Ola he aquí otro fic que traigo para ustedes. No les quito mas su tiempo asi que a leer!

Los personajes de Bleach no me pertenecen, son todos obra de Tite kubo-sama

Recomendación : escuchar la canción Broken de Evanescence.

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El evento más esperado por el mundo de la moda, estaba dando lugar en la enorme ciudad de Tokio. Era aquí donde los más grandes diseñadores del mundo, mostraban sus mejores trabajos en una sana competencia para ver quién era el mejor. La enorme pasarela digna de tal ocasión, brillaba con esplendor, las modelos mostraban con porte orgulloso las finas prendas echas con las mejores telas. Miles de cámaras captaban con detalle todo lo que ocurría en esa gran pasarela. Como todo evento importante, solo la más alta sociedad estaba ahí, ricos empresarios y nobles eran los invitados. Estos estaban situados a un lado de la pasarela para poder observar a lujo de detalle el desfile, meseros los atendían con cordialidad y respeto. Llevándoles copas con la más fina champaña, o uno que otro bocadillo.

Era una tranquila velada a los ojos de todos. Aunque detrás de la pasarela, para ser exactos en los camerinos. Se sentía la tensión y los nervios de todas aquellas hermosas jóvenes modelos, pues aquí tenían que lucirse para poder captar la atención de los más grandes iconos de la moda. La noche transcurrió tranquila, ya casi era hora del gran cierre, donde debían mostrar su mejor prenda.

-Escúchame bien Momo, has estado perfecta pero es momento de que te robes la atención ¿De acuerdo?- Decía. El famoso diseñador Kira Izuru a su modelo estrella Hinamori Momo. Este solo asintió, era su turno de brillar, tomo su postura y salió, vestía un hermoso vestido strapple de color melocotón, largo hasta los tobillos. Con finos detalles de piedras en la parte del busto. Una fina capa de maquillaje nada exagerado en su rostro hacia resaltar sus hermosas orbes chocolate. Su cabello lo tenía recogido en un chongo, finos mechones rizados caían a ambos lados de su rostro. En si la joven logro captar con su belleza la mirada de muchos, termino su recorrido como toda una profesional, el sonido de aplausos inundo el lugar.

-¿Cómo te sientes? ¿Estás bien?- Cuestionaba su diseñador a la joven modelo que intentaba recuperar el aliento. Tomo una botella de agua y se la paso, la castaña bebió casi todo el vital líquido. Una vez que se sintió mejor le devolvió la mirada al rubio.

-E-estoy bien Kira-kun y dime ¿Qué tal lo hice?- el rubio tomo ambas manos de la chica entre las suyas y la miro fijamente a los ojos. –No hay nada más hermoso que yo allá visto en mi vida, hasta este momento que tu.- Beso la palma de la joven. -Momo tu ganaras este concurso.- Termino de decirle, ya que aunque ella no lo supiera, no solo era su modelo estrella, también era la mujer que amaba y se lo demostraría.

Hinamori solamente le sonrió de esa manera tan dulce que solo ella podía, hubiera seguido apreciando la belleza de la castaña pero fue en ese momento que escucharon como el presentador anunciaba a la última participante.

-Muy bien, sé que esta noche ha estado fantástica al mirar a estas hermosas jóvenes modelar, pero ya es hora de terminar y de elegir a la ganadora. ¡Damas y caballeros con ustedes, la última participante, la modelo estrella de la línea de modas Ayesawa Kurosaki Karin!- En ese momento todas las miradas se posaron en la joven que modelaba un vestido color negro largo de tirantes, en la parte de atrás, estaba adornado por unos finos listones cruzados entre sí por toda la espalda para al final terminar en un pequeño moño en la cintura. Mientras que en la parte delantera, el diseño era un poco más sencillo, una línea de piedras plateadas, adornaba la parte superior del busto. Tenía también una abierta en su pierna izquierda que llegaba desde la bastilla hasta el muslo. El vestido se moldeaba perfectamente al cuerpo de la joven, su blanca piel hacia resaltar aún más la prenda. Su azabache cabello lo traía recogido en una coleta alta, dejando varios mechones rebeldes salir a ambos lados de su cara. Sus hermosos orbes ónix resaltaban gracias al maquillaje natural que traía. Muchos de los presentes se quedaron sin aliento, a aquella chica no se le podía considerar una modelo. "Una obra de arte más bien." Si esas eran las palabras adecuadas para describirla, ese porte de superioridad con el que modelaba, con la vista siempre al frente, le daba un aire "Inalcanzable" Cuando la joven salió de la pasarela, poco a poco todas las modelos salieron en fila, mostrando sus más bellas sonrisas excepto por la ultima participante, quien se mantenía con esa mirada seria.

-¡Wow! Les quiero pedir un gran aplauso para todas estas hermosas jóvenes.- El público obedeció a la petición del presentador, una vez que los aplausos cesaron volvió a hablar. –Muy bien como saben, solo una de ustedes puede ganar y aquí tengo el sobre con el nombre de la afortunada.- Rompió el sobre y leyó el contenido, muchas jovenes estaban ansiosas por saber quién sería la ganadora. -¡Vaya la ganadora es Kurosaki Karin! De la línea de modas Ayesawa.- El salón se hundió en aplausos, el diseñador Yumichika Ayesawa subió al escenario y se posó a un lado de su modelo estrella, quien era coronada como mejor modelo del año. Todas las cámaras se centraron en ellos dos, Yumichika mostraba una sonrisa y de forma amable anuncio que no hablaría con la prensa hasta estar en la fiesta en honor a su victoria. Saco a la joven modelo de ahí para que pudiera descansar unos minutos en su camerino, pues debía ayudarle con la fiesta y a atender a los medios. Además de que muchos empresarios se interesaron en ella, claro que también tendría que aceptar firmar contratos.

-Muy bien Karin-chan estuviste estupenda, te dejo para que descanses unos minutos pues aún hay mucho que hacer.- Dijo al momento que salía del lugar.

La azabache al verse completamente sola, salió sin que nadie la viera. Justamente estos tipos de eventos no le gustaban para nada, odiaba ser lo que era…. "Una modelo" Muchos se preguntaran ¿Si odiaba ser modelo porque lo era?, La razón muy simple, este no es su sueño más bien es su peor pesadilla, porque este era el sueño de su hermana fallecida Yuzu. Esta era su condena.

Así es su condena, al prometerle que haría todas aquellas cosas que ella no podría, fue una promesa la cual no podía romper, con el tiempo se fue resignando a renunciar a sus sueños y metas. Era el destino que quería verla ser miserable, tal vez lo seria por el resto de su vida. Tomo una botella de licor de la cocina y camino hasta llegar a unas escaleras, las subió hasta que llego a la azotea, se quedó un tiempo mirando el paisaje nocturno, el aire fresco le daba de lleno en la cara, empezó a temblar debido al frio que tenía. Maldijo por lo bajo, pues en su "Huida" nunca se acordó de llevarse un suéter.

Molesta por la situación, comenzó a dar grandes sorbos a aquel embriagante líquido que le quemaba la garganta. Quería gritarle al mundo cuan infeliz era, pero no lo hacía pues el recuerdo de su hermana la detenía cuando estaba a punto de mandar todo al demonio. Fue sacada de sus cavilaciones cuando sintió como la arropaban con un cálido abrigo, el aroma masculino que desprendía la prenda lo conocía perfectamente. Cerró sus ojos, dejándose llevar por aquella calidez. No fue hasta que le quitaron la botella de sus manos que decidió ver a su acompañante.

-Dámela.- Ordeno con voz firme la chica.

-No.- Fue la fría respuesta de su compañero.

-Dame la estúpida botella ahora Toshiro.- Alzo un poco más la voz, pero esto no pareció afectar al apuesto joven de cabello blanco y orbes turquesa, Karin al ver que él no se inmutaba por sus palabras aparto la mirada y la dirigió a la ciudad, estaba molesta.

El chico lanzo la botella lejos de ahí, se posó a un lado de la azabache para ver su ceño fruncido, clara señal de que estaba molesta. Suspiro, desde que la conoció años atrás, esa actitud fuerte fue lo que le llamo la atención en aquella joven, poco a poco se fueron haciendo amigos y después las cosas tomaron intensidad, tanto que terminaron sucumbiendo ante el deseo carnal, así es ellos podrían ser amigos y amantes pero nunca novios. Y no era porque no se amaran, ambos lo hacían se amaban, sin embargo el destino los quería ver infelices. Por desgracia eso era lo que los unía la "Miseria" ella por una promesa que le hiso a su hermana antes de que muriera. El por qué tenía que hacerse cargo de la empresa de su padre. Ahora podría decirse que cada uno era el soporte del otro, dos almas tan desdichadas que al momento de juntarse sacaban fuerzas para seguir, además también compartían el mismo sueño. Si les hubieran dado a elegir su destino seguramente se conocerían en el mundo del futbol, así es por extraño que pareciera tenían el mismo sueño en común, un sueño que cada vez lo veían más y más lejano.

-Kurosaki.- La llamo, la chica levanto la mirada. –Ayesawa te buscaba, tienes que ir a la fiesta.- Término de decir. Pero al ver como el rostro de ella se ensombrecía y una solitaria lágrima corría por su mejilla no pudo evitar odiarse, por impulso se acercó a ella y la abrazo, como si quisiera protegerla de cualquier daño. La chica ya no aguanto y comenzó a llorar, solamente con él "Su amado" podía permitirse ser débil.

Hitsugaya acariciaba la espalda de la chica intentando así aminorar un poco su dolor, varios minutos pasaron para que la azabache se por fin se calmara.

-¿Por qué tenemos que ser tan infelices?- Susurro aun siendo abrazada por el albino.

-Porque así lo quiso el destino.- Respondió a la interrogante de la chica.

-Toshiro yo…. Te amo por favor no me dejes nunca.- Pidió con un hilo de voz.

-Yo también te amo Karin y jamás te dejare lo prometo.-Se despegó de la Kurosaki. Le levanto la barbilla para que lo mirara, sus ojos turquesa se toparon con los ónix de ella, aparto la vista para ver sus tentadores labios y poco a poco fueron juntándolos en un beso, cerrando así la promesa.

La falta de aire los hiso separarse, ambos sonrieron. Pues nadie sabía de su pequeño amor más que ellos dos.

-¿Nos vamos Kurosaki?- Pregunto ofreciéndole su brazo por pura cortesía.

-Muy bien vamos Toshiro.- Y así ambos se fueron a enfrentar sus horribles vidas, donde no había mas que sueños rotos y gente falsa adorándolos por ser lo que más odiaban.

Sus vidas eran miserables, pero de no ser por esto quizá nunca se hubieran conocido. No importa lo que pase ambos cargaran con las penas del otro y así podrán continuar avanzando juntos.

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Chan chan! hasta aquí, perdonen si hubo Ooc pero últimamente quise hacer algo donde los personajes no fueran felices ¿Raro verdad? Pero bueno me encantaría que dejaran sus reviews para ver que opinan a y por cierto les pregunto ¿Si les gustaría continuación? Díganme xD ok ya para irme este fic también es para apoyar la noble causa de Sky-chan ahora si me despido Ya nee!