¡Hola gente! Muchas gracias por pasarse a leer este fic. Me gustaría dar una breve explicación de dónde salió para que puedan entenderlo mejor:

Primero que todo, el fic está basado en los personajes de Shingeki no Kyojin, personalidades más que todo, pero no creo que incluya referencias al manga (o no muchas) es totalmente un universo alterno, pero yo soy de quienes prefieren que los personajes sean lo menos OoC posible.

Ahora, este es un AU de un AU xD , viene de mi otro fic EruRi "Dancing on a Highwire" el cual está en proceso. Es un fic con trama policíaca, bastante serio, con contenido un poco chocante (violencia) pero también con mucho amor :3, aun así yo estuve siempre acostumbrada a escribir cosas cute, divertidas y Fluffy, y este fic será así; mucho amor, sonrisas y besitos de chocolate y miel (?)

Si gustan pasen a mi perfil a leer "Dancing on a highwire", les aseguro que no se arrepentirán es una trama bastante interesante, modestia aparte :D

Con respecto a este fic, la idea salió porque un día busqué imágenes EruRi y encontré una de Erwin con un Levi-Neko muy cute (por obvias razones no puedo poner el link de la imagen) y a mi amiga y beta Ninestesia (en FF. Net) se le ocurrió la idea del fic, pero me cedió los derechos de escribirlo y publicarlo :3

Los capítulos aquí son muuuy cortos, pero esa es la gracia. Por último les explico, ABC porque cada título de capítulo es una palabra que comienza con una letra del abecedario.

¡Espero que les guste!

Capítulo I

Abandonado.

Erwin Smith, era el jefe de departamento de policía de ciudad Sina. Una ciudad muy pacífica, por lo que sus policías se dedicaban a combatir crímenes menores; como robos o riñas, mantener el orden público y cosas por el estilo. Aun así el rubio era feliz con su trabajo y todos los días lo realizaba de la mejor manera posible.

El hombre vivía en una acogedora casita, en uno de los barrios residenciales de la ciudad. No era muy pequeña, pero tampoco muy grande. Justo para él, que vivía solo. Aunque no iba a continuar de esta manera por mucho tiempo.

Uno de tantos días, regresando muy cansado del trabajo, fue traído a la realidad de sus pensamientos, al escuchar un lastimero maullido. Intentó buscar de dónde provenía el sonido, mientras más caminaba, más fuerte se hacía. Hasta que dio con un terreno baldío que se encontraba a solo unos metros de su propia casa.

Curioso, se acercó al lugar, los maullidos ya eran totalmente audibles, por lo que no tardó mucho en encontrar la fuente de estos. Una caja de cartón se movía cuando su ocupante intentaba infructuosamente liberarse de su encierro.

-Vamos a ver…- El hombre se agachó para abrir la caja, lo hizo lentamente, pero en cuanto hubo abierto un pequeño espacio al desarmar las solapas, el ocupante de la caja saltó agresivamente fuera de ella, abriéndose paso desesperadamente,.

Se trataba de un gato, totalmente negro salvo por una mancha de pelo blanco sobre su pecho, a Erwin se le asemejó a un pañuelo atado a su cuello. El felino además, poseía unos extraños ojos color gris, al hombre le pareció un animal muy bello. Por alguna extraña razón, el gato no se alejó, pero mantenía su distancia, observando fijamente a su "salvador".

-¡Hola! Qué bueno que te encontré, nadie sabe qué hubiese pasado si no hubieses podido salir de allí.- Le habló como si le entendiera y le sonrió amablemente. El animal no se inmutó, continuaba observando al humano. Erwin revisó la caja, y encontró un collar dentro, le pareció extraño que el gato no lo llevara puesto, pero al ver que tenía un collar, también pensó que anteriormente el animal tenía un dueño, y no pudo evitar sentir algo de furia; después de todo, ¿cómo era posible que alguien pudiese abandonar así a su mascota?

El collar, tenía un bonito dije con un diseño en forma de alas, que Erwin nunca había visto, y en la parte trasera, había una inscripción que decía "Levi".

-¿Levi?- pronunció, y al instante el felino maulló en respuesta; a lo que el rubio se sorprendió. -¿Es así como te llamas? ¿Levi?- Un nuevo maullido le confirmó su suposición. Erwin pensó que era un gato muy inteligente, aparte de bonito, así que no lo pensó dos veces. -¿Quieres vivir conmigo, Levi?. –Le ofreció, nuevamente como si el animal entendiera sus palabras.

El rubio se acercó al gato e intentó tomarlo, pero con ágiles movimientos, el pequeño felino escapaba, mas no corrió y únicamente mantenía distancia.

-¡Vamos! No seas así, te aseguro que te gustará mi casa.- El humano sonrió divertido. Tras uno cuantos intentos más, Erwin se volteó para irse; el gato se acercó a él y entonces el hombre aprovechó para rápidamente voltear y atraparlo. -¡Te tengo! – rio victorioso. Extrañamente, el animal no intentó deshacerse de las manos de su captor, únicamente le miraba con esa expresión huraña, dándose por vencido.

Erwin llevó a Levi en brazos hasta su casa, al llegar lo depositó suavemente sobre el piso.

-Y aquí es donde vivo. Espero que te guste, de momento no puedo ofrecerte comida adecuada o un lugar propio para dormir, pero prometo que lo conseguiré mañana después del trabajo.- Le explicaba como si se estuviera dirigiendo hacia otra persona, mientras ponía a hervir agua en la cocina y luego sacaba un plato, y leche del refrigerador.

El rubio se preparó una taza de té, y en el plato vertió la leche, calentándola en el microondas para que estuviera tibia; también le agregó un poco de leche a su té. Se sentó a la mesa, luego de colocar el plato y al gato sobre la misma para que bebiera. –Es lo único que puedo ofrecerte de momento, lo siento mucho. –Se excusó.

El gato olisqueó el plato con el blanquecino líquido, pero no bebió de este, y por el contrario, se sentó mirando fijamente al humano. -¿No me digas que no te gusta? –Erwin sorbió un poco de su té y colocó la taza sobre la mesa nuevamente. Con curiosidad el gato se acercó y olfateó la taza de té, e inmediatamente, intentó beber, llegando a lastimarse la lengua; ya que los gatos no toleran la comida ni bebidas calientes.

-¡Oh, no! ¿Qué hiciste? ¿Acaso te gusta el sabor del té? –Por loco que parecía, Erwin vertió un poco de su té, sobre el plato con leche que le había servido anteriormente a Levi, inmediatamente, el animal comenzó a beber. –Te gusta… Eres un animalito muy peculiar, Levi. –Nuevamente le dedicó una dulce sonrisa.

Levi llegó para alegrar la vida de Erwin, quien no sabía aún que la estadía de ese animal significaría el fin de su rutina diaria y las tediosas y aburridas horas laborales.

Continuará….

Muchas gracias por leer, si gustan pueden dejar un review con recomendaciones o ideas que les guste ver en el fic, ya que no está todo planeado, cualquier comentario es bien recibido.