CAPITULO PRIMERO
Era curioso como a finales de curso, a pesar de acercarse la plenitud del verano, los últimos exámenes y con ellos las últimas noches en vela, siempre traían del brazo al mal tiempo. El lloviznar, que hacia suaves repiqueteos en los cristales de todas y cada una de las ventanas de la biblioteca, y tras el paso tiempo se había convertido en una fuerte tormenta, era amortiguado por la densa piedra al desnudo que velaba por la integridad de la estancia. Pero poco importaba, ya tenia decidido y aceptado pasar la noche prácticamente entera entre los libros...
Y, aunque aun no lo sabia, también con ella.
Bufó levemente apartando algunos mechones rebeldes de su áurea cabellera, retirándolos hacia atrás con el resto en un gesto de autoafirmación a la vez que sesgaba los ojos en una mueca de superioridad. Muy a su pesar, además de no ser vista, o mas bien el propio Draco diría que "disfrutada" por los pocos presentes, pronto quedo truncada ante la llegada de su forzosa y nocturna acompañante.
De rasgos finos y algo ovalados, de los que solo sus mejillas redondeadas resaltaban por su casi perenne cariz sonrosado, su túnica apenas le hacia justicia a ese cuerpo que llevaba ya unos años tomando una llamativa sinuosidad, cubierto por el calido abrazo del algodón... Por unos instantes su naturaleza le jugo una mala pasada, enturbiando su mente. Entorno los ojos y dejo que su vista se nublase a medio camino del sopor y la fantasía, pensó envidioso en dicha tela y lo que podría haber debajo...
Pero tenía cosas bastante menos interesantes en las que enfangar sus pensamientos, por alguna irónica y muy desagradable razón, que sin duda achacaba a su funesto padre y posiblemente interés de pasar mas días sin tenerle en casa, en comandita con la profesora McGonnagan habían decidido unilateralmente que alguien de su talla no podía obtener esa calificación tan paupérrima en Transformación, por lo que a pesar de todo, le engrilletaron la tarea de mejorar su nota final de 5º curso…
Que además de esto, se hayan permitido la pesada broma de conseguir que Hermione haga de practicante con el, posiblemente a lo largo de los primeros años le hubiese supuesto algo mas que una ulcera y la defunción de su creído status social, pero los años no pasan en vano. Hermione era ahora en 5º curso una tibia belleza de piel pálida, rasgos de quizás un toque algo infantil, y una turbulenta cascada de pelo en un crepitante tono castaño.
Sujetando contra, según lo que a sus oídos había llegado, su pequeño pero firme y turgente busto unos tomos de Transformación que yacían gustosos bajo el abrazo de sus manos, a su llegada hizo un leve gesto con la cabeza. Sin llegar a realizar ningún sonido, movió la boca en un silencioso "hola" que al terminar dejo sus, clareados por el excesivo paso del tiempo en dependencias similares a esta, labios en una sonrisa.
No le fue necesario hacer de tripas corazón, ni siquiera necesito hacer uso de una falsa cortesía o conducta hipócrita tan arraigada en su sangre. Cuando escucho sus silenciosos pasos por la estancia, encaminándose a donde el se encontraba, tras devolverle una sonrisa similar le cedió uno de los asientos al lado de los cuales estaban varios grupos de libros y material de estudio, iluminados por una titilante luz que emitía la cimbreante llama sobre un sencillo candil en la alargada repisa de la mesita, repetido en todas las demás de la amplia estancia donde más bien pocos estaban encendidos haciendo compañía a otros tantos escasos alumnos.
-He oído que esta parte del examen, en realidad la tenias aprobada…- Musitó con la misma suavidad con la que depositaba los tomos al lado de donde iba a sentarse.
-…-
Suspiro tras recogerse puntillosamente el vuelo de la túnica y sentarse, girando la cabeza para mirarle. -…Así que, supongo que has vuelto a meterte en algún problema- Antes de darle tiempo ni tan siquiera a responder.
Gesticulo con una mano, quitándole importancia a su último comentario, aprovechando ese mismo gesto para mover el pelo que evitaba que sus ojos de profundo color café mirasen directamente a los de Draco, y acompañarlos de un gesto casi insultantemente condescendiente. -De todas formas, tranquilo, no es asunto mió… Yo también sacare beneficio de esto, no esperaba obtener unas "practicas" para el profesorado, prácticamente en el cenit del quinto curso!-
Entrecerró los ojos en signo de sincera alegría por "usarle" a el como instrumento para sus propósitos. No pudo evitar sonreír a la par que ella, más que para devolverle el gesto, por la simple idea de pensar que, en términos mas retorcidos, eso solía ser lo que delimitaba su quehacer diario.
-Bueno…- Tomo aire y evito que ella continuase hablando más de la cuenta -…Tal y como dices, no es asunto tuyo.- Sonó tajante, para evitar de forma preventiva comentarios similares a posteriori. -Habría podido yo solo tranquilamente de no ser porque mi padre parece estar "disfrutando" demasiado de estos últimos días antes de mi regreso… Y quiere alargar sus vacaciones.-
Cada parte de su alegato estuvo acompañado de varios gestos que claramente tenían connotaciones a la actitud no tan secreta de su padre por dejarse caer siempre que le era posible en placeres carnales, gestos los cuales produjeron una mirada fruncida de desaprobación por parte de Hermione, a pesar de lo cual, no pudo terminar de borrar por completo la sonrisa de su cara.
Por unos instantes recordó como efectivamente entre sus propias amigas se había hablado de ese asunto… Y las noches vacías de compañía y llenas de soledad en las que su cuerpo tembló bajo el poder de sus propias manos y un uso muy particular de su varita, con el apuesto padre de Draco en su calenturienta mente, recorriendo cada rincón de su sedosa y blanquecina piel, en mucha ocasiones perlada de pasional sudor.
FIN DEL CAPITULO PRIMERO
Aqui os dejo el 1º episodio del 1º fic que cuelgo, por recomendacion de un amigo... Asique espero que todo salga bien y tener alguna review! Si veo que va por buen camino, seguire adelante con la historia... Disfrutarla.
