¿Cómo demonios se había visto envuelta en semejante locura?

Ella sabía todo sobre el gobierno, estrategias militares, vampiros, la corte; era excelente en todo lo referente a lo que significaba ser el representante de la familia Hellsing y la organización, pero no tenía la más mínima idea sobre como cuidar un bebé

¿Cómo, en el nombre del cielo, había permitido que la convencieran?

Bueno, si se detenía un momento y lo pensaba ella misma se había metido en eso, había hablado sin pensar y ahora pagaba las consecuencias. Ella misma se había ofrecido como voluntaria para eso, cosa que la había convertido en blanco de las burlas de Alucard más que de costumbre.

Pero ahora no se sentía tan valiente, había sido fácil llenar los formularios, había pasado todos los exámenes impecablemente, pero los nervios eran traicioneros, todo estaba listo para que llegara una nueva personita a la mansión Hellsing, todo excepto la persona encargada de cuidar al nuevo inquilino

Era la última reunión de la reina con el parlamento y los caballeros de la mesa redonda, ella detestaba esas reuniones, en especial cuando en ellas se tocaba el tema del heredero de Hellsing, cosa que había pasado en la última "por el amor de Dios tengo veintisiete años… denme un poco de tiempo" pensó Integra cuando comenzaron a decir que si no se apresuraba nunca se casaría, hasta que a uno de los miembros del parlamento, Sir Haltom, se le había ocurrido abrir la boca

–de todas maneras, puede casarse y quedar embarazada, pero no envidio a la criatura, después de todo es obvio que Sir Hellsing carece de instinto maternal –dijo mirándola burlonamente

–imposible, todas las mujeres tienen instinto maternal, nacemos con él, sólo que algunas lo tienen a flor de piel y otras no –dijo la reina mientras Integra degollaba al hombre con la mirada

–vaya, eh aquí un debate, algo digno de discutirse… todas la mujeres tienen o no instinto maternal –dijo otro, Sir Pinewood

–pues yo creo que Sir Integra será una madre excelente –dijo el joven Lord Michael Andrews, había estudiado con Integra desde el jardín de niños y eran buenos amigos, todos creían que se casarían, pero eran demasiado cercanos, y el cariño que se tenían era lo más comparable al cariño entre dos hermanos que al de una pareja, era el único de esa pandilla de buitres que se había quedado con ella en todo momento

–Bueno, sólo hay una forma de comprobarlo –dijo Sir Harrington

–y ¿Cuál es, si se puede saber? –preguntó Sir Haltom

–Muy simple –dijo Sir Harrington

–yo me he topado con este programa de reubicación de niños, casi todos bebés menores de seis meses, cuyas madres son incapaces de brindarles una vida digna, por lo que se reubica a los niños en familias y con personas que puedan cuidarlos, si después de una año de prueba todo sale bien, se firman los papeles de adopción y el niño en cuestión pasa a ser parte de esa familia –dijo el hombre sonriéndole a Integra por detrás de sus gafas cuadradas

–me parece bien, sería algo interesante –dijo la reina, al escuchar esto Integra sintió un nudo en la garganta "no sé si pueda criar niños propios… y ahora me quieren criando niños ajenos" pensó nerviosa

–ja, sería un buen chiste, Sir Integra Hellsing con un bebé, eso tengo que verlo –dijo Sir Haltom burlonamente y a Integra le ardió el rostro

–pues estoy dispuesta a intentarlo y estoy segura de que podría proveer a cualquier bebé de todas sus necesidades, físicas e intelectuales –dijo Integra desafiante

–y ¿emocionales? –preguntó el hombre

–tal vez no sea la madre, pero puedo hacerlo –dijo Integra

–en mi opinión Sir Integra es una mujer que podría darle a cualquier niño una crianza mejor que la que muchos de nosotros podríamos, la conozco bien como amigos íntimos que somos y ella es una persona con mucho amor y cariño para darle a un bebé –dijo Michael sonriendo, Integra lo miró agradecida

–pero les recuerdo que hablamos de un niño, no un perro –dijo Sir Pinewood

–Eso lo sé, gracias –dijo Integra comenzando a molestarse e intentando no explotar

–de todas formas, Sir Hellsing, dudo que pueda tener a ese bebé por un mes –dijo Sir Haltom

–de cualquier manera, su majestad, solicito que me permita asociarme al programa de reubicación infantil –dijo Integra calmándose de nuevo y mirando a la reina

–permiso concedido, Sir Integra… y le deseo buena suerte, tanto a usted como al bebé –dijo la reina ante la estupefacción de todos. La sesión se dio por terminada y cuando salían del salón Integra se acercó a Sir Harrington

–me preguntaba si podría ponerme en contacto con los encargados de ese programa, Sir Anthony –dijo Integra mirando al hombre

–oh, cuando quiera Sir Integra, el jefe del programa es amigo mío, y estoy seguro de que usted será una madre fabulosa –le dijo el hombre sonriendo.

Al siguiente día Integra recibió una llamada de los encargados del programa para programar una cita con el encargado, después se le practicaron exámenes físicos y psicológicos, y varias pruebas para asegurarse de que el niño no sufriría ningún tipo de problema, en resumen, querían ver si era una persona estable.

Fin Flash back

Hacia veinticuatro horas se sentía bien, calmada, capaz de todo, sería una excelente madre, pero todo su convicción se había ido junto con el jabón de la ducha de en la mañana.

Integra miró su reloj de muñeca, las cuatro en punto, la encargada por el servicio social llegaría en una hora, fue a su habitación y decidió que debía recibir al niño con otro tipo de ropa, y que, de hecho, tendría que abandonar en gran medida sus trajes formales. Tomó un pantalón blanco, que hacía años no usaba y se puso una blusa azul cielo, que mostraban más su figura, excelentemente formada por el entrenamiento militar, se recogió el cabello con una diadema azul igual que la blusa, y se miró al espejo

–Te ves sumamente maternal, Amo –dijo una voz detrás de ella

–Pues sí, ese es el punto, y te aconsejo que te acostumbres a ello… la próxima vez que haya una reunión cóseme la boca –dijo ella mientras volteaba a ver al vampiro, sentado sobre su cama "me apuesto lo que sea a que le gustaría hacer otra cosa en esa cama aparte de sentarse" pensó ella volviendo al espejo

–creo que me leíste la mente, Amo –dijo el vampiro riendo

–pues cuanto lo lamento, vas a quedarte con las ganas –dijo ella, que de pronto comenzó a carcajearse, Alucard la miró con impaciencia y susurró

–parece su bisabuelo –él la miró molesto porque ella no dejaba de reírse como loca, la tomó por los hombros y la zarandeó un poco

–Amo, reacciona –le dijo mientras ella comenzaba a calmarse un poco

–jajaja, lo sé… ya lo sé… son los nervios… jaja –dijo ella recargándose en el pecho de Alucard para no caer al piso

–ay… si digo que se parece a su bisabuelo no lo digo por otra cosa sino por sus ataques de risa –dijo él frotándose la frente con impaciencia con una mano y sujetándola con la otra

–ay… ya cállate –le dijo ella controlando un poco su risa

–fabuloso… ahora que puedes respirar con normalidad… déjame decirte que sería mejor si tuvieras un heredero propio… si quieres yo puedo ayudarte con eso –dijo él sonriendo maliciosamente mientras la abrazaba por la cintura, ella le lanzó una mirada asesina que decía "ni madres", en ese momento Walter entró en la habitación, palideció en un segundo al ver a Alucard abrasando a Integra mientras ella estaba perfectamente roja

–no es lo que crees… la señorita tuvo un ataque de risa… alguien tenía que evitar que se revolcara en el suelo –dijo Alucard apartándose de ella

–sí, claro… y como tú eres tan caritativo y tan poco aprovechado de la situación me ayudaste –dijo Integra, que era la impaciente ahora

–señorita, veo que ya se ha preparado para recibir al bebé, solo le aviso que la señorita Dewey, la trabajadora social, llegara de un momento a otro –dijo Walter

–fabuloso, la espero en la sala –dijo ella y Walter asintió saliendo de la habitación "ese par parecen casados" pensó mientras caminaba por el pasillo.

Un par de minutos más tarde Integra estaba en la sala principal de la mansión, era un salón muy lujoso, Integra se sentó en uno de los sillones de piel y miró a Alucard que estaba en el sillón frente a ella

–quiero que te comportes, por una vez en esta vida ¿Es posible que te comportes? –le dijo mirándolo nerviosa

–tranquila, yo sabré que hacer –le dijo sonriendo

– ¿Por qué no vas a ver si te puedes dormir un par de horas? –Le dijo ella

–no puedo, Amo, ya llevaba una hora despierto cuando fui a verte –dijo él "no es posible… un vampiro con insomnio" pensó ella desesperada

–no es insomnio… hace mucho que no tengo un verdadero reto… llevo mucho tiempo sin hacer nada interesante –dijo él tocando la rodilla de Integra

–y ¿no te interesa irte a platicar un ratito con Seras? –Dijo ella quitando la mano del vampiro, que había pasado de su rodilla a la mitad del muslo

– ¿de qué? –dijo él haciéndose tonto, pero ese juego lo podían jugar dos

–pues…no sé… de si prefieren O+ o AB-… realmente no me interesa de que hablen los vampiros entre ustedes y tampoco averiguarlo… y tomando en cuenta tu historial menos –dijo ella sin verlo, en ese momento Walter entró seguido de una mujer de color que llevaba una silla de bebé en brazos, Integra y Alucard se levantaron y Alucard salió de la habitación detrás de Walter

–hola, buenas tardes, usted debe ser la señorita Dewey –dijo Integra estrechando la mano de la mujer

–sí, Stephanie Dewey, mucho gusto –contestó la mujer sonriendo

–tome asiento por favor –le dijo Integra señalando el sillón detrás de la mujer, Stephanie dejó la silla para bebé, en dónde dormía una niña de no más de tres meses, pelirroja

–oh, que hermosa es –dijo Integra mirando dormir a la niña

–Sí, es adorable, y es una niña muy linda, casi no llora –dijo la mujer sonriendo

–Nunca me dijeron que sería una niña –dijo Integra

–espero que no le moleste –dijo Stephanie mirando a Integra de reojo

–no, para nada, me encanta la idea, de hecho –dijo Integra, que no le quitaba los ojos de encima a la bebé

–me alegro, hay algunas familias que exigen a un bebé de determinado sexo, y a veces eso no se puede conceder, no controlamos el género de los niños que reubicamos –dijo la mujer

–Sí, lo entiendo, de hecho se supone que yo iba a ser niño, pero sorpresa, sorpresa, soy mujer –dijo Integra algo nerviosa

–Bueno, yo debo pedirle que firme estos papeles antes de dejar a Margaret en su custodia –dijo Stephanie tomando unos papeles de su portafolio

–entonces, el nombre actual de la niña es Margaret Clarkson cumple los cuatro meses en una semana, y si todo sale bien, su nombre cambiará a Margaret Hellsing –dijo la mujer mientras Integra firmaba según sus indicaciones mientras la niña despertaba, de inmediato miró a Integra con sus enormes ojos verdes

–Bueno, Sir Integra, creo que eso es todo, como ya ha visto, la fecha de nacimiento es el doce de febrero, espero que recuerde que recibirá visitas mensuales para revisar a la bebé –dijo la mujer levantándose, Integra tomó a la niña en brazos y la mujer revisó rápidamente su postura

– ¿ha cuidado niños antes? –preguntó Stephanie

–realmente no –dijo Integra mientras la niña succionaba su chupón

–pues déjeme decirle que son pocas las personas que pueden cargar a un bebé con tanta naturalidad sin haber cuidado niños antes, creo que lo hará excelente, ya no me da nervios dejar a esta niña aquí –dijo la mujer mientras ella e Integra salían del cuarto.

Walter acompañó a la mujer a la salida mientras Integra regresaba a la sala, dónde se encontró con Alucard sentado de cabeza en el sillón

–Hola –le dijo y dejó a la niña en su silla

–es muy linda ¿no? –le dijo sin prestarle mucha atención

–Sí, hermosa –dijo Alucard sin ver siquiera a la niña

–Pero tú sabes que opino respecto a todo esto –dijo sonriendo

–Pues tu sabes mi opinión acerca de tu opinión –dijo Integra (a quien de hecho no le importaba lo que él pensara)

–touché, eso dolió Amo –dijo él riendo, Integra tomó a la niña en brazos de nuevo, se sentó en el sillón mientras la niña sujetaba su dedo con fuerza, Integra sonrió con ternura (cosa que ella nunca había hecho) mirando a la niña

–Margaret… que nombre más bonito –dijo Integra sonriéndole a la niña

–Sí… precioso –dijo él indiferente

–no tienes por qué sentirte celoso ¿sabes? –le dijo Integra, que lo conocía demasiado bien

– ¿y quién dijo que estoy celoso de esa niña? Sólo estás embobada con ella por la novedad de tener un bebé… te cansaras después de un par de semanas –le dijo él sonriendo burlonamente mientras desaparecía

–Tonto –dijo Integra por lo bajo mientras salía de la habitación con la niña en brazos. La llevó a su nueva habitación y la puso en su cuna.