Mi niñera Snape
Disclaimer: Nada recocnocible con la saga me pertenece, solo la idea de este fanfic.
Capitulo uno
Todo estaba tranquilo en el castillo. Hacia unos meses que Harry había derrotado a Voldemort. Ahora el y el inepto de Weasley estudiaban en la academia de Aurores. Granger por su parte había decidido hacerlo todo por el camino que tocaba, así pues ahora repetía su séptimo curso. En ese preciso momento, la joven se encontraba en clase de pociones. Y aquí es donde llegamos hasta él.
Ese profesor huraño, serio y misterioso. Había servido a Dumbledore desde antes de la muerte de los Potter. Había ayudado al trío dorado desde las sombras. No esperaba que le fuese reconocido ese trabajo, pues sabía que el Lord lo mataría y no haría nada para remediarlo. No tenia sentido vivir. Pero por lo visto sus ideas no eran compartidas. Cuando ya había entregado sus recuerdos a Potter, apareció Fawkes el fénix de Dumbledore. Entre las lágrimas del fénix y un poco de ayuda de la joven Granger había sobrevivido. Y ahora mismo se encontraba dando clase a los Griffindor y Slytherin de séptimo curso.
Estaba revisando la poción del señor Longbottom, que se sentaba junto a Granger. La poción de ella estaba perfecta pero la de Neville era un completo desastre. El caldero empezó a burbujear, y segundos antes de explotar Neville se escondió bajo la mesa. El contenido del caldero salió disparado empapando a Hermione la mayor parte y un poco en su pecho. Despidió a toda la clase menos a la chica Granger. Intentó con una infinidad de hechizos retirarle los restos de poción de encima pero parecía que se hubiese enganchado al cuerpo de la chica. De repente ambos cayeron desmayados al suelo.
Despertó, no podía abrir los ojos ni mover ningún músculo, también tenía dificultades para pensar con coherencia. Un llanto estridente se coló en su mente y le hizo reaccionar. Como si esa hubiese sido la señal todos sus músculos funcionaban y su mente funcionaba ala perfección.
Se levantó del suelo rápidamente, se sintió más ágil. Entonces vio la fuente del llanto. Reconoció a una Hermione Granger de unos 5 años aproximadamente. Claro. La poción rejuvenecedora les afectó más de lo que debía. Se miró en un espejo cercano, tenía el cuerpo de un joven de 26 años.
En ese momento llegó Dumbledore, después de hablar con el y enviar una muestra al laboratorio de investigación de pociones del ministerio acordaron que dado que el tampoco podía ser visto con esta apariencia, se quedaría en sus aposentos cuidando de Hermione. Dirían que los habían enviado a San Mungo y que estaban en cuarentena por que no sabían si los efectos de la poción eran contagiosos.
Así pues comenzó su aventura. Cuidar a una niña de 5 años, Dumbledore había confirmado sus edades. Severus Snape maestro pocionista, espía doble del bando de Dumbledore y ahora NIÑERA.
Espero que os haya gustado el primer capítulo, será una historia de humor, nada de dramas.