A/N: HOLA!! Aquí traigo este capi de nuevo!! Muchas gracias por el apoyo que me han dado!! Esta historia contenía un HORROROSO desorden cronológico. Así que…Espero hacerlo bien esta vez…ahh!! Y lamento el retraso….
Disclaimer: No, Death Note no me pertenece…si así fuera pues, este sería su final y no estaría desperdiciando mi tiempo escribiendo…y además…fuera rica…
Un crimen, Un asesino y Un héroe.
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Archivo encontrado…
# 2693-5
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Descarga completa: Caso Kira.
…"L está muerto"…
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La investigación del caso Kira no parece acercarse a un final concreto, por lo menos no desde que el mejor detective del planeta murió. Sin embargo el mundo pasó desapercibido el fatal destino de uno de los hombres más famosos en la historia y el único capaz de movilizar y controlar a toda la policía del planeta. No. Nunca nadie se enteró.
Estaba tan cerca de cumplir su cometido, tan cerca de resolver el caso más difícil, tan cerca de encerrarlo y condenarlo por homicidio en masa…Kira, Light Yagami.
L odiaba perder, apostó todo lo que tenía en aquel malvado juego, el juego de Kira, y perdió. Pagando el precio más alto con su propia vida y la libertad del maniático asesino.
Como se menciono anteriormente, eso es lo que aparentemente ocurrió, la versión popular. Pero no estoy aquí para relatar lo que aparentemente pasó, sino la verdad de los hechos.
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-¡¡Misa quiere estar a solas con Light-kun!!-
-Me temo que no podrá ser así esta vez, Misa-san-
-Siempre es igual ¡Ryuuzaki-san es un pervertido!-
La misma conversación se llevaba a cabo casi todos los días, auque para sorpresa del detective y la joven modelo no era para nada monótono, al contrario, disipaba las constantes tensiones del día. No podemos decir lo mismo del joven Yagami. A quien las constantes peleas sin sentido de sus acompañantes parecían fastidiarlo cada vez más. ¿Qué más podía hacer? No tenía opción, L lo tenía encadenado por ser el sospechoso principal.
Gracias a los tontos-pero-increíblemente-suertudos intentos de Matsuda por obtener información de Yotsuba la investigación se había acelerado increíblemente, L parecía más motivado a continuar al igual que su principal sospechoso, primer amigo y colega, Light.
Aún a pesar de los buenos presagios había algo que incomodaba al detective. Y era el hecho que Light cada vez trataba peor a Misa. Cuando él la rechazaba lo hacía cada vez con más veneno, ya no con la intención de apartarla de su camino sino intentando herirla de verdad. Al presenciar semejantes descortesías L no podía evitar el fuerte sentimiento de molestia, que probablemente mejoraría si pateaba algunos traseros con el nombre de Light Yagami en ellos. Irónicamente eso solo hacía que Misa insistiera más.
Para L esto era realmente ilógico, ¿Misa estaría realmente tan ciega o de verdad está atrapada dentro de una poderosa obsesión? Sinceramente una mezcla de ambos. Su impasible mirada se enfocaba sobre lo que tenía inmediatamente frente a el. Postres o los monitores. Algo dentro de el estaba cambiando y no conocer la respuesta a esas interrogantes era algo que lo frustraba un poco más que ver a Misa sufrir por las indiferencias de Light.
Aquella tarde no fue distinta.
-Oye Light-kun…¿Podrías pedirle a Ryuuzaki-san que se marche?-
-Si el se marcha yo también deberé hacerlo- Espetó el castaño, sin duda casi imploraba a L marcharse lo antes posible, cualquier excusa era válida.
-¡Pero quiero estar con Light-kun! ¡Misa se siente sola!-
-Misa, como rayos dices que te sientes sola si hay cerca de cien cámaras en todo tu piso. Es más deberías estar agradecida que Ryuuzaki tuvo las agallas de proporcionarte un piso entero para ti sola- La tensión y la agresividad se sentían en la atmósfera.
-Light-kun, deberías ser un poco más dulce con Misa-san. Lo único que desea es pasar tiempo con su novio. Lo cual es algo muy normal en una pareja…- Dijo el detective mientras se concentraba en devorar el último pedazo de tarta que le quedaba.
Light comenzaba a enfurecerse, la noche anterior Misa no lo había dejado descansar un solo minuto, saltando sobre la cama suplicando por que él durmiera con ella esa noche. Light rechazó la oferta, Misa era sin duda atractiva, pero demasiado tonta. Light odiaba la personalidad infantil e impulsiva de la chica, sin mencionar que esa misma tarde L le había obligado a trabajar el doble. Con su irritabilidad borboteando como un volcán a punto de hacer erupción decidió que era hora de marcharse.
-Bien Misa, creo que Ryuuzaki y yo debemos seguir con la investigación. Desde que descubriste que Higuchi es Kira es necesario atraparlo cuanto antes…Ryuuzaki y yo nos vamos-
-¡¿Tan pronto?!- Exclamaron Misa y L al mismo tiempo, Misa por obvias razones y L porque acababa de empezar a engullir otro pedazo de pastel.
-Si…es hora de irnos…¿No es así, Ryuuzaki?- El joven estudiante esperaba que L lo sacara de allí antes de que algo molesto ocurriera…algo como:
-¡Misa quiere estar con Light! ¿Acaban de llegar y van a dejar a Misa sola? ¡No es justo! ¡¡No lo es!!- Misa comenzó otro de sus escandalosos berrinches para que Light no la dejara, L simplemente observaba, engullendo una fresa. Light no podía soportarlo más. "¡Hasta cuando esta condenada mujer entenderá!" Se preguntaba a si mismo el joven. Normalmente el logra controlar a la chica prometiéndole citas falsas o algo por el estilo, sin embargo esta vez ella estaba llegando al límite.
Sin pensarlo la chica se colgó del cuello de Light tan fuerte que el chico perdió el equilibrio, propinándose un fuerte golpe en la cabeza, Ryuuzaki no tenía nada que ver en eso pero se vio indirectamente afectado. En momentos como ese admite que estar atado a otra persona puede ser una mala idea. La escena era intrigante por un lado estaba Misa apoyada fuertemente sobre Light, debido a la caída, Light, pues ¿Qué más se puede decir? y L más molesto por el pedazo de pastel desperdiciado que por la caída misma.
Ese fue el límite. Light no lo soportó más.
-¡Misa apártate de mí ahora!- Su normalmente templada voz se había convertido en un estruendo que enmudeció a la joven y capturó la atención del detective.
-Mira lo que has causado Misa…no eres más que un gran problema-
Cada palabra eran como dagas que traspasaban el corazón de la chica, poco a poco las lágrimas comenzaban a brotar. No podía moverse, Light hizo erupción.
-¡QUITATE DE UNA MALDITA VEZ!- Estaba a punto de empujarla violentamente cuando L se interpuso.
-Déjame ayudarte Misa-san- Lenta y suavemente ayudó a la joven a incorporarse, su voz era dulce y reconfortante. Misa estaba tan sorprendida y asustada que no le importó que "el pervertido" la ayudara. De lo contrario Light empeoraría su ya incontrolable estado de ánimo.
-Light-kun, debes aprender a manejar mejor tu ira. Es inmoral y totalmente incorrecto tratar así a una dama, especialmente a Misa-san. Dada la situación que es, de hecho, tu novia- El detective antes despreocupado le lanzó una mirada indescifrable.
-¡No me fastidies Ryuuzaki! ¡¿No viste la estupidez que hizo?!- L se mantenía serio, observándolo, como siempre.
-Considero apropiado disculparte con ella, es de caballeros reconocer el error…-El extraño hombre habló con suavidad, como si nada hubiera pasado. Light lo observó durante unos segundos, necesitaba una bolsa de boxeo…de inmediato. Finalmente concluyó.
-Como quieras, Ryuuzaki pero si ella- No terminó la oración, cierta joven se había recuperado del susto y entre lágrimas volvió a lanzarse sobre Light, casi se repitió la misma escena, esta vez Light estaba preparado…pero L fue más rápido.
-Te lo advierto Light Yagami. Si intentas golpearla de nuevo…lo lamentarás-Increíblemente el joven detective reaccionó antes que Light le propinara un buen gancho a Misa, el castaño se sorprendió. No solo por lo rápido que se movió o la fuerza que estaba ejerciendo sobre su brazo derecho al detener el golpe, sino por la mirada de odio que le lanzaba, la determinación que se apoderó de él cuando vio que Misa estaba en peligro.
Furioso, se apartó del firme agarre del detective. "No es débil después de todo, parece un verdadero fenómeno, pero debo admitir que es más fuerte de lo que pensaba" Masculló Light para sí. Sin mirar a Misa dio media vuelta, dispuesto a salir. L removió la cadena que lo unía a Light. Sabía que el enfurecido joven se retiraría a su habitación provisional en el cuartel general. Mientras lo miraba alejarse, revisó la expresión en el rostro de la chica. Las lágrimas salían de sus cristalinos estanques azules, confundida por las acciones de su "novio", ¿Cómo era posible que él le hiciera eso? ¿De verdad no la amaba? Muy dentro de su ser conocía las respuestas…
En un abrir y cerrar de ojos un par de frágiles brazos le rodearon. Torpes y temblorosos.
Era Misa.
L se sobresaltó ante el repentino contacto, en ese momento no sabía que hacer o como reaccionar. Su menuda figura sujetándolo con fuerza mientras sollozaba. Estaba confundida y sobre todo, herida. No físicamente pero emocionalmente.
Light siempre se las ingeniaba para dañarla, humillarla y utilizarla. Ella sabía a la perfección que el apuesto castaño no sentía ni el más mínimo interés por ella. Pero ¿Qué más podía hacer?
El joven detective comenzaba a incomodarse. Sin embargo sus brazos se movieron. Misa no esperaba que L le devolviera el abrazo, el también temblaba. Estaba realmente nervioso. Ni siquiera el sabía porque lo había hecho. Solo sintió el impulso de… ¿de abrazarla? Definitivamente no estaba pensando con claridad.
¡Cuando en la vida el gran detective L había hecho algo semejante!
En momentos como este deseaba que Watari apareciera con una bandeja llena de postres y café…mucho café.
"¿Por qué…?" Fue la pregunta que danzó en la mente de la chica. L estaba tan atónito como ella. ¿Cómo?... ¿Por qué?
Lentamente ella se aferró más a él y se sobresaltó un poco al darse cuenta de la frágil figura del joven. ¡¿Cómo era posible que ingiriera tanta azúcar y carbohidratos y no aumentar ni un kilo?!
Frágil pero no débil, ella había sido testigo de la asombrosa fuerza oculta bajo esa delgada silueta.
"Ryuuzaki…el es…muy cálido…" Misa solía imaginar que el excéntrico detective era frío, no solo en su manera para tratar con las personas, sino que también físicamente. Considerando lo pálido que es y el hecho que no usa calcetines o algo que proteja sus pies del frío…Era la primera vez desde que sus padres murieron, que alguien mostraba verdadera preocupación por ella.
L no sabía que hacer o decir, simplemente estaba allí. Con una chica en sus brazos. La primera vez que tenía a otro ser humano tan cerca. Su corazón latía rápido, muy rápido, sus manos sudaban, un extraño hormigueo recorría su estómago y estaba mareado.
"Mmmm…Claramente estoy fuera de forma, sin mencionar la considerable cantidad de dulces que acabo de ingerir…Eso explica el mareo y la acidez estomacal, la repentina explosión de adrenalina y la agitación del momento es la causa de la aceleración del pulso…Quizás Watari esté en lo correcto. Debo practicar las artes marciales con más frecuencia…"
Esa era la explicación que el detective atribuía a los repentinos síntomas que lo atacaban. Vagas explicaciones lógicas atribuidas por una mente racional excepcionalmente desarrollada, por un ser con capacidades mentales por encima del humano promedio, un simple hombre incapaz de establecer relación con otros de su misma especie. Un simple ser humano que desconocía el significado de la palabra "AMOR"…
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A/N: Jejeje…lo siento, se suponía que debía ser más largo. No me convence mucho, podría mejorarlo…¿Qué dicen? Críticas constructivas son bienvenidas. Me disculpo de antemano, pues lamentablemente pasará algo de tiempo hasta que suba el siguiente capítulo. Se pone más interesante…¡No se lo pierdan!
