atravesado dos países para ver a sus amigos. Al darles mi madre la terrible nueva, volvieron grupas sin pronunciar palabra; pero nunca olvidaré el aspecto que ofrecían aquellas personas…Ai, Sifr, Bruce, Lena y Shina, que, mudos e inmóviles, pero con el corazón hecho llamas, perseguían al enemigo con premura angustiosa y terrible. En el limite actual de Artai y Aries habíamos dado alcance al ejército, que esperaban solamente la llegada de la noche para hacer alto y acampar. A mí se me encargó la custodia de los carros de viaje y nuestras provisiones; mas la impaciencia me devoraba, y cuando creí que llegaba el momento del ataque, me deslicé por entre los árboles hasta el borde del bosque, donde oí el primer disparo y el primer poder de mi madre como Otome con un hijo….Fue una noche espantosa; el enemigo nos superaba en número y los aullidos guerreros no cesaron hasta que empezó a clarear.
Yo, que había presenciado la confusión de aquellos combatientes, oí los gemidos y lamentos de los heridos y moribundos, y pidiendo a Dios misericordia me hundí en la hierba mojada. Luego regresé al puesto de guardia. Nuestro campamento estaba destruido y en llamas. Un terror indecible se apoderó de mí, y al oír de nuevo los aullidos de triunfo del enemigo, comprendí que habíamos sido derrotados. Me escondí entre la maleza hasta que fuera de noche, para examinar entonces el lugar en que se había desarrollado el combate.
Un silencio profundo reinaba en él, y la clara luz de la luna plateaba las caras de los que yacían inmóviles en el suelo. Penetrado de espanto fui examinándolas una por una hasta que encontré... a mi padre…con el pecho atravesado de un balazo, y estrechando entre sus brazos a mi hermana mayor…cuyo pecho estaba atravesado por una espada Otome grotesca. El sentimiento que me produjo su encuentro me privó del sentido, y caí desmayado sobre sus cadáveres. No sé cuánto tiempo estaría allí. Vino el nuevo día, pasó una noche, y volvió a amanecer cuando sentí pasos que se acercaban. Me incorporé un poco y descubrí a Sifr y a Bruce bastante heridos siendo ayudados a caminar por mi madre y Lena. Lena y Shina tenían sus trajes de Otome destrozados y cubiertas de heridas. Habían tenido que ceder ante la superioridad numérica del enemigo, que les había cogido prisioneros y les arrastraba consigo, pero por fin habían logrado escapar.
Rei suspiró profundamente y clavó su mirada a lo lejos con expresión terrible. Luego, volviéndose a mí, me preguntó:
-¿Qué harías si mataran a tu padre? -
- Entregaría al asesino al brazo de la justicia -
- Bien; pero cuando este brazo, como ocurre en Artai, es demasiado débil o demasiado corto, hay que prestarle el brazo propio. -
- Hay gran diferencia entre el castigo y la venganza, Rei: el primero es una consecuencia necesaria del pecado, y está íntimamente unido a la imagen de la justicia divina y humana... La segunda, en cambio, es odiosa y priva al hombre de los altos privilegios que le hacen superior al animal -
- Hablas así porque ni la sangre real de Aries, ni la sangre de Shinso-sama corre por tus venas. Cuando el ser humano se despoja voluntariamente de esos privilegios para convertirse en bestia feroz, hay que tratarle como a tal y perseguirle hasta matarle. Cuando aquella noche aciaga enterramos los dos cadáveres, los tres sentimos palpitar en nuestros corazones un mismo sentimiento: el de un odio salvaje contra el asesino de nuestra ventura; y fue Lena la que expresó nuestro Quíntuple juramento al decir con voz ronca:
- La Otome de Windbloom ha escarbado en el suelo y ha encontrado la flecha de la venganza. Su mano se ha crispado, su pie es ligero, y su poder tiene la rapidez del relámpago. Buscará, indagará, y encontrará al asesino del príncipe de Aries y de su hija, y cogerá su vida a cambio de la vida de Rico, el hijo del Rey de Aries y de Ai la Princesa heredera -
- ¿Fue Ryotaru quien les mató? -
- El mismo. En los primeros momentos de la lucha, cuando parecía que iban a quedar vencidos los sorprendidos soldados de Artai, la Otome de Ryotaru mató despiadadamente a mi padre quien antes de morir canceló el contrato con mi madre gracias a las enseñanzas de la abuela y una Otome de Ryotaru mató a mi hermana quien trató de protegerle mientras él cancelaba el contrato. Lena vio esta escena, se precipitó sobre ellos, mató a la Otome de Ryotaru, y habría acabado con su vida si en aquel momento él no hubiera cancelado el contrato de una manera extraña y no le hubieran atacado otras Otome por la espalda, y tras una lucha desesperada no la hubieran hecho prisionera. Para mayor burla le dejaron en las manos las joyas de la Otome muerta a manos de Lena durante esa batalla…Lena me regaló esas joyas más adelante, que no se ha separado de mí desde entonces, ya sea recorriendo las calles de Artai o ya sea luchando por Zipang…todos la conocen como Kaze Arigatai…. -
Rei suspiró y dijo:
- En el pasado había jurado proteger a la descendencia de Kenichi Wong, Lena Sayers y Sifr Windbloom….no lo pude hacer….no les pude proteger…ahora mi deber es proteger a Nina Wong bisnieta de Kenichi Wong…..la familia que cuidó de mi hermana….Arika Yumemiya….descendiente de Lena Sayers…proteger lo último que me queda….la descendencia de Sifr Windbloom desapareció de mis sentidos...con uno de los ataques del Harmonium…no lo pude contrarrestar pero algo me dice que la descendencia real de Sifr no se ha perdido todavía y que aún puedo cumplir mi palabra…se que tu tuviste que ver con lo del Harmonium…pero no te tengo odio ni rencor…Nina…no sé porque…siento que no fue tu culpa….fue la de ese malnacido de Nagi…nieto del hombre que mató a mis seres queridos…-
Rei me miró con dolor y murmuró….
- Los que me quieren siempre terminan muertos…debo atraer la muerte…no debo tener amigos…así nadie saldrá herido y nadie llorará mi muerte… -
Yo me enfurecí ante ese comentario y le pegué una cachetada. Al instante me arrepentí de ello al ver su rostro lleno de lágrimas de dolor. Yo me mordí los labios irritada conmigo misma. Rei no dijo nada más. Simplemente estaba allí sentada mirando el infinito. No dije nada ya que estaba muy afectada por la historia de su familia y mi mente se negó a criticar su actitud y forma de ser de alguna manera. La vida había sido muy dura para ella y su pasado muy terrible. Duramos un par de minutos en un silencio completo…Rei tratando de controlar sus emociones mientras yo se lo permití, pero también estaba pensativa por la historia contada y por el último detalle contado…de su juramento no cumplido…eso me llenó de inmensa vergüenza y pesar….no merecía estar sentada a su lado ni de estar ante la presencia de alguien tan fuerte y noble como ella. Para colmo ella poseía en sus venas la sangre de Shinso-sama, la sangre real de Artai, la sangre real de Aries...sangre que le da el derecho de ser la Reina de Aries o de Artai. Finalmente Rei me miró y dijo:
- Eres la primera persona a quien le cuento esto. Por favor mantenlo así, incluso no le cuentes nada a Arika….no todavía…ella no debe saber que le conocí… -
Yo asentí con la cabeza accediendo a sus deseos. Ella sonrió y continuó…
- Nina-chan….te tengo una pregunta…. –
Yo le miré y noté que se puso cohibida. Yo sonreí y le dije graciosamente…
- Dispara –
- ¿Quieres seguir siendo una Otome? –
Esa pregunta me hizo dar un respingo. Ella lo notó y bajó su cabeza nerviosa sabiendo que esa pregunta era muy sensible para mí. Sin embargo me parecía justo que lo supiera. Ella me podía aconsejar….
- Rei….yo…veo que mi padre ya no necesita de mí y puede vivir solo sin que nada le falte…sin embargo…muchas personas murieron por mi culpa…por mi egoísmo…incumpliste un juramento debido uno de los ataques creados por mí y el Harmonium….tus padres murieron gracias a los abuelos de Nagi…yo apenas quiero proteger a mis amigos y recuperar algo de los errores que he cometido. Que he cometido con Arika….contigo…con muchas personas…con Erstin…tú no sabes cómo quedé en deuda con ellas…a mi propio padre aunque no lo recuerde…esto que hago, no lo hago por mí, lo hago por ellos. Eso es todo, solo quiero que vivan felices con sus familias y ese deseo arde dentro de mi pecho. Si es necesario acabaré el contrato rompiendo la gema y derramaré cada gota de mi sangre si es necesario para salvar a las personas inocentes -
Rei estaba silenciosa después mi argumento. Finalmente alzó su cabeza y su rostro había recobrado ese vigor y esa felicidad con la cual le había conocido. Ella me dijo:
- Que así sea. Nina Wong…veo que la gente cambia…cuentas con todo mi apoyo en esto…seguirás siendo una Otome…sin embargo mi Amo quiere hacerte una propuesta lo mismo que Mashiro-sama… -
- ¿Cuál es? –
- No te lo puedo contar todo ya que no está decidido totalmente. Lo que si te puedo decir es que mi Amo desea que tú seas la segunda Otome de Zipang…eso si aún quieres ser una Otome –
Mis ojos se abrieron como platos ante esto totalmente sorprendida de que se pudiera hacer ese cambio. Rei leyó mis ojos perfectamente diciendo con una sonrisa….
- Yo puedo hacer ese cambio. Además necesito de ti para que cuides del Amo Takumi cuando yo no esté…ese es mi único deseo egoísta…. -
Yo la miré seria y por toda respuesta ella me contestó….
- Después lo sabrás….no te lo digo ahora….me matarías al saberlo… -
Ella bajó su cabeza apesadumbrada. Yo alcé una ceja ante esto y recordando a Arika que me había perdonado a pesar de todo lo que había hecho….me había sacado del control de Nagi. Me juré en ese momento ser su bastón…le ayudaría a cumplir el trabajo que hubiera venido a hacer aquí. Ella me iba a ayudar a volver a ser una Otome oficialmente…no sabía cómo pero intuía que lo iba a hacer. Rei y yo nos abrazamos como un par de hermanas. Ella se durmió en mis brazos y supe que era por la fuerte historia que me había contado que la había acabado no solo físicamente sino moralmente y yo desde nuestra posición privilegiada puede seguir haciendo nuestra guardia sin despertar a mi nueva gran amiga. La miré un momento dormir y su fuerza se me contagió…ella sí que era una guerrera…en verdad Rei si que merecía el titulo de Otome…su historia me lo demostraba…
Media hora después dos guardias se acercaron al árbol como si supieran que este era nuestro punto de guardia y me ayudaron a bajar a Rei del árbol y a llevarla al interior de la casa. Mi padre y tres soldados le prepararon un cuarto al lado mío, luego un soldado y yo entramos al cuarto arreglado y el hombre me ayudó a cambiarla. El hombre me ayudaba a moverla mientras yo la cambiaba y respetuosamente desviaba la mirada a otro lado y lo agradecí silenciosamente. Finalmente Rei quedó acostada en la cama y el soldado le hizo una reverencia a Rei y a mí antes de retirarse. Yo me senté en una silla al lado de la cama y suspiré. Abrí el sobre que Rei me había entregado y comencé a mirar su contenido. Había cuatro sobres pequeños con tres cartas. Cogí la primera caja para ver su tapa. Era de Arika. Abrí la carta…
Nina-chan
Nina-chan cuanto tiempo sin verte….es casi un año…regresa por favor….Rei es la que me tiene informada respecto de tu persona y de tu vida y aún así no me dice muchas cosas porque dice que no es de ella contarlas. Yo le creo…por favor regresa a mi te extraño mucho….me siento muy sola…..ya no tenemos a Erts…- Noté que la hoja estaba llena de lágrimas y eso me hizo sentir terriblemente mal….me trajo los recuerdos de la carta de Erts…me juré dejarle aquella carta de despedida. Volví a la carta - ….Nina….muchas personas todavía te estiman. Muchos todavía creen en ti y en tu palabra…entre ellas Rei y cuatro de los cinco pilares. Aquí la escuela sigue igual y hasta monótona. Solo es Rei la que me hace un poco feliz…es una chica estupenda y muy fuerte…ojalá fuera como ella…sin embargo ella a pasado por muchas cosas…se amable con ella….debes saber esto…Mikoto, Mai y los pilares destruyeron el Harmonium así que no te preocupes por hacerle daño a alguien. Si lo deseas puedes regresar te estaré esperando…una última cosa cuídate mucho y cuida muy bien a tu padre…si no regresas, lo único que exijo de ti….es que seas feliz. Tu regalo se encuentra en el sobre espero que te sirva de recuerdo…
Arika Yumemiya
Otome de Windbloom
Dejé la carta encima de la cama y abrí el pequeño paquete y para mi sorpresa noté todos los apuntes de la escuela desde que había salido. Al lado había un pañuelo con mi nombre bordado en él. Ese pañuelo trajo lágrimas a mis ojos entendiendo todo…Arika hacía eso con solo sus verdaderos amigos y a quien consideraba su familia. Tomé el pañuelo en mi pecho y sentí en ese momento la calidez y la amistad de Arika. Luego fui al otro paquete y para mi sorpresa era del Rey Takumi. Abrí la carta:
Nina Wong
Un placer por fin de entrar en contacto con una joven que lo da todo por sus seres queridos. Si, hiciste cosas terribles, no lo niego, pero sabes….fueron grandiosas. Eso necesito…a una gran guerrera. Acepté como mi Otome a Rei por muchas cosas y ella a cambio de sus servicios me pidió el favor de tomar una segunda Otome. Rei se ausentará en un año y creo que para siempre. Por eso desea que quede bien protegido y ella pensó que tú pudieras ocupar su posición en el futuro. La espero en el palacio de Windbloom donde su actual Ama se encuentra, eso si deseas venir. Es una sugerencia, no lo tomes como una orden ya que se lo que es cuidar de un padre. Eso mi Otome me lo dejó en claro. Si decides venir contesta la misiva y mándala con Rei. No te preocupes será privada, ella nunca lee mis cartas y confío en ella con mi vida. Deseo poder recibir tu respuesta y si no es así, se feliz…estoy de acuerdo con mi Otome y eso solamente exigiremos de ti.
Atte:
Takumi Tohika
Rey de Zipang
Abrí los paquetes para ver los regalos de Takumi, Rei, Mashiro y a mi sorpresa de Natsuki. Mashiro me había mandado unas cuentas bancarias que había abierto para Arika y para mí donde podíamos ahorrar el dinero que ella nos iba a pagar por nuestros servicios. Natsuki me mandó un televisor en miniatura y me dijo que en un par de días lo tuviera prendido por la tarde a la salida de clases en Garderobe que me iba a dar una sorpresa. El regalo de Rei fue una cadena extraña con un ave como talismán. Era de color azul y al mirarlo bien parecía que el ave estuviera envuelta en llamas. Era la misma ave que había visto en el tatuaje de Rei y eso me llenó de extrañeza. Al lado de la carta del Amo de Rei había un paquete que destapé y noté un libro y al abrirlo advertí con asombro que había dos joyas. Una de color casi blanco y otra de color arena. Encontré una nota dentro del libro…
Cuida de estas joyas hasta que encuentres a alguien digno de ellas como yo lo hice con el Cielo Azul y el Viento Bendecido. Haz lo mismo que yo y sé que puedo confiar en ti. Mi hijo…bueno…mi hija para ustedes jejeje…si Rei confía en ti, Lena y yo lo haremos…porque el juicio de mi hija sobre las personas nunca falla, por eso puedo dejártelos con la confianza de que harás lo correcto.
Shina Himeno y Lena Sayers
Solté esta carta muy sorprendida por tener algo escrito por la hija de Shinso-sama. Comencé a temblar del puro susto de tener esas joyas bajo mi cuidado. Noté que de la oreja de Rei soltaban resplandores suaves y las joyas dentro del libro contestaban. Yo sentí lo mismo venir de mi oreja y veía el resplandor por el rabillo de mi ojo. En ese momento mi corazón se tranquilizó por completo y me sentí tan relajada como nunca lo hubiera estado en mi vida. Miré a Rei guardándome la nota. Se la tenía que mostrar a Rei cuando despertase…después de todo era una misiva de su madre. La miré dormir y sonreí tiernamente. Salí de su cuarto silenciosamente…..mañana sería otro día.
