Temores extraños
Por Victoria Muinesva Black
Disclaimer: El Potterverso le pertenece a J.K. Rowling
Este fic participa en el minireto de octubre para "La Copa de las Casas 2014-15" del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.
Hepzibah nunca fue una niña común y corriente. Por supuesto, le gustaba el rosa y los lazos –como a la mayoría de las niñas- pero las cosas que le desagradaban nunca eran lo que normalmente desagradaba a la gente. Una de las tantas peculiaridades que tenía, era su profundo y casi patológico terror a los pies. No era muy normal que alguien temiera a los pies, pero Hepzibah solía estremecerse ante su visión. Incluso con el paso de los años, en lugar de disminuir, su fobia fue aumentando de gravedad. Hasta tal punto que obligaba a su elfina Hokey a que utilizara zapatillas.
Pero para conocer el origen de tan extraña particularidad, debemos indagar en el pasado, cuando Hepzibah era una niña que solía caminar descalza por la hierba recogiendo flores, utilizando vestidos de colores pasteles y lazos elaborados en el cabello.
Su primer encuentro con su futura fobia fue el día en que su tía abuela llegó de visita. Hepzibah había entrado en su habitación para llevarle unos girasoles que había recogido aquella mañana como obsequio de bienvenida. Entonces los vio. La anciana bruja tenía los pies descalzos, dentro de un recipiente lleno de agua. La visión podría no ser tan aterradora para otra persona, pero algo extraño sucedió con la pequeña Hepzibah. Observó los pies sin disimulo. Eran grandes, con los dedos extremadamente largos e irregulares, adornados con unas uñas amarillentas. Aquellos dedos no eran como los suyos, que seguían un orden perfecto de tamaño. No, éstos eran aterradores, similares a garras, como las de los monstruos de los cuentos.
A partir de ese día, Hepzibah no fue capaz de ver más pies. En cuanto notaba los huesudos dedos de los gnomos que a veces infestaban el jardín, echaba a correr despavorida mientras sentía un horrible hormigueo en la espalda. Odiaba el paragüero hecho con una pierna de trol que estaba en la casa de una amiga suya y creía que iba a desmayarse cada vez que miraba pasar a un elfo, caminando sin cubrirse los pies. Y lo peor de todo es que ahora ya no era capaz de andar descalza por los jardines. Había adquirido cierto grado de antipatía por sus propios pies y había dejado de mirarlos directamente, temiendo que un día se convirtieran en algo parecido a garras. Porque si su tía tenía los pies así, ¿quién le decía que ella no los tendría?
N/A: Para este minireto se nos ha sorteado una fobia al inscribirnos y a mí me tocó escribir sobre la podofobia (miedo a los pies). He elegido a Hepzibah Smith porque, según sabemos, ella es una descendiente de Helga Hufflepuff (al menos es lo que ella ha dicho) y creí lógico que estuviera en la casa de la fundadora. Probablemente sea familiar de Zacharias Smith, quien pertenece a Hufflepuff.
Según Word, son 400 palabras.